Alice
Bailey reveló en su libro “Tratado sobre
el Fuego Cosmico” mucha información acerca del átomo físico permanente del
Logos solar, y a continuación les pongo algunos ejemplos de ello:
Los
Siete Señores Devas (la fórmula séptuple) son literalmente las siete espirillas
o vibraciones de fuerza dentro del átomo físico permanente logoico. Es necesario
recordar esto cuidadosamente y meditar sobre ello.
El
plano físico denso está energizado por medio de diferentes planos, y como consecuencia
(por medio del átomo permanente logoico) penetra una afluencia similar de
fuerza desde los niveles cósmicos.
Los
ángeles solares forman tres grupos que se relacionan con el aspecto autoconciencia
y están energizados y relacionados con la quinta espirilla del átomo permanente
logoico, funcionando como una unidad.
Existen
siete grupos relacionados con tres de las espirillas del átomo físico permanente
logoico. Dichas espirillas son para estos siete grupos de vidas, lo que los siete
rayos mayores para los siete grupos de rayos en los sub-planos egoicos del plano
mental. Es necesario que se medite sobre esta frase, porque puede proporcionar mucha
información al pensador intuitivo.
Debemos
recordar aquí que todos los sub-planos atómicos de los siete planos forman las
siete espirillas del átomo permanente logoico, porque éste tiene una estrecha
relación con el tema en consideración.
Toda
la energía manifestada en el sistema solar, no es más que energía del átomo
físico permanente logoico que tiene su núcleo en el sub-plano atómico del
físico cósmico. Este átomo físico permanente (como sucede con el átomo
correspondiente del jiva encarnante) tiene su lugar dentro del cuerpo causal del
Logos en su propio plano, y en consecuencia, está impresionado por la totalidad
de la fuerza del loto egoico cósmico, o la cualidad atractiva del amor cósmico.
Esta
fuerza es transmitida al sistema solar de dos maneras: por medio del Sol, que
en sentido oculto constituye el átomo físico permanente, y por lo tanto atrae y
mantiene atraído a todo lo que se encuentra dentro de su esfera de influencia,
produciendo así el cuerpo físico logoico, por medio de los planos que son las analogías
de las siete espirillas del átomo físico permanente de un ser humano.
Tenemos
así un doble tipo de fuerza de atracción: uno básico y fundamental, mientras
que el otro es muy diferente y secundario.
Estas
corrientes de energía, a juzgar por sus efectos, se denominan leyes en la terminología
humana, debido a que sus resultados son siempre inmutables e irresistibles y sus
efectos permanecen también invariables, variando solamente de acuerdo a la forma,
objeto del impulso energético.
Ahora
bien, el estudiante debe tener presente que los siete planos, o las siete
espirillas, del átomo logoico permanente, no todos son igualmente vitalizados
por la fuerza atractiva que emana del loto egoico vía el corazón del Sol. Cinco
de ellos son más "activos" que los otros dos; en los cinco no están
incluidos lo superior y lo inferior.
Y
también debe de comprenderse que las palabras "el corazón del Sol"
significan algo más que un lugar situado en las cavidades internas del cuerpo
solar y se refieren a la naturaleza de la esfera solar.
Esta
esfera es muy similar al átomo dibujado en el libro de Babbitt y también al libro
“Química Oculta” de Annie Besant. El
Sol tiene forma de corazón, y visto desde ángulos cósmicos tiene una depresión
que podríamos llamar su polo norte, formada por el impacto de la energía
logoica sobre la sustancia solar.
OBSERVACIONES
Todo
esto suena muy interesante, pero el detalle es que es completamente falso
porque resulta que en realidad los átomos permanentes no existen debido a que
fueron una mentira inventada por el embustero Charles Leadbeater como se los
demuestro en este otro capítulo (ver link).
Y
Alice Bailey no contenta con haberle copiado esa mentira a ese charlatán, y
haberles enseñado a sus lectores sobre la falsa existencia de un átomo físico
permanente que supuestamente tiene cada humano, a ella se le ocurrió ir aún más
lejos y por eso ella consideró que el Logos también tiene que tener su propio átomo
permanente al que ella llamó: el átomo físico permanente logoico (ya que eso no
lo inventó Leadbeater).
Y
a partir de esa premisa errónea Alice Bailey se le ocurrió todo lo que les puse
arriba sobre ese átomo imaginario.
Pero
lo peor del asunto es que Alice Bailey ni siquiera estudió adecuadamente la
pseudo-teosofía de Leadbeater, porque entonces ella se habría percatado que la
imagen que Leadbeater y Besant pusieron en su libro “Química Oculta” no es del átomo permanente sino de los anus, los
cuales según Leadbeater y Besant son las partículas físicas más pequeñas que existen
y que componen a los átomos.
Pero
resulta que los anus tampoco existen debido a que fueron otra mentira inventada
por esos dos charlatanes como se los demuestro en este otro capítulo (ver link).
Y
Leadbeater y Besant para ilustrar la forma que según ellos tienen sus anus
imaginarios, se les ocurrió basarse en la imagen que elaboró el físico Edwin
Dwight Babbitt y que puso en su libro “Los
Principios de la Luz y del Color” (1878).
Pero
el detalle es que el Sr. Babbitt puso ahí la imagen de cómo él consideraba que
era la forma de un átomo, pero un siglo después los científicos saben que en
realidad el átomo tiene otra forma, y por consiguiente la imagen que imaginó el
Sr. Babbitt es errónea:
Y
también es falso cuando Alice Bailey afirma que el Sol tiene forma de corazón, y
que tiene una depresión en su polo norte formada por el impacto de la energía
logoica sobre la sustancia solar.
Lo
que pasa es que Alice Bailey quiso extrapolar al Sol la imagen errónea inventada por
el Sr. Babbitt, pero hacer eso es prueba de mucha ignorancia debido a que el
Sol para nada tiene esa forma ya que es esférico:
CONCLUSIÓN
Y esto les muestra lo
perdida y charlatana que fue Alice Bailey, y hasta qué punto su enseñanza está
llena de falsedades.
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