Al final de su libro “Tratado
sobre el Fuego Cósmico”, Alice Bailey puso un diagrama donde supuestamente
el Maestro Djwal Khul describe a una parte de la Jerarquía solar y de la Jerarquía
planetaria terrestre:
Y en ese gráfico aparece el Maestro
Veneciano como director del tercer rayo y jefe de:
- El Maestro Serapis (4)
- El Maestro Hilarión (5)
- El Maestro Jesús (6)
- Y el Maestro R. [que es el
Conde de Saint Germain] (7)
(Esto se encuentra en la tercera
parte titulada: “El Fuego eléctrico del Espíritu”, en la sección A titulada: “Ciertos
enunciado básicos”, pág. 1238)
¡PERO RESULTA
QUE TODO ESO ES FALSO!
¿Entonces por qué lo publicó Alice Bailey?
Porque ella se lo copió a Charles Leadbeater
el cual en su libro “Los Maestros y el Sendero” puso la siguiente
clasificación:
- Morya es el jefe del 1º Rayo
- Kuthumi es el jefe del 2º Rayo
- El Veneciano es el jefe del 3º Rayo
- Serapis es el jefe del 4º Rayo
- Hilarión es el jefe del 5º Rayo
- Jesús es el jefe del 6º Rayo
- Y el Conde de Saint Germain es el jefe del 7º Rayo.
(Esto se encuentra en
el capítulo XII titulado: “Los chohanes y los rayos”)
Y como lo pueden constatar, los
rayos que le asignó Leadbeater a esos Adeptos, son los mismos rayos que Alice
Bailey les asignó también a los mismos Maestros, pero el detalle es que esa
clasificación es puro invento como en este otro capítulo se los demuestro (link).
Mientras que aquí, a continuación
les voy a explicar más en detalle las razones por las que en realidad el Maestro Veneciano no existe.
Para elaborar su
clasificación, Leadbeater primero tomo los nombres de los Maestros que eran más
conocidos en la Sociedad Teosófica y que son: Morya, Kuthumi, Serapis e
Hilarión.
Y también incluyó a Jesús para
atraer al público cristiano y también incorporó al Conde de Saint Germain para
complacer a Annie Besant (quien en esa época era la Presidenta de la Sociedad
Teosófica de Adyar) debido a que ella sentía una gran fascinación por ese
personaje histórico.
Pero como son siete rayos, a
Leadbeater le faltaba un jefe más que poner, y el problema es que ya no
conocía más nombres de Maestros. Entonces se puso a buscar en la literatura
teosófica a ver a quién más podía añadir y cuando leyó el Diario del coronel
Olcott, él leyó esto:
« La manera como se da el primer encuentro con los Maestros
de Sabiduría varía. Algunos discípulos como Damodar y Blavatsky, ellos vieron
por primera vez a los Maestros a través de visiones cuando eran jóvenes,
mientras que otros discípulos se encontraron con ellos bajo extrañas
circunstancias y en los lugares menos probables. Pero en mi caso, Blavatsky me
los fue paulatinamente introduciendo por medio del gran interés que yo tenía en
ese entonces hacia el espiritismo y la mediúmnidad.
Y es por eso que inicialmente ella
le atribuyó esos fenómenos que se producían a su alrededor, al espíritu de John
King (el cual era muy conocido en las sesiones espiritistas), y fue sólo
después y a través de una progresiva amistad que yo fui entamando con esos
Adeptos, que comencé a tener una comunicación personal y directa con ellos.
Y es así que en una ocasión “John
King” me hizo conocer a cuatro de los Maestros, de los cuales:
-
uno era un copto (o sea un egipcio
cristiano),
-
otro era un representante de la
escuela neoplatónica de Alejandría,
-
otro tenía un puesto muy elevado ya
que él era el Maestro de los Maestros, por decirlo así: un Veneciano,
-
y el último era un filósofo inglés
que había desaparecido de la mirada de los hombres, pero que no estaba muerto.
Y el primero de ellos se volvió mi
primer gurú. »
(Viejas Hojas del
Diario, vol. I, p.17-19, extractos)
Y es en base a este texto que
Leadbeater decidió que el jefe del tercer rayo iba a ser “el Veneciano”. Pero
resulta que “el Veneciano” en realidad es Serapis, ya que Serapis es el Maestro
de grado superior (el Maestro de los Maestros) que estuvo directamente a
cargo del resurgimiento del Movimiento Teosófico a finales del siglo XIX
Y por lo tanto era lógico que Serapis
se presentara ante Olcott, ya que el coronel Olcott fue el primer presidente de
la Sociedad Teosófica. Y también era lógico que el coronel Olcott no conociera
el nombre de Serapis la primera vez que lo vio y que por eso él lo describiera
como “un Veneciano”.
Sin embargo Olcott nunca más volvió
a mencionar al “Maestro Veneciano” pero en cambio sí mencionó en varias ocasiones
al Maestro Serapis.
Por ejemplo él señaló que:
« Serapis es uno de nuestros Maestros más venerados, ya que
es el Maestro de nuestros Maestros. En la India a alguien así se le llama un Paramagurú
(que significa un guía espiritual superior). Y él me dio un pequeño boceto a
colores de su rostro, cuando yo vivía en Nueva York, antes de que Blavatsky y
yo nos embarcáramos para Bombay. »
(Viejas Hojas de
Diario, vol. 2, p.430-431, extractos)
« Serapis es el más joven de los Directores de la Jerarquía
de los Maestros. »
(Carta Mahatma 3A, p.10)
Y como se los precisé, el coronel
Olcott nunca más volvió a hablar de “un maestro veneciano” y en ninguna otra
parte de la enseñanza teosófica original aparece la existencia de un miembro de
la Fraternidad de los Maestros al quien se le conociera como “el Veneciano”. En
cambio sí se menciona con bastante frecuencia al Maestro Superior Serapis.
(Y lo que se mencionó sobre él lo
puse en este otro capítulo: ¿Quién es Serapis
Bey?)
Pero para infortunio de Leadbeater,
esa información de que Serapis es un Maestro de nivel superior y también que es
el jefe de Kuthumi, Morya e Hilarión sólo se supo después, por lo que
Leadbeater ignorando ese hecho, posicionó a Serapis en el mismo rango que los
otros Maestros, mostrando con ello su superchería.
Y Alice Bailey
ignorando todo esto, creyó lo que afirmó Leadbeater y por eso ella también escribió
las mismas falsedades.