En este capítulo, les voy a resumir la explicación que los Maestros de sabiduría dan sobre lo que sucede después de morir. Pero para que la puedan comprender, primero deben de saber:
¿Por qué los humanos vienen
a la Tierra?
Y
la respuesta que dan los Maestros al respecto, es porque los humanos se
encuentran en un proceso de evolución cósmica que les permitirá convertirse en
seres divinos.
(Esto lo detallo en: rondas: desarrollo del hombre)
Al
inicio los humanos son como “semillas”, con todo el potencial para volverse
seres divinos pero sin nada aun desarrollado en ellos.
Y
al final de ese ciclo de evolución, los humanos se volverán seres divinos
plenamente desarrollados. Y entonces se harán cargo de una parte de la
Creación.
Pero
para poder llevar a cabo esa evolución, los humanos van a tener que estar
alternando su desarrollo entre dos mundos:
- El primer mundo ya lo conocen: es el mundo terrestre.
- Pero también existe un mundo divino que por el momento se encuentra más allá de nuestra capacidad de percepción, y a ese mundo divino, los cristianos lo llaman “el Paraíso” (y los teósofos lo llaman el “Devachan”).
- Y también hay una zona intermedia entre esos dos mundos que sirve de puente entre los dos y que los cristianos lo llaman “el Purgatorio” (y los teósofos lo llaman “el Kama-Loka”).
Ahora
bien, el plano físico es solo la parte visible del mundo terrestre. Pero como
la materia es en realidad “energía condensada”. La materia necesita de un molde
que condense esa energía, que le dé forma a esa energía (y que sostenga esa forma). Y por consiguiente para que el plano físico pueda existir, necesita también de una contraparte
sutil que desempeñe ese papel de moldar y esa es la función del plano astral.
Y
al mismo tiempo, el plano físico necesita también de otra contraparte sutil que
le aporte la vida. Porque de lo contrario, la materia solo permanecería inerte.
Y esa función de vitalizar la materia la desempeña el plano energético (o
pranico).
Por
lo tanto, vemos que el mundo terrestre está compuesto por tres planos de
existencia:
- Un plano físico
- Un plano astral que es la matriz de ese plano físico y
- Un plano energético que le aporta vida a ese plano físico.
Y
el mundo divino también está compuesto por tres planos de existencia
superiores:
- Un plano mental que es donde la mayoría de los humanos permanecen cuando se encuentran en el mundo divino.
- Pero aquellos que han trascendido los deseos concretos y que por ejemplo, ya no aman solamente a una persona en particular, sino a toda la humanidad, esos humanos ya ascienden al plano buddhico.
- Y los más evolucionados espiritualmente ascienden incluso hasta el plano atmico, que es el plano de existencia más divino en que los humanos “normales” pueden estar.
Por
consiguiente, podemos dividir esos dos mundos en donde interactúan los humanos
en siete planos de existencia:
LA MISMA ESTRUCTURA
SE ENCUENTRA EN EL HUMANO
Y
bajo la ley de correspondencia que dice que “como es arriba es abajo”. Los
humanos están constituidos bajo la misma estructura septenaria.
La
parte imperecedera de su ser está compuesta por sus tres componentes superiores
que son:
- Atma
que es su naturaleza divina
- Buddhi
que es su naturaleza espiritual y
- Manas
que es su naturaleza humana.
Pero
para que la triada superior pueda desenvolverse en el mundo terrestre, ella
necesita de un “vehículo” y este está formado por sus tres componentes
inferiores que son:
- El
cuerpo físico
- El
cuerpo astral que sirve para darle forma al cuerpo físico y
- El
cuerpo energético que sirve para mantener vivo al cuerpo físico.
Y
en medio de estas dos triadas (la triada superior y la triada inferior) está un
componente intermedio (Kama) que sirve de conexión entre la parte imperecedera
del humano y su vehículo terrestre.
(Aquí les puse los
nombres en sanskrito que utiliza la teosofía original con su equivalente en
español)
Usualmente
a Manas se le denomina “el cuerpo mental” y a Kama se le denomina “el cuerpo
emocional y de los deseos”. Pero esas denominaciones no me agradan porque hacen
creer a la gente que Manas sólo piensa y que Kama solo siente y desea. Lo cual
es incorrecto. Y es por eso que yo prefiero llamar a Manas como la parte psíquico
emocional y mental que los humanos identifican como “yo” y a Kama como su lado
animal.
Por
consiguiente una ilustración más certera sería de imaginar a:
- Manas como la persona a la que ustedes se identifican.
- Buddhi como la parte espiritual de vuestro ser que busca que hagan lo correcto y lo bueno.
- Y Kama como la parte bestial de vuestro ser que busca satisfacer sus deseos de manera egoísta y se deja llevar por los bajos instintos.
Al
inicio los humanos desarrollan principalmente su parte animal (Kama) y es así
que los hombres al comienzo se comportan de manera bestial, actuando de forma
egoísta y burda sin importarles las consecuencias que sus acciones tengan sobre
los demás. Y es una etapa desagradable, pero como lo pueden ver, necesaria en
el proceso evolutivo para que sus principios superiores puedan conectarse cada
vez más con su vehículo terrenal.
A
mayor evolución, los humanos van a desarrollar sobre todo su parte humana
(Manas) y es ahí donde se encuentra actualmente la mayoría de la humanidad. Es
en esa etapa en donde los hombres comienzan a pensar y discernir antes de
actuar por simple impulso.
Luego
a mayor evolución, los humanos van a desarrollar principalmente su parte
espiritual (Buddhi) y entonces alcanzarán un alto grado de iluminación como lo
han logrado grandes maestros como Jesús o Buda.
Y
por fin en su última etapa de evolución, los humanos van a desarrollar particularmente
su parte divina (Atma) y es ahí cuando se van a volver seres divinos plenamente
desarrollados.
¿Y PARA QUÉ LOS
HUMANOS NECESITAN DESCENDER A LA TIERRA?
Porque
si todo ese proceso evolutivo es para que al final de cuentas los humanos vivan
como seres divinos en el mundo divino. Pues lo mejor sería que se desarrollaran
directamente en el mundo divino y no se complicaran tanto en descender a la
Tierra.
Pero
resulta que es en el plano físico en donde se encuentra la energía que les
permitirá a los humanos brillar como “soles radiantes” y disponer de un gran
poder durante toda su vida como seres divinos.
Y
este es uno de los conceptos erróneos que tiene la gente: el de creer que el
poder divino se encuentra sobre todo “arriba” cuando en realidad el poder divino se
encuentra sobre todo “abajo”.
Y es que la mayor cantidad de la energía se
encuentra condensada en la materia. Nada más que esta energía se encuentra “dormida”.
Por eso la gente no se percata de todo el poder que contiene la materia, pero la física ya ha
demostrado que se puede generar inmensas cantidades de energía cuando los
átomos se desintegran y vuelven a su esencia original.
Y
es por eso que los humanos tienen que descender a la Tierra, para apoderarse de
su porción de materia, luego aprender a controlarla y por fin transformarla en
energía, la cual les servirá de “carburante” durante toda su existencia como
seres divinos.
Ahora
bien, ese proceso no es fácil de efectuar porque al descender a la materia, la
conciencia se atrofia, se duerme y temporalmente se oscurece. Y por
consiguiente se requiere posteriormente de todo un proceso evolutivo para
volverla a despertar y elevar al mundo divino. Y ese proceso se hace a través
del ciclo de las reencarnaciones.
EL PROCESO DE LA
REENCARNACIÓN
Como
vimos, el despertar de la conciencia se hace de abajo hacia arriba. Lo que
implica que los principios superiores de los humanos se encuentran todavía en
proceso de desarrollo.
Lo
que nos lleva al segundo concepto erróneo que tiene la gente de creer que los
humanos se encuentran ya tan despiertos y activos en el mundo divino como se
encuentran actualmente en la Tierra.
Y
eso es falso porque en realidad los Maestros explican que la inmensa mayoría de
los humanos se encuentran actualmente en el mundo divino como bebés en proceso
de nacer.
Ahora
bien, la Triada superior es por así decirlo “muy ligera”, lo que le impide
descender a la Tierra. Lo más que ella puede
hacer es proyectar un rayo de Manas. Y este rayo se va a entronizar con Kama
para así poder controlar a su vehículo terrestre.
Usualmente
a ese rayo de Manas se le denomina “el mental inferior” y a la parte de Manas
que permanece en el mundo divino se le denomina “el mental superior”. Pero en lo
personal no me gusta esos términos porque hacen creer a la gente que se trata
de dos entidades diferentes: “el yo inferior” que desciende a la Tierra y “el
yo superior” que permanece durmiendo en el cielo. Cuando en realidad ES EL
MISMO SER.
Por
lo tanto sería más adecuado comparar a tu “mental inferior” como la mano de tu cuerpo
que desciendes por el hoyo de un agujero (porque no puedes pasar todo tu cuerpo
a través de ese hoyo) para alcanzar lo que se encuentra en el fondo.
¿Vas a decir que tu
mano es una entidad diferente de tu cuerpo?
NO
Tu
mano forma parte integrante de ti. Pero resulta que (en nuestro ejemplo) al ser
la mano, la que más va a estar activa, también es la que más se va a
desarrollar de todo tu ser. Y es por eso que en la actualidad, la parte que
tienen más desarrollada y activada los humanos son sus principios Kama y Manas (o
sea su naturaleza animal y su naturaleza humana).
Resumamos el
asunto
El humano es una conciencia que
dispone de siete principios los cuales son:
- Atma que es su naturaleza divina
- Bhuddi que es su naturaleza espiritual
- Manas que es su naturaleza humana
- Kama que es su naturaleza animal, más
- Su cuerpo energético
- Su cuerpo astral y
- Su cuerpo físico
Los tres principios superiores son
permanentes, mientras que los cuatro inferiores son mortales y por consiguiente
se requiere reconstruirlos con cada nueva reencarnación. Y como la tríada
superior no puede descender al mundo terrestre, Manas proyecta un rayo de su
esencia, el cual se va a entronizar con el cuaternario inferior.
¿QUÉ SUCEDE DESPUÉS
DE MORIR?
Pues
bien a grandes rasgos se va a producir el proceso inverso de lo que sucede para
encarnar.
Y
este proceso inverso se puede dividir en cuatro periodos:
A) Estancia en el plano
astral
B) Estancia en el kama-loka
C) Estancia en el mundo
divino y
D) Proceso para una
nueva reencarnación.
A) ESTANCIA EN EL
PLANO ASTRAL
Y
aquí está el tercer concepto erróneo que tiene la gente de creer que cuando las
personas mueren, siguen despiertas y activas en el plano astral. Pero eso no es
cierto y los Maestros son muy categóricos sobre ese punto: la mayoría de los
humanos pierden la conciencia al momento de morir y se la pasan durmiendo
durante su estancia en el astral.
Al
respecto el Maestro Kuthumi dice:
« Toda persona recientemente desencarnada, ya sea que haya muerto de muerte sueve o violenta, de muerte natural o accidental, que se encuentre mentalmente cuerda o loca, joven
o vieja, buena o mala, etc. Toda persona al instante de la muerte
pierde todo recuerdo, es mentalmente aniquilada [cae en inconsciencia], ella
duerme su sueño Akasico [primero en el plano astral y luego] en el Kama-Loka.
Este
estado dura desde unas pocas horas (rara vez menos), días, semanas, meses y a
veces hasta varios años. Todo depende de su nivel mental
al momento de morir, del carácter de su muerte, etc.
Y la remembranza de su vida [recuerdo
consciente de la vida que tuvo en la Tierra] regresará lenta y gradualmente
hacia el final del estado de gestación al momento de su entrada en el Devachan
[o sea en el mundo divino]. »
(Carta
Mahatma 24B, p.186-187)
Ahora
bien, los Maestros también precisaron que toda regla tiene sus excepciones y los
humanos que permanecen despiertos (o semi despiertos) en el plano astral
después de morir se pueden reagrupar en dos categorías:
1)
Los humanos que por haber adquirido un desarrollo más avanzado, son capaces de
permanecer despiertos y conscientes después de haber fallecido. Y entre estos
se encuentran los adeptos, los magos negros, los chamanes y sus discípulos
avanzados respectivos.
2)
Y los humanos todavía “comunes” pero que por diversos motivos no pueden caer en
ese sueño akashico. Y algunas de las razones por las que no pueden dormirse son:
-
Porque
tienen una gran adicción hacia alguna droga (cigarro, alcohol, cocaína, etc.)
lo que les impide poder descansar y continuamente esas almas desencarnadas están buscando gente viva a
través de las cuales puedan satisfacer su adicción.
-
También
está la gente que está obsesionada con alguna actividad (la lujuria, la perversidad, etc.) y
también su necesidad las lleva a buscar personas a través de las cuales puedan
satisfacerse.
-
Están
también las personas que mueren de manera muy brutal (asesinato, accidente de
tránsito o aéreo, etc.) y el trauma por el que pasaron les impide poder
descansar.
-
También
están los suicidas cuya profunda depresión en la que se encuentran les impide
poder encontrar reposo en el sueño.
-
Etc.
¿Cuánto tiempo
permanecen las persona en el astral después de morir?
Permanecen
el tiempo que habría durado su vida normalmente en la Tierra. O sea que por
ejemplo, si una persona tenía destinado vivir hasta los noventa años, pero por
un accidente murió a los cincuenta. Entonces esa persona va a permanecer
todavía cuarenta años en el plano astral.
¿Por qué?
Porque
como vimos, Manas es muy ligero. Entonces para poder descender hasta la Tierra,
tiene que amarrarse a su vehículo terrestre a través de Kama. Pero acuérdense
que el vehículo terrestre está compuesto por tres elementos. Por consiguiente,
cuando el cuerpo físico fallece, todavía su contraparte sutil (el cuerpo astral
y el cuerpo energético) siguen existiendo. Y seguirán existiendo hasta que se
le acabe la vida al cuerpo energético y esta corresponde a la
duración de vida en la Tierra por la cual fue programado.
B) ESTANCIA EN EL
KAMA-LOKA
El
Kama-Loka es como una especie de basurero donde se queda toda la parte baja de
la persona que no puede ascender al mundo divino. Y esto se debe porque la
vibración del mundo divino es tan elevada que ahí solo pueden vibrar las
vibraciones más nobles y sublimes de la existencia.
En
otras palabras, en el mundo divino solo hay lugar para todo lo que es bueno.
Ahí no puede haber ni bajos pensamientos ni bajas emociones. Y es por eso que
todas esas bajas vibraciones se quedan en el Kama-Loka.
Lo
que implica por consiguiente que durante su estancia en el Kama-Loka, la
persona se va a dividir en dos:
- Todas las cualidades que desarrolló, todo el conocimiento que adquirió y todas las buenas vibraciones que generó durante su estancia en la Tierra (o sea todo lo bueno que hay en ella) va a ascender al mundo divino.
- Mientras que todo lo malo que hay en esa persona: todos sus defectos, todos sus vicios, etc. Todo eso va a quedar como un desecho en el Kama-Loka, en donde paulatinamente se va a ir desintegrando.
A
ese desecho, los teósofos lo denominan “un elementario” y ya se imaginarán que
mientras más malvada haya sido una persona, más el elementario va a guardar la
mayor parte de la persona y solo una pequeña parte de su ser ascenderá al mundo
divino. E inversamente, mientras más la persona haya sido buena o elevada, más
todo su ser entrará integralmente en el mundo divino, dejando sólo una minúscula
porción en el Kama-Loka.
Estos
elementarios normalmente permanecen inconscientes, pero pueden ser
revitalizados por medio del flujo energético que generan los círculos
espiritistas al invocarlos. Y una vez despertados, van a hacer todo lo posible
para tratar de no desaparecer y por consiguiente van a buscar vampirizar
energéticamente a los humanos que se encuentran en el plano físico.
¿Cuánto dura este
proceso de separación en el Kama-Loka?
Como
lo mencionó el Maestro Kuthumi: desde unas horas hasta varios años. Todo
depende de cada persona. Y en el Kama-Loka, solo los humanos que han alcanzado un alto grado de iniciación oculta (o sea que ya son adeptos o magos negros) pueden permanecer conscientes y despiertos
(y temporalmente los elementarios que han sido revitalizados).
C) ESTANCIA
EN EL MUNDO DIVINO
La
parte buena de la persona vuelve a reintegrarse con la Triada superior y
durante su estancia en el Devachan va a asimilar todas las experiencias que
trajo con ella y que adquirió durante su estancia en la Tierra.
Y
al mismo tiempo también va a disfrutar de un periodo de inmensa dicha en donde
la persona va a experimentar todo aquello que la haga más feliz.
El
detalle es que lo va a experimentar en sueños ya que como vimos, la inmensa
mayoría de las personas todavía no tienen el desarrollo suficiente para poder permanecer despiertas
en el mundo divino. Sin embargo ese sueño lo van a experimentar de una manera
tan intensa y detallada, que las personas lo sentirán más real que si lo vivieran
en el mundo terrenal. Y sin nada negativo que las pueda perturbar.
Y
cuando les explico esto a la gente, la pregunta que usualmente me hacen es:
¿Entonces ya no vamos a
poder estar junto a nuestros seres queridos?
Y
la respuesta es que sí van a estar, ya que las almas se agrupan en función de
sus similitudes, sólo que van a estar durmiendo. Y cuando los sueños
se asemejan, se sintonizan entre ellos. Por lo que sería más preciso decir que
van a estar soñando juntos.
La
estancia en el Devachan es un periodo de inmensa bienaventuranza que sirve
también de reposo reparador, ya que si los humanos tuvieran continuamente que estar reencarnando si ese descanso, rápidamente terminarían extenuados. Y los Maestros dicen que actualmente la duración promedio
de los humanos en el mundo divino es de 1’500 años. Aunque obviamente hay
grandes diferencias: desde los que se quedan sólo poco tiempo, hasta los
que residen durante muchos milenios. Todo depende del grado de desarrollo que la
persona haya adquirido, el karma positivo que haya generado y las experiencias que
haya obtenido durante su estancia en la Tierra.
D) PROCESO
PARA UNA NUEVA REENCARNACIÓN
Cuando
todas estas fuerzas mentales y psíquicas que mantuvieron al Ego en el mundo
divino, han sido agotadas. Manas se prepara para enviar un nuevo rayo de su
esencia hacia la Tierra para vivir una nueva reencarnación y por consiguiente
un nuevo periodo de desarrollo.
Y
así el ciclo se repite.
Y
de esta manera el humano se va desarrollando más y más con cada nueva
reencarnación que efectúa. Hasta que un día “el bebé cósmico” se vuelve un ser cósmico
plenamente desarrollado.
Entonces
ese humano muy evolucionado va a sublimar sus cuatro cuerpos inferiores y
transformarlos en energía. Y no necesitando más reencarnar (ya que todo el
desarrollo que podía aportarle la Tierra, ya lo ha obtenido). Ese humano va a
comenzar su vida cósmica en el mundo divino.
Ahora
bien (y este es otro concepto erróneo que tiene la gente), el mundo divino NO
es una región en donde todo el mundo vive en el mismo lugar.
Los
tres planos que les mencioné (el plano mental, el plano buddhico y el plano
atmico) son sólo una pequeña parte de todo el conjunto que conforma al mundo divino (son la parte más densa).
Porque de
hecho el mundo divino está constituido por numerosos otros planos de existencia
y a medida que los humanos vayan evolucionando (pero esta vez ya a un nivel más cósmico
y no sólo a un nivel planetario), esos humanos muy avanzados irán accediendo a planos de existencia cada vez
más superiores hasta alcanzar la Conciencia Divina que dirige a toda la Creación.
Sin
embargo, no lo harán como humanos, sino que para entonces lo harán en un reino superior al humano. Lo que
los católicos llaman la jerarquía angelical y los teósofos llaman la jerarquía
de los Dhyani-Chohanes (los cuales son los inteligencias superiores encargadas de
supervisar el Universo).
Observaciones:
Vemos como los humanos van a poder estar conscientes y despiertos en planos de existencia cada vez más elevados a medida que vayan evolucionando.
Y aquí les resumí la explicación que dan los Maestros trans-Himalayicos, pero
pueden leer los capítulos donde detallo el asunto en este link.
RECAPITULACIÓN
Y
habiéndoles explicado todo lo anterior, a continuación les hago un resumen de
las etapas por las que pasan los humanos entre la vida y la muerte para que lo
tengan más claro:
1. Estancia en el plano físico
2. La muerte física
3. Estancia en el plano astral
4. Estancia en el Kama-Loka
5. Estancia en el Mundo divino
6. Regreso a la Tierra
1) Estancia en el
plano físico
Cuando
los humanos se encuentran encarnados en la Tierra, todos sus siete principios
se encuentran presentes.
La
Triada superior y el Cuaternario inferior permanecen conectados por medio de un
lazo energético conocido como el Antakarana.
Y en la actualidad, la Triada superior en la mayoría de los humanos todavía
está muy inconsciente y en proceso de formación. Mientras que su Cuaternario
inferior se encuentra más desarrollado, pero apenas pasando de ser un hombre
bestial a volverse un verdadero ser humano.
2) La muerte física
Al
momento en que la persona está falleciendo, ella ve pasar toda su vida en su
mente porque su cerebro agonizante está proyectando todos los recuerdos
(conciencies e inconscientes) hacia su ser interno.
Y
cuando finaliza ese proceso la persona pierde la conciencia.
Sin
embargo, justo antes de perder la conciencia, los humanos tienen un instante de
profunda lucidez en donde perciben las causas karmicas y evolutivas que lo
llevaron a tener esa vida en la Tierra, y en donde también perciben los
aspectos que todavía necesitan desarrollar y los defectos que todavía requieren
controlar.
Y
ese momento en donde la persona se está desprendiendo de la vida física es muy
importante para los esoteristas y los budistas porque es un momento en donde se
pude lograr grandes saltos evolutivos e iniciáticos. Y es por eso que el
Maestro Pasteur recomienda efectuar una técnica al momento en que se está falleciendo
(ver link)
y que también ciertas Escuelas budistas enseñan todo un procedimiento que se debe de
efectuar en el momento en que está muriendo.
3) Estancia en el
plano astral
El
cuerpo físico habiendo fallecido, las personas desencarnadas entran en el plano
astral.
La
gran mayoría de ellas van a permanecer dormidas en lo que el Maestro Kuthumi
llama “el sueño akashico”. Las que fueron buenas van a tener dulces
sueños, las que fueron malas van a tener pesadillas y las que son
materialistas, no va a soñar sino que simplemente van a permanecer durmiendo de
manera inconsciente.
En
cambio un pequeño porcentaje de los humanos por diversas razones se van a
despertar. Y usualmente esto se debe porque:
- ellos ya han alcanzaron
el desarrollo suficiente para poder permanecer en el astral despiertos,
- o porque hay algo en
ellos que nos les permite permanecer dormidos.
Por
ejemplo: una ansiedad muy fuerte hacia algún vicio (cigarro, alcohol, etc.), o
porque eran extremadamente apegados a alguien o a algo que dejaron en la
Tierra, o porque al momento de morir estaban sufriendo una profunda depresión,
o porque murieron en un terrible accidente que los dejó muy impactados, etc.
Y
en algunos cuantos casos (y cuando las condiciones lo permiten) se puede lograr
que la persona vuelva a resucitar como lo explico en este capítulo (ver link).
Los
humanos van permanecer en el plano astral hasta que su cuerpo energético se le
termine la energía con la que fue creado, y esta corresponde usualmente al
periodo de vida que tenía la persona destinado vivir durante su encarnación en
la Tierra.
Y
así por ejemplo, si la persona tenía destinado vivir cien años, pero desafortunadamente ocurrió un
accidente que la mató cuando ella tenía treinta años. Eso significa que todavía
va a permanecer en el plano astral durante setenta años.
Y
cuando la “pila” del cuerpo energético se acaba, dado que es el cuerpo
energético el que le da vida al cuaternario inferior, el cuerpo astral comienza
rápidamente a desintegrarse y lo que queda del Cuaternario inferior (que es
Kama-Manas inferior) asciende al Kama-Loka.
4) Estancia en el
Kama-Loka
Ahí,
la persona desencarnada se va a dividir en dos:
- Todo lo bueno que la
compone (y también todo lo bueno que haya desarrollado durante su estancia en
la Tierra) va a ascender al mundo divino.
- Mientras que la parte
mala de su ser va a permanecer en el Kama-Loka como un desecho que
progresivamente se va a ir desintegrando, a menos que sea revitalizado por las
sesiones espiritistas, en cuyo caso se va a volver una entidad que va a buscar
vampirizar a los humanos para no desaparecer.
Y
hay que remarcar que algunos magos habiendo alcanzado el conocimiento y el
desarrollo suficiente, ellos logran anclarse ya sea en el astral o en el
Kama-Loka. Pero esto provoca que se separen de su Triada superior, y dado que
ya no disponen, ni de la energía que les procuraba el Antakarana, ni de la
energía que les procuraba su cuerpo energético, esos magos desencarnados van a
poder existir solamente mientras que logren vampirizar la energía a los humanos
que permanecen en la Tierra.
La
mayoría de esos magos son del lado oscuro y hacen ese anclaje para evitar ser
(temporalmente) destruidos, pero también hay algunos magos que cometen ese error
simplemente por ignorancia, y los más antiguos se encuentran en el plano astral desde
la época de la Atlántida.
Nota:
el periodo en el Kama-Loka puede durar desde unas cuantas horas hasta varios
años, todo depende del desarrollo espiritual que tenga la persona, así como de
sus apegos terrenales. Y esta es una de las razones por las que se recomienda
la incineración: porque el fuego a nivel sutil es purificador y ayuda mucho a
liberar a las almas de todos esos apegos.
5) Estancia en el
Mundo divino
La
inmensa mayoría de los humanos no teniendo todavía el desarrollo suficiente
para poder permanecer despiertos en el Mundo divino, ellos van a entrar en el
“sueño devachánico” en donde se la van a pasar soñando con todo aquello que los
haga más felices. Y aunque solo será un
sueño, la persona lo experimentará de una forma tan real, intensa y profunda
que para ella será completamente verdadero.
Pero
la estancia en el Mundo divino no solamente es un periodo de recompensa hacia
los humanos por todo lo bueno y beneficioso que hicieron en la Tierra. Sino que
también les permite recuperarse, porque si los humanos estuvieran reencarnando
y reencarnando sin poder hacer una pausa, rápidamente ellos terminarían
exhaustos y ya no podrían avanzar más.
Y
también es un periodo en donde la Triada Superior va a integrar todo el
aprendizaje y desarrollo que logró el Cuaternario inferior durante su estancia
en la Tierra. Y durante ese periodo Manas inferior y Manas superior vuelven a
unirse y vuelven a ser uno solo.
Los
Maestros dicen que actualmente los humanos permanecen en el Mundo divino en
promedio 1’500 años, aunque obviamente hay grandes diferencias: desde los que
permanecen solo unos pocos meses, hasta los que permanecen muchos milenios.
Todo depende del karma y desarrollo que haya logrado la persona durante su
estancia terrestre.
6) Regreso a la
Tierra
Cuando
las energías psíquico mentales y emocionales que la persona trajo con ella, han
sido integradas, y que el karma positivo ha sido compensado en el Mundo divino
(y todavía falta que también se compense en el Mundo terrestre), y que haya en
el planeta las condicione adecuadas para un nuevo tramo evolutivo.
Entonces
Manas vuelve a proyectar un rayo de su esencia hacia la Tierra y un nuevo
Cuaternario inferior se va a volver a formar para recomenzar una nueva
reencarnación.
Y
Blavatsky precisa que en ese proceso, durante un corto instante, los humanos
vuelven a tener un momento de profunda lucidez, en donde perciben a grandes
rasgos la nueva vida que van a tener y las razones por las que les tocó se
destino.
Y
hay que remarcar que durante el proceso post-mortem, el karma negativo es temporalmente
pausado y este se tendrá que saldar principalmente durante las estancias en el
plano físico, con la excepción de aquellos que realmente fueron muy, pero muy
malos, y estos individuos en vez de tener un periodo de felicidad (Devachan)
van a tener un periodo de sufrimiento (Avitchi) durante su viaje post-mortem.
Y
también hay que remarcar que a medida que los humanos vayan evolucionando más,
la separación entre la Triada superior y el Cuaternario inferior va a ir
disminuyendo hasta que la persona sea capaz de estar consciente en los
diferentes planos de existencia.
Y
esto es lo que logran los Maestros (incluso estando encarnados en la Tierra) ya
que habiendo desarrollado de manera muy avanzada sus siete principios, ellos
pueden viajar a cualquiera de esos planos de manera consciente. Lo que
significa que para los Maestros la muerte es un simple cambio del “vehículo
físico” (así como si fuera un cambio de vestimenta) debido a que ellos
permanecen conscientes durante todo el proceso post-mortem (con excepción de un
pequeño periodo al momento de fallecer).
Mientras
que para los humanos comunes, la muerte sigue siendo todo un trastrocamiento
porque nosotros perdemos la conciencia y no la recuperaremos hasta en la
próxima reencarnación y con una completa amnesia de lo que sucedió.