Cuando yo tenía alrededor de 17 años
me gustaba mucho una chica y como ella no me prestaba atención, entonces decidí
utilizar la magia para enamorarla.
Ya no me acuerdo que técnica utilicé,
pero si me acuerdo que al inicio estaba funcionando y ella se estaba interesando
por mí, pero súbitamente ella cambió de actitud y se alejó de mí. Mientras que
en cambio yo me obsesioné por ella y sufría mucho porque ella ya no tenía ningún
interés hacia mí.
Este calvario duró varios meses
hasta que ya me encontraba tan harto de no poder dejar de pensar en ella, que
decidí liberarme de ese hechizo costara lo que costara, y entonces cada vez que
ella volvía a mi mente, en mi interior decretaba:
-
“Ya no quiero pensar más en ella y
me libero completamente de este deseo.”
Y también visualizaba que estaba
encadenado a ella y que con un hacha rompía esa cadena.
Pero apenas acababa de hacer eso que
de nuevo los pensamientos sobre ella me volvían a invadir, y de nuevo yo volvía
a repetir el mismo procedimiento. Y así decenas y decenas de veces al día
durante meses y meses, hasta que poco a poco me fui liberando de esa atadura.
Y después de esa amarga experiencia,
quedé tan hastiado que no quise volver a hacer ningún ritual de magia por el
resto de mi vida.
Ahora viendo el asunto en retrospectiva,
algo que me desconcierta mucho es que el karma me haya castigado tan rápida e
intensamente, porque mientras que yo veo que las personas que hacen magia, el
karma tarda mucho tiempo para castigarlas, e incluso hasta lo hace en su siguiente
reencarnación.
En cambio conmigo no tardó ni dos semanas para regresarme el
hechizo y que yo sufriera las consecuencias de mis acciones. Ni siquiera me dejaron disfrutar un poco mi fechoría, sino que me castigaron inmediatamente y con todas las fuerzas.
Y aunque todavía estoy muy enojado
por ese acontecimiento ya que siento que se me castigó exageradamente en
comparación a lo que yo había hecho. Debo de admitir que esa dura experiencia
fue beneficiosa para mí debido a que si no la hubiera vivido, entonces hubiera seguido
manipulando a la gente utilizando magia, y tal vez incluso me hubiera sumergido
en la hechicería.
En cambio al no haber querido saber
más de la magia, me evité todo ese karma y las consecuencias nocivas que
seguido les sucede a las personas que se meten en la magia cuando todavía no están
preparadas.
Así es que yo sospecho que “allá
arriba” decidieron darme un fuerte escarmiento desde el inicio para que así ya
no siguiera avanzando por el sendero oscuro.
La mala noticia es que cuando me
preguntan sobre magia, seguido no tengo respuesta porque quedé tan trastornado por esta amarga experiencia que ya no quise estudiar ningún tipo de magia, ni la blanca ni la verde, ni
nada de nada.
~ * ~
Y este es un
testimonio más que les comparto (y esta vez basado en mi propia experiencia)
para explicarles los motivos por los que les aconsejo de mejor evitar meterse
en la magia. Y si ustedes están haciendo rituales para manipular a la gente y
no les pasa nada, asústense porque la factura kármica se está incrementando
descomunalmente, y cuando les golpee va a ser brutal. Porque si yo por un
pequeño hechizo sufrí enormemente durante más de un año, no quiero imaginarme
lo que van a sufrir aquellos que llevan décadas embrujando a la gente.
Totalmente de acuerdo. El karma es "brutal" tal como has dicho. La "recompensa" - como dijo Kuthumi en una carta- es multiplicado, atroz, desalentador. Si viéramos las cadenas, el tejido de las acciones, jamás haríamos el mal. Pero no lo vemos y eso es un grave problema.
ResponderBorrarYo leí en tu blog (no recuerdo cuál artículo) que a las personas que están más despiertas espiritualmente o conscientes de las cosas que hacen, el karma les llega más rápido. En cambio, si aún no están listas, el karma demora hasta que sus conciencias hayan madurado lo suficiente para poder adquirir el aprendizaje correctamente; de lo contrario, el karma les será inútil.
ResponderBorrarEso lo dijo Pastor y suena válido, pero aún así yo siento que si el karma fuera más rápido entonces hasta el hombre más bruto terminaría por captar las consecuencias de sus actos (pero también es un hecho que la jerarquía que dirige el karma sabe mucho más que yo).
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BorrarCid eh cambiado mi decreto por éste a continuación: (Yo renunció por completo al karma positivo)
BorrarEl universo está obligado a satisfacerme, verdad?
Yo considero que ésto me va a ayudar en muchas cosas...
Gracias Cid por ser Sherlock Holmes de la vida real (mejor ejemplo no se me viene )
No creo que fuera necesariamente karma, ó que algun ser superior le diera un "pequeño" escarmiento; creo que mas bien, como no sabia mucho de magia, al igual que un novato que no sabe trabajar con el fuego, se termino quemando, mientras que, quien sabe trabajar con el fuego, lo puede usar tanto para algo positivo, como negativo...
ResponderBorrarNo es que yo sepa mucho de magia, pero si tengo mis dudas con respecto al planteamiento del karma como castigo.
Tu argumento sobre el novato que apenas inicia es bastante coherente...
BorrarYo veo que a la inmensa mayoría de los novatos no les pasa nada, y tal vez no fue karma pero si se sintió como tal.
ResponderBorrarEn mi defensa yo no tengo ganas ni tiempo para hacer éstos rituales de magia...
BorrarY aparte pues que te digo, para mí es un castigo reaprender la paciencia (si últimamente eh notado que la impaciencia me domina)
Y yo escuchando mantras cada vez que me separaba de mi enamorada y siempre volvía, ahora ya tomé la decisión de abandonar toda visualización, el karma fue amable conmigo y pienso ayudar a la gente según mis posibilidades ya sea con conocimiento o una parte de mis ganancias o animales y que me perdonen a cambio de no volver a hacer esos ejercicios de visualización para volver con la persona de mi interés
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