Extractos de las cartas de la condesa Wachtmeister sobre los últimos días de HPB
24 de octubre de 1890
Últimamente han surgido varios proyectos nuevos. Uno de ellos es alquilar la casa de al lado. La señorita Cooper, la señorita Chambers y el señor Sturdy son quienes probablemente garantizarán el alquiler.
La casa tiene un bonito jardín y un invernadero, y como deberíamos tener una puerta de comunicación abierta a nuestra casa, o mejor dicho, a nuestros terrenos, formaría un mayor centro de fuerza y actividad en Avenue Road.
El primer lunes de cada mes, la señora Cooper-Oakley y yo estaremos en casa por la noche. HPB dice que es absolutamente necesario trabajar en todos los niveles de la sociedad, y la gente de la alta sociedad nos ha ignorado por completo desde que vivimos en Avenue Road; así que haremos un esfuerzo supremo para atraerlos a la casa.
Puede imaginarse lo seria que es HPB cuando encarga un traje de noche.
6 de marzo de 1891
Las cosas van bastante bien aquí. Las tardes de los jueves continúan, aunque HPB rara vez está presente; de hecho, ahora casi nunca la vemos. Se encierra durante días enteros.
Está construyendo una habitación que da al jardín, con acceso a su propia habitación; y luego, supongo, se aislará por completo. A medida que se debilita, le resulta agotador tener tanta gente ronroneando a su alrededor.
19 de abril de 1891
HPB se está debilitando cada vez más, y siente que para poder realizar cualquier trabajo necesita estar completamente sola, para poder concentrar sus energías. Su sala actual es un pasillo hacia la Sección Esotérica, y no puede tener la tranquilidad y la soledad necesarias; por lo tanto la habitación interior que se está construyendo estará cerrada al público, incluidos los familiares.
Se le ha dado parte del dinero; el resto se tomará de las ganancias de sus libros. Dice que su cuerpo está tan destrozado que solo estando mucho tiempo sola puede mantenerse en pie; y espero que llegue el día en que se encierre por completo y solo vea ocasionalmente a los de la casa.
Tal como están las cosas, nunca nos acercamos a ella excepto por la noche.
(Blavatsky falleció el 8 de mayo de 1891)
25 de mayo de 1891
Hemos pasado un tiempo terrible y parece casi imposible, incluso ahora, darnos cuenta de que HPB se ha ido. Todos estábamos tan seguros de que viviría hasta el fin del siglo; así que aunque durante todo este invierno la hemos visto desfallecer y perder fuerza continuamente, no nos alarmamos realmente.
HPB trabajó muy poco este invierno, y como les escribí antes, se fue distanciando poco a poco de nosotros. Ahora creo que sabía que el fin se acercaba, y lo hizo para acostumbrarnos a su ausencia, y también para observarnos y ver cómo nos las arreglaríamos solos sin ella; y ahora tenemos que trabajar solos y hacer lo mejor que podamos.
(The Theosophist, mayo de 1929, p.124-125)
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