LOS PODERES QUE TENÍA BLAVATSKY ATESTIGUADOS POR ARCHIBALD KEIGHTLEY

 
Archibald Keightley fue uno de los principales alumnos de Blavatsky y sobre este asunto el mencionó lo siguiente:
 
 
Cuando Blavatsky estuvo en Londrés en 1884, él no percibió nada:
 
Creo que puedo reclamar la orgullosa distinción de que de todos los que en ese momento habían vivido en la misma casa con Madame Blavatsky, yo era el único que nunca había presenciado ninguno de los fenómenos que se veían con tanta frecuencia en su cercanía. (1)
 
 
 
 
Posteriormente cuando Archibald Keightley fue a visitar a Blavatsky en 1887 a Ostende, Bélgica, ahí él si percibió algo que lo impresionó:
 
Encontré a Blavatsky viviendo con la condesa Wachtmeister, trabajando muy duro en su obra La Doctrina Secreta y escribiendo desde las seis de la mañana hasta las seis de la tarde, y solo omitiendo intervalos muy cortos para las comidas.
. . .
Lo que más me impactó en la parte del manuscrito de La Doctrina Secreta que pude leer durante mi corta estadía fue la enorme cantidad de citas de varios autores. Y eso me impresionó mucho porque no había ninguna biblioteca en ese lugar para consultar esos libros, y pude ver claramente que los libros que tenía Blavatsky a penas llegaban a treinta y de los cuales varios eran diccionarios y varias obras contaban dos o más volúmenes. Y en esa ocasión no vi Las Estancias de Dzyan, aunque había varias porciones de ese Catecismo Oculto incluidas en el manuscrito. (2)
 
 
 
 
Ese mismo año Archibald Keightley llevó a Blavatsky a Londres, y junto con su tío Bertram Keightley, la ayudaron en la corrección y edición de La Doctrina Secreta, y ahí él descubrió como hacia Blavatsky para leer todos esos libros que citó en su obra:
 
Muchas de las citas que ella usó tuvieron que verificarse, y aquí nos hubiéramos perdido si no fuera porque una noche Blavatsky nos precisó que ella utilizaba la Luz Astral para obtener esas citas, y a veces se le olvidaba que debía invertir las cifras, por ejemplo: la página 123 la escribía 321 y así sucesivamente.
 
Y con esto en mente, la verificación fue más fácil ya que al principio me quedé perplejo al examinar todas las ediciones en el Museo Británico para encontrar en varios casos que las citas no se encontraban en la página mencionada, pero con la inversión de los números el asunto se arregló y las citas se encontraron en los lugares señalados. (3)
 
 
 
 
 
 
 
Notas
 
1.    HPB: en Memoria de Helena Petrovna Blavatsky, p.55-58
2.    Reminiscencias de H.P. Blavatsky y la Doctrina Secreta, Condesa Constance Wachtmeister, apéndice I-2, p.96-100
3.    Ibid
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario