Por un lado están los misioneros
ingenuos que realmente creer que Samael fue el nuevo Avatar de la Era de
Acuario y que por consiguiente es un deber difundir su enseñanza por todo el
mundo.
Estos misioneros viven de manera muy
precaria viajando de
ciudad en ciudad, sin dinero, enseñando la gnosis samaeliana. Y cuando se instalan
en algún lugar, todo el dinero que recaudan se les va en pagar la renta del local
donde dan sus clases y en la publicidad que hacen para atraer a la gente.
Pero
si la vida de estos misioneros es mala, la vida de sus esposas es aún peor,
porque el misionero fuera de sus clases se la pasa acostado “meditando”,
mientras que la esposa tiene que trabajar como sirvienta todo el día para tener
el local y a su marido presentables; la pobre mujer vive en la miseria y si se
queja es golpeada por su marido, quien además abusa de ella como si fuera su
esclava sexual.
Y
por el otro lado están los misioneros hipócritas que aparentan también ser muy
fervorosos, pero que en realidad son muy mañosos, y sobre estos individuos
Mariana comentó:
« También me tocó conocer cómo se manejan los negocios
dentro de las instituciones gnósticas, todo tiene que ser en secreto,
"herméticos", dar una cara y hacer otra cosa. Por ejemplo entre los misioneros
gnósticos es común pedir dinero, andar mal vestido, mal calzado, y andar
pidiendo para los frijoles, eso es común.
Hay algunos que de verdad tienen
necesidad, pero yo conocí a muchos que van con los otros gnósticos a sus casas,
llegan a comer, a cenar, a bañarse, andan en harapos, les dan ropa, les dan
zapatos y un poco de dinero; luego les piden prestado, les dan más dinero, y
así andan de casa en casa; o llegan con los alumnos y les piden, “oye préstame
porque no traigo ni para comer”, pero en cambio si traen el celular más lujoso…
Traen como mil dólares en sus bolsillos
pero andan haciéndose los pobres, conocí a uno que en un día junto unos 200
dólares nomas de andar pidiendo a los alumnos para la renta y se fue y ni la
renta pagó, eso es común. Eso nunca lo hicimos nosotros, mi ex no lo hacia,
pero amigos suyos si.
Y también conocí a un instructor de
los más cercanos al que ahorita está a la cabeza de una institución que era
todo un mujeriego, ya que tenía varias mujeres de segunda cámara con las que
practicaban la “alquimia sexual” en un hotel, y ellas pagaban el cuarto, y él
les había prometido que se iba a casar con ellas.
Así es que ya ven las fechorías que
hay en esa organización, y eso que yo estuve en una de las instituciones más
"limpias". ¿Cómo estarán las demás? Por lo que tengan cuidado, porque
estos individuos hacen que todos esos abusos parezcan muy naturales y todos les
creen que es lo normal. »
Y estas mañas también las atestiguó Estela
quien fue víctima de los misioneros gnósticos en Costa Rica:
« Yo tuve una mala experiencia con la gnosis. Empecé muy
motivada y fui a un "curso de meditación" en el cual nos dieron las
lecciones de la primera cámara.
Mis compañeros y yo estábamos muy
emocionados, nos encantaban las lecciones e incluso varias veces que íbamos
cayó en un día feriado pero aun así asistimos a pesar del poco transporte
público que había esos días, o también lloviendo, Nunca faltábamos.
El caso es que yo fui una de las que
llegó a las últimas lecciones y el instructor empezó a mencionar la segunda
cámara y al final la iniciación, cosa que la mayoría aceptó. De echo mi grupo
fue el más numeroso que según ellos habían tenido, con doce personas que la
dividieron en dos grupos para hacer el ritual de iniciación.
Y bueno luego de eso ya
participábamos más a menudo en las actividades: teníamos salidas al campo, al
templo, etc. Al inicio me sentí bien, pero luego de cinco meses abrí los ojos y
vi que ese camino no era para nada bueno y por los siguientes motivos:
1. La mujer que tiene la
menstruación no puede participar en cadenas, ni encender las velas de los
candelabros. Lo cual me dejó completamente pasmada. ¿Qué tiene que ver la
menstruación con la capacidad de la mujer de poder realizar cualquier actividad?
Aparte de que esa actitud es muy
humillante puesto que nosotras debemos estar siempre pendientes de que no se
note que estamos en ese periodo pues es algo muy intimo, ni siquiera nuestros
padres y hermanos tienen que saberlo. Y en cambio ahí todo el mundo se da
cuenta de eso. Y aparte de eso te discriminan, te aíslan, como si en ese
periodo tuvieras una enfermedad contagiosa.
2. La casa en la que estábamos era
muy pequeña, por lo que los cuatro encargados de dar la gnosis en esa zona se
consiguieron una casa lujosa con habitaciones enormes y un gran jardín, y nos
dijeron a los de la segunda cámara que teníamos que aportar económicamente cada
mes para pagar el alquiler de esa casa, lo cual nos iba a beneficiar para
nuestro crecimiento espiritual etc., etc.
Y ellos se la pasaban muy a gusto
viviendo ahí, sin trabajar y solamente haciendo algunos trabajos ocasionales, o
como me dijeron a mí, editando videos que alguien de la gnosis les mandaba por
internet.
Y resulta que en ocasiones la
mayoría de nosotros no podíamos pagar (eran como 40 dólares americanos) y
entonces hacíamos comidas para vender, con ingredientes que nosotros teníamos
que pagarlos. Y claro, nos quedábamos hasta en la madrugada haciendo la comida
para el alquiler de esa casa... lo cual después de analizarlo me di cuenta que
estaba donando el poco dinero que yo tenía para que personas vivieran muy
cómodamente en esa casa.
3. Y también vi las mentiras y las
farsas de Samael y también la idolatría que tenían los gnósticos sobre él, la
manera como se expresaban como si Samael fuera casi un dios. Además su
enseñanza está toda llena de contradicciones, y yo que amo la ciencia me quedé
helada cuando vi las declaraciones que Samael hizo sobre que la mujer no puede
estudiar química, matemática, física, etc. Y eso ya fue demasiado para mi, le
comenté al instructor sobre esto pero él no le tomó importancia y me contestó
que Samael se había arrepentido de muchas cosas que él había dicho y que yo
estudiara tranquila sin preocuparme de eso.
4. Pero lo mas grave fue cuando mis
amigos me dijeron que yo había cambiado de sobremanera en mi comportamiento y
que me había vuelto irritable, iracunda. No me podían decir nada contra la
gnosis por que yo explotaba e incluso gritaba en lugares públicos, no me podían
decir que también estudiara algo externo a la gnosis sobre un tema para tener
una idea mas amplia (que la verdad yo siempre hacia eso antes), y tendía a
discriminar a ciertas personas por encontrarse en un determinado grupo ajeno a
la gnosis, tendía a condenar a los demás cuando antes yo no era así.
De hecho fueron ellos quienes me
sacaron de mi error, y se los agradezco mucho, y también por haber soportado
todas las cosas que les dije y que a pesar de eso no me quitaran su amistad,
ellos si son verdaderos amigos, no como mis “amigos” de la gnosis que ya no me
quieren hablar solo porque dejé de asistir a su congregación.
5. Además me absorbía gran cantidad
de tiempo, era indispensable ir todos los sábados cuando al inicio me dijeron
que eso no se requería.
Y es por eso que hace dos semanas
más o menos me fui y los dirigentes aun me mandan mensajes y me llaman, es
decir, me siguen acosando.
Bueno, no sé por que estuve tan
ciega y no me salí antes, en verdad me durmieron mucho tiempo y sin quererlo me
terminaron engañando y haciendo aceptar sus doctrinas. Le doy gracias a Dios
que ya me salí de allí y espero que alguien que lea esto reflexione y no se
deje engañar por esos individuos a quienes no les importa tu crecimiento
espiritual, sino únicamente explotarte. »
CONCLUSIÓN
Eviten los dos tipos de misioneros gnósticos que existen,
porque los primeros son unos fanáticos que no están conscientes de que ellos
están promoviendo a un charlatán y buscan adoctrinar a todos los incautos que
puedan. Y los segundos, a parte de adoctrinar, también son unos abusivos que
tratan de aprovecharse de todos los ingenuos que encuentran.
De acuerdo con los argumentos contra el gnosticismo samaeliano. Yo fui misionero gnóstico internacional en 1975; tenía 20 años y ocurrió tal como dicen los damnificados. Actualmente soy licenciado en Filosofía y Letras y conozco un poco más de esoterismo, así como las fuentes samaelianas.
ResponderBorrarMe iniciaron en el gnosticismo de Samael a la temprana edad de 13 años, en 1968, actualmente tengo 69, (como lo expuse ayer,) fui misionero gnóstico internacional, soy colombiano y estuve en Ecuador y Chile haciendo "misión". A los 27 años deserté, después de empezar a conocer las "fuentes" del saber de Samael, lo cual me llevó a investigar hasta lograr hallar a sus "Maestros"...Aunque me parece lamentable el final que ha tenido ese gnosticismo, agradezco la oportunidad que me brindó para conocer algo más de Esoterismo...Actualmente docente de Filosofía, he escrito algunas obras en las cuales hago un paralelo entre el gnosticismo, la masonería y el rosacrucismo, con el título de LOGIAS SECRETAS en la que expongo su filosofía, doctrina y los ritos de las tres y su semejanza...Saludos desde Florencia, Caquetá, Colombia. Prometeo
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