Este es el sexto capítulo del
libro “La Doctrina Secreta de los
Rosacruces”.
En la Doctrina Secreta de los
Rosacruces encontramos el siguiente quinto aforismo:
“El Uno es
la Flama de la Vida. Los muchos son las chispas en la flama. La Flama una vez
encendida enciende todo dentro de su esfera. El Fuego está en todo y en todas
partes; no hay nada oscuro o frío dentro de su esfera.”
En este Quinto Aforismo de la
Creación, el Rosacruz está dirigido a aplicar su atención al concepto de la Vida
Universal, la Vida del Alma del Mundo, impregnando todo en todas partes dentro
de su esfera de existencia. Este concepto del Alma del Mundo como Fuego
Flamígero de Vida que habita en todo el Universo en todas sus partes, está
representado por los Rosacruces con el símbolo de un círculo lleno de fuego flameante.
Figura 9. Símbolo de la Flama Universal de la Vida
(Sospecho que esta no es una figura rosacruz
ya que no la he visto antes en la verdadera enseñanza rosacruz.)
El símbolo de la Vida siempre ha
sido el Fuego Flamígero en todas las enseñanzas ocultas. El Fuego o Flama
Eterno, Universal, que enciende siempre todo lo que se presenta a su
influencia, pero que permanece inalterado y sin disminuir en su Esencia, ha
sido siempre el símbolo favorito de los ocultistas para la Vida Universal en
Manifestación. Cuando el término "Espíritu" se usa para indicar
"Vida", entonces la Flama o el Fuego siempre ha sido el símbolo del
Espíritu.
Y de hecho, la Flama es el símbolo más
apropiado para la vida que se puede pensar, porque la Flama, aunque siempre
permanece igual, nunca se compone de las mismas partículas o chispas ni
siquiera durante dos segundos consecutivos. La Flama, en sí misma, en su
Esencia, permanece siempre igual y sin cambios, sin embargo su Manifestación
siempre está acompañada y correlacionada con la aparición y desaparición de
innumerables diminutas partículas de sustancia material
que enciende en chispas, y luego se destruyen por el proceso de la combustión y
por eso son reemplazadas por otras de naturaleza similar.
Y lo mismo ocurre con la Vida
Universal. Siempre persiste inalterada en su Esencia, sin embargo
manifestándose constantemente a través de innumerables formas materiales que
van y vienen y son a su vez reemplazadas por otras formas. La forma aparece, se
consume y muere, pero la Flama de la Vida permanece y sobrevive a todo cambio. Y
aquellos que se han sumergido profundamente en las enseñanzas esotéricas son
conscientes de que hay muchas otras muy buenas razones por las que la Llama o
el Fuego es el mejor símbolo posible de la Vida, pero no se cree conveniente
entrar en estas razones adicionales en este momento y en este libro.
Anteriormente, según las enseñanzas
de la ciencia, el Universo estaba compuesto de dos grandes clases de Cosas,
como sigue: (1) Cosas Vivas y (2) Cosas Sin Vida. En la primera clase se colocó
toda la vida humana y animal, al menos durante su término de existencia vital;
Posteriormente la ciencia añadió a las plantas, aunque a regañadientes. Y en la
segunda clase se colocaron todas las cosas por debajo del plano de la vida
animal o vegetal; enseñando en las escuelas que los minerales, los elementos
químicos, etc., estaban completamente sin vida. Y cualquiera que se atreviera a
cuestionar esta clasificación aceptada era considerado de mente enferma e
indigno de una consideración seria.
Pero las escuelas de pensamiento
esotéricas y los ocultistas siempre insistieron en el principio de que no había
nada sin vida en el universo: que todo era instinto de vida en alguna forma,
grado o fase. ¡Y he aquí que la ciencia moderna ha llegado por fin al punto en
que prácticamente está mirando al ocultismo directamente a la cara y en pleno
acuerdo sobre este importante punto!
La vieja idea de un universo con la
mayor parte de lo que lo constituye sin vida está desapareciendo rápidamente, y
los hombres de ciencia avanzada están comenzando a susurrarse unos a otros que
"El Universo está Vivo, como un Todo y en todas sus partes". Sin duda
este es un cambio notable en la opinión científica.
Esta concepción cambiada de la
ciencia es expresada pintorescamente por Luther Burbank, el "mago de la
vida vegetal", de la siguiente manera:
« Todas mis investigaciones me han
llevado lejos de la idea inicial de un universo material muerto sacudido por
varias fuerzas, hacia la idea de un universo que es absolutamente todo fuerza,
vida, alma, pensamiento o cualquier nombre que elijamos llamarlo. Cada átomo,
molécula, planta, animal o planeta, es solo una agregación de fuerzas unitarias
organizadas, mantenidas en su lugar por fuerzas más fuertes, manteniéndolas así
por un tiempo latente, aunque rebosante de un poder inconcebible. Toda la vida
en nuestro planeta está, por así decirlo, en la franja exterior de este océano
infinito de fuerza. El universo no está medio muerto, sino que es todo vivo. »
El profesor Dolbear se remonta
incluso al Éter del Espacio en su suposición de la Vida Omnipresente, cuando dice:
- "El Éter tiene,
además de la función de energía y movimiento, otras cualidades inherentes, de
las cuales podrían surgir en circunstancias adecuadas, otros fenómenos, tales
como vida, mente o lo que sea que haya en ese sustrato."
Y
el profesor Cope ha insinuado que:
- "La base de la
vida se encuentra detrás de los átomos y puede encontrarse en el Éter
Universal".
(Aquí William Atkinson
está muy desactualizado debido a que los científicos ya habían rechazado la
teoría del “Éter del Espacio” o “Éter Universal” en 1905, o sea trece años
antes de que él publicara este libro.
Y los sabios
orientales afirman que la base de la vida se encuentra en Jiva, que es el principio cósmico de la vida y que se manifiesta en
el universo a través de la energía pránica.)
Saleeby, en su conocida obra “Evolución” en la que lleva a sus lógicas
conclusiones la obra de Herbert Spencer, dice:
« La vida es potencial en la materia,
la energía vital no es una cosa única y creada en un momento particular del
mundo. Si la evolución es cierta, la materia viva ha sido desarrollada por
procesos naturales a partir de materia que aparentemente está muerta. Pero si
la vida es potencial en la materia, entonces es mil veces más evidente que la
mente es potencial en la vida y que la mente es potencial en la materia (adopto
esa forma de palabras por el momento, pero no sin futuras críticas).
La célula microscópica, una diminuta
partícula de materia que se convertirá en hombre, tiene en sí la promesa y el
germen de la mente. ¿No podemos sacar la inferencia de que los elementos de la
mente están presentes en aquellos elementos químicos —carbono, oxígeno,
hidrógeno, nitrógeno, azufre, fósforo, sodio, potasio, cloro— que se encuentran
en la célula?
No solo debemos hacerlo, sino que
debemos ir más allá, ya que sabemos que cada uno de estos elementos, y todos
los demás, está formado por una unidad invariable: el electrón, y por lo tanto
debemos afirmar que la mente es potencial en la unidad de la materia — el
propio electrón.
(La respuesta es no,
debido a que la substancia mental pertenece a otro plano de existencia.)
Es para afirmar la verdad sublime
percibida por primera vez por Spinoza, que la mente y la materia son la
urdimbre y la trama de lo que Goethe llamó "la vestidura viviente de
Dios". Ambas son expresiones complementarias de la Realidad Incognoscible
que subyace a ambas. »
Flammarion ha dicho:
« El universo es un dinamismo. La vida
misma, desde la célula más rudimentaria hasta el organismo más complicado, es
un tipo especial de movimiento, un movimiento determinado y organizado por una
fuerza directriz.
La materia visible representa en el
momento presente el universo, y que ciertas doctrinas clásicas consideran como
el origen de todas las cosas —el movimiento, la vida, el pensamiento— es sólo
una palabra vacía de sentido. El universo es un gran organismo controlado por
un dinamismo del orden psíquico. La mente brilla a través de cada átomo. Hay mente
en todo, no solo en la vida humana y animal, sino también en las plantas, en
los minerales y en el espacio. »
El estudiante siempre debe recordar
que donde hay “mente”, debe de haber “vida”; y donde hay “vida”, debe de haber
“mente”. Y de ahí la importancia de estas admisiones de la ciencia moderna.
(Esto que dice William
Atkinson es falso, ya que la mente solo es un instrumento para la creación y
hay planos de existencia en donde ya no se emplea la mente sino otros
instrumentos que rebasan nuestro entendimiento.
Y sería más fácil esta
discusión si Atkinson precisara que para los ocultistas: todo tiene vida, nada
más que la vida también se expresa de maneras diferentes a las que conocemos a
nivel biológico.)
Haeckel en su "Acertijo del
Universo", a veces llamado "La Biblia del Materialismo", hace la
siguiente declaración, notable viniendo de tal fuente:
- "No puedo
imaginar el proceso químico y físico más simple, sin atribuir los movimientos de
las partículas materiales a la sensación inconsciente".
Y
luego dice:
- "La idea de
afinidad química consiste en el hecho de que los diversos elementos químicos
perciben las diferencias cualitativas en otros elementos — experimentan
'placer' o 'repulsión' al contacto con ellos, y ejecutar movimientos específicos
sobre este terreno".
Y
agrega en otro punto:
- "Las sensaciones
y respuestas en la vida vegetal y animal están conectadas por una larga serie
de etapas evolutivas con las formas más simples de sensación que encontramos en
los elementos inorgánicos y que se revelan en afinidad química".
Y cita con aprobación la afirmación de
Nageli quien dice:
- "Si las
moléculas poseen algo que está relacionado, aunque sea lejanamente, con la
sensación, debe ser incómodo poder seguir sus atracciones y repulsiones; e
incómodo cuando se ven obligados a hacer lo contrario".
Pero no sólo la ciencia moderna está
dando su aprobación a las concepciones más antiguas de los ocultistas sobre la
Vida Universal de la manera mencionada anteriormente, es decir, mediante
declaraciones generales; sino que también está citando con aprobación los
experimentos y descubrimientos de científicos destacados en la misma línea:
experimentos que prueban las afirmaciones generales antes citadas. Y consideremos
a continuación algunos de estos experimentos y descubrimientos en los
laboratorios de la ciencia moderna.
1) La ciencia ha creado prácticamente
contrapartes de las diatomeas o "cristales vivientes", creados
artificialmente en los laboratorios y criaturas similares a estos vínculos
entre las formas minerales y animales.
Las diatomeas son formas geométricas
diminutas compuestas por una capa minúscula de material silíceo que encierra
una gota diminuta de plasma, parecido al pegamento. Estas criaturas son
visibles a través del microscopio y son tan pequeñas que miles de ellas podrían
reunirse en la cabeza de un alfiler. Se parecen tanto a los cristales que se
requiere un examen muy detenido para distinguirlos de los verdaderos cristales;
y sin embargo están vivos y realizan todas las funciones de la vida.
Los cristales, como se sabe, nacen,
crecen, viven y pueden morir a causa de los productos químicos o la
electricidad. Algunos investigadores han descubierto indicios de funciones
sexuales elementales en ciertos cristales. Un escritor científico ha dicho al
respecto:
- "La
cristalización, como vamos a aprender ahora, no es una mera agrupación mecánica
de átomos muertos, es un nacimiento".
El cristal se forma a partir del
licor madre y su cuerpo se construye de manera sistemática, regular y de
acuerdo con un patrón, plan o diseño bien definido, y tan fiel a ese diseño
como lo son los cuerpos de las plantas y los animales. La certeza está presente
en la actividad de la vida creativa cristalina. Y el cristal no solo crece de
esta manera (como una planta o un animal) sino que también se reproduce por
separación y división, al igual que los individuos de las formas inferiores de
vida vegetal y animal.
El punto distintivo entre el
crecimiento y la reproducción de las formas cristalinas y el de las formas
superiores de vida que se ha sostenido hasta ahora es el siguiente: el cristal
se nutre del exterior y construye su estructura corporal en su superficie
exterior, mientras que las formas humildes de la vida vegetal y animal se
nutren del exterior pero construyen su estructura corporal desde el interior.
Si el cristal tuviera un centro blando
y se alimentara de la forma inferior de la vida vegetal o animal (construyendo
desde adentro), sería casi idéntico a la diatomea; o si la diatomea creciera
desde el exterior y tuviera un centro duro, se consideraría un verdadero
cristal. Así que como puede ver, hay muy poca diferencia real entre ellos.
Y ahora, incluso esta pequeña distinción
desaparecerá con el descubrimiento de cristales vivos artificiales,
desarrollados en el laboratorio.
2) Pruebas científicas cuidadosas
han determinado que existe lo que se conoce como "fatiga de la
elasticidad" en los metales, la cual se alivia con un descanso o
"vacaciones". Y esto también se ha encontrado en el caso de las
navajas, cuyos bordes se restauran con un pequeño descanso, lo que corrobora la
antigua "superstición" de los usuarios de navajas.
Y también se ha descubierto que los
diapasones pierden su poder de vibración por un uso excesivo, pero que un breve
descanso restaura el mismo. Y se ha descubierto que la maquinaria de los
molinos y las fábricas se benefician de un "día libre" ocasional. Y se
ha descubierto que los metales están sujetos a enfermedades e infecciones, y en
algunos casos se ha descubierto que en realidad han sido envenenados y luego
restaurados con antídotos.
El vidrio de las ventanas,
especialmente los finos vitrales de las ventanas de las catedrales, está sujeto
a una enfermedad infecciosa que se propaga de un panel a otro y provoca la
desintegración de la sustancia del vidrio. Se ha descubierto que las
herramientas de los trabajadores experimentan fatiga y son las mejores para
unas vacaciones ocasionales o unas vacaciones más largas. Y todo maquinista
observador ha constatado ciertas idiosincrasias en máquinas particulares que
necesitan "humor".
El informe científico más
concluyente sobre este interesante tema (hasta donde el presente autor conoce)
es el que relata la célebre serie de experimentos realizados con la llamada “materia
no viva” ya hace varios años, y que están registrados con el titulo
"Respuesta en los seres vivos y no vivos" por varios científicos que
llevaron a cabo los experimentos, siendo dirigidos por el profesor J. Chunder
Bose de la Universidad de Calcuta, y quien ocupa una alta posición en el mundo de
la ciencia.
Los experimentos del profesor Bose
han despertado el mayor interés en círculos científicos prominentes y han
ayudado enormemente a corroborar las conclusiones de otros científicos que
sostienen que "no existe la materia muerta".
Partiendo del postulado fundamental
de que la mejor y única prueba verdadera de la presencia de vida es la
respuesta de la materia al estímulo externo, el profesor Bose ha demostrado que
en muchos casos la llamada “materia inorgánica” como metales, minerales, etc.,
también muestra una respuesta a un estímulo que es similar, si no es que
idéntico, a la respuesta de la materia que compone a los cuerpos de los animales,
las plantas y los hombres.
Para ello el profesor Bose ideó
ciertos aparatos muy delicados para registrar y medir tales respuestas, las
mismas que se trazan como curvas en un cilindro giratorio. Él empleó el
instrumento científico más delicado llamado Galvanómetro en estos experimentos.
El galvanómetro registra la más leve irritación de la materia nerviosa o del
músculo vivo; y los experimentos demostraron que también registra las
variaciones de minerales, metales, etc., sometidos al estímulo de la fuerza
exterior; siendo las curvas o trazados prácticamente idénticos en ambos casos.
El profesor Bose informa que cuando
unió el galvanómetro a barras de varios metales, estos dieron una respuesta
similar cuando se golpearon o torcieron; y cuanto mayor fue el grado de
irritación que se produjo en el metal, mayor fue el grado de respuesta.
Cabe señalar que el nervio o músculo
vivo reacciona y se registra exactamente de la misma manera, y en la medida en
que el instrumento indicaba la respuesta del músculo y nervio, la respuesta del
metal y mineral era idéntica. Así como el nervio o músculo registró
"fatiga" después de estímulos repetidos con frecuencia, también lo
hizo el metal o mineral. Y así como el nervio o el músculo registraron la
renovación de vigor después de un descanso, también lo hizo el metal o el
mineral.
A todos los efectos, la materia
"viva" y la "no viva" dieron la misma respuesta y evidencia
de "vida". Además que el instrumento mostró algo así como
"tétanos" en los metales, causado por repetidos choques. Y varios
metales registraron fatiga por otras causas y en algunos casos los metales también
mostraron el efecto del envenenamiento, recuperación mediante la aplicación de
antídotos, y también los signos de excitación o intoxicación por otras formas
de estímulo.
Los experimentos también mostraron
que los metales manifiestan una condición similar al sueño; que exhiben letargo
y lentitud; que se despierten y puedan activarse; que puedan ser estimulados,
fortalecidos, debilitados, drogados o intoxicados; que sufren de frío o calor
extremos; que responden a la presencia de ciertas drogas al igual que las
plantas y los animales vivos; y que incluso pueden ser asesinados.
Por ejemplo, una pieza de acero
sometida al efecto del veneno registró en el delicado instrumento un aleteo y
un debilitamiento gradual, resultando en la muerte final, al igual que hubiera
sucedido con una porción de materia animal, o un órgano del cuerpo de un
animal, o una pieza del cuerpo de un animal, o la sustancia viva de una planta.
Y cuando se revivió antes de que fuera demasiado tarde, la respuesta del metal
fue gradual.
Un hecho muy interesante es la
afirmación del experimentador que incluso los venenos que servían para
"matar" los metales mostraban una susceptibilidad similar a las
acciones de otros venenos, y se descubrió que ellos mismos eran capaces de ser
"matados" por los venenos. En el caso de estas "muertes" de
metales, sin embargo, la estructura molecular aparentemente no se vio afectada,
al igual que la estructura similar no se ve afectada en el tejido animal.
En ambos casos aparentemente hubo
una causa de que un "algo dentro" dejara de funcionar en la
sustancia, un "algo" que bien podría llamarse un "alma"
como cualquier otro término.
(En lo personal no me
parece adecuado utilizar los términos: “enfermar”, “envenenar” o “asesinar” para
los metales, como tampoco compararlos con las plantas, los animales y los
humanos, debido a que si bien los esoteristas consideran que el reino mineral
también está vivo, su forma de vida es muy diferente a la de los seres biológicos.)
3) Otros experimentos científicos de
laboratorio han revelado los hechos más interesantes sobre la producción de
seres vivos a partir de "materia no viva". El Dr. Charles Bastian de
Londres ha preparado y exhibido más de cinco mil microfotografías que muestran
la evolución de las formas orgánicas vivas a partir de las inorgánicas "no
vivas". Y afirma haber producido ciertas manchas negras microscópicas a
partir de un licor previamente perfectamente claro, y que las manchas se
agrandan gradualmente y se transforman en ciertas formas de bacterias sencillas.
El profesor Burke de Cambridge
afirma haber producido a partir de un caldo esterilizado por la acción de
cloruro de radio esterilizado, ciertos cuerpos vivos diminutos que manifiestan
un crecimiento y reproducción subsiguientes por subdivisión.
El estudiante ordinario de química y
física está familiarizado con lo que se llama "vegetación metálica", y
especialmente en el caso del "árbol de plomo" en el que se manifiesta
la aparición de formas vegetales por parte de la solución acidulada de determinadas
sustancias metálicas.
En el caso del "árbol de
plomo" se coloca una solución acidulada de acetato de plomo en una botella
de cuello ancho, de cuyo corcho se suspende un trozo de alambre de cobre y en
cuyo extremo cuelga un trozo de zinc que cuelga en el centro de la solución de
plomo.
Cuando se tapa la botella con un corcho,
el alambre de cobre comienza a rodearse de inmediato con un crecimiento de
plomo metálico que se asemeja mucho a un musgo muy fino, y ese musgo
gradualmente desarrolla ramas y finalmente un follaje, y al final se forma un
arbusto o árbol en miniatura.
(Aquí William Atkinson
comete una equivocación al identificar esos dos fenómenos: el mineral y el
vegetal como iguales ya que si bien los dos son similares, sus mecanismos son
diferentes. Por ejemplo: si yo les pongo una simulación por computadora en
donde reproduzco ese mismo fenómeno, ustedes no van a concluir que la
computadora tiene el mismo metabolismo que una planta. Y ese es el error que comete Atkinson.)
Otras soluciones metálicas producen
fenómenos similares. Por ejemplo el salitre sometido al efecto de la luz
polarizada asume formas muy parecidas a las de la orquídea. Los cristales de
escarcha se forman en los cristales de las ventanas con la forma de hojas,
ramas, follaje, capullos, flores, etc. Muchos metales tienden a cristalizar en
forma de crecimiento vegetal, y esto es particularmente significativo cuando se
recuerda que los cristales están comenzando a ser considerados como "casi
vivos" por la ciencia moderna, como se señaló en un párrafo anterior del
presente capítulo.
Las revistas científicas, hace unos
años contenían referencias a un interesante experimento realizado por un
científico alemán utilizando determinadas sales metálicas. El científico
sometió las sales a la acción de una corriente galvánica, y quedó asombrado al
descubrir que alrededor del polo negativo o catódico (hembra) de la batería,
las partículas de la sal metálica comenzaban a agruparse en forma de minúsculo
hongo, con tallo y parte superior en forma de paraguas.
Estos hongos metálicos al principio
mostraban una apariencia transparente, pero gradualmente desarrollaron un color
y finalmente asumieron un color pajizo pálido en los tallos, con un color rojo
brillante en la parte superior del paraguas y un ligero tinte rosa en la
superficie inferior. Pero la característica más sorprendente del fenómeno fue
que el hongo metálico tenía venas finas o pequeños tubos que recorrían el
interior de las jarras, a través de los cuales se transportaba el alimento, o
material adicional para el crecimiento. El hongo metálico se alimentaba desde el interior, como
en el caso del hongo verdadero. Parecía que a todos los efectos, estos
elementos metálicos los hongos eran prácticamente el eslabón que conectaba la
vida mineral y vegetal.
~ * ~
Como se ha dicho en otra parte de
este capítulo, la ciencia moderna se encuentra ahora en el umbral del
descubrimiento (mediante pruebas de laboratorio reales) de que no existe la
materia "sin vida" y que Todo está Vivo. Este ha sido el argumento de
los ocultistas durante miles de años. Y como ha dicho un escritor, parecería
que, como en el caso del gran Túnel de los Alpes, las dos bandas de
trabajadores, cada una en su propio lado de la montaña, se acercan rápidamente
al lugar donde solo una delgada partición los separaba el uno del otro; y que
ya pueden escuchar débilmente los sonidos de los picos de los demás penetrando
la delgada pared divisoria entre los dos campamentos.
El ocultista ahora puede esperar con
seguridad el día en que la ciencia moderna realmente "probará para él la
vieja enseñanza de las escuelas esotéricas".
Además, la ciencia se está acercando
mucho al lugar en el que percibirá la verdad del antiguo axioma oculto de que
"Todo Poder es Voluntad", y que los movimientos de electrones,
átomos, moléculas y masas de materia son la respuesta a un
"sentimiento" interno que resulta de la atracción o repulsión hacia o
desde otras formas de materia, y la acción de "voluntad" en respuesta
a ello, como Haeckel y Nageli han afirmado durante media generación.
La afirmación de los materialistas
de que la vida y la mente no son más que cualidades de la materia, y que se
encuentran en todas las formas de objetos materiales, necesita ser invertida para mostrar la Verdad,
pronunciada desde hace mucho tiempo por los ocultistas antiguos, a saber, que
la materia no es sino la Vestidura Exterior del Alma (Vida-Mente), y que todas las formas materiales están animadas
por la Vida y la Mente.
La concepción de los Materialistas
no es más que la Pirámide Invertida del Error, mientras que la concepción de
los Ocultistas es la verdadera Pirámide de la Verdad, firmemente colocada y
profundamente descansada, esa Roca de las Edades que nunca puede ser Base
eterna del ser.
Entonces recuerda, estudiante, el
aforismo rosacruz de que "El Fuego
está en todo y en todas partes: no hay nada oscuro ni frío en su esfera".
OBSERVACIONES
Se le agradece a William Atkinson que
busque en este capítulo impulsar la idea de que todo en el Universo tiene vida,
pero desafortunadamente él lo hace de una forma torpe, debido a que los
científicos le pueden replicar que si bien las reacciones de los metales y los
seres vivos tienen semejanzas, esto se debe simplemente porque los dos están
sometidos a las mismas reglas que rigen a la materia. Pero que en cambio los
metales no procrean como si lo hacen los seres biológicos. Y en ese aspecto los
científicos tienen toda la razón.
Atkinson comete el error de querer
comparar las otras formas de vida con la vida biológica, lo cual es una
equivocación ya que las otras formas de vida se desenvuelven de maneras muy
diferentes. Por ejemplo el esoterismo afirma que los planetas y las estrellas,
así como los átomos y las partículas también están vivos. Pero es un hecho que
la manera como la vida se manifiesta a nivel macrocósmico y microcósmico es muy
diferente a la manera como se manifiesta en las plantas, los animales y los
humanos.
Y la explicación que da Atkinson a
nivel esotérico también se encuentra incompleta, ya que si bien en el ocultismo
el fuego puede utilizarse para simbolizar la vida, también se utiliza para simbolizar
otros aspectos, como por ejemplo: la energía, el amor, el poder, la divinidad,
etc.
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