LOS HUMANOS ACTUALES DE QUINTA Y SEXTA RONDA




Los maestros teosóficos explicaron que el desarrollo en la Tierra se compone de siete inmensos periodos de tiempo que ellos denominan 'rondas', actualmente nos encontramos en la cuarta ronda, pero que en esta cuarta ronda ya hay humanos de la quinta ronda, e incluso de la sexta ronda.



KUTHUMI

Cuando el señor Allan Hume le preguntó al maestro Kuthumi:

« Morya dijo que toda la humanidad está en la cuarta ronda, y que la quinta ronda aún no ha comenzado pero que pronto lo hará. ¿Fue un desliz de su parte? Si no, al comparar esto con vuestras observaciones actuales, deducimos que toda la humanidad está en la cuarta ronda (aunque en otro lugar parece decir que estamos en la quinta ronda).

Que actualmente las personas más elevadas de la Tierra pertenecen a la primera subraza de la quinta raza, la mayoría de los humanos pertenecen a la séptima subraza de la cuarta raza, pero con restos de las otras subrazas de la cuarta raza y de la séptima subraza de la tercera raza.

Por favor, aclare esto. »
(CM 14, p.83)



Kuthumi le respondió:

« Morya sabe muy poco inglés y detesta escribir, pero incluso yo podría haber usado muy bien la misma expresión: "unas pocas gotas de lluvia no hacen el monzón, aunque lo presagie".

La quinta ronda aún no ha comenzado en nuestra Tierra, y las razas y subrazas de una ronda no deben confundirse con las razas y subrazas de otra ronda.

Se puede decir que la humanidad de la quinta ronda "comenzará" cuando en la esfera [el globo C] que precede a la nuestra no haya quedado ni un solo humano de esta ronda, ni en nuestra Tierra [el globo D] uno de la cuarta ronda.

Debes saber también que los ocasionales hombres de la quinta ronda (y son muy pocos y escasos) que llegan a nosotros como mensajeros de vanguardia no engendran en la Tierra descendencia de la quinta ronda.

Platón y Confucio fueron hombres de la quinta ronda, y nuestro Señor Buda fue un hombre de la sexta ronda (el misterio de su avatar lo abordo en mi próxima carta), pero ni siquiera el hijo de Buda Gautama fue otra cosa que un hombre de la cuarta ronda.


Nuestros términos místicos, en su torpe traducción del sánscrito a sus idiomas occidentales, nos resultan tan confusos como a ustedes, especialmente a Morya; a menos que al escribirles, alguno de nosotros tome su pluma como un experto y la use de principio a fin, en este sentido es tan propenso a errores como cualquier otro.

No, no estamos en la quinta ronda, pero los hombres de la quinta ronda han estado llegando durante los últimos miles de años. ¿Pero qué es un lapso de tiempo como ese tan insignificante en comparación con incluso un millón de los varios millones de años que abarca la ocupación humana de la Tierra en una sola ronda? »
(CM 14, p.84)


Varios lectores no comprendieron esta respuesta debido a que ¿cómo era posible que hubiera humanos de la quinta ronda, e incluso de la sexta ronda, en la cuarta ronda, si la quinta y la sexta ronda todavía no habían comenzado?





BLAVATSKY

Por lo que Blavatsky en su obra "La Doctrina Secreta I" en la sección "Conceptos Erróneos" escribió lo siguiente para aclarar este asunto:

« Sobre la doctrina que aborda los periódicos “adormecimientos” y sucesivas “Rondas” de los Globos a lo largo de sus cadenas (que es bastante incomprensible para las mentes occidentales) surgieron las primeras perplejidades y conceptos erróneos. Y uno de ellos hace referencia a la “Quinta” e incluso a la “Sexta Ronda”.

Quienes sabían que una Ronda era precedida y seguida por un largo Pralaya, que es una pausa de descanso que creaba un abismo infranqueable entre dos Rondas hasta que llegaba el momento de un ciclo renovado de vida, no podían comprender la “falacia” de hablar de “quinta y sexta Rondas” en nuestra Cuarta Ronda.

Gautama Buda, se sostenía, era un hombre de la “Sexto Ronda”, Platón y otros grandes filósofos y mentes, fueron hombres de la “Quinta Ronda”.

¿Cómo era posible?

Un Maestro [Kuthumi] enseñó y afirmó que existían tales humanos de la “Quinta Ronda” incluso ahora en la Tierra; y aunque se entendía que decía que la humanidad estaba todavía “en la Cuarta Ronda”, en otro lugar parecía decir que estábamos en la Quinta.

A esto, otro Maestro [Morya] dio una “respuesta apocalíptica”: “Unas pocas gotas de lluvia no hacen un Monzón, aunque lo presagian”. . . . “No, no estamos en la Quinta Ronda, pero los hombres de la Quinta Ronda han estado llegando durante los últimos miles de años”.

¡Esto era peor que el enigma de la Esfinge!

Los estudiantes de Ocultismo sometieron sus cerebros a la más descabellada especulación. Durante un tiempo considerable intentaron superar a Edipo y reconciliar las dos afirmaciones. Y como los Maestros guardaron tanto silencio como la propia Esfinge de piedra, fueron acusados de inconsistencia, “contradicción” y “discrepancias”. Pero simplemente permitían que las especulaciones continuaran, para enseñar una lección que la mente occidental necesita urgentemente.

En su vanidad y arrogancia, como en su hábito de materializar toda concepción y término metafísico sin dejar margen alguno para la mentalidad oriental. Mediante metáforas y alegorías, los orientalistas han mezclado la filosofía exotérica hindú, y los teósofos han hecho lo mismo con las enseñanzas esotéricas.

Hasta el día de hoy, es evidente que estos últimos han ignorado por completo el significado de los términos "Quinta y Sexta Rondas". Pero es simplemente esto: cada "Ronda" trae consigo un nuevo desarrollo e incluso un cambio total en la constitución mental, psíquica, espiritual y física del hombre, principios que evolucionan en una escala cada vez más ascendente.

De ahí se deduce que aquellas personas que como Confucio y Platón, pertenecían psíquica, mental y espiritualmente a los planos superiores de evolución, estaban en nuestra Cuarta Ronda como el hombre promedio estará en la Quinta Ronda, cuya humanidad está destinada a encontrarse, en esta escala de evolución, inmensamente superior a nuestra humanidad actual.

De igual manera, Gautama Buda —quien es la Sabiduría encarnada— era aún más elevado y grandioso que todos los hombres que hemos mencionado, llamados de la Quinta Ronda, mientras que Buda y Sankaracharya son llamados de la Sexta Ronda, alegóricamente.

Y de ahí la sabiduría oculta de la observación, pronunciada en su momento como "evasiva": que "unas pocas gotas de lluvia no hacen el monzón, aunque lo presagian". »
(p.161-162)


Blavatsky explicó que aquellos humanos que en la cuarta ronda ya tienen el desarrollo que tendrán los humanos en la quinta ronda, se los denominan "hombres de la quinta ronda".

Y aquellos humanos que en la cuarta ronda ya tienen el desarrollo que tendrán los humanos en la sexta ronda, se los denominan "hombres de la sexta ronda".

Pero eso es en un sentido puramente alegórico y figurativo, o sea que Confucio y Platón siguen siendo hombres de la cuarta ronda pero que ya alcanzaron el nivel que tendrán los humanos cuando en un futuro muy lejano se desarrollen en la quinta ronda.

Para darles una analogía, es como si dijeran que unos alumnos de cuarto año de primaria, como han sido muy buenos estudiantes, ya tienen el nivel académico que tendrán los alumnos cuando estén en quinto año de primaria.

Y de la misma forma, Buda y Sankaracharya también siguen siendo hombres de la cuarta ronda, pero que ya alcanzaron el nivel que tendrán los humanos cuando en un futuro mucho más lejano se desarrollen en la sexta ronda.

Retomando la analogía, es como si dijeran que unos alumnos de cuarto año de primaria, como han sido tan extraordinariamente buenos estudiantes, ya tienen el nivel académico que tendrán los alumnos cuando estén en el sexto año de primaria.

Pero desafortunadamente varios instructores teosóficos no prestaron atención a la explicación que dio Blavatsky y ellos continuaron interpretando y enseñando esto de manera literal.





PURUCKER

Uno de ellos fue Gottfried de Purucker quien en su libro "La Fuente del Ocultismo" escribió lo siguiente sobre este asunto:

« Los precursores, llamados de quinta y sexta ronda, son aquellos egos avanzados que debido a experiencias pasadas y relativamente perfeccionadas en la cadena lunar, están más evolucionados que la mayor parte de la ola de vida. Es simple: tenemos todos los grados de hombres, desde los más involucionados hasta los mahatmas y los budas.

Los precursores que están ahora en nuestra cuarta ronda son aquellos individuos que, cuando tienen la oportunidad, abandonan la Tierra y se adelantan; ellos nos preceden, lo que sólo significa que mientras trabajamos con ellos atrás en el globo D, ya nos han adelantado en los globos superiores y bajado de nuevo en su quinta ronda.

Los de la sexta ronda son las raras flores de la raza humana que están aún más evolucionadas que las de la quinta ronda; han ido dos veces por delante de nosotros. »
(Sección 7)


Para comprender lo que dijo Purucker, deben de saber que así como el humano está compuesto por siete principios (un cuerpo físico y seis envolturas sutiles), los planetas también están compuestos por siete principios (un globo físico y seis globos sutiles).

A estos siete globos se les denominan: A, B, C, D, E, F y G; y la oleada de vida va a recorrerlos siete veces (que son las siete rondas).



A continuación les pongo el gráfico de arriba pero extendido en el tiempo:




Pues bien, Purucker en su texto está afirmando que los hombres de la quinta ronda que hay actualmente en la Tierra (globo D), ya recorrieron los globos E, F y G de la cuarta ronda, y los globos A, B. C y D de la quinta ronda.

Y los hombres de la sexta ronda que hay actualmente en la Tierra (globo D), ya recorrieron eso más los globos E, F y G de la quinta ronda, y los globos A, B. C y D de la sexta ronda.

Pero eso que afirma Purucker es falso porque esos recorridos todavía no existen ya que solo se efectuarán en el futuro. La quinta ronda no comenzará hasta que haya terminado la cuarta ronda, y la sexta ronda no comenzará hasta que haya terminado la quinta ronda.

Y en realidad lo que ha sucedido es que esos humanos de "la quinta y la sexta ronda" son humanos de la cuarta ronda pero que al haberse desarrollado tan eficientemente en esta cuarta ronda, se encuentran adelantados a los demás.

Y es por eso que en otra carta el maestro Kuthumi le dijo al señor Alfred Sinnett:

« Buda, un ser de la sexta ronda, lo logró por haber recorrido con tan buen éxito la carrera en sus encarnaciones anteriores, por lo que sobrepasó incluso a sus predecesores [los humanos de la quinta ronda]. Sin embargo un hombre como éste únicamente se encuentra en un billón de creaturas humanas. »
(CM 17, p.117)





BARBORKA

Geoffrey Barborka retomó este error que dijo Purucker y por eso en su libro "El Plan Divino" sobre este asunto él escribió:

« Como hay algunos pioneros a la vanguardia de la evolución humana que están sosteniendo su Quinto Ciclo Evolutivo, por eso en el diagrama de las siete rondas se indica la Quinta Ronda por medio de una órbita elíptica, aunque tiene lugar dentro del campo de actividad de la Cuarta Ronda.

En otras palabras, la Quinta Ronda también se está realizando en, por y a través de la serie de todos los globos de la cadena.

Las Sexta y Séptima Rondas se indican por medio de líneas punteadas, transmitiendo la idea que estas Rondas se emprenderán en los remotos eones del futuro»
(p.344)



Siguiendo el razonamiento de Barborka, su diagrama es incompleto porque entonces él debió también de haber indicado la sexta ronda por medio de una línea y no en punteado como lo hizo, debido a que también "hay algunos pioneros a la vanguardia de la evolución humana que están sosteniendo su Sexto Ciclo Evolutivo" (Buda y Sankaracharya).

Pero en realidad es falso que la quinta ronda (y la sexta ronda) tienen lugar dentro del campo de actividad de la cuarta ronda. Lo que pasa es que Barborka se confundió por la equivocación de Purucker.



A continuación les pongo la explicación detallada que Geoffrey Barborka dio sobre este asunto en el capítulo 9 de su libro "El Plan Divino":

En "La Doctrina Secreta II" se señala que:

« Todas esas inteligencias prematuramente desarrolladas (en el plano espiritual) en nuestra Raza, son anormales; son los que hemos llamado “Seres de la Quinta Ronda”. »
(p.167)

(Como vimos más arriba, sería más adecuado decir que los humanos de esta cuarta ronda que ya se han desarrollado descomunalmente a nivel mental se les denomina "seres de la quinta ronda”, y los humanos de esta cuarta ronda que ya se han desarrollado descomunalmente a nivel espiritual se les denomina "seres de la sexta ronda”.) 


¿Qué se quiere decir con el término “Seres de la Quinta Ronda”?

El significado técnico significa que el desarrollo del cuarto principio (Kama) [que rige la naturaleza bestial del hombre] se ha completado en todos sus séptuples aspectos. Esto quiere decir que se han encendido todos los Fuegos de Kama.

Siguiendo esto, se está haciendo el esfuerzo para desenvolver o desarrollar el quinto principio (Manas) [que rige la naturaleza mental del hombre] hasta que todos sus séptuples aspectos sean conducidos al desarrollo.

Esta será la fase de desenvolvimiento que emprender en la quinta vuelta durante el ascenso en espiral de este manvantara planetario. En otras palabras, Manas se desarrollará completamente al término de la Quinta Ronda.

Puesto que la humanidad está avanzando en su cuarta vuelta del ascenso en espiral, la vasta mayoría de la raza humana está ocupada en desarrollar las fases de la Cuarta Ronda. Predominan por lo tanto los Seres de la Cuarta Ronda.

Mientras que aquellos referidos (en la cita) como “inteligencias prematuramente desarrolladas en el plano espiritual”, son los precursores. Han avanzado con ímpetu y firmeza y son llamados "Seres de la Quinta Ronda".

Así, los Seres de la Quinta Ronda ejemplifican el proceso del desenvolvimiento del aspecto superior del principio Manásico.

« De ahí se deduce que los hombres, como Confucio y Platón, que pertenecían psíquica, mental y espiritualmente a los planos más elevados de evolución, eran en nuestra Cuarta Ronda como la generalidad de los hombres en la Quinta Ronda, cuya humanidad se halla destinada a encontrarse inmensamente más elevada, en esta escala de la evolución, que nuestra humanidad presente. »
(DS I, p.162)

(Confucio y Platón si están muy desarrollados a nivel mental, pero no a nivel psíquico ya que ninguno de los dos tenía sus poderes ocultos activados; ni tampoco estuvieron muy desarrollados a nivel espiritual ya que ninguno de los dos alcanzó la iluminación espiritual.)


Se dispone de una explicación técnica de cómo se ha efectuado el desenvolvimiento de los Seres de la Quinta Ronda:

« Y puesto que el hombre, mientras completa su séptimo anillo en A, no ha hecho más que empezar el primero en Z, y como que A muere cuando él lo deja para pasar a B, etc., y como que también debe permanecer en la esfera intercíclica después de Z, tal como lo hace cada vez entre dos planetas, hasta que el impulso haga revivir nuevamente la cadena, queda claro que nadie puede adelantarse más de una ronda a su especie. »
(CM 15, p.62)

“Completa su séptimo anillo en A” significa que completa la séptima fase principal de desarrollo, llamada la Séptima Raza-Raiz, en el primer globo de la cadena terrestre, llamado el globo A.

“Z” tiene referencia al globo más elevado de la cadena [y el último que se recorre].

Se observará que la frase usada es que el Globo A muere, no que entra en un Pralaya [temporal].

(Eso fue un error que cometió el maestro Kuthumi, quien señaló que debido a que él estaba extremadamente ocupado, a veces cometía errores en sus cartas.)


En cuanto concierne a la ola de vida humana, el Globo A ha terminado su ciclo evolutivo en la Ronda, y continúa su existencia en un estado de latencia (u “obscuración”), hasta que la ola de vida humana regresa al Globo A para la próxima Ronda de desarrollo cíclico.

La palabra “etc” después del Globo B se refiere al lapso consecutivo en un estado de latencia para cada uno de los globos de la cadena (referidos como “planetas” en la cita) cuando la Hueste de Mónadas Humanas se mueve desde el Globo B al Globo C, y a su vez desde el Globo C al Globo D, durante la cuarta vuelta de los globos, llamada la Cuarta Ronda.

(El maestro Kuthumi explicó de manera resumida el recorrido que los humanos hacen en la cuarta y quinta ronda.)


Y la cita también dice:

« Buddha sólo constituye una excepción en virtud del misterio. Tenemos hombres de la quinta ronda entre nosotros porque estamos en la segunda mitad de nuestro anillo terrestre septenario. »
(CM 15, p.62)

Gautama el Buddha “constituye una excepción” porque está clasificado como un Ser de la Sexta Ronda.

La frase “la segunda mitad de nuestro anillo terrestre septenario” puede aclararse de esta manera. Como la Tierra tiene que ejecutar su anillo, al igual que la Hueste de Mónadas tiene sus anillos, un “anillo terrestre” significa la terminación de un Manvantara planetario para la tierra, el Manvantara planetario que consiste de siete Rondas.

La mitad del periodo de las siete rondas en consecuencia serían tres Rondas y media. Y puesto que la Ola de Vida Humana está ejerciendo su quinta fase principal de desarrollo (de las siete requeridas) en esta Cuarta Ronda, por lo tanto “estamos en la segunda mitad de nuestro anillo septenario”.

La cita continúa llamando la atención al hecho que durante el periodo anterior al punto medio de las siete Rondas, no sería posible haber tenido Seres de la Quinta Ronda:

« En la primera mitad eso no podría haber ocurrido. Las incontables miríadas de nuestra humanidad de la cuarta ronda que se nos adelantaron y completaron sus siete anillos en Z han tenido tiempo de ganar su periodo intercíclico y de empezar su nueva ronda y trabajar en el Globo D (la Tierra). »
(CM 15, p.62)

El “periodo intercíclico” se refiere al intervalo que ocurre entre Rondas, conocido técnicamente como los Sandhyās y Sandhyānśas (“amaneceres” y “ocasos”).

El periodo intercíclico también se refiere al intervalo que sigue a la terminación de las siete Razas en un globo y la inauguración de la Ola de Vida en el globo siguiente de la Cadena.

Otra cita explica lo que realizan los precursores de la raza humana:

« El esquema con sus detalles septenarios resultaría incomprensible para el hombre si no tuviera el poder, tal como lo han demostrado los Adeptos más elevados, de desarrollar prematuramente sus 6º, y 7º sentidos – aquellos que serán el don natural de todos en las rondas correspondientes. Nuestro Señor el Buddha – un hombre de la 6ª Ronda – no habría aparecido en nuestra época, por más grandes que hubieran sido los méritos acumulados en sus anteriores nacimientos de no haber sido por un misterio… Ningún individuo puede adelantarse a la humanidad de su ronda por más de un intervalo. »
(CM 15, p.62)

Fue en conexión con una pregunta respecto a los Seres de la Quinta Ronda que se escribió la celebrada observación:

« Unas pocas gotas de lluvia no hacen el monzón, aunque lo presagian. »
(DS I, 162)

Es a causa de la interpenetración de los siete principios, es decir, el “siete dentro del siete” que hace los 49 Fuegos, que el hombre puede evocar sus principios superiores que el desarrollo de la Ronda desenvolverá en el curso de las edades.

Aunque hay una forma de acelerar este proceso. Se alcanza por medio de iniciaciones.

« El objetivo principal de nuestros esfuerzos e iniciaciones es alcanzar esta unión mientras estamos todavía en esta tierra. Aquellos que lo logren no tienen nada que temer durante las rondas quinta, sexta y séptima. »
(CM 13, p.78)

La “unión” a que se refiere es una mezcla de los “tres en uno – el sexto”. Es decir mezclando los principios cuarto, quinto y séptimo (Kama, Manas y Ātman) en el sexto principio, Buddhi.

« Porque los grados de iniciación de un Adepto señalan las siete etapas en las que él descubre el secreto de los principios septenarios de la naturaleza y del hombre y en las que despierta sus poderes dormidos. »
(CM 15, p.99)

(Siento que Barborka explica de una manera muy complicada, por lo que en otro artículo trataré de explicar lo que dijeron los maestros Kuthumi y Morya en sus cartas de una manera más sencilla.)











2 comentarios:

  1. sobre este punto me genera una confusion, si se puede considerar a platon y confucio hombres de quinta ronda, se esperaria que ya no reencarnen mas, ya que ellos ya llegaron a superar el desarrollo que se espera de una persona en esta ronda que es la cuarta, sin embargo nos enseñan que para dejar de reencarnar en esta ronda hay que llegar al nivel de un bodthsava y elegir ser un nirmanakaya o un buda egoista, pero se considera a platon solo un iniciado en los misterios mas no al nivel de un bodithsava, pero ya se le considera un hombre de la siguiente ronda, en ese caso la monada de platon sigue reencarnando? ya que tranquilamnete podria esperar la siguiente ronda bajo las afirmaciones de los mahatmas

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    1. Para dejar de reencarnar no es suficiente con estar muy desarrollado mental y discernientemente, que fue el caso de Platón y de Confucio, y que va a ser el caso de los humanos en general durante la quinta ronda.

      Se requiere que logres liberarte del Samsara y seas capaz de alcanzar el Nirvana. Y eso tiene que ver más con un desarrollo espiritual que mental.

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