LA BATALLA QUE LIBRARON LOS BALLARD CONTRA LOS MAGOS NEGROS

 
 
Por Gerald B. Bryan
 
En este capítulo les contaré cómo Guy y Edna Ballard libraron casi solos a los Estados Unidos de todos sus magos negros. Aunque por supuesto fueron ayudados por los “Maestros Ascendidos” y sus grupos de estudiantes decretantes.
 
Durante cinco largos años los Ballard han estado muy ocupados expulsando a los magos negros de América y Europa. El número original de estos bastante nebulosos trabajadores de la oscuridad nunca se indicó definitivamente, pero parecían haber sido emparejados alrededor de un cincuenta por ciento con los "Maestros Ascendidos".
 
Encadenarlos o “retirarlos” de la Tierra parece haber sido el procedimiento habitual; pero como algunos de los más poderosos, al parecer, de alguna manera volverían a circular nuevamente, a veces tendrían que ser “consumidos” o “destruidos” por Rayos de Luz bien dirigidos.
 
Incluso se sabe que algunos de estos grandes y malos magos negros hacían bromas juveniles a los "Maestros Ascendidos", por ejemplo el Maestro Ascendido Saint Germain señaló el 3 de septiembre de 1938, en la clase de Oakland:
 
“. . . Secretamente se ha difundido en vuestra vecindad una actividad que pretende ser la Actividad Real de Mí Mismo. . . El mago negro que tiene sus garras sobre él se representa a sí mismo como Yo”. (p.30, octubre de 1938, V.)
 
De hecho, debe haber sido muy desconcertante para Saint Germain, e incluso una carga para su reputación, ¡tener a un malvado mago negro haciéndose pasar por él mismo!
 
Pero entonces, ¿cómo pueden sus estudiantes saber a qué “Saint Germain” se han contactado cuando hacen la “llamada”: el mago negro Saint Germain o el Ballard Saint Germain?
 
Por lo tanto no es de extrañar que durante varios años los Ballard y sus “Maestros Ascendidos” hayan estado tratando de eliminar de la circulación a estos magos negros.
 
Sin embargo el método para exterminarlos o para acabar con ellos presenta ciertas dificultades, pues nos dice el mismo Poderoso Astrea que “¡esos individuos siempre tienen cuerpos físicos!” (p. 139, AML).
 
Por lo que sin duda esto complica el asunto, ya que parecería estar en conflicto con las leyes de nuestra Tierra matar a estos malhechores que tienen cuerpos físicos, o “eliminarlos” de otra manera sin un juicio justo y adecuado.
 
Sin embargo los “Maestros” de los Ballard, ya sea sin darse cuenta o ignorando que la constitución estadounidense garantiza un juicio justo e imparcial incluso a los criminales confesos, a pesar de ello supuestamente han eliminado o “consumido” a cientos de ellos.
 
Incluso cuando hay que cumplir mandatos de la ley, el Estado designa a personas jurídicamente constituidas para que se ocupen del asunto. Nuestro Gobierno desaprueba el asesinato por parte de todos los demás, incluso por parte de los “Maestros Ascendidos”, y las penas son elevadas.
 
En cualquier caso cualquiera que sea el estatus legal de la cuestión relativa a esta eliminación total de los magos negros que tienen cuerpos físicos, los Ballard y su Saint Germain decidieron eliminar a estos malhechores.
 
Así, en diversas clases por todo el país, informaron a sus aplaudientes alumnos de los últimos resultados de esta limpieza de magos negros, quienes fueron “encadenados”, “atados”, “consumidos”, “sacados de la atmósfera de la tierra”, o de otro modo volverse inofensivos para los ciudadanos respetuosos de la ley.
 
A veces sólo uno, a veces hasta cinco, y una vez en un informe se señaló que fueron eliminado nueve a la vez y este parece haber sido el récord en Estados Unidos.
 
En Europa, como era de esperar, la puntuación es más alta, se eliminan hasta treinta en un día.
 
Así, de forma gradual pero segura, los magos negros del país fueron diezmados hasta que por fin en una ocasión memorable en Washington, DC, Saint Germain dio la alegre noticia de que “todos menos 12 de los magos negros en los Estados Unidos habían sido capturados y expulsados". (p.1, 20 de diciembre de 1938, GL)
 
¡Las filas del alguna vez poderoso ejército de magos negros en los Estados Unidos habían sido reducidas a un simple puñado!
 
 
Y como era de esperar, el público enloqueció ante tan buena noticia: el informe oficial decía: “Nos pusimos de pie de un salto en medio de un tremendo estallido de aplausos y gozoso entusiasmo”.
 
Pero los Maestros Ascendidos no aceptan medidas intermedias. El ejército disperso y andrajoso de magos negros iba a ser completamente aniquilado.
 
Siguiendo quizás el ejemplo de Éxodo 22:18, “No dejarás vivir a la bruja”, se aplicó con el efecto adecuado al igualmente detestable “mago negro”.
 
Así que los estudiantes que decretaron con la victoria casi a la vista, continuaron con aún más poder emocional y fuerza vocal que antes para trabajar en eliminar los últimos doce restantes.
 
Y fue en la histórica Filadelfia, ciudad de nuestras libertades constitucionales, donde se alcanzó otro hito.
 
El propio Arcángel Miguel (!), portador de la “Espada del Relámpago Azul”, informó el 15 de noviembre de 1938 que “5 de los 12 magos negros restantes en los Estados Unidos habían sido capturados y eliminados, quedando sólo 7”. (p.1, 30 de diciembre de 1938, GL)
 
Pero fue en la pequeña y vieja Nueva York donde se asestó el golpe más eficaz de todos, y muy acertadamente Saint Germain tuvo el honor de anunciarlo:
 
“¡Alabado sea!” dijo, como un colegial feliz, “¡los 7 magos negros que quedan en los Estados Unidos han sido capturados!” (p.1, 30 de diciembre de 1938, GL)
 
Según informe oficial, el efecto de este anuncio fue tremendo:
 
“El público se puso de pie de un salto. ¡Se desató una tremenda oleada de aplausos que siguieron y siguieron! . . . Nunca más un mago negro volvería a tener actividad en los Estados Unidos”.
 
Pero a pesar de estas destacadas victorias en Estados Unidos, se advirtió a los estudiantes que todavía había magos negros operando en otras partes del mundo, y se nos instó a no cejar en sus decretos.
 
No es de extrañar por lo tanto que poco después llegara la noticia de un trabajo realmente encomiable para acabar con los últimos extranjeros que quedaban entre los magos negros.
 
Citamos el informe oficial de la clase Oakland:
 
“Cuando comenzó la Clase, todavía quedaban en la tierra, principalmente en Europa, 36 magos negros. Decidimos como nunca antes llamar, llamar y llamar a los Grandes y a la Diosa de la Luz para capturar y eliminar a cada uno de esos viciosos demonios al final de la Clase.
 
¡Para nuestra alegría, una noche Saint Germain dijo que todos menos 6 habían sido eliminados!
. . .
Volvimos a entrar en acción en nuestra convocatoria. Entonces la Diosa de la Luz, dos días antes del final de la Clase, dijo que todos menos uno habían sido eliminados; y este último había sido rodeado en su guarida por un Muro de Llama Azul a través del cual no podía pasar. . .”
 
Y así, “rodeado de su guarida”, los días del más persistente de todos los magos negros de la tierra parecían contados.
 
Y efectivamente dos días después, justo a tiempo en la noche de clausura de la clase, la gran Diosa de la Lu” salió a informar que el último mago negro que había quedado atrapado en su guarida había sido completamente “retirado del mundo”.
 
“Nos pusimos de pie de un salto”, continúa el informe oficial de la victoria, “mientras una gran ovación barría el Auditorio Municipal. Siguió y siguió”. (págs. 1-2, 18 de marzo de 1939, GL)
 
Ahora que este obstinado mago negro y todos los demás, tanto extranjeros como nacionales, han sido eliminados o exterminados, podríamos pensar que la Tierra sería un mejor lugar para vivir.
 
Pero parece que no es así. Las guerras han seguido, y luchas, pestilencias, inundaciones, huracanes, catástrofes y demás crisis han sido nuestra suerte desde la eliminación de estos magos negros.
 
Sin embargo el lanzamiento de esos maravillosos “decretos” continúa con fuerza incesante, porque parece que todavía hay otras cosas que estos estudiantes deben lograr para hacer que el mundo sea seguro para el “Poderoso YO SOY”.
 
 
(Libro Dictadura Psíquica en América, capítulo 23)
 
 
 
 
 
 
 
OBSERVACIÓN
 
Este es un ejemplo más de las fantasías que inventaban los Ballard para entusiasmar a sus estudiantes, y de lo ingenuos que eran sus seguidores.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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