William Quan Judge fue el principal
colaborador de Blavatsky y la opinión que tenía Helena Roerich sobre él la
podemos ver en una carta fechada el 15 de abril de 1939 que ella le escribió a
E.R. y R.J. Rudzitis, los presidentes de la Sociedad Agni Yoga en Letonia, que
era la rama más activa de sus seguidores en esos días:
« William Judge era mejor que la mayoría. Muchos lo
calumniaron, pero por supuesto también tenía ciertas debilidades que son
inaceptables para los estudiantes reconocidos. Por lo tanto los Mahatmas no
encontraron ningún verdadero discípulo entre los europeos y ninguno de éstos
llegó a las Torres. »
OBSERVACIONES
Pero
esto que Helena Roerich afirmó es falso ya que ¿cómo Blavatsky hubiera fallado al pasar por alto esas "debilidades
determinadas que son inaceptables para los estudiantes reconocidos"?
(Según afirmó Helena Roerich)
Cuando en realidad Blavatsky habló y escribió
repetidamente que William Judge no solamente era
su único amigo y parte de ella misma desde varios eones, sino que también él era
el Antahkarana o sea el enlace de conexión entre el pensamiento
estadounidense y el conocimiento esotérico transhimaláyico.
Es más, Blavatsky dijo también que William
Judge era el principal y único agente
de Dzyan en los Estados Unidos, y también Blavatsky declaró que William
Judge era interiormente un Nirmanakaya (es
decir un adepto iniciado o Bodhisattva) y ella enfatizó que William
Judge era un chela [discípulo] aceptado por los Maestros y ya se encontraba más
allá de la etapa de prueba.
Y es
por eso que el maestro Morya (quien fue el maestro de Blavatsky y William
Judge) escribió:
« Durante los primeros
dos años no se pudo contar con una mejor guía, porque cuando la 'PRESENCIA'
está sobre él [William Judge] sabe bien lo
que otros sólo sospechan y adivinan.
. . .
Se le pueden solicitar mayores servicios a él quien,
de todos los chelas, sufre más
y exige o incluso espera lo impensado. »
(Cartas que me han ayudado, p.271)
CONCLUSIÓN
Esto es una prueba más que demuestra que los
Roerich no estuvieron en contacto con el maestro Morya porque entonces Helena
Roerich no habría dicho esa falsedad sobre William Judge.
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