Sobre el personaje mítico a partir del cual fue nombrado el Hermetismo, el
libro El Kybalión en su introducción dice
lo siguiente:
« Su gran fundador del Hermetismo fue
Hermes Trismegisto, el “escriba de los dioses”, quien residió en el Antiguo
Egipto en los días en que la raza presente de los hombres estaba en su
infancia.
Él fue
contemporáneo de Abraham, y si las leyendas son verdaderas, fue un instructor
de ese venerable sabio. Hermes fue y es el gran sol central del ocultismo cuyos
rayos han servido para iluminar las innumerables enseñanzas que han sido
promulgadas desde su tiempo.
Todas las
enseñanzas fundamentales y básicas contenidas en las enseñanzas esotéricas de
toda raza pueden ser atribuidas a Hermes. Incluso las más antiguas enseñanzas
de la India tienen indudablemente sus raíces en las enseñanzas herméticas
originales.
Desde la tierra
del Ganges muchos avanzados ocultistas viajaron a la tierra de Egipto, y se
sentaron a los pies del Maestro. Y de él obtuvieron la llave maestra que
explicaba y reconciliaba sus puntos de vista divergentes, y así fue firmemente
establecida la doctrina secreta.
Y de otras
tierras vinieron también los instruidos, todos los cuales consideraban a Hermes
como el maestro
de maestros, y su influencia fue tan grande
que a pesar de las desviaciones
del sendero por parte de los cientos de instructores en estas diferentes
tierras, aún puede encontrarse un cierto parecido y correspondencia básicos que
subyacen a las muchas y a menudo divergentes teorías mantenidas y enseñadas por
los ocultistas de estas diferentes tierras hoy en día.
El estudiante
de las religiones comparadas será capaz de percibir la influencia de las
enseñanzas herméticas en toda religión merecedora de ese nombre, sin importar
que se trate de una religión ya muerta o que todavía esté en completo vigor en
nuestro propio tiempo. Hay siempre una cierta correspondencia a pesar de los
rasgos contradictorios, y las enseñanzas herméticas actúan como el gran
reconciliador.
El trabajo de
la vida de Hermes parece haber sido en la dirección de plantar la gran semilla
de la verdad que ha crecido y florecido en santísimas formas extrañas, más que
en establecer una escuela de filosofía que dominara el pensamiento del mundo. »
En su primer capítulo añade:
« En el Antiguo Egipto moró una vez un
Maestro a quien los maestros aclamaron como «el maestro de maestros».
Este hombre, si
es que en verdad fue un humano, moró en Egipto en los primerísimos días y él
fue conocido como Hermes Trismegisto. Él fue el padre de la sabiduría oculta;
el fundador de la astrología y el descubridor de la alquimia.
Desafortunadamente
los detalles del relato de su vida están perdidos debido al lapso de los años,
aunque varios de los países antiguos disputaron uno con el otro en sus alegatos
por el honor de haber suministrado su lugar de nacimiento, y de esto hace miles
de años.
La fecha de su
residencia en Egipto (en esa su última encarnación sobre este planeta) no es
conocida ahora, pero ha sido fijada en los primeros días de las más viejas
dinastías de Egipto, o sea mucho antes de los tiempos de Moisés. Las mejores
autoridades lo consideran como un contemporáneo de Abraham, y algunas de las
tradiciones judías llegan a afirmar que Abraham adquirió una porción de su
conocimiento místico a partir de Hermes mismo.
Conforme los
años rodaron tras su partida de este plano de vida (la tradición enunciando que
vivió durante trescientos años), los egipcios deificaron a Hermes y le hicieron
uno de sus dioses, bajo el nombre de Thoth.
Años después,
la gente de la Grecia antigua también lo transformó en uno de sus muchos dioses
llamándole «Hermes, el dios de la Sabiduría». Y los egipcios reverenciaron su memoria por muchos siglos —sí, decenas de siglos—
llamándole «el escriba de los dioses»,
y confiriéndole, honoríficamente el título de «Trismegisto» que significa “el tres
veces grande”, “el gran grande”, “el grande más grande”, etcétera.
En todos los
países antiguos el nombre de Hermes Trismegisto fue reverenciado, siendo su
nombre asociado con la “fuente de la sabiduría”.
E incluso en estos días, usamos el término hermético en el sentido de
“secreto”, o “sellado de manera que nada puede escaparse”, etc. Y esto en razón
del hecho de que los seguidores de Hermes siempre observaron el principio del
secreto en sus enseñanzas. »
Y en su séptimo capítulo menciona:
« Las leyendas dicen que Hermes el
Grande, cuando le fue hecha esta pregunta por varios de sus discípulos más
avanzados (¿Por qué el TODO creó al Universo?), él contestó apretando los labios
fuertemente y no diciendo ni una sola palabra, como si indicara que no había
respuesta.
Pero también
podría haber pretendido con ese gesto haber aplicado el axioma de su filosofía
que dice que: «Los labios de la sabiduría están cerrados, excepto para los
oídos que saben escucharlos», y con ello considerando que incluso sus
estudiantes más avanzados no poseían aún el entendimiento suficiente que los
calificara para recibir la respuesta.
De cualquier
forma, si Hermes poseyó el secreto, él no lo comunicó, y por lo menos en lo que
al mundo concierne los labios de Hermes están cerrados al respecto. Y si el
gran sabio Hermes vaciló en hablar, ¿quién sería el osado mortal que trataría
de hacerlo? »
OBSERVACIONES
Percibo en este
texto grandes mentiras:
1.
El autor del Kybalión dice que “Hermes fue y es el gran sol central del ocultismo cuyos
rayos han servido para iluminar las innumerables enseñanzas que han sido
promulgadas desde su tiempo”.
Pero esto es
falso porque Blavatsky precisó que en el siglo III después de Cristo el
emperador Diocleciano
mandó destruir todos los documentos relacionados con el Hermetismo original y
desde entonces todo lo que ha surgido catalogado como “Hermetismo” han sido
versiones en gran medida tergiversadas del Hermetismo genuino.
2. Dice “Todas
las enseñanzas fundamentales y básicas contenidas en las enseñanzas esotéricas
de toda raza pueden ser atribuidas a Hermes.”
Pero esto es
falso porque los Maestros transhimaláyicos explicaron que ellos cíclicamente
mandan emisarios a diferentes partes del mundo para ir transmitiendo
paulatinamente cada vez más el conocimiento oculto a los humanos. Y por
consiguiente la mayoría de las enseñanzas fundamentales contenidas en las
enseñanzas esotéricas de toda raza provienen de los Maestros transhimaláyicos,
no de Hermes Trismegisto.
3. Dice:
“Incluso las más antiguas enseñanzas de la India tienen indudablemente sus
raíces en las enseñanzas herméticas originales.”
Pero esto es
falso debido a que Blavatsky precisó que las enseñanzas esotéricas más antiguas
provienen de Asia Central.
4. Dice “Desde la tierra del Ganges [o sea la India] muchos
avanzados ocultistas viajaron a la tierra de Egipto, y se sentaron a los pies
del Maestro [Hermes]. Y de él obtuvieron la llave maestra que explicaba y
reconciliaba sus puntos de vista divergentes, y así fue firmemente establecida
la doctrina secreta.”
Pero esto es
falso ya que la doctrina secreta la tienen resguardada los Maestros transhimaláyicos e históricamente ha sucedido al revés, o sea que
avanzados ocultistas han ido al Oriente para instruirse con los Maestros transhimaláyicos. Esto por ejemplo lo hemos percibido con Christian Rosenkreuz y con Helena Blavatsky.
5. Dice: “Su influencia [de Hermes] fue tan grande
que a pesar de las desviaciones
del sendero por parte de los cientos de instructores en estas diferentes
tierras, aún puede encontrarse un cierto parecido y correspondencia básicos que
subyacen a las muchas y a menudo divergentes teorías mantenidas y enseñadas por
los ocultistas de estas diferentes tierras hoy en día.”
Pero esto es
falso porque esa influencia yo la he percibido en la Teosofía, no en el
Hermetismo; por ejemplo la estructura septenaria del hombre que enseña la
Teosofía se encuentra también, pero en mayor o menor medida oculta, en las
escuelas esotéricas de varias civilizaciones:
6. Dice: “El
estudiante de las religiones comparadas será capaz de percibir la influencia de
las enseñanzas herméticas en toda religión merecedora de ese nombre, sin
importar que se trate de una religión ya muerta o que todavía esté en completo
vigor en nuestro propio tiempo. Hay siempre una cierta correspondencia a pesar
de los rasgos contradictorios, y las enseñanzas herméticas actúan como el gran
reconciliador.”
Pero esto es
falso, porque esto también yo lo he percibido en la Teosofía, pero no en el
Hermetismo; por ejemplo la explicación que da la Teosofía sobre lo que sucede
después de morir se encuentra como base en muchas religiones, nada más que con
el paso del tiempo la explicación original ha sido deformada:
7. Dice: “Hermes Trismegisto fue el padre de la sabiduría oculta;
el fundador de la astrología y el descubridor de la alquimia.”
Pero esto es
falso porque
la Teosofía explica que la sabiduría oculta ha
sido resguardada desde tiempos inmemorables por la jerarquía divina, el esoterismo señala
que la astrología proviene desde la civilización atlante, y Blavatsky precisó
que la alquimia proviene de Asia.
8. Dice: “Su
estancia en Egipto fue su última encarnación en la Tierra.”
Pero esto es falso por el motivo que más abajo les voy a explicar.
9. Dice “Las mejores autoridades lo consideran como un
contemporáneo de Abraham, y algunas de las tradiciones judías llegan a afirmar
que Abraham adquirió una porción de su conocimiento místico a partir de Hermes mismo.”
Pero
el autor del Kybalión no da los nombres de
esas autoridades ni de esas tradiciones judías. Yo he
investigado y no he encontrado que alguien más haya afirmado eso, y dado que el
judaísmo difiere enormemente del hermetismo, concluyo que lo más seguro es que
esto también lo haya inventado el autor del Kybalión.
10. Dice “En todos los países antiguos el nombre de Hermes
Trismegisto fue reverenciado, siendo su nombre asociado con la ‘fuente de la sabiduría’.”
Pero
esto es falso porque ni en Oriente, ni en América ni en el resto de África se
sabía de la existencia de Hermes Trismegisto, y en realidad su influencia solo
abarcó la región mediterránea y un poco el Medio Oriente.
11. Dice “Las leyendas
relatan que Hermes el Grande, cuando le fue hecha esta pregunta por varios de
sus discípulos más avanzados (¿Por qué el TODO creó
al Universo?), él
contestó apretando los labios fuertemente y no diciendo ni una sola palabra,
como si indicara que no había respuesta.”
Pero
esto seguramente es falso porque en ninguna otra parte he encontrado esa
supuesta leyenda, lo que me hace enormemente sospechar que es otra fantasía del
autor del Kybalión, quien no sabiendo qué responder al respecto, prefirió inventar
esa historia para esconder su ignorancia, porque en el esoterismo si hay
respuesta a esa pregunta:
12.
Y finalmente el autor del Kybalión se refiere a Hermes Trismegisto como si se tratara
de un individuo, pero eso es falso porque Blavatsky precisó que Hermes
Trismegisto no fue una persona sino que en realidad fue el nombre genérico que
se le dio a la elevada casta sacerdotal del Antiguo Egipto.
Y algunos
lectores se preguntarán qué tan válido es todo lo que dijo Blavatsky, y yo les
respondo que he investigado muy profundamente a Blavatsky y he concluido que
muy probablemente ella si fue una discípula de los Maestros transhimaláyicos, y
por lo tanto sus afirmaciones en el ámbito esotérico tienen mucha validez.
Además que son poquísimos los errores que he detectado en sus obras, mientras
que en cambio El Kybalión está
llenísimo de errores y mentiras (ver link).
CONCLUSIÓN
Estas numerosas falsedades que dijo el autor del Kybalión me demuestran que
para nada él era un “iniciado” como lo pretendió.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario