EL ERROR QUE COMETEN LOS SEGUIDORES DE KRISHNAMURTI



(El siguiente artículo fue escrito por Alsibar quien ha estudiado mucho a los guías espirituales, y el texto original en portugués lo pueden leer en este link.)



Lograr la absoluta libertad del hombre fue la meta que Krishnamurti se fijó al disolver la Orden de la Estrella de Oriente, y desde entonces miles de personas en todo el mundo se han convertido en asiduos lectores y oyentes de sus conferencias con la esperanza de alcanzar la ansiada liberación.

Entre ellos se encontraba un grupo de personas —amigos, patrocinadores y viejos conocidos— que gozaban de la privilegiada posición de proximidad y convivencia con el gran sabio.

 Estas personas tuvieron la oportunidad de participar en reuniones privadas bajo la guía directa de Krishnamurti, y era de esperar que tal relación diera como resultado al menos un ser humano verdaderamente liberado de la esclavitud del tiempo.

¿Pero por qué no ocurrió esto, si el mensaje de Krishnamurti gira enteramente en torno a la libertad?

Es simple: la gran mayoría de quienes lo siguieron de cerca lo convirtieron en una autoridad. Y al hacerlo, ellos cayeron en otra trampa. Así no pudieron ir más allá de ser meros seguidores y repetidores de sus enseñanzas.


¿Pero Krishnamurti quería eso?

¿Cuántas veces les dijo a las personas que no lo siguieran?

¿Cuántas veces condenó toda autoridad en el campo espiritual?


Krishnamurti habló sobre muchos temas a lo largo de su vida, pero no todo lo que enseñó es aplicable a todos. La visión que cada persona tiene de la vida, por mucho que la niegue, es muy personal.

De hecho, las experiencias personales moldean nuestra percepción del mundo. Y este hecho explicaría las diferentes visiones de las distintas personas iluminadas a lo largo de la historia.

Eso no significa que no exista la Verdad Universal y Eterna. Sí existe, pero al transmitirla al mundo, el sabio lo hace valiéndose de elementos de la cultura, el tiempo, la educación y la experiencia personal.

 En resumen, si nadie tiene la Verdad absoluta –ni siquiera Krishnamurti–, entonces quienes simplemente lo siguen están cometiendo el mismo error que aquellos a quienes tanto critican.

Como la conciencia de Krishnamurti estaba en un nivel muy avanzado, aquellos que no estaban en el mismo nivel (y aún así intentaban seguirlo) estaban completamente confundidos y no sabían qué hacer.

Tras años y años intentando ser fieles al mensaje de Krishnamurti, sin haber logrado el resultado deseado, no pudieron percibir una cuestión sencilla: necesitaban ser libres para investigar la verdad no solo de sus enseñanzas, sino de todo lo que aprendieron, incluso de otros maestros. Solo así, mediante la experimentación y la experiencia, habría una verdadera posibilidad de liberación.

A diferencia de los seguidores de Krishnamurti, UG tuvo esa intuición a tiempo para liberarse y seguir su propio camino. Y al hacerlo, pudo encontrar en su interior lo que Krishnamurti señalaba. De hecho, como él mismo dijo: la libertad está en el principio, no en el final. Esto incluye por supuesto, liberarse de todo, incluido del propio Krishnamurti.






OBSERVACIÓN

Este error también lo comenten los seguidores de los otros instructores, y  es por eso que el maestro Pastor enfatizó mucho la importancia de experimentar por uno mismo ya que solo es a través de la experiencia propia que uno puede descubrir aquello que no se puede enseñar con palabras.











No hay comentarios.:

Publicar un comentario