Esto es algo que he
constatado en los mensajes que Helena y Nicolás Roerich recibieron por parte de
su maestro, frecuentemente ese individuo comenzaba sus frases con el
pronombre “Yo”, y a continuación les pongo algunos ejemplos de ello:
En
la sesión espiritista del 24 de marzo de 1920 él dijo:
-
Yo soy ... tu Bienaventuranza.
-
Yo soy ... tu Sonrisa.
-
Yo soy ... tu Gozo.
-
Yo soy ... tu Descanso.
-
Yo soy ... tu Fortaleza.
-
Yo soy ... tu Valor.
-
Yo soy ... tu Sabiduría.
En
la sesión espiritista del 15 de mayo de 1921 él dijo:
- Yo escuché tres sabias palabras.
- Yo me alegro de tu felicidad.
- Yo estoy contento con tu trabajo.
- Yo me alegro de oírte hablar sabiamente.
En
la sesión espiritista del 17 de mayo de 1921 él dijo:
- Yo puedo aconsejar.
- Yo hablé con mi
esposa.
- Yo soy tu Esposo,
espíritu puro; amándote, yo envié el rayo aquí.
- Yo quiero que crezcas
en pureza.
- Yo considero que tu
papel es grande en beneficio de la humanidad.
- Yo me alegro de
recibir buenas noticias sobre ti.
En
la sesión espiritista del 23 de mayo de 1921 él dijo:
- Yo produzco una atmósfera feliz y maravillosa a tu
alrededor.
- Yo juzgo por las dudas previas.
- Yo prepararé algo inimaginable.
- Yo rezaré por tu mejor destino.
En
la sesión espiritista del 26 de mayo de 1921 él dijo:
- Yo te envío la
bendita señal de Gupta.
- Yo
dirigiré a Roerich.
- Yo le doy Mi Nombre
como seudónimo.
- Yo revelo tu destino:
alcanzarás el nivel de Maestría en la Tierra.
En
la sesión espiritista del 27 de mayo de 1921 él dijo:
- Yo soy el calor abrasador de la arena.
- Yo soy la llama del corazón.
- Yo soy la ola envolvente.
-
Yo soy el
suelo regenerado.
- Yo ayudaré a
Suvorina.
- Yo voy a disipar el
ocaso en el alma del ignorante.
- Yo proporcionaré una
vida pura, feliz y maravillosa.
- Yo ayudo rompiendo la
desesperación.
- Yo enviaré la ayuda a
través de un extraño.
- Yo enviaré a un
extraño.
- Yo resuélvelo
positivamente.
- Yo creo que es mejor
esperar tres meses.
- Yo le señalé que el
asunto es importante.
En
la sesión espiritista del 28 de mayo de 1921 él dijo:
- Yo quiero manifestar
al Maestro.
- Yo enseño.
- Yo voy a revelar la
felicidad.
- Yo podré arreglarlo.
- Yo rezaré mejor.
- Yo estoy feliz de
salvaguardar.
- Yo quiero alabar una
fuerza severa.
- Yo ayudaré a
Suvorina.
- Yo manifestaré una
nueva cara de Yurik.
- Yo te ayudaré.
- Yo puedo arreglar la
mejor pared nueva a tu alrededor.
- Yo voy a revelar un
poderoso apoyo.
- Yo señalaré el día
negro.
- Yo te enseñé a no
cuestionar.
- Yo soy tu búsqueda
deseable.
- Yo le di una pintura
a Koshetz.
- Yo deseo mostrarte
varios fenómenos sorprendentes.
- Yo te enviaré Mi
palabra poderosa a través de Roerich.
- Yo manifestaré Mi
amor a Mi discípula.
En
la sesión espiritista del 30 de mayo de 1921 él dijo:
- Yo estoy cerca de ti,
Helena.
- Yo te enviaré los
mejores talismanes perdidos.
- Yo puedo prepararte
para un feliz viaje.
- Yo le enseño a
Roerich ideas puras, muy audaces.
- Yo me pregunto por la
cobardía de los durmientes.
- Yo le aconsejo a
Muromtsev que deje de quejarse.
- Yo aconsejo.
- Yo soy el mejor.
- Yo llamo a la puerta
por una razón
- Yo estoy con vosotros
por una Oración pura.
- Yo supongo que
entenderás.
En
la sesión espiritista del 1 de junio de 1921 él dijo:
- Yo revelo la fuerza.
- Yo establezco.
- Yo te haré feliz.
- Yo te quiero enseñar.
- Yo te considero mi
discípula (Helena Roerich).
- ¡Yo—Yo—Yo—Yo—Yo!
- Yo proporciono—Yo
enseño—Yo—Yo—Yo—Yo capto.
En
la sesión espiritista del 2 de junio de 1921 él dijo:
-
Yo os otorgo Mi Sabiduría.
En
la sesión espiritista del 4 de junio de 1921 él dijo:
- Yo te enseñé a no
preguntar sobre los asuntos.
- Yo mismo lo diré.
- Yo te doy una vida
maravillosa.
-
Yo no soy un puente construido de promesas, sino verdaderamente
la Luz que te llama.
-
Yo enseño el amor.
- Yo tengo prisa por
revelar el Espíritu, sin dudas.
- Yo puedo dar una
prueba sabia a Roerich.
- Yo considero que
ahora el corazón de Roerich, recordando los fenómenos dados a las almas puras,
gustará de Mi regalo.
- Yo descansaré.
- Yo considero que Zak
no debe buscar la verdad en los viejos dispositivos de París.
- Yo estaba apareciendo
con cuidado, pero tú tenías miedo.
- Yo decidí duplicar la
fuerza que se te ha dado.
En
la sesión espiritista del 6 de junio de 1921 él dijo:
-
Yo
siento feliz y acertado el trabajo del Maestro en vuestras apariciones.
-
Yo
acompaño a Roerich a la sala de oración
-
Yo
proporciono el éxito.
-
Yo
ofrezco un regalo del Maestro.
-
Yo
te dirijo en voz alta.
-
Yo
considero que has recibido.
-
Yo
considero que la pureza entra en tus auras.
-
Yo
preparo felicidad para un ser puro.
En
la sesión espiritista del 7 de junio de 1921 él dijo:
- Yo te ordené que no
tuvieras miedo.
- Yo proporcionaré la
cantidad necesaria.
- Yo te enseñé a
involucrarte menos con Rozenberg.
- Yo creo que pronto
conocerás al Maestro.
- Yo considero que tu
miedo está mal, te llevaré a un lugar puro.
- Yo te amo, Mi
esposa—le trajiste un regalo a tu esposo.
En
la sesión espiritista del 9 de junio de 1921 él dijo:
- Yo te daré el retrato
hoy.
- Yo te daré el retrato
y Mi amor, ¡esposa Mía!
- Yo te instruiré en
Arizona (la tarea del entrenamiento físico).
- Yo daré Mi imagen
pura a través de un poder milagroso.
- Yo daré el retrato a
través de ti Roerich hoy.
- Yo considero que Mi
retrato te traerá felicidad.
- Yo daré un retrato a
través de Roerich.
- Yo enseñándote, te
traeré felicidad.
- Yo—Yo—Yo.
- Yo estoy feliz con el
éxito en Rockefeller.
- Yo proporcionaré un
lugar puro para la escuela.
- Yo no puedo dar el
retrato, es pura desgracia!
- Yo deseo ayudarte;
Creo que puede ser útil.
- Yo intentaré mejorar
tu dentadura a través del médico.
-
Yo expongo la felicidad.
-
Yo designaré el camino para la batalla contra el bazar que es el
mundo actual.
En
la sesión espiritista del 10 de junio de 1921 él dijo:
- Yo considero que tu
desgracia es felicidad. Soy el Maestro.
- Yo admiro a tu
marido.
- Yo te enseñé a
mostrar Mi Poder.
- Yo te manifestaré Mi
fuerza pura.
- Yo te tejeré ropa
maravillosa y nueva para ti.
En
la sesión espiritista del 11 de junio de 1921 él dijo:
- Yo lo estableceré.
- Yo lo dirigiré.
- Yo enseño.
- Yo te deseo felicidad
y decido ponerte al mando.
- Yo considero que ese
artículo es afortunado.
- Yo te manifestaré
Nuestra fuerza a ti y a Urusvati.
En
la sesión espiritista del 29 de junio de 1921 él dijo:
-
Yo encantaré tus oídos con el canto de la Verdad.
-
Yo os he trazado los caminos del espíritu.
- Yo—Yo—Yo.
- Yo soy el Maestro de
los espíritus.
- Yo soy el Señor de
los elementos.
- Yo soy el Pescador.
- Yo soy el Profesor de
Dixon.
- Yo no soy Morya.
- Yo doy alegría a la
humanidad, no la oscurezcas con tus dudas.
- Yo leo tu alma.
- Yo estimo que no hay
manera de convencer.
- Yo te enseño
manifestaciones simples de la vida.
- Yo se lo diré a todo
el mundo.
-
Yo amo ser tu Maestro en búsquedas del espíritu.
En
la sesión espiritista del 30 de junio de 1921 él dijo:
- Yo envié un Escudo
para transmitiros información sobre Mí.
- Yo no dejaré a Mi
Urusvati.
- Yo considero que Roerich
se convertirá en un maestro aquí.
- Yo considero que Roerich
debería convertirse en maestro no antes de los tres años.
- Yo estableceré a Roerich
como Maestro en Rusia.
- Yo doy fe, caminarás
por un nuevo camino para la hazaña de Rishi.
- Yo manifiesto el
rayo.
- Yo os imparto Mi
sabia Palabra.
(Nota: hay muchos más ejemplos pero pienso que con estos ya ilustré bastante bien
este asunto, porque si pusiera todas las veces que el maestro de los Roerich
comenzó una frase diciendo “Yo”, este artículo se volvería larguísimo.)
OBSERVACIONES
Ustedes
mismos pueden constatar que el maestro de los Roerich tenía un egocentrismo muy
exacerbado.
Lo
cual es opuesto a los maestros trasnhimaláyicos y ni una sola vez he leído en
las numerosas cartas que escribió el verdadero maestro Morya que él se
expresara de esta manera, lo cual es una prueba más que el maestro de los
Roerich no era el maestro Morya sino que en realidad era una entidad astral
embaucadora.
Y
de todos esos mensajes que les transcribí arriba, solamente las partes que les
puse en azul los Roerich las
incorporaron en su libro “Hojas del Jardín de Morya I”.
Y
es comprensible que los Roerich no
hayan querido poner todos los mensajes que su maestro les envió porque entonces
sus libros de Agni Yoga ya no serían muy agradables de leer. Pero esa selección
muestra también la hipocresía de los Roerich quienes publicaron únicamente las
partes más bonitas para que así los mensajes de su maestro sonaran más
“espirituales”.
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