ALICE BAILEY VERSUS BASIL CRUMP

Ralph Shirley, editor de la revista The Occult Review, publicó en 1928 un artículo en el que el escritor Herbert Adams elogiaba el último libro que Alice Bailey había publicado “La Luz del Alma”.  Y más tarde el Sr. Shirley recibió dos cartas, una de Alice Bailey y otra de Basil Crump.

Y a continuación se las transcribo:

LA CARTA DE ALICE BAILEY

« Señor,

Permítaseme solicitar el privilegio de tener suficiente espacio en su valiosa revista para aclarar mi posición con respecto a la autoría de mi último libro “La Luz del Alma” la cual ha sido comentada por el Sr. Herbert Adams en su número de junio de 1928. Edición americana (página 377?).

El valor del estudio de los Yoga Sutras de Patanjali es tan grande y la necesidad de esclarecer las verdades que contienen ese texto se ha sentido tan profundamente, que es un verdadero placer para mí haber visto mi libro mencionado en sus páginas. Estoy profundamente deseosa de que este libro esté disponible para todos los que puedan beneficiarse de él, y le agradezco a mi amigo el Sr. Herbert Adams el artículo que él ha escrito al respecto.

El Sr. Adams está evidentemente bajo la opinión personal de que el Maestro Tibetano con quien he cooperado en la producción de mis otros libros: “Un Tratado sobre el Fuego Cósmico”, “Cartas sobre Meditación Ocultista” e “Iniciación Humana y Solar” y quien también ha participado en la producción del presente libro, es uno de los Maestros de la Sabiduría relacionados con el grupo de Maestros Transhimaláyicos. Sin embargo esto es un asunto puramente de su opinión personal, una opinión a la que él tiene tanto derecho como cualquier otra opinión que cualquier persona pueda formar sobre este o cualquier otro asunto.

Pero estoy reiterando públicamente y en forma impresa, como lo he hecho anteriormente en varias ocasiones, que yo mismo no hago y nunca he hecho tal afirmación. Es el deseo expreso del Tibetano que su nombre real sea retenido. Y también es su deseo que los libros sean estudiados y valorados sobre la base de su propio valor intrínseco y por su apelación o no apelación a la intuición, y no porque alguien presuma reclamar autoridad para ellos.

En febrero de 1923, yo escribí para su publicación en The Beacon, el siguiente párrafo, el cual deseo mucho que me haga la cortesía de reimprimir en este momento:

"En este período particular de la historia del Movimiento Teosófico, debería ser evidente para todos los estudiantes cuidadosos que gran parte de los problemas que se han producido, se deben a dos factores:

·        La credulidad ciega de un grupo determinado que acepta cualquier declaración siempre que esta se encuentre respaldado por la afirmación jerárquica de algún tipo, y

·        El sectarismo estrecho que hacen de Blavatsky un profeta y de la Doctrina Secreta una Biblia.

Por lo tanto ya es hora de que los libros esotéricos se presenten y juzguen por su contenido y no porque se supone que tal o tal otro Maestro son responsables de ellos, o porque están de acuerdo o en desacuerdo con la Doctrina Secreta.

De esta manera nuestra gente encontrará la manera de salir del estrecho camino del devoto crédulo o del estrecho seguidor sectario, hacia el camino ancho que lleva al hombre hacia la auto-realización."

Agradeciéndole por su cortesía en este asunto.

Atentamente,

ALICE ANN BAILEY. »

(Pero posteriormente Alice Bailey se contradijo a lo que ella declaró en esta carta debido a que ella aseguró que el Maestro Tibetano era Djwal Khul y que él sí se encontraba trabajando estrechamente con los Maestros Transhimaláyicos, y también que él le dictó gran parte de La Doctrina Secreta a Blavatsky.

Pero yo les puedo asegurar que todo eso es falso y me parece muy hipócrita por parte de Alice Bailey que ella repudie "la credulidad ciega" que imponían los nuevos instructores teosóficos, cuando ella hacía exactamente lo mismo con sus estudiantes afirmándoles muchas cosas que resultaron ser falsas.

Y para colmo cuando uno estudia los libros de Alice Bailey por su contenido, como ella lo exige, uno se da cuenta que estos están plagados de errores y mentiras.)

Y a continuación les transcribo la carta que envió Basil Crump quien fue un miembro muy erudito de la Sociedad Teosófica.

CARTA DE BASIL CRUMP

« Señor,

Me sorprende mucho leer las extravagantes afirmaciones presentadas por el Sr. Herbert Adams sobre los trabajos de la Sra. Bailey en su edición de mayo, edición europea, pág. 305.

Usted parece aceptar sin cuestionar la afirmación que hace el Sr. Adams de que un "Maestro tibetano" ha dictado y parafraseado los Sutras de Patanjali en ese libro y le imparte sus obras a la Sra. Bailey de forma psíquica.

En la página 306 él cita de que se avecina un "segundo impulso de rayos que no tiene relación con el primer impulso de rayos que produjo el trabajo de Madame Blavatsky".

El Sr. Adams declara a esta fuente como "autoritativa", y a uno le gustaría preguntarle en qué evidencia basa su opinión, ya que en las Cartas de los Mahatmas se nos advierte de la existencia de los "Planetarios sin progreso que se deleitan en personificar a los dioses y en ocasiones a personajes conocidos que han vivido en la tierra." (p.462).

¿Dónde se puede dibujar la línea en estos casos y quién sino una iniciada entrenada como Blavatsky podría distinguir entre esas entidades embusteras y un verdadero maestro?

El Sr. Adams continúa afirmando que el libro de la Sra Bailey "emana virtualmente de la Hermandad, quien ignorando todos los problemas menores, o más bien respondiéndolos de la manera más efectiva por la voz de un mensajero acreditado, declara una vez más de manera clara y sólida, la ciencia del espíritu escondida en los sutras".

Pero yo dudo mucho que así sea porque acabo de revisar el libro "Tratado sobre el Fuego Cósmico" de la Sra. Bailey y lo encuentro simplemente lleno de mentiras, afirmaciones vacías y sin apoyo, y para nada corresponde con las enseñanzas de los Maestros Transhimaláyicos, sino que en cambio la mayor parte de su contenido corresponden a la Neo-Teosofía y el Adventismo inventados por Leadbeater y Besant.

En cuanto al supuesto "lenguaje claro y sólido", tal vez el Sr. Adams nos aclare la siguiente frase mencionada en dicho libro:

-      "El hombre promedio se encarna a través del impulso egoico, basado en el deseo, y en la relación del segundo aspecto con el tercer aspecto del Ser con el No-Ser." (p.767).

¡Y sin embargo hay personas que consideran el Fuego Cósmico como una continuación y expansión de la Doctrina Secreta!

Y el Sr. Herbert Adams también se equivoca en sus alusiones con el libro “La Luz en el Sendero” (pág. 305).

La escritora fue la Sra. Mabel Collins (única hija de Mortimer Collins, poeta y novelista, quien fue el padrastro de mi padre), y en una copia original que yo poseo de ese libro se encuentra la siguiente inscripción:

« Trabajo realizado bajo Sri: Hilarión, "Luz en el Sendero" que comenzó en octubre de 1884. "Karma" escrito el 27 de diciembre de 1884. Mabel Cook. »

(Mabel Cook es el nombre de casada de Mabel Collins)

Pero debido a un error que hay en ese libro, Blavatsky cuando escribió “La Voz del silencio” en 1889, ella incluyó la siguiente advertencia (pág. 17):

-      "No creáis que la lujuria puede ser eliminada si es gratificada o saciada, ya que esta es una perversión inspirada por Mara [la ilusión terrenal], y al alimentar el vicio este se expande y se vuelve más fuerte, como el gusano que engorda en el corazón de la flor."

Y esto ella lo escribió para contrarrestar el siguiente consejo que se da en el libro “La Luz en el Sendero” (versículo 20):

-      "Busquen [el camino] probando toda la experiencia, utilizando los sentidos para comprender el crecimiento y el significado de la individualidad."

Pero en cambio Blavatsky en La Voz del Silencio advierte:

-      "Desconfía de tus sentidos ya que estos son engañosos."

Y esta es una doctrina fundamental del Raja Yoga (el Dhydna budista). Además Blavatsky explicó que las facultades psíquicas imperfectamente controladas por Mabel Collins habían provocado que ella malinterpretara el pensamiento del Adepto Hilarión.

Mabel Collins (o sea mi tía madrastra tardía) era bien conocida en la familia como una médium innata, y su talento literario heredado de su padre la convirtió en un instrumento útil en ese momento para los maestros. Y es por eso que ella comenzó su entrenamiento oculto bajo la supervisión de Blavatsky quien la colocó bajo la tutela del Adepto Hilarión

Pero ese entrenamiento oculto es muy difícil, Blavatsky dice acerca de  su propio entrenamiento que fue solo después de una lucha terrible y un esfuerzo supremo de voluntad y con la ayuda de sus maestros en el Tíbet, que ella obtuvo el control de sus facultades psíquicas.

En cambio Mabel Collins no fue tan persistente y muy pronto abandonó el movimiento teosófico, y posteriormente incluso negó que Hilarión tuviera algo que ver con su trabajo.

Y menciono estos detalles para demostrar la necesidad de tener mucha precaución en casos similares de "inspiración psíquica", y especialmente cuando no hay un iniciado entrenado como Madame Blavatsky que sea competente para juzgar los méritos de las afirmaciones hechas.

Nuestra única guía en estos casos es el material que se ofrece, y tristemente en los trabajos de la Sra. Bailey, ese material está abierto a serias dudas.

Atentamente.

Desde Pekín, 23 de mayo.

BASIL CRUMP. »

(Basil Crump era un gran conocedor de teosofía y budismo, y él estuvo muy involucrado con la Sociedad Teosófica en Europa cuando Blavatsky estuvo al mando, por lo que vale la pena prestarle atención ya que él sabe muy bien de lo qué está hablando. Además que mi propia investigación me ha llevado a las mismas conclusiones.)

(Estas dos cartas se publicaron en The Occult Review de agosto de 1928, p.117-119)