El Doctor Wilhelm Hübbe-Schleiden
fue un prominente investigador y académico alemán que contribuyó mucho a la
formación de la Sociedad Teosófica en Alemania, y sobre las experiencias que él
tuvo durante
la elaboración de La Doctrina Secreta,
él mencionó lo siguiente:
« Cuando
visité a Madame Blavatsky en octubre de 1885, ella acababa de comenzar a
escribirla, y cuando la volví a visitar en enero de 1886, ella ya había
terminado una docena de capítulos.
Mientras
yo conversaba principalmente con Babaji (quien era su ayudante y en ese entonces
vivía con ella), Madame Blavatsky se pasaba casi todo el día ocupada en su
manuscrito, desde la madrugada hasta la tarde e incluso hasta la noche, a menos
que ella tuviera invitados. Y a pesar de estar muy ocupada, aún así ella se
daba el tiempo para seguir escribiendo artículos para la revista “The Theosophist”.
(Y
esto a pesar que el Coronel Olcott la había expulsado de Adyar.)
Y
algo que me impresionó mucho es que ella casi no tenía libros, ni media docena,
y tuve que conseguirle una Biblia en inglés, ya sea para citar un texto
correctamente o para controlar la exactitud de una cita.
Por
lo que en muchos aspectos su trabajo ella lo llevó a cabo de manera muy similar
a como el Coronel Olcott describió en su biografía "Viejas Hojas de un Diario", en donde él menciona que Blavatsky
para elabora su anterior libro "Isis
Desvelada", ella parecía tomar muchos apuntes de libros invisibles. Y
yo también la vi escribir frases como si las estuviera copiando de un libro que
se encontrara en frente de ella, aunque cuando me asomaba no veía nada.
Sin
embargo yo no presté mucha atención a la manera en que ella llevaba a cabo su
trabajo (como si fuera un cazador de fenómenos) ya que no era mi naturaleza,
pero si vi seguido la conocida escritura azul del Maestro Kuthumi en
correcciones y anotaciones de sus manuscritos, así como en libros que
ocasionalmente estaban sobre su escritorio. Y noté esto principalmente en la
mañana antes de que ella comenzara a trabajar.
Yo
dormía en el sofá de su estudio después de que ella se retiraba por la noche, y
el sofá se encontraba a pocos pies de su escritorio. Y recuerdo muy bien la
gran sorpresa que tuve una mañana cuando me levanté y encontré una gran
cantidad de páginas de su manuscrito cubiertas con ese lápiz azul escrito a
mano.
Y
no sé cómo llegaron esas páginas, pero no las vi antes de irme a dormir y
ninguna persona pudo haber entrado físicamente en la habitación durante la
noche sin que yo me hubiera dado cuenta porque yo tengo un sueño muy ligero.
Sin
embargo, debo decir que la opinión que tomé en ese entonces es la misma que tengo
ahora, y es que nunca juzgaré el valor de un libro o una enseñanza por la forma
y la manera en que se produce. Y por eso retuve mi opinión pensando y diciendo:
- "Esperaré hasta
que se termine de escribir La Doctrina
Secreta y luego podré leerla y analizarla, y esa será la prueba para mí, la
única que será buena."
Y
probablemente sea por esa razón que en la última noche antes de despedirme de
Blavatsky, se me aparecieron los dos certificados sobre la autoría de La Doctrina Secreta y los cuales se
imprimieron por primera vez en el número de abril de la revista “The Path” página 2.
Estos
los encontré en la copia que tenía del Informe Hodgson de la S.P.R., después de
que ya había dejado a la Señora Blavatsky, y yo soy la persona que se los
mostró al Señor William Judge en Londres el pasado agosto.
El
Maestro Kuthumi me aconsejó que no debía publicarlos, pero en cambio el señor
Judge posteriormente si fue autorizado a hacerlo por las instrucciones que él recibió.
Y
para concluir, repetiré que considero que La
Doctrina Secreta es un libro de suma importancia, ya que no tengo la menor
duda de que realmente contiene la enseñanza oculta, el conocimiento sagrado de
todos los sabios y de todas las edades. Y en ella se dan las claves verdaderas
y útiles que pueden resolver los enigmas de la existencia tanto del macrocosmos
como del microcosmos.
Sin
embargo me parece muy deseable, si no es necesario, que se le escriban
resúmenes explicativos para que los contenidos se utilicen mejor para los
lectores actuales. Y esa es la razón por la que yo escribí un resumen en 1891,
al que titulé "Lusty Leid und Liebe"
en donde utilicé el lenguaje y los términos de Darwin, Haeckel y la filosofía
moderna, con el propósito de poner la enseñanza oculta más accesible para el público. »
(Reminiscencias de H.P. Blavatsky
y la Doctrina Secreta, por la Condesa Constance
Wachtmeister, apéndice 6, p.112-114)
Saludos
ResponderBorrarAmigos
Que
Tengan
Un dia
Maravilloso
Cid , podría coger artículos interesantes del blog que no traten temas muy ocultos y sean más exotéricos (las palabras de Pastor) y difundirlas por mi pueblo. Lo haría en la noche, en silencio y pasando desapercibido. Dejaría un correo adjunto al artículo para quien quisiera recibir más de ese conocimiento. Hay algún problema en ello?
ResponderBorrarEres bienvenido a tomar lo que quieras
BorrarGracias Cid, cuídate muchísimo.
ResponderBorrar