Muchas personas cuando
comienzan a caminar por el sendero esotérico o espiritual, se encuentran perdidas
frente a tantas enseñanzas diversas, y también tienen miedo de caer en sectas o
de ser engañadas por charlatanes. Y para evitar todos estos contratiempos, el maestro
Pastor aconsejó lo siguiente:
« No quiero desesperarlos diciéndoles que están lejos de la
meta. Pero tampoco quiero mentirles diciéndoles que están cerca. Simplemente
les digo: conozcan vuestra naturaleza y sepan en que camino están caminando y
hacia qué objetivo se dirigen. Y así ustedes podrán vivir mejor lo que ustedes
son, y también podrá administrar mejor vuestra vida diaria.
Y es por eso que, a ese nivel, y
visto en ese aspecto, el conocimiento es un verdadero medio de iniciación.
Porque entonces todo toma su lugar, y habiéndose despejado el horizonte, el
individuo puede trazar su línea de destino.
En cambio mientras que el horizonte
esté caótico y ustedes se digan a si mismo:
"Escuché esta teoría, pero
luego escuché esta otra teoría, y también existe esta otra teoría, y ya no sé
cuál creer", o "Parece que los budistas creen esto, pero los
cristianos creen esta otra cosa, y los musulmanes creen esta otra cosa más, y
los masones creen esto que es diferente, etc."
Entonces,
¿Cómo quieren
encontrar vuestro camino y un camino recto si el horizonte que perciben es tan
caótico?
Cálmense y comprendan que trazando
un camino inseguro, inevitablemente ustedes caerán y se lastimarán, y se
sentirán decepcionados, resentidos, malhumorados, y en el apogeo de la
desesperación enviarán todo el esfuerzo que han hecho al basurero por algunos
años. Y luego, un día cuando el viento de la evolución vuelva a soplar en
ustedes, el destino los pondrá nuevamente a estudiar y a avanzar, pero con un
enorme retraso si no se hubieran tropezado.
Entonces, antes que nada, es
importante tener claridad, porque un humano solo puede avanzar en su camino que
si su horizonte está despejado
¿Ustedes pueden
caminar en la niebla?
No, ustedes van a andar a tientas, y
si no sabes cómo andar bien, terminarán cayéndose en un precipicio, porque
además de ser ciegos, hay algunos que también son sordos.
Así que tienen que trazar un
horizonte tranquilo y si no pueden percibirlo porque no pueden elegir entre
esta o aquella teoría, entonces les sugiero que utilicen un instrumento muy
efectivo:
Tomen en mano vuestra inteligencia y
toda su capacidad de razonamiento y de discernimiento que hay en ella, y miren
dónde está el equilibrio en todas esas teorías, en todas esas tesis, y así
ustedes encontrarán el camino. Intenta encontrar los conceptos que crean
osmosis entre ellos, y así creen vuestra línea de horizonte.
E incluso si se sienten ignorantes,
hay una manera de ir más allá de la ignorancia, y es utilizando el sentido común,
la deducción, el análisis, la experiencia, la autenticidad. Porque hay muchos
que se preguntan: ¿qué teoría es la correcta?
¿Pero están ellos
haciendo algo para descubrir cuál teoría es la correcta?
No, primero ellos quieren saber cuál
teoría es la correcta para poder investirse en ella. Pero yo os digo:
La vida es un gran juego y en este
mundo hay sabios y hay charlatanes, y si ustedes no saben distinguir entre los unos
y los otros, entonces experimenten lo que les dicen cada uno de ellos, y sean
alguien que asume su búsqueda, sean responsables, sean valientes, sigan
adelante, muévanse, cumplan.
Y si ustedes experimentan con
autenticidad, entonces ustedes descubrirán si esa persona es un sabio o un
charlatán. Y en menos de unos pocos días ustedes se darán cuenta de eso porque
todo vuestro cuerpo, toda vuestra mente y toda vuestra inteligencia (los cuales
se encuentran alineados con el alma) no soportarán algo que rompa esta
alineación, porque todas las falsas teorías y todas las falsas palabras rompen
la alineación con el alma.
Por lo tanto, si ustedes se
encuentran alineados con vuestra alma y pasan a la experimentación. Y si lo que
experimentan no es verdadero, entonces inmediatamente ustedes sienten la falta
de armonía.
Y por consiguiente no solamente deben
de usar este método para descartar a los falsos guías, sino también para encontrar
los verdaderos maestros, y por lo tanto busquen y elijan los conceptos y las
enseñanzas que produzcan una alineación todavía más perfecta, y de este modo
seguramente ustedes encontrarán un instructor real, o alguien de verdaderamente
iluminado, un texto valioso, o una técnica confiable.
Muchas personas se están perdiendo
en este momento porque ya no saben a quién creer en este bullicio de espiritualidad.
Y es que en esta abundancia de teorías, técnicas, escuelas e instructores, la
espiritualidad se vuelve tan problemática como la vida cotidiana.
Entonces,
¿Qué hacer?
Cuando ustedes ingresan a la vida
profesional, ustedes hacen una selección entre todos los oficios que están a
vuestra disposición, y en función de vuestras capacidades y afinidades con esos
oficios, ustedes eligen el que más les conviene, o el que está más a
vuestra disposición. Pues bien, es lo mismo con la espiritualidad. La
espiritualidad es muy diversa porque hay tantas espiritualidades como hay tipos
de individuos.
Hoy les hablo como les hablo, a
causa de mi espíritu, y por la raíz que me alimenta y por el grado que
represento. Pero la espiritualidad que a ustedes les anima es vuestra y está
constituida por lo que ustedes son, por lo que ustedes hacen, y por lo que
ustedes creen. Entonces esa espiritualidad que ustedes encarnan es tan válida
como la que estoy tratando de darles.
Entonces lo que ustedes deben de
hacer es elegir, ya que existen todo tipo de espiritualidades que se pueden
adaptar a la gran multiplicidad de los requisitos humanos (debido a su
diferencia de vibración). Ya que los humanos no están todos fundidos en el
mismo molde y alguien que es alimentado por tal energía de tal planeta, no va a
necesitar el mismo ascetismo que otro que tenga energías diferentes.
Comprendan que la universalidad no
es la uniformidad, y por consiguiente un plan universal no se basa en el mismo
ritual para todo el mundo, ni en la misma evolución para todos los humanos.
Sino por el contrario, un plan universal es el respeto de todas las diferencias
y el cumplimiento de cada una de estas diferencias.
Entonces sé tú mismo. No intentes
ser como es el otro, afiliarte a donde se afilia el otro, parecerte a como se
parece el otro, hacer como hace el otro. Sé tú mismo. Y si eres tú mismo, entonces
la red de energías que representas comenzará a fusionarse y manifestará al niño
espiritual que hay en ti.
Y es por eso que Jesús dijo:
« Vuelvan a ser sencillos como los
niños. Bienaventurados los simples de espíritu. »
Cuando dijo estas palabras, él no
quiso decir:
« Bienaventurados los que se contentan
de poco. Bienaventurados los que no pueden hacer abstracciones e imaginar la
complejidad de las cosas. Bienaventurados los que están satisfechos con
solamente pan y agua. »
No
Ser simple de espíritu no significa
ser bobo, no significa ser cándido. Ser simple de espíritu y convertirse otra
vez en un niño significa simplemente ser uno mismo. Así que sean claros con
ustedes mismos.
Porque mientras esta claridad no se
encuentre presente en ustedes, mientras haya conflicto en vuestro interior,
entonces el niño espiritual que está en ustedes y que son ustedes mismos cuando
alcanzan la claridad. Ese niño no puede nacer porque ustedes no se encuentran
alineados, y aunque el niño empuje y empuje, no puede abandonar el útero de su
madre, y como la personalidad es como un huevo, el alma no puede abandonar su
personalidad.
La personalidad también podría llamársele
mater, ya se trata de la materia. Es
un huevo que debe incubarse y que desencadena la eclosión cuando la alineación
se realiza, y en ese momento el alma puede emerger a la superficie de su
personalidad.
Y cuando eso sucede, al humano se le
llama un iniciado, porque el iniciado es justamente aquel que habiendo logrado
su alineación con su naturaleza divina, a partir de se momento manifiesta su
naturaleza elevada incluso hasta en el plano físico.
Entonces hagan lo que les digo. Sean
primero auténticos y luego hagan una limpieza interna. Reflexionen por qué
tienen los problemas que tanto los molestan; un complejo aquí, un trauma allá,
un obstáculo que se presenta y que regresa y regresa.
¿Por qué tienen
eso?
Analícenlo y busquen comprender por
qué surge eso. Y cuando se hayan limpiado y alineado, ustedes podrán
convertirse en un iniciado. No antes. Y esto sin importar todos vuestros deseos
y todos vuestros esfuerzos, ya que sin esta preparación previa, todas vuestras
esperanzas y todo vuestro ascetismo son inútiles, debido a que estas son
cáscaras de nuez vacías que con un solo soplo se caen. Así que sean sólidos.
¿Pero qué es lo
que crea la solidez?
Es autenticidad la que la crea.
¿Pero cuántos
humanos hay que pueden sentirse realmente auténticos?
Muy pocos. Y es por eso que Jesús
también dijo:
« Dejad que los muertos entierren a
los muertos. »
Porque la mayoría de los humanos no
se permiten ser ellos mismos. Ellos se identifican con sus complejos, con sus
traumas, con sus dolores, con sus límites. Son todo lo que no deberían ser y
todo lo que no es. Ellos solo son la negación. En cambio ustedes sean lo que
realmente son, es decir lo positivo, la acción, el logro, la esperanza, la luz.
Díganme,
¿No tienen ya
suficiente de ser vuestros complejos?
No se cansan de mirarse al espejo
por la noche y reprocharse por sentirse feos, deformes, tener kilos de más,
tener piernas demasiado cortas, o no ser capaz de imponerse ante sus colegas de
trabajo, de no ser un poeta, o un gran mago, o no sé qué más.
¿Es que esa
constante agresión no comienza ya a hastiarlos?
Claro que sí, y justamente ahí
radica el problema. Y es que el final esa agresión se vuelve tan agotadora que
los humanos se vuelven ansiosos, deprimidos, los nervios fallan, la
personalidad se desgasta, y las enfermedades comienzan a surgir.
Y es así como encontramos a
individuos que cada vez están más amargados, más estresados, y más
encolerizados. Pero esto se debe porque ellos no están mirando en el espejo
correcto. Ellos se miran a si mismo con una visión distorsionada.
Y las personas colapsan a fuerza de
contemplar lo que no son. Ellas observan su destrucción en lugar de observar su
construcción. Y no les estoy diciendo que sean optimistas o que tengan un
pensamiento positivo. No. Les pido simplemente que tengan un pensamiento
analítico y que piensen claro y con lucidez.
La lucidez es una flama fantástica.
Y cuando los hombres sepan realmente utilizar la lucidez, entonces ellos ya no
serán esclavos de ningún problema, ni de ningún poder ajeno a ellos.
¿Qué es la lucidez?
Es saber cómo
encontrar la verdad de todo y para eso hay que preguntarse, analizar y
buscar. »
(Conferencia
el 24.06.87)
Por fin ahora si tus temas son interesantes no como los de antes repitiendo lo mismo de siempre y pastor excelente?
ResponderBorrarExcelente entrada.
ResponderBorrarSi un artículo se repite no lo leas.
ResponderBorrarExcelente artículo.
Como todos.