EL SIGNIFICADO SIMBÓLICO DEL ARCA DE NOÉ SEGÚN RUDOLF STEINER

Sobre este tema, en la conferencia que Rudolf Steiner dio en Stuttgart el 13 de septiembre de 1907, él dijo lo siguiente:

« "Y Dios le ordenó a Noé que construyera un arca de trescientos codos de largo, cincuenta de ancho y treinta de alto." (I Moisés, 6:15).

Y en estas medidas del arca de Noé, hemos establecido exactamente las medidas para la armonía del cuerpo humano. »

(GA0101)

Pero si Rudolf Steiner se hubiera dado la pena de hacer unos cálculos antes de afirmar esto, él se habría percatado que lo que él estaba asegurando era un completo disparate, porque esas proporciones implicarían que un hombre de 1.75 m de altura, solo tendría 29 cm de anchura y 17.5 cm de profundidad. Lo cual equivaldría a una persona exageradamente delgada, similar a los sobrevivientes de los campos de concentración. Y eso para nada corresponde a la armonía de un cuerpo humano.

Y en la conferencia que Rudolf Steiner dio al día siguiente, él añadió:

« Para entender el significado del Arca mencionada en la Biblia debemos ocuparnos de ese tiempo del desarrollo de los humanos en el que tuvieron lugar los acontecimientos reales a los que se refiere la historia de Noé.

En la época atlante, el aire no existía como existe hoy. La distribución de aire y agua era bastante diferente de lo que es hoy. Masas de niebla rodeaban a la Atlántida. Y cuando se imaginan cómo sube la niebla, cómo se forman las nubes y cómo cae la lluvia, entonces tienen en miniatura lo que sucedió en enormes extensiones de la Atlántida durante milenios.

Y así, poco a poco llegaron las tormentas de lluvia, y gradualmente las personas se acostumbraron a una forma de vida completamente nueva. Los cuerpos humanos tuvieron que cambiar. Y les sorprendería ver las imágenes de los primeros pueblos Atlantes. ¡Qué diferentes eran de la gente de hoy!

Sin embargo, no crean que este cambio se produjo por sí solo. Sino que a través de largos períodos de tiempo, las almas humanas tuvieron que trabajar en estos cuerpos humanos y provocar efectos como los descritos por el ejemplo dado de los efectos de las formas arquitectónicas en la sensación de vida del alma que luego apareció en sus rostros.

Debido a esta atmósfera llena de niebla, las cosas no se le mostraban con contornos firmemente marcados. Sino que en realidad, eran más bien imágenes en color que surgieron para el atlante. Sus percepciones eran inundaciones de colores entretejidos. Y en esto, los contornos aparecieron gradualmente. Los objetos se revelaron como linternas en la niebla, rodeadas de colores del arco iris, y sus capacidades espirituales se desarrollaron en consecuencia.

Si esta condición hubiera continuado, habría sido imposible para el hombre adquirir su cuerpo actual. Los objetos tenían que tomar sus contornos actuales, el aire se volvió libre de agua. Y este proceso continuó durante miles de años. Solo gradualmente las cosas adquirieron distinción.

¿Qué tipo de forma tenía el alma para experimentar cuando escapó del paisaje acuático atlante hacia el nuevo paisaje aireado?

Para que el cuerpo actual se formara, el ser humano tenía que estar rodeado de una forma definida de longitud, amplitud y profundidad. Y de hecho, se le dio esta forma para que el cuerpo pudiera formarse de ese modo.

Y así como el humor de los místicos se modeló a partir de la forma de la catedral, y como el iniciado sería capaz de indicar qué rostros se habían formado en consecuencia, los seres humanos se transformaron gradualmente ya que, de hecho, vivía en embarcaciones, bajo la influencia de grandes iniciados, que habían sido construidos de acuerdo con estas medidas.

Antes de la época de nuestra humanidad actual, los atlantes llevaban una vida marina y vivían en embarcaciones, y solo posteriormente y gradualmente la humanidad se acostumbró a la vida en la tierra.

La vida de los atlantes fue en su mayor parte una vida en embarcaciones. Y ellos no solo estaban rodeados de un aire acuoso y brumoso, sino que gran parte de la Atlántida estaba cubierta por el mar. Y este es el profundo misterio del Arca de Noé. »

(GA0101)

Entonces Rudolf Steiner asevera que al inicio de la época atlante, la atmosfera estaba tan llena de vapor de agua que provocaba que casi no se pudiera ver, porque el aire estaba tremendamente nublado. Pero con el tiempo y por medio de la condensación, la niebla se fue transformando en líquido y los atlantes se volvieron un pueblo marítimo que vivía en embarcaciones construidas con las medidas que la Biblia da del arca de Noé.

Y estas medidas corresponden también a las proporciones que los atlantes tuvieron que trabajar en ellos para desarrollar “cuerpos armoniosos”.

Y este proceso en donde los atlantes pasaron de la vida brumosa a la vida marina, y posteriormente de la vida marina a la vida terrestre es lo que simboliza la historia de Noé.

Pero esto que afirma Rudolf Steiner son puros inventos suyos, porque en ninguna enseñanza esotérica genuina se menciona que la Atlántida estuviera cubierta constantemente de una densa niebla, sino que por el contrario se afirma lo opuesto. Y por ejemplo, el maestro Pastor asegura que durante la época atlante los rayos del sol brillaban más fuertemente que ahora porque en ese entonces la atmosfera de la Tierra era más delgada.

Entonces,

¿De dónde sacó Rudolf Steiner esa idea estrafalaria de que la atmosfera durante la época atlante estaba llena de vapor de agua?

Y la respuesta es que él se lo imaginó, ya que en su libro “Memoria Cósmica”, él escribió:

« En la vieja época Atlante, el aire fue saturado con vapores de niebla de agua. El hombre vivió en la niebla de agua, que en ciertas regiones nunca levantó al punto donde el aire estaba completamente claro.

El sol y la luna no podían ser vistos como son vistos hoy, pero fueron rodeados por coronas coloreadas. Una distribución de lluvia y luz del sol, como ocurre actualmente, no existió entonces. Uno puede clarividentemente explorar la antigua Atlántida y constatar que el fenómeno del arco iris no existió en esa época y sólo apareció en el período post-Atlante.

Nuestros antepasados los atlantes vivieron en un país de niebla. Y estos hechos han sido averiguados por medio de la observación supersensible. »

(Capítulo 20)

Pero esto no tiene ningún sentido porque si los atlantes hubieran vivido en una atmosfera tan húmeda que no se podía ni siquiera ver los objetos, entonces los atlantes habrían terminado enfermándose y muriendo porque sus pulmones se habrían llenado de agua.

Y para resolver esto, Rudolf Steiner salió con el disparate todavía más absurdo que los atlantes no poseían pulmones, sino branquias. Y es por eso que en la conferencia que él dio en Paris el 9 de junio de 1906, Rudolf Steiner afirmó que:

« La temperatura de la Tierra en esos tiempos antiguos era mucho más alta de lo que es hoy, y por eso el ambiente era tan vaporoso y lleno de corrientes. En Lemuria, encontramos formas humanas rudimentarias que respiraban no a través de los órganos nasales sino a través de órganos más parecidos a las branquias.

Y es así que el hombre primitivo no tenía oídos para oír, y su movimiento a través del elemento semi-líquido, semi-gaseoso que lo rodeaba fue posible gracias a un órgano que le permitió flotar y nadar.

Y cuando los elementos se diferenciaron y el cielo se volvió claro, el hombre se encontró en la tierra sólida, y este órgano se transformó en los pulmones, las branquias en los oídos y las partes frontales de su estructura en brazos y manos libres. »

(GA0094)

Pero esto es completamente falso porque los registros fósiles muestran que en lo tiempos antediluvianos ya habían animales con pulmones, y no tiene sentido que lo lemurianos y los atlantes tuvieran que utilizar branquias, mientras que los animales ya utilizaban pulmones.

Y no contento con decir esas absurdeces, Rudolf Steiner además es inconsistente con lo que él enseña, porque en la conferencia que él dio en Berlín el 22 de mayo de 1905, él aseveró que:

« El Arca de Noé fue construida con el propósito de preservar a la humanidad para la etapa actual de la existencia humana. Antes de Noé, el hombre vivió en las épocas atlante y lemuriana. En ese momento no había construido la nave que lo llevaría a través de las aguas del mundo astral a la existencia terrenal.

El hombre vino por las aguas del mundo astral, y el Arca de Noé lo llevó. El Arca representa la construcción elaborada por fuerzas divinas inconscientes. Y de las medidas dadas, sus proporciones corresponden a las del cuerpo humano, y también a las del Templo de Salomón. »

Y Rudolf Steiner es muy incongruente porque:

• Aquí él dice que el Arca de Noé fue construida después de los atlantes, mientras que en su otra conferencia él dijo que el Arca de Noé simboliza a los atlantes.

• Aquí él dice que el diluvio representa a las aguas del mundo astral, mientras que en su otra conferencia él dijo que el diluvio representa a las aguas del mundo físico que se fueron condensando de la atmosfera.

• Y es completamente falso su aseveración de que las proporciones del Arca de Noé corresponden a las proporciones del Templo de Salomón, porque en la Biblia se señala que “el Templo de Salomón tenía sesenta codos de largo, veinte de ancho y treinta de alto” (1 Reyes 6:2). Lo cual significa que proporcionalmente el Arca de Noé era dos veces más larga que el Templo de Salomón.

¡O sea que Rudolf Steiner ni siquiera se dio la pena de leer la Biblia antes de decir sus falsedades!

CONCLUSIÓN

Y este es un ejemplo más de a qué punto las enseñanzas de Rudolf Steiner son puros delirios y mentiras.