NICOLÁS ROERICH QUERÍA CREAR UN NUEVO PAÍS EN ASIA CENTRAL



El investigador ruso Vladimir Andreyevich Rosoven su libro “Nicolás Roerich, el Mensajero de Zvenigorod: el Gran Plan” (Primer libro) presenta muchos datos importantes basados en los estudios de archivos que él ha realizado en Rusia, Estados Unidos e India.
 
Y es evidente a partir de los hechos presentados por Rosov que lo que guió principalmente la actividad de los Roerich entre los años de 1920 a 1930 fue el "Gran Plan" que tenía Nicolás Roerich de fundar un país utópico en Asia Central que fuera de religión budista y con un régimen político comunista. Y ese gran proyecto también se puede percibir en los diarios personales de Helena Roerich.
 
Ese nuevo país incluiría partes de otros países ya existentes, como la Unión Soviética, Mongolia y China. Y Nicolás Roerich miró con codicia en particular al sur de Siberia y a la vecina Mongolia que en 1911 se había liberado de China, pero que desde 1924 era un satélite de la Unión Soviética.
 
La base financiera propuesta para ese proyecto venía de una corporación llamada Belukha que iba a adquirir de la Unión Soviética concesiones de cultivo de tierras y extracción de minerales valiosos en el área. Por lo tanto era necesario establecer una estrecha colaboración con el régimen soviético, y muy probablemente ese fue el motivo por el que a partir de ese momento, en la primavera de 1925, el señor y la señora Roerich dieron un giro brusco a su anterior orientación política que era manifiestamente anticomunista.
 
A principios de 1925, los Roerich viajaron a París para ver a Leonid Krasin, quien era el Comisario de Comercio Exterior de la Unión Soviética, y uno de los objetivos de la visita era obtener concesiones para la minería y la agricultura en la región de Altai, en el sur de Siberia, lo cual era uno de los pasos para fundar su “Nuevo País”.
 
Los Roerich ahora declaraban ardientemente su simpatía por el comunismo. Y las comunicaciones por medio de sesiones espiritistas que ellos efectuaban con los “Mahatmas”, y principalmente con Allal Ming, a partir de entonces esas entidades que se hacían pasar por los Maestros de Shambala elogiaban consistentemente al comunismo.
 
Y es porque esas entidades astrales para poder seguir absorbiendo la energía de sus invocadores les siguen sus creencias, y a los Roerich les hacían creer que la nueva enseñanza (que se supone debe unir a la humanidad) era una amalgama de budismo y comunismo.
 
 
La expedición que los Roerich efectuaron de 1925 a 1928 en Asia Central, oficialmente tenía por objetivo estudiar esa región, pero el objetivo oculto era llevar a cabo las maniobras para poder crear ese nuevo país.
 
Y una de esas estrategias consistía en motivar a la Unión Soviética a participar en ese proyecto, y es por eso que cuando Nicolás Roerich fue a Moscú el 13 de junio de 1926, la carta que supuestamente había sido escrita por los Mahatmas para el comisario del pueblo para asuntos exteriores, Gueorgui Vasílievich Chicherin, iba en ese sentido ya que entre otras cosas decía:
 
« Si la Unión Soviética reconoce el Budismo como la enseñanza del Comunismo, entonces nuestras comunidades podrán brindar ayuda activa, y cientos de millones de Budistas repartidos por todo el mundo otorgarán un poder inesperado pero necesario [para la URSS].
 
Confiamos a nuestro emisario Akdorje [Nicholas Roerich] para que entregue los detalles de nuestra propuesta; podemos confirmar que se deben tomar medidas sin demora para la introducción del Comunismo Mundial como una etapa inmediata de evolución. »
 
 
Pero como era de esperarse resultó imposible realizar ese proyecto megalómano de una nación budista-comunista que se extendería desde Siberia hasta Mongolia e incluso el Tíbet. Y el apoyo que el régimen soviético mostró en su fase inicial hacia los Roerich (aunque por otros motivos) terminó por desvanecerse en 1930.
 
Y esto coincide con el tiempo en que los Roerich volvieron a cambiar su creencia política y de ser unos férreos comunistas a partir de entonces dirigieron su atención hacia los Estados Unidos y comenzaron a cooperar con los capitalistas estadounidenses.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

1 comentario:

  1. Repito los blancos son materialistas,Je supongo que en el futuro ya no podrán tener acceso a ese tipo de vida rodeados de dinero

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