Sobre
este asunto, Max Heindel comentó lo siguiente:
« El
amigo materialista, si él vivió una buena vida moral, como generalmente suele suceder,
se quedará en la cuarta región del Mundo del Deseo durante cierto número de
años (de acuerdo con el tiempo que vivió) y después de eso pasará al Segundo
Cielo, en donde él no tendrá allí una conciencia tan completa y perfecta como
la persona que ya se ha preocupado por las realidades espirituales de la vida.
Y
ahí lo veremos a nuestro amigo materialista, reconociéndolo y asociándonos con
él durante centurias enteras en la obra de crear el futuro ambiente en donde
viviremos en la Tierra cuando volvamos a reencarnar, porque para ese entonces él
ya no será más materialista absolutamente, debido a que cuando el espíritu asciende
a esa elevada región, ya no está bajo las ilusiones que algunas veces lo envuelven
en este mundo material. »
(Filosofía
rosacruz en preguntas y respuestas I, n.56)
Y
en su libro “El Concepto Rosacruz del
Cosmos”, Max Heindel dio más detalles al respecto:
« La
Región central del Mundo del Deseo es una especie de territorio neutral o limítrofe,
ni cielo, ni infierno. Y en esta región encontramos a las personas que fueron rectas
y honestas, que no injuriaron a nadie, pero que estaban tan sumergidas en los
negocios que nada pensaron sobre la vida superior.
Y
para ellos el Mundo del Deseo es un estado de la más indescriptible monotonía,
ya que ahí no hay ningún “negocio” ni nada que pueda substituirlo. Y ahí esta
gente pasa un tiempo muy penoso hasta que aprenden a pensar en otras cosas que
no sean sus letras de cambio o sus cheques.
El
hombre materialista que ha pensado sobre el problema de la vida y llega a la
conclusión de que “todo acaba con la muerte”, que niega la existencia de las
cosas que están más allá de los sentidos físicos, ese hombre sentirá también
esa espantosa monotonía.
Él
ha esperado la aniquilación de la conciencia, pero en vez de eso se encuentra
con una percepción aumentada de las personas y cosas que están en torno suyo. Pero
se ha acostumbrado a negar esas cosas tan vehementemente que muy a menudo cree
que el Mundo del Deseo es una alucinación y se les puede oír exclamando con la
más profunda desesperación:
¿Cuándo acabará esto? ¿Cuándo acabará esto?
Tales
personas se encuentran realmente en un estado lastimoso. Están más allá de toda
ayuda, y sufren mucho más que cualquier otro. Además, tienen muy poca vida en
el Mundo Celeste, donde se efectúa la construcción de los cuerpos para futuros
usos, así que ponen todos sus pensamientos cristalizantes en los cuerpos que construyen
para la vida siguiente, y así se forma un cuerpo que tiene las terribles tendencias
que vemos, por ejemplo, en la consunción.
Algunas
veces el sufrimiento de tales cuerpos decrépitos tornará los pensamientos de
las almas que los animan hacia Dios, y entonces pueden seguir su evolución;
pero en la mente materialista yace el peligro de perder todo contacto con el
espíritu y convertirse en un rezagado. »
(Capítulo
3)
OBSERVACIONES
Desafortunadamente
todo esto que afirma Max Heindel es incorrecto, porque los maestros explicaron
que la mayoría de los humanos después de morir caen en un profundo sueño y se
la pasan soñando durante casi todo su viaje post-mortem, hasta que vuelven a la
Tierra para reencarnar en un nuevo cuerpo.
Y
en lo que concierne a la gente materialista su estado de inconsciencia es
todavía mayor, debido a que el maestro Kuthumi precisó que como esas personas
repudian la espiritualidad, ellas solamente se la pasan durmiendo pero sin
soñar.
~ *
~
Y este es un ejemplo
más de como mucho de lo que enseñó Max Heindel es opuesto a lo que enseñaron
los Maestros de sabiduría.
Cid, leo mucho tu blog, y me encanta como explicas y se me hace fácil leerte porque eres muy conciso. Sin embargo, quisiera preguntarte algo, que importancia tiene realizar tantas entradas al blog sobre personas contrarias a la teosofía, a veces leo todo un artículo para al final en tus anotaciones ver qué eran personas opuestas a los maestros y aunque es importante saber que enseñanzas pueden ser verdaderas y cuáles no, no le veo mucha utilidad a tener tantas entradas sobre pensamientos de personas que no aportan en nuestro desarrollo. ¿Por qué no enfocarnos más en las enseñanzas verdaderas de los maestros verdaderos?
ResponderBorrarDisculpa Cid, no quiero ser inoportuno, te admiro mucho y agradezco está gran labor que haces. Te envío un abrazo.
Muchos lectores me reclaman que critique tanto, pero lo hago para alertar a la gente que no sabe al respecto, porque mientras más artículos escriba sobre los embusteros, más aumento los links en los buscadores, y así también más aumento las posibilidades de que las personas los lean, y de esta forma evitar que ellas sean engatusadas por los prosélitos de esos charlatanes.
BorrarSin embargo tienes razón y voy a concentrarme más en transcribir la enseñanza, solo que ahorita me puse a estudiar a Max Heindel y resultó ser un individuo tremendamente embustero y alguien tiene que señalarlo, porque de lo contrario sus admiradores van a seguir desviando a muchos honestos buscadores.