En los pocos casos que los médiums son auténticos, son diferentes tipos de entidades las que se comunican a través de ellos, y a continuación se las voy a enumerar:
1. LAS ENTIDADES ASTRALES EMBAUCADORAS
Hay principalmente dos tipos de entidades embaucadoras:
Los elementarios
Los elementarios son los remanentes que quedan flotando en el astral después de que la parte positiva de la persona fallecida asciende al mundo divino (llamado cielo, paraíso, devachan, etc.).
En condiciones normales estos remanentes se van a ir desintegrando progresivamente, pero al ser invocados por los espiritistas se revitalizan y van a aparentar ser lo que los espiritistas quieran que sean (familiares fallecidos, personajes históricos, guías espirituales, etc.) para de esta forma seguir siendo invocados y así poder seguir vampirizando la energía de quienes asisten a las sesiones espiritistas.
En sánscrito se les denomina kama-rupas y son la inmensa mayoría de las entidades con las que se comunican los espiritistas.
Las entidades no humanas
Existen también entidades astrales embusteras que no son humanas pero que tienen la suficiente inteligencia y habilidad para también embaucar a los espiritistas.
2. LOS FANTASMAS
Con esta palabra aquí nos referimos a las manifestaciones visibles de formas sutiles, y pueden deberse por diferentes causas. Los principales tipos de fantasmas son:
Los elementarios materializados
Con la substancia astral del médium el elementario se hace visible en el plano físico y toma la forma que le soliciten: un familiar o un amigo fallecido, etc.
Este tipo de fantasmas son la inmensa mayoría de las materializaciones genuinas que suceden en las sesiones espiritistas.
Los siguientes tipos de fantasmas casi no se aparecen a los médiums pero se los menciono para que sepan de su existencia:
Las apariciones breves fantasmales
Suele ser el remanente etéreo del cuerpo físico que permanece existiendo porque el lugar donde se encuentra es muy energético, pero como ese remanente no tiene inteligencia propia entonces solo repite una y otra vez las últimas acciones que ese humano efectuó antes de morir.
Esos son la mayoría de los fantasmas que se ven en los antiguos castillos. Normalmente son invisibles pero en condiciones atmosféricas particulares se hacen visibles por un corto periodo de tiempo.
Las materializaciones del doble astral
Las personas pueden volver a su doble astral visible (de manera consciente o inconscientemente) y a eso se le llama una proyección astral visible:
Ejemplos de proyecciones inconscientes:
Ejemplos de proyecciones conscientes:
Y con el suficiente entrenamiento pueden tomar otras apariencias:
3. HUMANOS DESENCARNADOS
Los instructores teosóficos explicaron que la mayoría de las personas después de fallecer no pueden comunicarse con los vivos porque los humanos desencarnados caen en un profundo sueño, pero hay un pequeño porcentaje de humanos fallecidos que por diversos motivos permanecen despiertos.
Y solo en una pequeña porción de las sesiones espiritistas los médiums se comunican con esos humanos desencarnados, y los principales casos son:
1) Los humanos comunes que se despiertan en el astral
A ese tipo de humanos se les denomina “espíritus sufrientes”, “almas en pena”, “caminantes del astral”, “demonios”, etc. Y entre ellos están:
Los accidentados
Las personas que murieron de manera muy dramática (accidentes de tráfico, o accidentes aéreos, o fueron brutalmente asesinadas, etc.) y que eso les impactó mucho; esas personas suelen despertarse después de morir.
Ellas vagan en el astral y están atemorizadas porque no comprenden su situación- La película “Ghost: la sombra del amor” ilustra bien estos casos.
Pero no todos los accidentados se van a despertar porque si la persona fue espiritual, entonces es probable que su espiritualidad le ayude a superar ese traumatismo.
Los suicidas
También las personas que se suicidan se despiertan en el astral, ellas creen que quitándose la vida física eso las va a liberar de su sufrimiento, pero resulta que ese sufrimiento las despierta después de morir físicamente.
(Han constatado que cuando están sufriendo mucho no pueden dormir, o se despiertan a media noche. Pues lo mismo sucede con los suicidas.)
Y en el astral ese sufrimiento lo van a sentir aún más intensamente debido a que ya no disponen de su cuerpo físico que absorbía en gran medida ese dolor.
Los aferrados
Las personas que fueron extremadamente apegadas a sus posesiones suelen despertarse y van a permanecer como un fantasma invisible junto a su posesión: su casa, su fortuna, etc.
Los adictos
Y también las personas que fueron muy adictas a algún vicio o a alguna substancia, como por ejemplo: al alcohol, al tabaco, etc., su adicción suele despertarlas y entonces van a tratar de satisfacer su adicción por medio de personas vivas.
Por ejemplo, un alcohólico va a buscar personas que son alcohólicas para volver a sentir esa sensación.
Los sexodependientes
Estos son los súcubos e íncubos del folclore europeo medieval, que así llamaban a los demonios femeninos y masculinos que aparecían en los sueños de los hombres y las mujeres para seducirlos y alimentarse de su energía sexual. (También los elementarios pueden hacer eso).
Los malvados
Las personas que fueron muy malvadas y particularmente las que fueron condenadas a muerte suelen despertarse y van a querer vengarse de su asesinato ocasionando crímenes a través de individuos débiles a los que puedan influenciar.
Por ejemplo David Berkowitz mató a once personas y en el juicio alegó que el perro de su vecino se lo ordenaba. Pues bien, es probable que en realidad fuese un malvado desencarnado quien le ordenó eso y Berkowitz lo captó de esa manera.
En oriente a estas entidades se les denomina pisachas o mara-rupas que se traducirían en español como demonios.
2) Los adeptos y sus discípulos avanzados
Son humanos que se han desarrollado lo suficientemente para permanecer despiertos después de morir, y pueden ser tanto del lado luminoso como del lado oscuro.
Los adeptos del lado luminoso en oriente se les llama: Rishis o Mahatmas o Raja Yoguis; y en español: Maestros o Grandes iniciados.
Y los adeptos del lado oscuro en oriente se les llama: Rakshasas; y en español: Hechiceros o Magos negros.
Y también los adeptos pueden interactuar con los espiritistas aunque todavía no hayan fallecido por medio de su doble astral, solo que no lo vuelven visible.
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