La
revista The
Rosicrucian Forum (El Foro Rosacruz) es una revista de la
organización AMORC que está reservada únicamente para los miembros de AMORC,
mientras que su revista paralela The Rosicrucian
Digest (El Compendio Rosacruz) la puede comprar
todo el mundo.
Esta
revista comenzó a publicarse a partir de agosto de 1930 de manera bimestral
hasta 1991, y después se ha estado publicando de manera trimestral hasta el
presente.
Su
editorial se encuentra en la sede principal de AMORC, en San José, California.
Su primer editor fue Spencer Lewis, luego su hijo Ralph Lewis, y desde entonces
se han ido turnando varias personas.
En
esta revista al inicio se les prometió a sus lectores que "encontrarán
esas discusiones, explicaciones, comentarios y anotaciones a nuestro trabajo y
enseñanzas que hasta ahora han sido dadas en conversaciones personales y en clases
privadas por el Imperator".
Y
un recordatorio en ediciones posteriores avisaba que la revista era "una
publicación privada solo para los miembros y que permitir que circulara de otra
manera anularía su propósito y sería una violación de la obligación del miembro".
Sin embargo a pesar de esta advertencia, la revista ha tenido poca restricción.
Hasta
la muerte de Spencer Lewis en 1939, la revista transcribía las conferencias
semanales que Lewis daba a los estudiantes y las respuestas a las preguntas que
estos le hacían, como también sus respuestas a las preguntas de los
corresponsales de todo el país sobre diversos temas.
A
esto Lewis agregó sus cavilaciones sobre asuntos de interés general,
discusiones puntuales de competidores como William Dudley Pelley, R.S. Clymer y
Psychiana, y exposiciones más reflexivas sobre las luchas de los miembros para
contactar con La Catedral del Alma en el plano Cósmico.
Los
cargos de plagio que se le formulan regularmente esforzaron por diferenciar a
los grandes maestros de la Gran Hermandad Blanca con los que Lewis pretendía
estar en contacto de los mencionados por otras instituciones como por ejemplo
la Sociedad Teosófica, y también se transcribieron las comunicaciones regulares
que Lewis pretendía tener con dichos maestros.
Lewis
también se sintió obligado a abordar las preocupaciones de los estudiantes
sobre las enseñanzas actuales de otros acerca de las "enseñanzas sexuales"
y "almas gemelas y afinidades y esas tonterías" ("Es imposible
hacer contacto con lo Cósmico y elevar el cuerpo psíquico o el aura de uno
hasta el sintonización más alta con la conciencia de Dios y los principios de
Cristo si uno está atado a la tierra por deseos sexuales y consideraciones
sexuales"), etc.
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