EL CONDE DE SAINT-GERMAIN DESCRITO POR HELENA BLAVATSKY




En su “Glosario Teosófico”, Blavatsky describió al conde de Saint-Germain de la siguiente manera:


« Referido como un personaje enigmático por los escritores modernos. Federico II rey de Prusia, solía decir de él que era un hombre al que nadie había podido descifrar.

Muchas son sus "biografías" y cada una es más imaginativa que la otra. Algunos lo consideraban como un dios encarnado, mientras que otros como un inteligente judío alsaciano.

Una cosa es segura, el conde de Saint-Germain, cualquiera que haya sido su verdadero patronímico, tenía derecho a su nombre y a título, ya que había comprado una propiedad llamada San Germano en el Tirol italiano, y le pagó al Papa el título.

Era extraordinariamente guapo, y su enorme erudición y capacidad lingüística son innegables ya que hablaba inglés, italiano, francés, español, portugués, alemán, ruso, sueco, danés y muchos idiomas eslavos y orientales, con igual facilidad que si fuera un nativo.

Era extremadamente rico, aunque nunca recibió una moneda de nadie, y de hecho, nunca aceptó un vaso de agua ni partió el pan con nadie, sino que hizo los regalos más extravagantes de joyas excelentes para todos sus amigos, incluso para las familias reales de Europa.

Su dominio de la música fue maravilloso, tocaba todos los instrumentos, aunque el violín era su favorito, el cual dominaba con inmensa maestría, al grado que un octogenario belga en 1835 se exclamó "Saint-Germain rivalizó con el propio Paganini" después de escuchar al maestro genovés. Y un barón lituano también exclamó "Es Saint-Germain resucitado quien toca el violín en el cuerpo de un esqueleto italiano [Paganini]", después de haber escuchado a ambos.


Saint-Germain nunca reclamó poderes espirituales, pero demostró tener derecho a tal reclamo. Solía ​​pasar en un trance muerto de treinta y siete a cuarenta y nueve horas sin despertar, y luego supo todo lo que tenía que saber, y demostró el hecho profetizando el futuro y nunca cometiendo un error.

Es él quien profetizó ante los reyes Luis XV y Luis XVI y la desafortunada María Antonieta. Muchos fueron los testigos que aún vivían en el primer cuarto de este siglo y que dieron testimonio de su maravillosa memoria

Él podía leer un periódico por la mañana, y aunque apenas lo miraba, podía repetir su contenido sin perder una palabra días después. Y también podía escribir con las dos manos a la vez, la mano derecha escribiendo una poesía, y la izquierda un papel diplomático de la mayor importancia.

Y leyó cartas selladas sin tocarlas, mientras aún estaba en la mano de quienes se las trajeron.

El era el mejor adepto en la transmutación de metales, la fabricación de oro y los diamantes más maravillosos. Ese era un arte, dijo, que había aprendido de ciertos brahmanes de la India, que le enseñaron la cristalización artificial ("aceleración") del carbono puro.

Como dice nuestro Hermano Kenneth Mackenzie:

 "En 1780, cuando el conde de Saint-Germain visitó al Embajador de Francia en La Haya, él rompió en pedazos con un martillo un magnífico diamante de su propia fabricación, cuya contraparte, también había sido fabricada por él mismo, y que justo antes había vendido a un joyero por 5500 Luis de oro."

Él fue el amigo y confidente del conde Orloff en 1772 en Viena, a quien había ayudado y salvado en San Petersburgo en 1762, cuando estaba preocupado por las famosas conspiraciones políticas de ese tiempo. Y también se hizo íntimo con Federico el Grande de Prusia. Y como es natural, también tenía muchos enemigos.

Y siendo un personaje tan enigmático, generó muchas historias fantasiosas sobre su persona, y es por eso que no hay que tomar con seriedad todos los chismes que se inventaron sobre él y que ahora se atribuyen a sus propias confesiones, como por ejemplo: que tenía más de quinientos años, y también que reclamó intimidad personal con Jesús y sus doce apóstoles, y también que había reprendido al San Pedro por su mal genio.

Y también se dijo de él que "había nacido en Caldea y profesaba poseer los secretos de los magos y los sabios egipcios", y en esto puede haber dicho la verdad sin hacer ninguna afirmación milagrosa, debido a que hay Iniciados (y no necesariamente los más elevados), que están en condiciones de recordar más de una de sus vidas pasadas.

Pero tenemos buenas razones para saber que Saint-Germain nunca podría haber reclamado "intimidad personal con el Salvador".

Sea como sea, el conde de Saint-Germain fue sin duda el mayor adepto oriental que Europa ha visto en los últimos siglos. Pero Europa no lo conocía. Tal vez algunos lo reconozcan en la próxima época de Terreur que afectará a toda Europa cuando esta llegue, y no solo a un solo país [como sucedió durante la revolución francesa].



Mesmer también fue un miembro iniciado de las Hermandades de los Fratres Lucis (los hermanos de luz) y de Lukshoor (o Luxor), o la rama egipcia de este último. Y fue el Concilio de Luxor quien lo eligió —según las órdenes de la “Gran Hermandad”— para actuar en el siglo XVIII, como su habitual pionero que envían en el último cuarto de cada siglo para iluminar un poco más al mundo sobre el conocimiento oculto.

Fue Saint-Germain quien supervisó el desarrollo de los eventos en este caso; y posteriormente Cagliostro recibió el encargo de ayudar, pero habiendo cometido una serie de errores, más o menos fatales, fue llamado.

De estos tres hombres que en su tiempo fueron considerados charlatanes, Mesmer ya ha sido reivindicado, y la reivindicación de los otros dos se hará en el próximo siglo. »
(p.214.308-309)





Y a parte de ese texto, Blavatsky en otras ocasiones en sus escritos volvió a mencionar al conde de Saint-Germain aportando más detalles sobre ese misterioso personaje:


El conde de Saint-Germain no es una leyenda

« El "Conde de Saint-Germain" es, hasta este momento, un misterio viviente, pero las innumerables autoridades que tenemos en la literatura, así como en la tradición oral (que a veces es la más confiable) sobre este maravilloso personaje que se ha conocido y reconocido en diferentes siglos, no es un mito. »
(CW 1, p.109)



Fue un humano muy evolucionado

« La evolución tiene sus etapas y por lo tanto no se puede esperar que los humanos actuales ya sientan la naturaleza y la esencia divina. Algo que en cambio será plenamente percibido en un futuro todavía muy lejano.

Las excepciones a esta regla se han encontrado hasta ahora solo en algunos casos raros de evoluciones individuales anormalmente precoces, en donde algunos individuos, ya sea por don natural o por el entrenamiento temprano y métodos especiales, ellos ya han alcanzando el nivel de desarrollo que tendrán los humanos en la quinta ronda (actualmente estamos en la cuarta ronda). Y uno de estos hombres fue el conde Saint-Germain. »
(CW 5, p.144-145)




Y es por esa razón que él fue contactado por
los Maestros transhimaláyicos

« Durante siglos, la selección de los discípulos por parte de los Mahatmas del Himalaya se ha efectuado en los templos y en una menor proporción entre los habitantes del Tíbet en donde se encontraban una considerable cantidad de místicos naturales.

Las únicas excepciones han sido en los casos de hombres occidentales como Fludd, Thomas Vaughan, Paracelso, Pico della Mirandola, el Conde de Saint-Germain, etc., cuya gran afinidad personal a esta ciencia celestial, obligó a los Adeptos distantes a establecer relaciones con ellos, y les permitieron obtener una proporción del conocimiento oculto que los Maestros resguardan en la medida en que les fuese posible en su entorno social. »
(CW 4, p.607)




Fue instruido por grandes adeptos

« El conde de Saint-Germain fue pupilo de hierofantes hindús y egipcios. »
(CW 3, p.128)




Y desafortunadamente fue, y ha seguido siendo, tratado
como un embustero

« A Mesmer se lo clasifica hasta nuestros días (en las enciclopedias) junto con Cagliostro y Saint-Germain, como charlatanes e impostores. »
(DS II, p.156)

« A Saint-Germain lo llaman el "príncipe de los impostores" y a Cagliostro, un charlatán. Pero, ¿quién ha probado eso alguna vez? »
(CW 4, p.339)

« Y así se ha comportado el mundo ignorante hacia todo aquellos que se han esforzado, como Saint-Germain, y después de una larga reclusión dedicada al estudio, con historias de sabiduría esotérica acumulada, y con la esperanza de mejorar el mundo y de hacerlo mas sabio y feliz. »
(CW 3, p.128)




Y Blavatsky sospecha que conde de Saint-Germain desempeñó un papel muy importante en los acontecimientos que desembocaron en la revolución francesa, y lo que dijo al respecto lo detallo en este otro capítulo (ver link).


Y Blavatsky también dio algunos detalles sobre los manuscritos del conde de Saint-Germain, los cuales detallo en este otro capítulo (ver link).



Y finalmente Blavatsky terminó diciendo:


« La verdadera magia existe y ha existido desde tiempos inmemorables. Iniciado en la historia con los misterios samatracianos, luego siguió su curso ininterrumpidamente, y terminó por un tiempo con los rituales y ceremonias teúrgicas de la Grecia cristianizada; luego reapareció por un tiempo nuevamente con la escuela neoplatónica, alejandrina y, pasando por iniciación a diversos estudiantes y filósofos solitarios, cruzó con seguridad las edades medievales. Y a pesar de las furiosas persecuciones de la Iglesia, retomó su fama en manos de Adeptos como Paracelso y varios otros, y finalmente murió en Europa con el fallecimiento del conde de Saint-Germain y Cagliostro. »
(CW 1, p.141)




1 comentario: