Francisco
Brualla (1879-1951) me da la impresión que fue español, trabajó para Alice Bailey y difundió su organización en los países de habla hispana.
Traductor
Colaboró
en la traducción de los libros de Alice Bailey al español.
Su trabajo
en España
Alice
Bailey en su autobiografía señaló que Francisco Brualla fue su lugarteniente
para el trabajo en España:
“La tarea realizada en España, bajo la
supervisión de Francisco Brualla, marchaba muy bien, contando ya con varios
cientos de estudiantes españoles, en su mayoría hombres.” (Capítulo 6)
Su trabajo
en Latinoamérica
Después
de haber estudiado en la Escuela Arcana de Nueva York, Francisco Brualla supuestamente por sugerencia
del Maestro Tibetano se dirigió a Sudamérica para difundir las enseñanzas.
En
1937 fundó en la ciudad de Buenos Aires, Argentina, el Centro de Estudios
Sophia.
En
1938 editó la revista Sophia.
Casi
simultáneamente publicó en forma paralela pero exclusivamente para los
estudiantes, un boletín mensual que denominó “El Servidor”.
Después
que Francisco Brualla falleció en 1951, su trabajo fue retomado en el año 1957 por su hijo
primogénito Jorge y su esposa Rosa Ponte al crear la Fundación Lucis que obtuvo
la personería jurídica en 1960, comenzando a funcionar haciendo uso de la
anuencia acordada por Alice Bailey antes de su deceso en el año 1949, en la sede
de Argentina en Buenos Aires, la Escuela Arcana y sus actividades de servicio,
Buena Voluntad Mundial y Triángulos.
Ante
circunstancias difíciles para la Institución, el Consejo de Administración que
operaba en ese momento, optó por cambiar el nombre de Escuela Arcana, por el de
Sophia E.E.E. para la proyección de la enseñanza en Latinoamérica.
En
1993 se reavivó la revista “El Servidor”.
Discípulo
Francisco
Brualla fue conocido en el Discipulado de la Nueva Era como "I.A.P",
siglas de “Inclusiveness, Assurance y Power in Service” que traducidas al español
significan: Inclusión, Garantía y
Poder en el Servicio.
Francisco
Brualla afirmó ser discípulo del Maestro Tibetano, pero eso es una mentira
porque en el blog les he demostrado que el Maestro Tibetano en realidad no
existió y fue una falsedad que inventó Alice Bailey para impresionar a la
gente.
Y
esto me indica que Francisco Brualla fue un charlatán, porque se le puede
perdonar que él haya creído en las falsedades que inventó Alice Bailey, pero
que él también se pusiera a participar en esas falsedades, eso ya indica que él
también fue muy embaucador.
Puedo entender que cuando H. P. B. escribió Isis sin Velo y La Doctrina Secreta, entre otros de sus trabajos, encontrara oposición y descrédito en su época, especialmente por lo que implicaban las enseñanzas que dió al público. Pero honestamente, que ese descrédito y difamación continúen a principios del siglo XXI, con quienes fueron responsables voluntarios de la difusión de la segunda fase de la enseñanza dada inicialmente por medio de ella (me refiero a Blavatsky), por lo menos es poco serio y habla de un total desconocimiento del karma que algo así genera. Ignoro los motivos que llevaron al redactor de este blog a tales apreciaciones, sin embargo, lo que sí deja en evidencia es su escaso espíritu de investigación y amor por la verdad por cualquiera sea la vía a través de la cual ésta se exprese. No es atacando al mensajero que se mata la verdad. Ésta siempre prevalece.
ResponderBorrarHe Investigado mucho a Alice Bailey y puedo asegurar que si fue muy embustera:
Borrarhttp://esoterismo-guia.blogspot.com/2017/02/alice-bailey-critica-embustera-mentirosa.html