EL FENÓMENO DE LA TELEPORTACIÓN ANALIZADO POR FRANZ HARTMANN

Como nuestro objetivo es estudiar las leyes aún inexplicadas de la naturaleza, por consiguiente los fenómenos llamados “paranormales” forman parte de nuestro análisis, y de estos, los más asombrosos y desconcertantes son aquellos en donde personas en sus cuerpos naturales han desaparecido repentinamente de un lugar y en un espacio de tiempo increíblemente corto, para reaparecer en otro lugar distante al que no pudieron haber llegado por medios ordinarios.

Y por lo que sabemos, este cambio de localidad generalmente no se realiza por sus propios esfuerzos, sino con la ayuda de poderes superiores desconocidos.

Hay numerosos casos mencionados en la historia, aunque a menudo estos son tratados como fábulas por aquellos que no saben nada de las leyes de la metafísica. Por ejemplo en las leyendas de los santos encontramos relatos de tales sucesos, como el de San Franciscus Xaverius quien fue llevado físicamente de un barco en alta mar a un barco en peligro, el cual salvó por medio de sus instrucciones.

Otro caso conocido es el de Apolonio de Tiana quien desapareció repentinamente de la presencia del Emperador Domiciano en Roma e inmediatamente después apareció físicamente entre sus amigos en Puteoli. Y también hay casos similares registrados en la Biblia (ver Hechos viii. 39, 40).

Y por supuesto, hemos sido educados para creer que todos estos casos pertenecen a la buhardilla donde se guardan las supersticiones explotadas de los tiempos antiguos y que solo los inocentes ingenuos creerían en la actualidad en esas tonterías.

Pero tales eventos no son solamente cosas del pasado, sino que en el presente ocurren con mayor frecuencia de lo que estamos dispuestos a creer, y parece que el número de millas de distancia que se recorren es de poca importancia.

He oído hablar de un caso en el que un hombre fue transportado de Inglaterra a Australia, y tengo amigos en Florencia que afirman haber sido visitados repetidamente de esta manera por una dama hindú que vive en la India.

Mientras escribo estas líneas, los diarios y las revistas mensuales discuten el caso de los dos muchachos Alfredo y Paolo Pansini de Bari, quienes fueron retirados repetidamente de alguna manera misteriosa y se encontraron quince minutos después, en algún lugar, a cuarenta y cinco kilómetros de distancia.

Tales casos cada vez que se hacen públicos crean cierto entusiasmo, pero pronto se olvidan porque no existe una explicación razonable para ellos conocida por las autoridades científicas.

Y para el beneficio de aquellos que no han leído el relato de estos hechos en los periódicos italianos, a continuación les pongo el siguiente extracto condensado traducido del Giornale d'Italia:

« Bari, 15 de noviembre de 1905.

UNA CASA MISTERIOSA

En 1901, el señor Mauro Pansini, constructor y arquitecto se fue con su familia a vivir en una casa antigua no lejos del Palacio Municipal. Y los primeros días pasaron tranquilamente pero luego la familia se sintió atemorizada por ruidos y fenómenos extraños. Las pinturas caían de los clavos. Platos, vasos y botellas era proyectados contra las paredes y se rompían en pedazos, y los muebles se movían sin que nadie los tocara.

La familia Pansini llegó a la conclusión de que el lugar estaba habitado por espíritus malignos, y es por ello que llamaron al sacerdote, el cual efectuó las ceremonias prescritas para exorcizar a los demonios, pero incluso esos rituales y el agua bendita no sirvieron de nada. Las mesas siguieron siendo revolcadas y las sillas rotas como sucedía antes.

Una tarde, el pequeño Alfredo Paoli de siete años de edad, mientras el resto de la familia estaba presente, cayó en un estado de trance y comenzó a hablar con una voz que no era la suya, diciendo que había sido enviado por Dios con el propósito de ahuyentar a los espíritus malignos, y por un momento pareció que ese fuera el caso ya que una noche el niño mientras que se encontraba en ese estado de trance, describió una batalla que tuvo lugar entre los fantasmas buenos y malos. Luego el niño comenzó a caminar mecánicamente y respondió preguntas sobre cosas que no podía saber.

Se llevaron al niño a la iglesia, y allí se volvió tan insensible como un cadáver, pero se despertó cuando el obispo lo llamó por su nombre. Permaneció con el obispo durante varios días y luego regresó con sus padres. Entonces se produjeron fenómenos aún más curiosos.

Un día el muchacho Alfredo, con su hermano Paolo de ocho años, estaban en Ruvo a las 9 de la mañana, y a las 9:30 se encontraron en el convento de Capucine en Malfatti (a unos treinta kilómetros de distancia).

Otro día toda la familia estaba sentada a la mesa del desayuno a las 12:30 pm, y como no había vino, el pequeño Paolo fue enviado a buscarlo, pero no regresó, y media hora después, Alfredo desapareció repentinamente, y a la 1 pm ambos niños fueron encontrados en un barco de pesca en el mar, no lejos del puerto de Barlatta.

Comenzaron a llorar, y el pescador asustado por su repentina aparición, los llevó a tierra donde por suerte encontraron a un cochero que los conocía y este aceptó llevarlos a su casa donde tras un recorrido de una hora media llegaron a las 3:30.

Y de manera parecida fueron llevados en otras ocasiones a Bisceglie, Giovinazzi, Mariotti y Ferlizzi (cuya distancia de Ruvo se pueden ver en el mapa). »

El doctor Raffaelo Estugno y otros científicos investigaron este caso, pero no obtuvieron ningún resultado y evitaron dar la única explicación razonable que se presenta para un ocultista.

Y esto no debe de sorprender si tomamos en consideración la tremenda indignación que ha surgido entre los científicos en ese ámbito, incluso contra colegas suyos como fue el caso del famoso Profesor Richet a quien se le fueron encima por haber publicado los relatos de sus experimentos en Villa Carmen, y haber afirmado públicamente haber visto y tocado a un fantasma materializado.

Pero a parte de los casos anteriores señalados, dos casos similares de teleportación han llegado a mi conocimiento personal. Uno sucedió en el barrio donde yo vivía, el otro entre mis amigos personales.

EL PRIMER CASO

Este caso sucedió en Radein en el Tirol, y el cual también fue ampliamente discutido por la prensa y ridiculizado como el que les mencioné arriba, y a continuación se los resumo:

Hay una pequeña choza en Radein en la que vivía una niña huérfana llamada Angelica Darocca junto con sus tres hermanos. Solo había una habitación que servía de salón y dormitorio para la niña, mientras que sus tres hermanos dormían en la buhardilla bajo el techo.

Esta niña tenía los “estigmas” en sus manos y pies, de los cuales en ciertos momentos se originaba un sudor sangriento, y se dice que durante siete años no había ni comido ni bebido. Sin embargo ella gozaba de buena salud, y esto puede explicarse por el hecho de que ella parece haber inconscientemente actuado como un vampiro energético, obteniendo su vitalidad y fuerza de los visitantes y los niños que fueron traídos por sus padres para ser bendecidos por ella, ya que ella era considerada una santa.

Ella solía ​​abrazar y acariciar a estos niños, lo cual puede haber sido bueno para ella, pero probablemente malo para ellos. Y como se puede suponer, numerosos visitantes iban a visitarla aunque el lugar estaba situado en una colina alta y empinada y de difícil acceso.

Los médicos no sabían qué hacer con este caso y el párroco estaba igualmente perdido. Sin embargo el obispo hizo lo mejor que pudo al prohibir que las personas visitaran la casa.

La niña deseaba abandonar el lugar debido a que sentía que era una carga para sus hermanos, y el obispo de Trient finalmente le consiguió un lugar en un convento en Meran.

El 17 de noviembre, dos monjas de ese convento fueron a tomarla a cargo. Hablaron y oraron con ella, y mientras hablaban, la niña cayó en trance. Cuando las monjas volvieron a llamarla a la mañana siguiente, encontraron la cama vacía; la niña había desaparecido y sus hermanos les informaron que no era la primera vez que se la habían llevado misteriosamente. Llamaron al párroco, registraron la casa, pero Angélica no estaba en ninguna parte.

El 25 de noviembre, los hermanos y algunos de los vecinos celebraron su oración habitual en la sala, cuando de repente la niña estaba en la misma cama de nuevo.

Ella dijo que un poder superior se la había llevado, sin ninguna voluntad de su parte, y ella tampoco sabía dónde había estado; pero uno o dos días después, una señora de la vecindad recibió una carta de una amiga suya que vivía en Roma, y ​​en esa carta su amiga le decía que ella y su hermana habían disfrutado de la visita de una amable chica tirolesa llamada Angelica Darocca, quien se había quedado con ellas y las acompañó a la iglesia de San Pedro, y que la niña había desaparecido sin ni siquiera tomar un trago de agua durante su estancia con ellas.

La niña fue llevada después a Roveredo donde exhibió todos los signos de obsesión. En el asilo donde se hospedaba, se oían voces, gritos y silbidos; y también ruidos como los golpes de un martillo sobre un yunque, y en otras ocasiones ruidos de aserrado, limadura de hierro, raspados de madera, gemidos y charlas blasfemas, como si estuvieran trabajando una docena de carpinteros.

Los disturbios se volvieron tan molestos que las monjas se vieron obligadas a despedirla. Entonces una señora de Trient la tomó a su cargo, pero entonces la niña se puso tan enferma que parecía estar muriendo, y por consejo de su médico se le administró el Sacramento de la “extrema función”, después de lo cual ella se recuperó por completo y cesaron los disturbios.

Y los estados por lo que pasaba esa niña pueden atribuirse a estados de “histeria” e “hipnotismo”, pero eso no explica cómo la histeria y el hipnotismo pueden llevar a una persona a 660 kilómetros de distancia.

EL SEGUNDO CASO

El segundo caso me fue contado por algunos de mis amigos y conocidos especiales, y como no se me permite dar sus nombres, los llamaré M. Ellos son una familia bien conocida en Florencia que ocupan lugares prominentes en la sociedad.

No son espiritistas del tipo habitual, sino que parecen ocultistas capaces de trabajar conscientemente en el plano astral. Son muy inteligentes y bien educados, y es notable lo bien que parecen conocer la filosofía hindú (aunque nunca leen ningún libro que trate sobre ese tema) sino que reciben su enseñanza de otra manera más espiritual.

Afirman que cada evento que se manifiesta en el mundo se debe por causas en el astral, y que por consiguiente ciertos desastres, como los terremotos, pueden prevenirse ocasionalmente actuando sobre sus causas en el ámbito espiritual.

Y para este propósito tienen un círculo de amigos que se reúnen a veces en su casa y los ayudan mental y espiritualmente en su trabajo.

Uno de los miembros de ese círculo es mi amigo, el Dr. Z, un hombre joven, fuerte y sano, pero que tiene una característica mediumnística peculiar porque además de ser suficientemente clarividente para ver los órganos internos y sus estados de enfermedad en sus pacientes, él ha viajado repetidamente de manera inconsciente hasta lugares distantes e incluso a través de puertas cerradas y paredes sólidas.

Así una vez se lo llevaron de Livorno a Florencia (lo que es una distancia de 100 kilómetros) en unos 15 minutos. Y a continuación daré su propia declaración, ya que él la escribió a petición mía, y lo que dice ha sido corroborado por nuestros amigos:

« En una ocasión yo tuve que ir a Livorno por unos días, pero antes de salir de Florencia fui a visitar a nuestros amigos con quienes a menudo estoy en comunión espiritual, y ya había pasado dos días en Livorno cuando me sucedió algo muy extraño.

Fue después de las nueve de la noche y después de haber ido a cenar, cuando sentí claramente un mensaje oculto proveniente de nuestros amigos en Florencia, pidiéndome que viniera lo antes posible porque necesitaban mi presencia.

Instintivamente me quité la capa y sin siquiera cambiarme la chaqueta monté mi bicicleta y me dirigí a la estación de trenes con la intención de tomar el primer tren que salía para Florencia, pero a medida que avanzaba sentí un impulso irresistible de tomar el camino a la derecha que lleva a Pisa, y al mismo tiempo mi bicicleta continuó a tal velocidad que me mareé y mis piernas ya no pudieron seguir el rápido movimiento de los pedales, así que tuve que soltarlos.

La velocidad creció hasta tal punto que me pareció que estaba volando sin tocar el suelo, y por un momento vi la ciudad de Pisa y sus luces, y luego la respiración me comenzó a fallar debido a la presión del aire causada por la rapidez del movimiento y perdí la conciencia.

Cuando recuperé mis sentidos, me encontré en el salón de nuestros amigos en Florencia quienes expresaron su sorpresa al ver que había llegado tan rápido, ya que no había trenes que provinieran de Livorno a esa hora. Miré mi reloj. Eran las nueve y media de la noche. Por lo tanto había recorrido los 100 kilómetros que separan Livorno a Florencia en aproximadamente quince minutos.

Le pregunté a nuestros amigos cómo entré en la casa ya que las puertas siempre estaban cerradas a esa hora, y me dijeron que "Tom" (un cierto “espíritu” que se manifestaba con frecuencia en su casa y solía dar instrucciones) les dijo de ir a una cierta habitación llamada “la cámara mágica” para hacer ciertos signos y pronunciar ciertas palabras.

Hicieron esto e inmediatamente comenzó a sonar un ruido como si una bomba hubiera explotado en la ventana hacia la calle, y oyeron un golpe como si un cuerpo humano hubiera caído sobre la silla. Entonces encendieron la luz y descubrieron que un cuerpo humano que era yo mismo y parecía que dormía.

Y mientras esta conversación tuvo lugar, el timbre de la puerta sonó violentamente. Era el vigilante nocturno quien afirmaba haber visto a alguien, presumiblemente un ladrón entrar a la casa por la ventana. Evidentemente, fui yo a quien él vio. Y nuestros amigos le dijeron que todo estaba bien, por lo que el vigilante se retiró aparentemente no muy satisfecho por esa respuesta.

Y mientras nuestros amigos fueron a abrir la puerta para hablar con el vigilante, ellos encontraron una bicicleta en el vestíbulo. Por lo tanto, parece que mi bicicleta fue llevada a través de la puerta cerrada y yo a través de la ventana, que también estaba cerrada.

Esto sucedió en marzo de 1902. Tenía plena conciencia cuando salí de Livorno hasta que pasé por Pisa en donde perdí la consciencia y la recuperé en la casa de nuestros amigos en Florencia. 

Al día siguiente regresé a Livorno en tren. »

Así, el Dr. Z recorrió toda la distancia de 100 kilómetros en aproximadamente 15 minutos, mientras que el tren rápido tarda cuatro horas en ir de Livorno a Florencia !!!

Y en otra ocasión, el mismo caballero sentado en el salón de nuestros amigos en Florencia, cayó en trance y mientras estaba en esa condición, fue llevado a través de un techo sólido hasta la habitación de arriba.

Yo mismo he visto repetidamente fantasmas materializados que aparentemente eran perfectamente sólidos, y pasan de este modo a través de pisos y paredes; pero el Dr. Z no era un fantasma.

Hubo un tiempo en que la familia de Florencia encontró al Dr. Z en el sofá de su salón, y después de haber hecho un viaje tan aéreo, en una condición semiconsciente y sin materializarse por completo. Levantaron sus miembros, que parecían tan ligeros como una pluma.

Les habló en un susurro, y pidió que lo magnetizaran, y así lo hicieron. Y después de unos minutos, su fuerza y solidez regresaron, y cuando saltó y golpeó con sus puños sobre la mesa, exclamó con su voz habitual:

    -   "¡Ahora soy material otra vez!"

Y puedo asegurar que estos hechos mencionados son ciertos aunque por supuesto no tengo medios para convencer a ningún escéptico. No pido sin embargo ninguna creencia ciega por parte de nadie, y soy totalmente indiferente con respecto a la opinión de quienes niegan la posibilidad de tales hechos. Y a falta de una explicación satisfactoria, quizás se nos permita especular un poco sobre el tema.

(Observación: yo en lo personal ni los acepto ni los rechazo esos casos, sino que considero esos fenómenos como una posibilidad real [aunque siempre está la sombra de que sean fraudulentos] pero de los cuales por el momento no puedo indagar más profundamente por falta de un mayor conocimiento e información al respecto,)

POSIBLE EXPLICACIÓN

Está claro que estas personas no pudieron tomar tales vuelos aéreos por su propia voluntad. Los niños en Bari fueron llevados contra su propio deseo por algo que se llamó a sí mismo "Cavaliere Fernando". En el caso del Dr. Z, una inteligencia llamada "Tom" parece haber tenido algo que ver con lo sucedido, y Angélica Darocca afirmó que fue llevada por un poder superior.

Y estos poderes, espíritus, demonios, o como sea que los llamemos, también manifestaron una gran fuerza para producir fenómenos físicos, ruidos como el rodar de pesadas balas de cañón sobre el suelo de madera, los relámpagos dentro de la habitación, la lluvia y el lanzamiento de arena. Y estos fenómenos no eran deseados sino que por el contrario a menudo eran la causa de una gran molestia.

Estos seres no podían ser espíritus humanos incorpóreos porque no es razonable suponer que el alma humana (o la forma astral) deban al morir adquirir tales poderes, y las personas vivas que abandonan temporalmente sus formas físicas no los posean.

En el Oriente a tales espíritus se les llaman “djinns”; los místicos de la Edad Media los llamaban “demonios”, y los esoteristas modernos les han dado el nombre de “elementales”, y como estos espíritus actúan de manera inteligente, ellos deben de poseer cierta cantidad de inteligencia propia.

(Nota: estas entidades también son mencionadas en el chamanismo y así por ejemplo el Nahual Juan Matus los nombraba sus “aliados” y decía que algunos de ellos le aportaban conocimiento mientras que otros le aportaban poder, pero también añadió que es bastante difícil controlarlos y que su compañía puede volverse peligrosa e incluso llevar a la muerte.)

Además ha habido y todavía hay muchas personas con posesión de facultades clarividentes que pueden ver y describir a estas entidades.

Así por ejemplo, el Dr. J. Pordage cuyos sentidos internos se abrieron en su cuadragésimo cuarto año, describe las apariciones que vio en la noche del 3 de enero de 1651. Uno apareció como un hombre quien sabía que estaba muerto; otro parecía ser un gigante, otro como un horrible dragón, y también fueron vistos por su esposa.

Entonces comenzó una serie de los fenómenos desagradables, él y su esposa y muchos vecinos y amigos fueron atormentados con vistas y ruidos horribles, con sofocantes heces, sabores asquerosos y sensaciones dolorosas.

Las apariciones se volvieron visibles para todos y fueron las de formas semi-humanas y semi-animales. Animales feroces y bestias que cambiaban sus formas. Aparecieron dibujos de varios tipos en los paneles de las ventanas y en las tejas del techo y en las estufas, y estas imágenes no se podían lavar, por lo que se necesitaban un martillo y un cincel para quitarlas.

Estos fenómenos duraron meses y causando muchos problemas, pero tal vez estos fenómenos hubieran sido bienvenidos para un espiritista moderno.

Tengo un amigo en Hamburgo que mediante el uso de masilla esparcida en tablas, recibe las impresiones de manos, caras y formas de monstruos invisibles, serpientes, etc. Y al verter yeso sobre los moldes, obtiene una colección muy extraña de figuras.

Los místicos dicen que estos demonios tienen el poder de mezclar su influencia mágica con los elementos de este mundo visible, y por lo tanto son capaces de producir los fenómenos más estupendos, como por ejemplo: ellos pueden tomar la forma de algún difunto y personificarlo perfectamente; y también pueden obsesionar o influir en personas susceptibles (médiums) como el deseo de comunicarse con ellos y pueden hacer que dichas personas realicen cosas aparentemente milagrosas, como lo hacen los faquires y los hechiceros.

Su influencia penetra hasta la médula de sus víctimas y por consiguiente pueden causar enfermedades y la muerte. Las brujas y los brujos son los instrumentos preferidos de estas entidades, los cuales seguido actúan sin saber cómo, ya que incluso el mago más sabio no sabe por sí mismo cuál es su poder mágico y cómo produce sus hazañas.

Y en lo personal me parece que estas explicaciones dadas por los sabios antiguos son mucho más razonables que las que dan algunos de nuestros científicos modernos para explicar estos fenómenos, ya que ellos atribuyen estos fenómenos al hipnotismo, la fuerza psíquica y demás.

¿Pero cómo es posible que un ser organizado pueda disolverse para atravesar paredes sólidas y volver a materializarse de nuevo?

Parece que para resolver esta pregunta debemos entender el misterio de la materia y la fuerza. Entonces quizás deberíamos encontrar que somos un organismo de fuerzas compuesto por vibraciones del éter en una escala tan densa como para aparecer como lo que llamamos “materia”, y que la materia y la fuerza son esencialmente una y misma cosa.

Sabemos que cuanto lo más alto puede controlar lo más bajo, lo activo es lo pasivo. La mente puede controlar los movimientos del cuerpo y el espíritu las emociones de la mente.

Y si nuestra espiritualidad se desarrolló plenamente, no hay razón por la cual no podamos por el poder de nuestra voluntad espiritual, cambiar las vibraciones de las que está compuesto nuestro cuerpo material y enviarlas como “fuerza organizada” guiada por nuestro pensamiento a cualquier parte del mundo.

Sabemos que la influencia de la mente cambia gradualmente el cuerpo físico, y quizás si nuestra fuerza mental fuera más fuerte, grandes cambios en nuestra constitución física podrían producirse a voluntad, y ciertas cosas que ahora se consideran imposibles serían perfectamente naturales.

Hay una gran verdad que siempre ha sido conocida por los sabios y ahora comienza a ser adoptada por la ciencia popular, a saber que la mente no es un producto de la materia, sino que es un producto del espíritu.

Las imágenes formadas por el pensamiento se han vuelto suficientemente naturales por el poder de la concentración mental y la voluntad, y la filosofía espiritual enseña que el mundo entero, con todas sus formas aparentemente sólidas, sus montañas y rocas es un producto de la voluntad y la ideación del Creador.

Todas las cosas existen dentro de la Mente Universal antes de que entren en lo que llamamos la “existencia objetiva” y por el poder de esa Fuerza divina que es la Vida y el fundamento de todo, y la forma en que esto se logra, nosotros podemos llegar a conocerlo, si nos examinamos a nosotros mismos; porque encontramos por nuestra propia introspección que de una idea brota un deseo, y lo que hace que la idea crezca en una forma de pensamiento es por el poder de la voluntad hasta que finalmente esta energía se manifiesta como un acto.

Ahora bien, se sabe que el hombre es una imagen del gran cosmos de la naturaleza universal, y como dentro de nosotros podemos encontrar innumerables deseos y pensamientos, cada uno de los cuales tiene su propia vida, su propio estado de conciencia y su propio poder para crecer y desarrollar.

Así también en la gran Alma del mundo puede haber innumerables habitantes de tipo similar, siendo invisibles a nuestros ojos, creaciones de pensamientos y deseos, personificaciones de pasiones e instintos, dotados de voluntad e inteligencia, impalpables a nuestros sentidos, pero sin embargo poderosos para realizar, bajo ciertas condiciones en nuestro mundo físico, todos esos fenómenos de los que los místicos hablan como "obras de los espíritus", y que en la actualidad son uno de los misterios aún sin resolver de la ciencia académica.

(The Occult Review, julio de 1906, vol. 4, p.17-25, y el texto original en inglés lo pueden leer aquí.)