Desde tiempos
muy antiguos los habitantes de la India han creído en la existencia de humanos
muy avanzados que tienen grandes poderes y conocimientos. Y en este capítulo
les voy a ir poniendo la documentación que vaya encontrando al respecto.
Por ejemplo,
cuando el señor Richard Hodgson publicó su nefasto informe donde acusó a
Blavatsky de haber inventado la existencia de los maestros transhimaláyicos, muchos
indios afirmaron que dichos maestros si existían.
La
hermana de Blavatsky, Vera Petrovna Zhelikhovsky, sobre este asunto escribió lo
siguiente:
« Tan pronto como se supo que una de las acusaciones más
necias contra Madame Blavatsky era que los Mahatmas no existían y que sólo eran
una creación suya inventada para supuestamente engañar a los crédulos, que cientos
de cartas llegaron de todas las regiones de la India, suscritas por personas
que aseguraban haber tenido conocimiento de estos humanos increíbles antes de
haber oído hablar cosa alguna sobre la Teosofía.
Finalmente vino una carta de
Negapatam, la morada de los “pandits”
(los sabios), con las firmas de setenta y siete de ellos, afirmando
enfáticamente la existencia de esos seres superiores, demasiado bien conocidos
en la historia de las naciones arias, para que sus descendientes pudiesen dudar
de su existencia. (Boston Courrier, julio de 1886). »
(Un esbozo biográfico
de Helena Petrovna Blavatsky)
La
Sra. Zhelikhovsky hace referencia a la carta que un
numeroso grupo de indios de la localidad de Nagapattinam (que en ese entonces
se llamaba Negapatam) y que está ubicada en el sur de la India, envió el
siguiente comunicado, el cual lo publicó el periódico Boston Courier:
« Ya se ha demostrado en un panfleto
publicado por el Sr. Sinnett, sobre cuán débil base descansaba la evidencia del
informe, y es de interés a este respecto leer la siguiente protesta que ha sido
enviada desde Negapatam firmada por casi setenta personas de prestigio, ninguna
de las cuales está relacionada de ninguna manera con la Sociedad Teosófica:
“Nosotros, los abajo firmantes, estamos muy
sorprendidos de leer el informe de la Sociedad para la Investigación Psíquica
de la Teosofía, porque la existencia de los Mahatmas o Sadhus no fue inventada
por Madame Blavatsky ni por ningún otro individuo. Nuestros antepasados, que
vivieron y se fueron mucho antes del nacimiento de Madame Blavatsky y los
Coulomb, creían plenamente en la existencia de los Mahatmas y sus poderes
psíquicos, e incluso tuvieron entrevistas personales con ellos. Hay personas en
la India, incluso en la actualidad, que no tienen conexión con la Sociedad
Teosófica y, sin embargo, tienen entrevistas con tales Seres Superiores.
Hay muchas razones para probar estos hechos
bien establecidos, pero no tenemos tiempo y sería inútil entrar en detalles.
Que el Sr. Hodgson y el Comité, si son serios, hagan investigaciones profundas
sobre el asunto y descubran que sus conclusiones no solo fueron apresuradas
sino también completamente infundadas. El informe del Sr. Hodgson y la
conclusión del Comité sobre el mismo no pueden afectar en lo más mínimo nuestra
creencia en la existencia de los Mahatmas, sino que solo traicionarán su
ignorancia más grosera de la historia oculta de los hindúes.”
La verdad es
que el Sr. Hodgson, enviado por la sociedad de Londres a la India para
investigar a Madame Blavatsky, estaba tan completamente incapacitado para el
trabajo que se le había confiado que fue víctima de los errores más atroces.
Estableció,
para crédito de los poderes inventivos de Madame Blavatsky, teorías y
afirmaciones que pueden encontrarse incluso en muchas obras inglesas sobre las
religiones indias publicadas en Londres hace un siglo o más; y la sociedad
difícilmente puede estar dispuesta a atribuir a Madame un período de vida tan
prolongado como para suponer que ella instigó la escritura de libros tan
antiguos.
El informe
probó demasiado y, a primera vista, es absurdo. La cuestión, por supuesto, no
es aquí sobre la realidad de los Sadhus, sino sobre el origen de la creencia en
ellos; y nada más fácil que probar que esta fe ha prevalecido en la India desde
tiempos inmemoriales. »
(18
de julio de 1886)
Y también en la
investigación que he efectuado, he encontrado el testimonio de numerosos indios
que afirmaron haberse encontrado con estos maestros:
~ * ~
Obviamente todo esto no es una prueba suficiente para asegurar
con toda certeza que los Maestros transhimaláyicos si existen, pero si son
argumentos a tener en cuenta para considerar que muy probablemente esos humanos muy
desarrollados si son reales y que ellos no fueron una invención de Blavatsky
como lo aseguraron varios de sus detractores.
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