El final de un ciclo suele ser acompañado por cataclismos
cuyo grado de intensidad es en función de la amplitud del ciclo. Doy algunos
ejemplos:
AL
FINAL DE LAS YUGAS Y CICLOS MENORES
Al
final de ciclos ocultos, los países pasan por cataclismos tanto naturales como
sociales.
«
Esta es la situación actual de los asuntos y para la India es muy mala. Aún es
prematuro decirte más de la influencia secreta que la ha ocasionado, pero
podrías tener noticias de esto más tarde. Ni tampoco puedo predecir el futuro,
excepto para llamar tu atención más que nunca sobre las negras nubes que se
están juntando sobre el firmamento político. Tú sabes que hace largo tiempo te
dije que esperaras muchos y grandes disturbios de todo tipo, ya que un ciclo se
está cerrando y otro está comenzando sus fatales actividades. Ya puedes ver en
los últimos fenómenos sismológicos que han ocurrido últimamente algunas de las
pruebas, pronto veras mucho más. Y si tenemos que lamentar la pérdida de un
proyecto humanitario, al menos mitigará la severidad de tu desilusión el sentir
que en un mal tiempo como este, uno tiene que luchar en contra de influencias
visibles e invisibles de una naturaleza sumamente hostil. »
(Carta
del Mahatma Kuthumi a Sinnet, octubre 1883, CM83, p396)
Sospecho
que el ciclo al que se está refiriendo el Maestro son los primeros 5’000 años
de la Kali Yuga que terminaron entre los años 1897 y 1898. (Ver la Kali Yuga o Edad Oscura)
AL
FINAL DE LOS CICLOS MAYORES
La
humanidad evoluciona en la Tierra a través de siete inmensos periodos de tiempo
llamados Rondas. (Ver desarrollo del hombre)
Al
final de las seis primeras rondas, el planeta entra en un estado de adormecimiento
(o “oscurecimiento”) durante el cual la vida se va temporalmente para
posteriormente volver a surgir.
«
La proximidad de todo nuevo “oscurecimiento” está siempre señalada por
cataclismos – ya sean por fuego o por agua. »
(Carta
Mahatma 23, p156)
En
cambio, al final de la séptima ronda que es un ciclo mayor (llamado manvantara
planetario) sucede un cataclismo mayor ya que el planeta “muere”, la vida ya no
vuelve a surgir y el planeta se vuelve un esqueleto rocoso que lentamente se va
desintegrando.
«
Como consecuencia de la refrigeración secular (más bien vejez y pérdida del
poder vital), de la solidificación y desecación de los globos, la Tierra llega
a un punto en que empieza a convertirse en un conglomerado aflojado. El periodo
de generar criaturas ha pasado. Toda la progenie ha sido criada y su término de
vida ha finalizado. »
(Carta
Mahatma 15, p98)
En
cada ronda, la humanidad se desarrolla a través de ciclos más pequeños al final de los cuales hay hundimiento y resurgimiento de los
continentes.
«
Nuestros continentes actuales (al igual que “Lemuria” y “Atlántida”) han estado
ya varias veces sumergidos y tuvieron el tiempo de reaparecer otra vez, para abrigar
a sus nuevos grupos de humanidad y civilización. [En el futuro] en el primer
gran solevantamiento geológico en el siguiente cataclismo – en la serie de
cataclismos periódicos que ocurren desde el comienzo hasta el final de cada
Ronda – nuestros ya autopsiados continentes se hundirán y las Lemurias y las Atlántidas
surgirán de nuevo. »
(Carta
Mahatma 23B, p151)
¿POR
QUÉ SE PRODUCEN ESOS CATACLISMOS?
Contrario
a la idea popular, no es por venganza de Dios. Dios no tiene nada que ver en el
asunto, de hecho los principalmente responsables son los humanos, aunque las
razones difieren según la amplitud del ciclo.
En
los Ciclos Menores
Los
cataclismos ya sean naturales (temblores, inundaciones, epidemias) o sociales (guerras,
crisis, etc.) son esencialmente consecuencia de una purificación del astral.
Deben
saber que el hombre, cuando actúa, cuando piensa, cuando descarga sus
emociones, crea vibraciones, crea formas. El problema es que la humanidad
siendo todavía inmadura, genera principalmente vibraciones negativas a través de
sus pensamientos de odio, envidia, rencor, etc. Y bajo la ley del Karma que
hace que todo lo que generas, se te regresa. Toda esa negrura termina regresándole
a la humanidad. Así pues, entidades que durante años, incluso generaciones, los
humanos estuvieron creando en el plano astral con sus malos pensamientos y
emociones, terminan por manifestarse en el plano físico a través de un
cataclismo. Y si ese daño no se produjese, es toda la humanidad la que estaría
en peligro. (Ver ¿Por qué Dios permite las guerras?)
Cuando
el discípulo va a recibir una iniciación (un paso en su evolución cósmica)
tiene primero que purificar su cuerpo astral. Lo mismo pasa con la humanidad
cuando se acerca a un nuevo plano iniciático. Es necesario en un primer tiempo
limpiar el plano astral y es lo que sucede al final de un ciclo. (Ver el plano etérico se está intensificando)
Un
ser humano, como individuo, puede fácilmente limpiar su cuerpo astral, es lo que
le va a surgir como pruebas o como karma, y así individualmente va poder ir a
tomar su iniciación. Pero cuando se trata de iniciar a toda una humanidad
aunque se intente repartir el karma de manera individual, hay un karma de masa,
un karma colectivo que es necesario absolutamente purgar, para que esas
entidades, esos fantasmas del bajo astral, creados por la humanidad inmadura
sean completamente disueltas.
Es
lo que genera los forúnculos como las guerras, las crisis, las catástrofes
naturales, o sea todos los problemas que la sociedad conoce y vive, que sean
los problemas económicos, sociales, políticos, etc. Es una manera de evacuar,
desintegrar en una toma de consciencia general, esas entidades. Esto es lo que
se expresa en la Biblia cuando Jesús dice que el hombre tiene que renacer y que
es necesario limpiar los cielos antes que el hombre sea nuevo.
A
medida que la humanidad deje de generar malas vibraciones, los finales de
ciclos menores serán menos drásticos, lo que no significa que dejará de haber ciertos
cataclismos como los temblores. Como vimos los continentes emergen y se
sumergen, pero estos movimientos telúricos serán más armoniosos. En vez que se
produzca un fuerte terremoto que destruya a toda una ciudad, serán sucesivos
temblores ligeros que no afecterán a la población.
En
los Ciclos Mayores
«
[Cuando llega el final de un gran ciclo, por ejemplo de una Ronda], la fuerza
en operación y la que determina el gran ciclo, es la del hombre mismo
considerado como un ser espiritual. Cuando [la humanidad en su conjunto ha alcanzado
la divinidad y] ha terminado de usar el globo, [ella accede a otros planos de
existencia], deja la Tierra y con su partida se va la fuerza de cohesión que mantenía
al globo unido. La consecuencia es la disolución por fuego o agua o por lo que
sea, siendo estos fenómenos simples efectos y no causas.
.
. .
En
la intersección de los grandes ciclos se siguen efectos dinámicos que alteran
la superficie del planeta en razón de desplazamientos de los polos del globo u
otras convulsiones. Esta no es una teoría aceptada generalmente, pero
mantenemos que es cierta. El ser humano es un gran dínamo que produce, almacena
y arroja energía. Y cuando las masas de humanos que componen una raza producen
y distribuyen energía de esta manera, hay un efecto dinámico resultante sobre el
material del planeta, el cual será lo suficientemente poderoso como para ser
marcado y catastrófico. De que ha habido inmensos y terribles disturbios en los
estratos del mundo se admite por todas partes y no se necesita de más pruebas.
.
. .
En
lo que respecta a los grandes cataclismos que ocurren al inicio y terminación
de los grandes ciclos, los efectos son gobernados por las mismas leyes de Karma
y Recorporificación o Reencarnación, las cuales proceden de acuerdo a la regla cíclica.
No solo el hombre está gobernado por estas leyes, sino que igualmente cada átomo
de materia, y al mismo tiempo que el hombre, la masa de materia está
constantemente experimentando un cambio. Por lo tanto ella debe mostrar
alteraciones que correspondan con aquellas por las que esté pasando el
pensador.
Sobre
el plano físico, los efectos se manifiestan a través de los fluidos eléctricos y
otros, que actúan con los gases sobre los sólidos del globo. En el cambio de un
gran ciclo ellos alcanzan lo que podría denominarse el punto de explosión,
siendo la causa de violentas convulsiones de las siguientes clases. (a)
Temblores de tierra, (b) Inundaciones, (c) Fuego y (d) Hielo. »
(William
Judge, El Océano de la Teosofía, cap. XIV)
Para
algunos podrá parecerles muy pretencioso que se le de tanta importancia a la
humanidad, sin embargo así es. En el libro La Respuesta del Ángel, el Ángel explica que actualmente hay un abismo que separa el mundo físico del mundo divino, y la función de la humanidad es ser el puente que una los dos mundos, para que las energías nutritivas circulen abundantemente en los dos sentidos. Al menos
así será cuando la humanidad haya evolucionado. (Ver el aspecto oculto de la energía)
Gran artículo. Muchos dicen que actualmente nos acercamos a un cambio hacia una nueva humanidad, la que se ocupará de desarrollar la mente abstracta a la que ya muchos empezamos a dar cada vez más importancia (paso de la 5ª a la 6ª humanidad o subrazas). Personalmente creo que se avecina una aún mayor crisis económica, social y política y quién sabe si también catástrofes ambientales, necesarias para el cambio de ciclo.
ResponderBorrarRecomiendo este vídeo titulado "Lemuria, la Atlántida y la humanidad actual: las humanidades pasadas y las que vendrán" ( https://youtu.be/YTbZjinpBq0 ) donde Emilio Carrillo hace un resumen claro de todo este tema.
Gracias
el cambio climático es por nuestras emociones y no por la contaminación y destrucción de la naturaleza?
ResponderBorrarlas crisis económicas son por un cambio de era y no por la escases de recursos?
como afrontar todos los cambios negativos que estamos viviendo, y que aun estan empezando y van a empeorar?
hay alguna enseñaza que nos ayude a afrontar de manera practica los desafios venideros?
Parece que el ser humano tendrá que sufrir las consecuencias de sus actos (en este caso, sería el cambio climático y similares)
BorrarClaro está que tú tengas tenacidad y al mismo tiempo puedas salir sólo del problema... No no soy ningún administrador.
Hay causas físicas y causas sutiles.
BorrarY para afrontar lo que se viene te tienes que preparar pero sin caer en la paranoia, y aprender a ser más espiritual y estoico te puede ayudar.