Los
Dugpas es una de las cuatro escuelas principales del budismo tibetano cuyos
monjes se distinguen por usar gorros rojos, mientras que los Gelugpas es la más
reciente de esas escuelas y cuyos monjes se distinguen por usar gorros
amarillos.
Y
sobre estas dos organizaciones René Guénon en su libro Teosofismo escribió lo siguiente:
« En
sus obras Madame Blavatsky alude frecuentemente a los “magos negros", a
los que denomina también Dugpas y “Hermanos de la Sombra", oponiéndolos a
los "Adeptos" de la “Gran Logia Blanca". En realidad, los Dugpas
son, en el Tíbet, los Lamas Rojos, es decir: los Lamas del rito primitivo,
anterior a la reforma de Tsong-Khapa; los Lamas Amarillos, los del rito
reformado, son denominados Gelugpas, no habiendo entre ellos ningún antagonismo.
Es
dable preguntarse, entonces, por qué razón Mme. Blavatsky profesaba tal rencor
a los Dugpas. Quizás ella había fracasado en alguna tentativa por entrar en relaciones
con ellos, sintiendo desde entonces una profunda decepción y consiguiente
animosidad, esta es, sin que nada podamos afirmar una manera absoluta, la
explicación más verosímil. »
(Capítulo 6)
René
Guénon dice que no hay ningún antagonismo entre los Dugpas y los Gelugpas, pero
eso es falso ya que si ha habido pleitos territoriales y también hay
antagonismo en sus creencias. Y esto la propia Blavatsky lo especificó:
« Los
gorros rojos pertenecen a la antigua secta śingmapa, ellos cambiaron al budismo
solo después de que en el siglo X un lama tibetano los convirtió a la antigua
fe budista, pero ellos la mezclaron fuertemente con las prácticas de los
nativos Bön y posteriormente se resistieron a la reforma religiosa introducida
por Tsong-Kha-pa entre finales del siglo XIV y principios del XV, y la cual dio
nacimiento, en oposición, a los reformados Gelugpas.
Los
registros conservados en el monasterio de Tashi-Lhünpo muestran que el Señor Buddha
se encarnó en Tsong-Kha-pa como consecuencia de la gran degradación en que
habían caído sus doctrinas.
Tsong-Kha-pa
prohibió la nigromancia (que se practica hasta el día de hoy con los ritos más
repugnantes por los Böns, o sea los aborígenes del Tíbet, con quienes los gorros
rojos o Shammars siempre han fraternizado) pero los Dugpas se resistieron a su
autoridad.
Este
acto fue seguido por una división entre las dos organizaciones. Los Dugpas
(gorros rojos) separándose por completo de los Gelugpas —desde los primeros tiempos
en una gran minoría— ellos se asentaron en varias partes del Tíbet, principalmente
en sus zonas fronterizas y también en Nepal y Bután. Pero mientras mantuvieron
una especie de independencia en el monasterio de Sâkya-Jong, la residencia
tibetana de su jefe espiritual Gong-sso Rinpoche, los butaneses han sido desde
sus comienzos tributarios y vasallos de los Taley-Lamas. »
(CW IV, p.10-12, extractos)
« Tsong-kha-pa
dio los signos por los cuales se podía reconocer la presencia de uno de los
veinticinco Bodhisattvas o de los Budas Celestiales (Dhyâni-Chohans) en un
cuerpo humano, y él prohibió estrictamente la nigromancia.
Esto
condujo a una división entre los Lamas, y los descontentos se aliaron con los
aborígenes Böns contra el budismo reformado. Incluso ahora forman una poderosa
secta practicando los ritos más repugnantes por todo Sikkim, Bután, Nepal e
incluso en las fronteras del Tíbet, aunque en el pasado era peor entonces.
Con
el permiso del Tda-shu o Teshu Lama, unos cien Lohans (Arhats) para evitar
conflictos fueron a China y se establecieron en el famoso monasterio cerca de
Tien-t'-ai, donde pronto se convirtieron en sujetos de la tradición legendaria,
y continúan siéndolo hasta el día de hoy. »
(CW XIV, p.427-8)
Ustedes
pueden ver por lo tanto que contrario a lo que afirmó René Guénon si ha habido
conflictos, pero si a nivel exotérico el antagonismo es perceptible, a nivel
esotérico el antagonismo es todavía más fragante debido a que esa asociación
que han tenido los Dugpas con los Böns ha hecho que varios de sus dirigentes
sean magos negros.
Y
es por eso que Blavatsky en el libro “La
Voz del Silencio” escribió:
« Los
Böns, asociados con los Dugpas, son considerados como los más versados en
hechicería, ellos habitan en el Tíbet Occidental y también en el pequeño Tíbet
y en el Bután. Todos ellos son Tantrikas [sexuales].
Es
completamente ridículo ver a algunos orientalistas que han visitado las tierras
fronterizas del Tíbet (como Schlagintweit y otros) que confundan los ritos y prácticas
repugnantes de estos con las creencias religiosas de los Lamas orientales o
gorros amarillos y sus Narjoles u hombres santos. »
(p.90)
« La
palabra dugpa en el Tíbet es deprecatoria. Los Dugpas la pronuncian dög-pa de la raíz “atar” significando
con eso: “los atados religiosamente a la antigua fe”. Mientras que la escuela de
budismo tibetano más importante — los Gelugpas (los gorros amarillos) — y el
pueblo usan esa palabra en el sentido dug-pa,
o sea los que dañan, los hechiceros. »
(CW IV, p.9n)
(Observación
de Cid: Gelugpas, dge-lugs-pas, es una palabra tibetana que significa virtuosos.)
Pero
Blavatsky también especificó que no todos los Dugpas son magos negros, sino solamente
algunos de sus dirigentes:
« En
Oriente se les conoce a esos hombres como los “Hermanos de la Sombra”, son hombres
vivos poseídos por los elementales ligados a la tierra; a veces, sus amos, pero
siempre en el largo plazo cayendo víctimas de esas terribles entidades. En
Sikkim y el Tíbet se les llama Dug-pas (gorros rojos), en contraposición a las
Geluk-pas (gorros amarillos), a los que pertenecen la mayoría de los adeptos.
Y
aquí debemos suplicar al lector que no nos malinterprete, porque aunque todo
Bhûtan y Sikkim pertenecen a la antigua religión de los Bhons, ahora conocidos
generalmente como los Dug-pas, no queremos que se entienda que toda la
población está poseída, en masa, o que son todos hechiceros. Entre ellos se
encuentran hombres tan buenos como en cualquier otro lugar, y sólo hablamos de
la élite de sus Lamas, de un núcleo de sacerdotes "danzantes del
diablo" y adoradores de fetiches, y cuyos ritos espantosos y misteriosos
son completamente desconocidos para la mayoría de la población. »
(CW VI, p.197-8)
Sobre
estos hechiceros negros el maestro Morya escribió:
« Nosotros
no pensaríamos en asociarnos con aquellos que se encuentran sumergidos en el
error, como tampoco lo hacemos con los Gorros Rojos en la tierra cuyos malos
resultados tratamos de paliar, pero en cuyo trabajo oscuro no tenemos derecho a
entrometernos en tanto que ellos no crucen nuestro sendero. »
(CM 134, p.463)
Y
el maestro Kuthumi le precisó al señor Sinnett:
« Ten
un ojo avizor ya que los Dugpas y Gelugpas no están luchando solamente en el Tíbet. »
(CM 47, p.272)
Estos
hechiceros negros buscan lastimar, y si posible matar, a los discípulos de los
maestros transhimaláyicos, y ese fue casi el caso de Djwal Khul como se lo comentó Blavatsky
al señor Sinnett:
« El pobre “Desheredado” [Djwal Khul] está muy enfermo, él
se cayó por una grieta y casi se rompe sus piernas de no haber sido por otro
chela [discípulo] que lo acompañaba y que tuvo el tiempo y la agilidad de hacer
lo que era necesario para evitar que cayera en un abismo de casi mil metros.
El Maestro
Morya dice que fue un diabólico Gorro Rojo quien lo provocó, quien atrapó al
muchacho con la guardia baja por un instante y aprovechó para atacarlo en un
pestañeo.
Para lograr su
fechoría ese Gorro Rojo estuvo rondando durante semanas alrededor de la casa en
donde actualmente no hay Adeptos, solo tres discípulos y una mujer. Por
supuesto Djwal Khul pronto se recuperará, pero esta es una prueba más de que
incluso un chela y uno de primer grado puede estar fuera de su guardia algunas
veces. »
(Cartas
de H.P. Blavatsky a A.P. Sinnett, p.12)
Y
sabemos que los Dugpas también le hicieron la vida imposible a Blavatsky ya que
el maestro Kuthumi le comentó al señor Sinnett:
« Blavatsky
no está segura en Sikkim, es tremenda la oposición de los Dugpas y a menos que
dedicáramos todo nuestro tiempo a cuidarla, la “Vieja Dama” la pasaría muy mal
en vista de que ahora ella es incapaz de cuidarse por si misma. »
(CM 110, p.446)
CONCLUSIÓN
Y
después de haberles explicado todo esto, ahora ustedes comprenderán mejor por
qué motivo Blavatsky sentía tanto rechazo hacia los Dugpas. No es por haber
“fracasado en alguna tentativa por entrar en relaciones con ellos” como lo pretendió
René Guénon, ya que lo que menos Blavatsky quería era justamente entrar en
relación con los Dugpas, sino que en realidad su repudio se debió por todos los
ataques que los hechiceros negros pertenecientes a los Dugpas le hicieron a
ella y a sus compañeros.
~ * ~
Y este es un ejemplo
más de lo ignorante que era René Guénon en asuntos esotéricos y con el budismo.
Has leído los artículos que se han escrito sobre los gelugpas, el Dalai y el Panchen Lama, sus controversias y los vínculos con los Maestros y Blavatsky? Te dejo el link, son fascinantes: https://sabiduria-atemporal.blogspot.com/2022/02/gelugpas-tantra-y-dalai-lamas-una.html
ResponderBorrarJan van Rijckenborgh, fundador de la Rosacruz Áurea, insistió en que la magia "negra", con caras de bondad pero también de maldad manifiesta se había apoderado del Tibet nuevamente. La influencia de los dugpas ha crecido mucho desde hace siglos y especialmente en las primeras décadas de 1900 , y así es como desapareció el Panchen Lama y los Dalai Lamas previo y actual han estado integrando más al Bön y al tantra sexual sin ningún pudor.
Los Maestros y aquellos superiores en jerarquía, y ya sabrás a quien me refiero (M.C.), regentaron desde Tashilumpo hasta la persecución emprendida por el XIII° Dalai Lama en contra de su superior, que también era el superior de los Mahatmas (?) (aquí un gran misterio). La deuda kármica generada, quedó en evidencia con la invasión del Tibet y el fin del budismo tibetano que habíamos conocido hasta 1900.
De alguna manera, el actual será el último Dalai Lama y el actual Papa será el último de la Iglesia de Roma, que muchas implicaciones tendrá en la espiritualidad mundial.
Los Maestros de Sabiduría en Oriente, han impulsado y propagado al budismo "gnóstico", o esotérico, tántrico (verdadero tantra), sin ser budistas propiamente, así como la misma Fraternidad, en Occidente, impulsó al gnosticismo cristiano, al maniqueismo, al catarismo y a otras organizaciones rosacruces gnósticas, sin pertenecer a ellas.
Así las cosas, creo que a partir de esta década el mapa "religioso" mundial cambiará mucho, tanto en oriente como en occidente. La "Gnosis" budista y la "Gnosis" cristiana se manifestará de manera distinta a la humanidad, según el mandato de la Fraternidad de la Siddha.
Sería muy interesante que investigaras y plasmaras en este blog esa maravillosa y extraña relación entre Tsong-Ka-Pha, los Gelugpas, los Mahatmas y su Fraternidad, Blavatsky y el impulso teosófico del silo XIX. Es un tema fascinante y el origen de TODOS los acontecimientos de relevancia, en torno a la verdadera espiritualidad en occidente en los últimos 150 años.
En occidente, al menos en la Rosacruz Áurea, esas relaciones se conocen bien, aunque de forma muy reservada, conociendo muchos detalles de cómo se dieron esos impulsos desde aquella "Fraternidad de la Siddha", de los "Hijos de la Voluntad y del Yoga", conocida en oriente como la "Fraternidad de Shamballa", con el nacimiento de la Teosofía Original (que no es casualidad que esté resurgiendo hoy), así como en Occidente, bajo la denominación de "Fraternidad del Grial", que intervino en la segunda mitad del siglo XX, a partir de la década de los 70, con la creación de una comunidad espiritual muy singular, dentro del seno de la ya existente Escuela Espiritual de la Rosacruz Áurea en ese momento,