LO QUE ES EL AMOR EXPLICADO POR EL MAESTRO PASTOR





Cuando le preguntaron al maestro Pastor:


El amor y el poder parecen ser dos conceptos opuestos que se enfrentan. ¿Cómo combinar los dos?


El maestro respondió:


« El amor y el poder son de hecho una síntesis cuando los consideramos de acuerdo con los conceptos divinos, mientras que a un nivel físico luchan entre sí.

El amor y el poder no son tesis y antítesis, sino que por el contrario, y como lo acabo de señalar, son síntesis. Pero hay que saber de qué poder estamos hablando y también de qué tipo de poder se ejerce en la Tierra.

Precisamente si uno quisiera hablar correctamente sobre el amor, tendría que cuestionar el poder. Pero establecer el amor o un pacto de amor en la Tierra, ya sea por medio de una religión, por medio de una iglesia, o finalmente por medio de una sociedad basada en el amor. No significa que el poder ya no existirá y que a partir de entonces todos los humanos serán como grandes hermanitos que se la pasarán paseando juntos en los prados viendo las flores crecer y las mariposas volar, y que todos se abrazarán, todos se querrán y nadie se preocupará más por la tormenta que puede aparecer, o por la cosecha que se debe de hacer, o por todas las demás cosas que se deben de efectuar para vivir en el plano físico.

No


Por el contrario, el amor necesita del poder, y el amor vive gracias al poder para justamente poder perpetuarse, y sobre todo, para perpetuarse en el equilibrio y la armonía. El amor sin el poder es algo falso, ilusorio y completamente vano. Y desafortunadamente es el amor que la mayoría de los discípulos principiantes buscan, y es debido a este amor ilusorio que ellos se queman sus alas, y que se dan cuenta mucho después, que al tratar de hacer surgir este tipo de amor, ellos solo perdieron su credibilidad, perdieron sus energías, perdieron su dinero, etc.

En cambio el amor unido al poder permite ejercer otro concepto que también es su sinónimo y que es la justicia misma, porque no se puede hablar de amor sin hablar de justicia, ya que es la justicia la que permite que el amor se establezca, y que el amor sea creíble y que se vuelva una fuerza real. Entonces, un individuo que realmente quiere ser amor debe también ser justicia.

El humano no puede ser amor sin ser al mismo tiempo justicia, porque de lo contrario no sabría cómo irradiar este amor de manera justa. Y es por eso que siempre hay tantos problemas para dar a conocer el concepto de lo que es el amor a un discípulo naciente o a un laico. Porque ellos creen que amar es aceptar todo del otro, ser ciego como dice vuestro proverbio: "el amor es ciego". Pero a nivel espiritual eso es incorrecto.

Por el contrario, el verdadero amor te permite conocer mejor a tu prójimo y amarlo a pesar de lo que sabes de él. Y esto es el verdadero amor. Mientras que la mayoría de las personas que aman, tan pronto como conocen y descubren que el prójimo no es perfecto, entonces su amor termina enfriándose a causa de todos los defectos y de todos aspectos negativos de la otra persona.

Pero el propósito del amor no es echar un yeso en todas las fachadas del mundo y decir: "miren cómo son hermosas las fachadas". Sin importar que dentro de las fachadas las tuberías están oxidadas, que las ratas tienen infestado el sótano y el ático, y que detrás de la fachada se oculta toda clase de podredumbres.

No

El amor no es eso. No es una máscara que te opaca la realidad. Sino por el contrario, el amor es una gran lucidez. El amor es decirse:

« Sé muy bien cómo eres, conozco tus aspectos oscuros, sé que eres un predador, porque veo tus dientes largos y sé que me quieres comer. Pero a pesar de eso y mientras las fuerzas del bien me permitan hacerlo, te enfrentaré, y mientras te enfrento, intentaré hacerte ver que detrás de tu oscuridad hay alguien que sabe amar tanto como yo puedo amarte a ti pesar de tu actitud negativa; y a pesar de que seas un pequeño demonio, intentaré volverte un poco más angelical. »


Amar no es mirar al otro y no hacer caso de sus defectos. No. Amar es amar a pesar de ello, y eso es lo que me gustaría que ustedes entendieran. Amar es amar a pesar de todos los defectos que tiene el otro, pero no para aceptarlos, sino para sublimarlos.

Y es que una vez más, dicho esto, tengo que detenerlos porque los humanos al escuchar esto tienden a irse al otro extremo. Y es que amar tampoco significa abrir tu corazón a todo lo que te hagan y en gran exaltación decirte a ti mismo:


Debo de amar al ladrón porque Jesús lo dijo, debo de amar al asesino porque Jesús lo dijo.”


No


No sucede de esa manera. Si Jesús dijo que deben de amar incluso a aquel que comete pecado, no es porque deban olvidar su maldad y olvidar los errores que ese individuo ha cometido. No funciona así. Jesús les dijo eso para simplemente hacerles comprender cual parte de la persona requiere ser amada y cual otra parte de la persona requiere ser corregida.

Y así, en el ladrón o en el asesino, no es esa parte de ese individuo que robó o que asesinó la que ustedes deben de amar. Sino que por el contrario, ustedes deben de corregir esa parte, reeducarla, reinsertar al individuo. Pero por el otro lado, ustedes cometen un error al olvidar que ese individuo también es una chispa divina, una parte del universo, como también lo son la flor, la roca, el perro, el gato y ustedes mismos. ¡Todos son parte del universo!

Y es en esa dimensión que ustedes deben de amar. No a ciegas. Amar a ciegas no es el verdadero amor, porque tan pronto como ustedes sufren de una injusticia, entonces vuestro coraje para amar se diluye. Y es así como hay personas que en el camino evolutivo de repente se ponen a amar muy febrilmente porque se sienten abrumadas por una exaltación, o por una devoción, o por un fervor místico. Pero que después de algunos reveses que la sociedad les inflige, su amor se enfría y entonces se dicen a sí mismas:

« El amor finalmente no existe, son solo invenciones religiosas, son solo fantasías utópicas. »


Pero eso es erróneo, lo que pasa es que esas personas no supieron amar con el amor verdadero, sino solo con el amor ilusorio.

Como todas las cosas venidas del cielo, el amor necesita de un cierto grado de conciencia para ser asimilado a través de cada individuo. Y por consiguiente no se le puede pedir  a alguien que todavía se encuentra en un estado de conciencia demasiado bajo que exprese un amor verdadero. Esa persona sentirá la necesidad de ser amada, y ella también querrá amar, pero solo a nivel afectivo, es decir, exactamente como un niño.

Y observen como en la sociedad la mayoría de los humanos todavía se encuentran en ese nivel, buscando el amor a nivel afectivo y emocional. Y por ejemplo, el esposo a través de la esposa continúa buscando el cariño de la madre. Y la esposa a través del esposo continúa buscando la protección del padre, etc.

Pero resulta que los humanos (y a pesar de que ya tengan cuarenta, cincuenta o sesenta años) mientras sigan manteniendo una inmadurez en sus relaciones con el amor, ellos no podrán convertirse en seres libres.

Miren todos los problemas que tienen los humanos precisamente con este tipo de relaciones afectivas. Por ejemplo todos los celos que eso provoca. Porque tan pronto como uno se enamora a un nivel afectivo y emociona, existe el concepto de la propiedad, la noción de la exclusividad que germina automáticamente, y esa es la raíz de todos los celos, de toda la ilusión, de toda la angustia y de todo el sufrimiento que desafortunadamente ocurre cuando ocurre un divorcio, una muerte o una separación.



Entonces si la emoción del verdadero amor no es el afecto, entonces,


¿Qué es?


Y la respuesta es que el mejor sinónimo para describir lo que es el verdadero amor es la palabra vida. Porque esta palabra transmite una imagen más exacta de lo que es el amor.

Imaginen lo que es la vida, la emoción que sienten cuando vieron a vuestro hijo nacer, cuando fueron testigos de ese nacimiento, cuando se convirtieron en padre o en madre. O si son más jóvenes, cuando vuestra mascota tuvo cachorritos y que ustedes estuvieron frente al milagro de la vida.

¿Sienten esa emoción?


Pues bien, el amor es eso, es la vida.



Entonces, como pueden ver, cuando queremos hablar del amor, estamos hablando de todo lo que constituye al ser humano, ya que estamos hablando del poder, pero también estamos hablando de la naturaleza misma de la vida.

Y es por eso que no podemos hablar de cosas divinas de manera disociada, y por ejemplo, decir que Dios es esto y que Dios es aquello, porque todos estos conceptos son solamente diferentes aspectos que componen una misma esencia. Por lo tanto, no tiene sentido trabajar con el poder de un lado y el amor por el otro lado, sino que es necesario sintetizarlos.



¿Qué es entonces la vida ya que para conocer el amor primero deben pasar por la vida?


Y para descubrir esto, para eso justamente ustedes vienen a la Tierra, para precisamente experimentar la vida. Observen vuestra vida diaria, vuestra vida en pareja, vuestra vida profesional, vuestra vida con vuestros amigos. ¿Cuál es el punto de todas estas relaciones, de estos encuentros y de estos compromisos? ¿Qué significado tienen todas estas experiencias?

Pues bien, resulta que a través de todas estas experiencias, a través de todas estas acciones, a través de todos estos movimientos, lo que se les propone a los humanos es precisamente de descubrir el amor. Y es por eso que ustedes no lo conocen, y es por eso que se preguntan tanto sobre el amor, porque es una especie de recompensa que se les da al final, es el descubrimiento final de vuestra evolución.


Ustedes descienden a la Tierra para crear vuestro templo interior. Y para darles una analogía, es como un albañil que primero tuvo que cavar y remover mucha tierra, y en sus esfuerzos descubrió rocas difíciles de mover, y también descubrió capas de agua difíciles de neutralizar, pero aún así él siguió bajando hasta tocar lo más profundo para ahí sentar las bases de su edificio.

Y esto es lo que ustedes mismos están haciendo actualmente, esto es precisamente lo que la encarnación les permite efectuar. Es de descender en el plano físico, y como un albañil, cavar para sentar las bases de vuestra propia creación que son ustedes mismos.

Obviamente no son los mismos cimientos arquitectónicos, eso es seguro, pero estos representan los mismos objetivos y son igual de esenciales que las bases de un edifico, porque sin los cimientos, el edificio no tiene equilibrio y se derrumbaría. Y de la misma manera, el hombre que desciende a la materia, a la vida física, descubrirá los equilibrios que necesita para convertirse en un ser divino.

Y a partir de estos equilibrios él se encontrará con grandes nociones como es el amor, como es lo divino, como es la eternidad, etc. Y en ese momento, él se convierte en una cruz que se abre, en lugar de ser solamente un cubo que está cerrado, un cubo que representa la materia, o sea los cuatro.

Y cuando el hombre descubre los equilibrios, los cuatro se despliegan y se convierten en una cruz que comienza a girar en el universo. Y tan pronto como él se asocia con el movimiento del universo, entonces puede comprender las grandes nociones como es el amor divino. »

(Conferencia del 27.06.87)









7 comentarios:

  1. Por cierto amigo cid, se qie se lee muy egoista y machista pero cada uno tiene defectos que superar, si logro con esto he de avanzar mucho

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  2. Me viene bien este artículo. El tema es que es tan difícil ver la vida en el hombre actual. Sé que suena mal, pero tengo que reconocer que en la sociedad moderna hay tan poca imaginación, tan pocos valores, tan poco de todo excepto de cáscara, de fachada, que se hace muy difícil ver el aspecto profundo, la vida verdadera, en las personas. En los animales y plantas es más fácil porque son más sencillos y auténticos, y para ver la vida ahí solo hay que traspasar una capa de cuero, escamas, o de corteza, pero con las personas... ¡Madre mía! Se hace difícil estar siempre intentando ignorar todas esas construcciones innecesarias, y lo peor es que pasa en uno también, obvio, a no ser que fuéramos ángeles (que no lo somos). Me recuerda al caballero de la armadura oxidada cuando tiene que estar en silencio y luego llorar hasta oxidar y romper su yelmo para comprenderse a sí mismo, y en consecuencia entender el sufrimiento de su esposa.

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  3. en otras palabras lo que ellos llamaban amor nosotros lo conocemos como orden no es asi cid

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  4. Cid que se dice sobre los sueños Eroticos? Son malos?

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  5. Yo tengo una pregunta por una experiencia propia, siento algo por una persona pero lo me llama la atención que hubo un momento sentí una sensación que no he sentido con otra persona y que en un momento no sabia como descifrarlo hasta q me llego la frase o palabra " PERTENENCIA" yo no se si eso es positivo como puede ser negativo ( ya que puede ser apego emocional) no se q hacer pq siento conexión con esa persona pero siento que ella tiene resistencia con los sentimientos, como uno sabe cuando es amor verdadero¿?¿ pq ya percibiendo esa sensación de "pertenencia " no se que pensar.....

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