EL TESTIMONIO DE UN ANTIGUO PROFESOR DE LA ORGANIZACIÓN SAMAELIANA CEA

 

 

 

Solnaciente: En mis tiempos de instructor en el CEA, no solamente yo estaba chifladísimo sino que además era un profesor "mediocre". Y mi mediocridad se basaba según los informes de la súper coordinación y mi ex supervisora feminista, debido a mi posición económica y como consecuencia de eso mi baja participación en regalos, aportaciones constantes para obras, asistencia a seminarios, congresos, etc., etc.

 

Parece ser que estas quejas de ser mediocre se las trasladó a mi entonces esposa en el momento en que ella tomó su curso. Frustración que ella no pudo superar hasta el punto de abandonar el CEA, su familia e hija. A día de hoy todavía no lo ha podido superar la pobre.

 

Estas son las artimañas que se gasta el señor Baron (quien es el fundador de esa organización).

 

 

Charmander: Ánimo amigo, tus palabras expresan muchas emociones, y la vida sigue adelante pero ya sin esos “grotescos fantasmas” , y muy lejos de esas ideologías BASURA.

 

 

Solnaciente: Gracias amigo Charmander, puedo asegurarte que doy gracias a la vida por ayudarme y darme cuenta del engaño donde estaba metido. Desde que me liberé de ese grupo de fanáticos la existencia no ha dejado de sonreírme. Sin embargo no puedo evitar el dolor de ver como gente cercana ha quedado lastimada psicológicamente con sentimientos de miedo y culpabilidad hacia una ideología no solo basura, sino también cruel y despiadada. Los fantasmas hace rato que han desaparecido, lo único que me queda es el coraje hacia las "fantasmadas" de estos personajes.

 

 

Armann: La vida ya es bastante compleja, buscar tiempo para dedicarle al estudio, el trabajo, la familia, las amistades, el descanso, los proyectos personales, etc. Al conocer "un grupo" o "centro de estudios", uno cree que es para mejorar la vida de uno y de quienes nos rodean; pero resulta todo lo contrario porque además del tiempo que se consagra para asistir a conferencias, están las prácticas para la casa, el tiempo libre se le dedica a las actividades sectarias, la suma de dinero destinado a "aportaciones voluntarias" cada año aumentando...

 

Lo peor es cuando varios miembros de una familia entran en la secta y no somos capaces de ver en qué lugar estamos. Aunque algunos logramos salir después de varios años y dinero perdidos, queda una sensación de tristeza por los que quedan adentro y los que son afectados por "las enseñanzas".

 

 

José García: ese es uno de los métodos de control mental de las sectas gnósticas, te hacen creer que eres mediocre por no aportar económicamente a la causa u oba del Padre, según los misioneros gnósticos, y el daño psicológico te dura hasta décadas. Lo más importante es buscar la paz mental y evitar el control mental que te programan estos ojetes.

 

 

Solnaciente: Así es, aunque tener paz no significa desmemoriarse; sobre todo por el bien de los que están enganchados. Una pregunta amigo: ¿Tú has estado en una secta?

 

 

José García: si estuve en el movimiento gnóstico dirigido por Florentino Martínez Contreras, estuve en las garras de esa secta por casi cuatro años. Tuve un lavado de cerebro, llegué hasta los últimos grados impartidos por esa pseudo escuela, pero entonces según ellos caí en la mediocridad, y no por que no quería aportar económicamente, si no por que no tenía.

 

El misionero que en esos años impartía las conferencias me diagnosticó “mediocre espiritualmente” y comunicó a todo el grupo que yo era un mago negro. Acto seguido fue la aplicación de hielo por todo el grupo, ninguna palabra hacia mi persona. A veces me encuentro con algún ex-estudiante de esa época y fue tan grande el efecto del dizque diagnostico que no me dirigen ni una palabra aunque ellos ya estén fuera de ese movimiento.

 

 

Solnaciente: Tal vez se debió porque comenzaste a cuestionar. El señor Baron recalcaba una y otra vez a los que se "revoltaban" que se fueran del CEA y que se olvidaran de él y que se dedicaran a "degenerarse" lo antes posible. ¿Por qué será?

 

Seguramente sería porque él no quería que esos miembros con sus dudas influenciaran a los demás.

 

Gracias a que no me olvido me doy cuenta de la manera de proceder y de las artimañas de esos grupos sectarios y mafiosos con doble moral... ¡Nunca lo olvidaré Ernesto Baron, embustero del engaño!

 

 

Luismi: Recientemente acudí a unas conferencias dictadas a golpe de apuntes y diapositivas en este bello rinconcito de España. Los carteles, primero de psicología tibetana y recientemente de Egipto. Ahí estaban dos integrantes del grupo de CEA. Veo que en tu caso has formado parte de ese grupo. Y también he leído tus experiencias. Lo cierto es que estas dos personas trasmitían miedo e inseguridad, además de un cierto resquemor oculto.

 

 

Maia: Yo después del seminario de Atenas en 1994 me quedé flipada.

 

 

Solnaciente: La manipulación gnóstica es una falsedad muy insidiosa donde se piensa de una y mil maneras para lavar el cerebro a sus seguidores, se habla con miel en los labios y veneno en las entrañas, y se actúa de otra manera diferente entre los dirigentes. Actitudes grabadas muy a fuego y muy difíciles de borrar.

 

Este mensaje va dirigido a todos aquellos lectores de este y otros foros, los animo a que participen sin miedo a dar vuestro testimonio para alertar a los demás, especialmente a los "baronianos" encantados o desencantados, no teman queridos amigos, empezaran a ser libres cuando comiencen a sacar toda esa represión misticoide y enfermiza que llevan dentro. Exprésense, escriban, descubran y libérense.

 

 

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