¿ES POSIBLE SER INMORTAL?

Para las personas en general, un inmortal es aquel que permanece vivo en su cuerpo durante siglos, milenios. Es comprensible que los humanos consideren la inmortalidad así, dado que por el momento no conciben otro modo de existencia fuera de la vida física, sin embargo es una visión muy limitada con respecto a la realidad. Sobre el tema el Maestro Kuthumi dice:

« La palabra “inmortalidad” tiene un significado totalmente diferente para los iniciados y ocultistas. Nosotros solo llamamos “inmortal” a la VIDA UNA en su colectividad universal y su completa o Absoluta Abstracción. Eso que no tiene ni comienzo ni fin, ni interrupción alguna en su continuidad.

¿Se aplica el término a algo más?

Ciertamente no. Por lo tanto, los más antiguos caldeos tenían diferentes prefijos para la palabra “inmortalidad”, uno de los cuales es el término griego raramente usado de “inmortalidad paneónica”, es decir que comienza con el manvantara y termina con el pralaya de nuestro Sistema Solar. [Un periodo descomunalmente largo que corresponde al periodo de vida del Sol, más un periodo similar de “muerte” del Sol. Esto lo explico en ciclos cósmicos: manvantaras y pralayas]

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Inmortal es entonces aquél en la inmortalidad paneónica cuya clara consciencia y percepción de Sí bajo cualesquiera forma, no sufre disgregación en ningún momento, ni siquiera por un segundo, durante el periodo de su Egoidad.

Tales periodos [de inmortalidad cósmica] son distintos en duración, teniendo cada uno sus nombres distintivos en las doctrinas secretas de los caldeos, griegos, egipcios y aryos, y si solo fuesen fáciles de traducir – que no lo son (al menos mientras que la idea que entrañan, permanezca inconcebible para la mente occidental) – podría dártelos. Basta que sepas por el momento que un hombre, un Ego como el tuyo o el mío, puede ser inmortal de una Ronda a la otra. Digamos que comienzo mi inmortalidad en la presente cuarta Ronda, es decir que habiendo llegado a ser un pleno Adepto (lo que desafortunadamente no soy)

No te desanimes Kuthumi. Vas por buen camino. ¡Tú puedes!

Detengo la mano de la Muerte a voluntad y cuando finalmente me encuentro obligado a someterme a ella, mi conocimiento de los secretos de la Naturaleza, me coloca en una posición de retener mi consciencia y una clara percepción de Mí mismo como un objeto para mi propia consciencia reflexiva y cognición.

Y así evitando todas esas desmembraciones de principios, que como regla tienen lugar después de la muerte física de la humanidad común, permanezco como Kuthumi en mi Ego a lo largo de toda la serie de nacimientos y vidas a través de los siete mundos [los siete globos de la cadena terrestre] y Arupa-lokas [las esferas donde se habita entre cada reencarnación] hasta que finalmente desembarco de nuevo en esta Tierra entre los hombres de la quinta raza de los seres que pertenecen plenamente a la quinta Ronda. Yo habría sido en tal caso “inmortal” durante un largo periodo inconcebible para ti, abarcando muchos miles de millones de años. Y sin embargo, con todo eso.

¿Soy “yo” verdaderamente inmortal?

Al menos de que haga los mismos esfuerzos que hago ahora para asegurar para mí mismo, otra semejante suspensión temporal de la Ley de la Naturaleza, Kuthumi desaparecerá y se convertirá en un Sr. Pérez o en un inocente Babu [en otro personaje como les sucede a los humanos comunes cuando reencarnan], cuando expire su licencia.

Hay hombres que llegan a convertirse en seres poderosos como estos, existen humanos entre nosotros que pueden llegar a ser inmortales durante el resto de las Rondas y luego tomar su lugar establecido entre los más elevados Dhyani-Chohanes, “Ego-Espíritus Planetarios” conscientes. [Seres superiores que supervisan el Universo] »

(Carta Mahatma 20C, p129-130)

A mí me fascina esta parte de la enseñanza porque da una visión muy profunda de lo que es el hombre y de las posibilidades que se le ofrecen. Voy a tratar de explicárselos.

El hombre es una conciencia constituida de siete principios (un cuerpo físico y siete envolturas sutiles).

El hombre comienza su evolución como un “embrión cósmico”. No tiene mente, no tiene cuerpo, no tiene nada desarrollado en él. Es simplemente una abstracción inconsciente con sus siete principios en estado de germen.

La evolución cósmica consiste para el hombre en que vaya desarrollando sus siete principios y se constituya en un ser consciente y entero. Esta evolución se desarrolla en siete etapas llamadas Rondas. Es así que en la séptima y última ronda el hombre tiene plenamente desarrollados su consciencia y sus siete principios. Alcanza la máxima evolución que puede lograr como ser humano y se vuelve un “Hombre Cósmico”, un Hombre Divino.

Actualmente la humanidad se encuentra en la cuarta Ronda a mitad de camino. (Ver Rondas: desarrollo del hombre)

Esta evolución se hace a través de numerosas reencarnaciones en donde el hombre alterna periodos de manifestación (lo que llamamos Vida), con periodos de abstracción en planos superiores de consciencia (lo que llamamos Muerte), los “Arupa-lokas”. (Esto lo explico en ¿cómo es la vida en el más allá?)

Al final de las siete Rondas, los humanos que se hayan vuelto “Hombre-Dioses” tendrán un recuerdo de todas sus vidas pasadas y después de un periodo de descanso cósmico, comenzarán en el nuevo ciclo de evolución cósmica en un reino superior, como Ángel, Dhyani-Chohan, etc. (Lo explico en los reinos de la creación)

Desafortunadamente, el proceso de morir y reencarnar implica la destrucción de los principios inferiores, para posteriormente volverlos a reconstruir, lo que provoca interrupciones en la consciencia. Ustedes se dan muy bien cuenta de eso, cada vez que reencarnan se olvidan de su pasado y tienen que volver a pasar por una etapa de re-aprendizaje. Re-aprender a hablar, a escribir, volver a ir a la escuela, antes de ser de nuevo una persona desarrollada como lo eran en su vida anterior. Sin embargo la Naturaleza tiene un regalo que es la posibilidad de seguir esa evolución cósmica, sin perder el recuerdo del pasado entre las reencarnaciones, pero no es un regalo gratuito. La persona que esté interesada en ello, tiene que ganárselo y tampoco es un regalo eterno.

Para dar una analogía, imaginen que los humanos fueran globos aerostáticos posados en la tierra. Por medio de su trabajo y esfuerzo, un hombre logra calentar el aire al interior de su globo, lo que le permite elevarse al cielo por arriba de los demás, en nuestro caso, le otorga “inmortalidad” (continuidad de su consciencia). Nuestro hombrecito está muy contento, pero paulatinamente el aire caliente se va a ir enfriando y si no quiere volver a caer al suelo, en la condición de humano común en la que se encuentran los demás, tiene que seguir trabajando para recalentar el aire al interior de su globo.

No es posible vivir eternamente en el mismo cuerpo, porque solo lo que no existe es eterno (Lo explico en ¿quién creó el universo?). Todo lo demás es perpetuo, o sea que requiere regenerarse para seguir existiendo. Pero existe la posibilidad de mantener la consciencia de Sí mismo intacta sin interrupciones, paradas, ni suspensiones, a pesar de esas regeneraciones y no estamos hablando de siglos o milenios, sino de periodos increíblemente inmensos.

Para darles un ejemplo, el periodo que menciona el Maestro Kuthumi de mediados de la quinta raza-raíz de la cuarta Ronda a mediados de la quinta raza-raíz de la quinta Ronda corresponde a cerca de 640 millones de años!!!

Como pueden ver los conceptos que maneja actualmente la humanidad sobre lo que es ser inmortal se quedan tremendamente cortos en comparación.

¿Qué se requiere para merecer ese periodo de inmortalidad?

Volverse un gran Adepto, en otras palabras, adelantarse en la evolución cósmica.

¿Cuál es el método para lograr esa inmortalidad?

Como lo acabo de mencionar, forma parte de de las enseñanzas ocultas avanzadas, reservadas a los grandes Adeptos. Sin embargo el erudito Subba Row da algunos indicios:

« La mera adquisición de poderes para hacer maravillas nunca puede asegurarle la inmortalidad al estudiante de la Ciencia Oculta, a menos que haya aprendido los medios para trasladar gradualmente su sentido de individualidad de su corruptible [perecedero] cuerpo material, al incorruptible y eterno No-Ser representado por su séptimo principio. Por favor, considere esto como el verdadero fin de la Ciencia Oculta y vea si las reglas que se le exhorta a obedecer [a los discípulos y adeptos] son o no necesarias para lograr este enorme cambio. » (CM131, p458)

El séptimo principio (el Espíritu) es el principio más elevado que tiene el hombre, es una proyección del No-Ser que como vimos es el único que es eterno. Pero para elevar la consciencia de Sí mismo al Espíritu, se requiere purificarse (lo que se logra siguiendo las reglas) porque como lo señala el Señor Buddha:

« Tienes que eliminar completamente todo aquello que esté sujeto a la impermanencia que compone al cuerpo, para que tu cuerpo se haga permanente. Lo permanente nunca se mezcla con lo impermanente aunque los dos sean uno. Pero es solamente cuando han desaparecido todas las apariencias externas que queda aquel principio único de vida que existe independientemente de todos los fenómenos externos. »

(CM127, p455, Parinirvana Sutra kuan XXXIX)

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Sospecho que los maestros no solo ayudan a la humanidad por amor, sino también para ganarse el derecho a un ciclo de inmortalidad, ya que en el ocultismo es un objetivo por el que vale la pena trabajar. Retomando nuestra analogía, hay una gran diferencia en evolucionar sufriendo en el suelo con la masa, que volando en los cielos más cerca de la divinidad…

Nota: Los que quieran comprender más profundamente la explicación del Maestro Kuthumi, estudien primero el tema rondas-cadenas-globos comenzando por los posts más antiguos y las razas humanas: introducción.