KARMA y LAS ENFERMEDADES

Cuando le preguntaron al maestro Pastor:

¿Las enfermedades graves son por razones karmicas?

Esto es lo que el maestro respondió:

« Las enfermedades forman parte de la vida en el planeta, pero corresponden más al karma colectivo que al karma individual.

Como ya les he dicho muchas veces, a nivel cósmico, la humanidad es una entidad propia y por lo tanto suceden muchas más cosas a una escala global que a nivel individual.

Las enfermedades epidémicas son provocadas por el karma colectivo, y por lo tanto, es una depuración de los seres humanos en su conjunto, mientras que el karma individual tiene muchas otras formas de manifestarse y no necesariamente elige la enfermedad.

Algunas raras veces el hombre, cuando todavía se encuentra en las altas esferas, opta por la enfermedad como una forma de depurar su karma propio antes de reencarnar en la Tierra, pero no es el mejor medio para purgar un karma, porque la persona una vez inmersa en la materia, se olvida de los motivos y finalmente va a rebelarse contra la enfermedad e intentar curarse, sanar.

Lo cual es muy lógico. Y al decirles esto NO quiero que si se encuentran enfermos, dejen de buscar sanar con el pretexto que piensen que vuestra enfermedad debe de ser karmica. Como les dije son casos raros. Además, usualmente no se genera un desarrollo de la consciencia a través de la enfermedad, sino que por el contrario, seguido hay rebelión de la persona.

El karma individual escoge más lo que va a poner a prueba la voluntad, el discernimiento, el valor, el control; en vez de cortar el ímpetu del individuo con una enfermedad que le quita todas sus energías.

Por lo tanto en correspondencia con el cuerpo, karma escogerá más bien trastornos fisiológicos (enanismo, gigantismo, deformaciones, etc.) que las enfermedades, las cuales son casi siempre de carácter colectivo, y corresponden a la purificación en masa o una iniciación en su conjunto de la humanidad.

Y atención, cuando hablo de la purificación e iniciación, esto tiene que ver con el grado de conciencia de la masa de los individuos que componen la humanidad.

Verán, según su comportamiento, una civilización genera ciertos modales, ciertas costumbres, y esas costumbres caen en el reino de la naturaleza, o sea en la ley de causa y efecto. Lo que implica que tan pronto como ustedes actúan en el mundo, también actúan bajo el régimen de las leyes cósmicas.

El karma es en realidad más colectivo que individual. Cierto, también existe el karma individual, pero lo que ustedes llaman “karma individual” es en realidad vuestra guía iniciática personal. Por ejemplo, cuando le hicieron daño a alguien y que luego les sucede un infortunio, lo pueden llamar karma personal, pero sobre todo se trata de una prueba iniciática.

El karma, como tal, es la suma de todas las restricciones, limitaciones y aberraciones de una humanidad. Y es por eso que su acción se generaliza y que se tiende a considerar que el “castigo de Dios” es injusto.

-      ¿Cómo es posible que la enfermedad le arrebate su niño pequeño a la madre desconsolada?

-      ¿Cómo los adolecentes pueden morir tan jóvenes a causa del cáncer?

-      ¿Cómo todo un pueblo, que tiene el mismo derecho legitimo a la vida que cualquier otra población, pueda ser destruido por una epidemia?

Todo esto es el efecto de la masa, el efecto de sus rayos que justamente vienen de los otros planetas y que solo conciernen la masa. Pero esta masa se compone de individuos, por lo que inevitablemente ese karma colectivo se depura a través de las personas. »

(Conferencia del 06.12.86)