LO QUE SUCEDE DESPUÉS DE MORIR EXPLICADO POR JOSÉ RUBIO SÁNCHEZ


José Rubio Sánchez es un miembro relevante del Grupo de Estudios Teosóficos de Valencia y él publicó el siguiente video donde aborda este tema:
 
 
 


 
 
 
 

 
 
1. Al inicio de su conferencia José Rubio explica que comparando las enseñanzas de los diversos instructores que él recomienda estudiar y que son:
 
   -  Helena Blavatsky
   -  Alice Bailey
   -  Vicente Beltrán Anglada
   -  Francisco Brualla
   -  Nicolás y Helena Roerich
   -  Omraam Mikhael Aivanhov
   -  Peter Deunov
   -  Torkom Saraydarian
   -  Jiddu Krishnamurti
 
Eso nos amplía mucho el panorama y conciencia sobre lo que sucede después de morir. Lo que no sería el caso si solo se estudiara a uno de esos instructores. Ellos se complementan.
 
Pero yo no estoy de acuerdo con esto que afirma José Rubio porque de los instructores que él menciona, solo considero que muy probablemente Blavatsky transmitió información esotérica genuina, mientras que en cambio Alice Bailey, Vicente Beltrán Anglada, Francisco Brualla y los Roerich fueron unos charlatanes.
 
Omraam Mikhael Aivanhov copió las mentiras que inventaron los embusteros Charles Leadbeater y Max Heindel sobre lo que sucede después de morir.
 
Peter Deunov todavía no lo he estudiado, pero viendo su bibliografía me da la impresión que él no habló o habló muy poco sobre lo que sucede después de morir.
 
Torkom Saraydarian se basó en lo que enseñó Blavatsky, Alice Bailey y los Roerich, o sea que mezcló enseñanzas genuinas con erróneas.
 
Y Jiddu Krishnamurti fue un hombre muy ignorante en asuntos esotéricos.
 
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O sea que para obtener información esotérica legítima sobre lo que sucede después de fallecer, de esa lista solo les recomiendo lo que enseñó Blavatsky.
 
 
 
 
2. Luego José Rubio considera que los antiguos libros religiosos que abordan ese tema y que son:
 
   -  El libro egipcio de los muertos
   -  El libro tibetano de los muertos
   -  El libro sagrado de los mayas
   -  Así como las explicaciones que dio Platón
 
Son una guía para saber lo que sucede después de morir, pero ahí tampoco estoy de acuerdo con él porque si se leen las explicaciones que dieron los Maestros transhimaláyicos y que considero que probablemente son las más certeras (ver link).
 
Uno percibe que las explicaciones que dieron esos libros y Platón se parecen un poco, pero incluso considerando el simbolismo que contienen, difieren en gran medida.
 
 
 
 
3. Luego José Rubio señala acertadamente que para comprender lo que sucede después de morir hay que conocer la composición septenaria del hombre (la cual detalla en los minutos 38:00 a 46:20), y también hay que conocer la composición septenaria de los planos de existencia (la cual detalla en los minutos 46:20 a 49:13).
 
Pero el problema es que él utiliza diagramas que contienen varios errores y falsedades como lo detallo en estos otros dos capítulos:
 
 
 
 
 
4. Luego José Rubio habla de los átomos permanentes (en los minutos 49:13 a 54:20) pero el detalle es que los átomos permanentes no existen ya que fueron una mentira inventada por Charles Leadbeater como se los demuestro en este otro capitulo (ver link).
 
 
 
 
5. Luego José Rubio habla de los siete puntos de muerte, que es un tema que no había escuchado hasta ahora y que por lo tanto no sabría comentarles al respecto.
 
 
 
 
6. Y finalmente José Rubio da una explicación de lo que sucede después de morir, pero él se basa principalmente en extractos de lo que escribió Alice Bailey (los cuales supuestamente le fueron dictados telepáticamente por El Tibetano) y un poco también de lo que escribieron Anglada y Aivanhov.
 
Esa compilación también la pueden leer por escrito en este link.
 
Y aunque la explicación que dieron esos personajes se parece en cierta medida con lo que enseñaron los verdaderos instructores teosóficos, desafortunadamente también contiene muchas falsedades.
 
Por ejemplo esos individuos hablan de los éteres, el cuerpo etérico, los átomos permanentes, el cuerpo causal, etc. Pero todo eso en realidad no existe porque fueron mentiras inventadas por Charles Leadbeater.
 
Y también esos individuos cometen grandes errores.
 
Como por ejemplo cuando Anglada dice que:
 
« En un nivel intermedio entre el plano físico y el plano astral, el alma recopila espontáneamente todos los recuerdos de su vida pasada y los archiva en su cuerpo causal, vía los átomos permanentes mental, astral y físico. »
 
Pero eso es incorrecto porque como se los señalé arriba, el cuerpo causal y los átomos permanentes no existen. Pero además ese procedimiento se efectúa en el plano físico y no en un “nivel intermedio entre el plano físico y el plano astral” como lo afirma Anglada.
 
William Judge explicó que:
 
« Cuando el cuerpo está rígido y los ojos cerrados, todas las fuerzas del cuerpo y de la mente se precipitan a través del cerebro y por una serie de imágenes, la vida entera que apenas acaba de terminar queda indeleblemente grabada en el hombre interno, no solamente en una forma general, sino también hasta en los más mínimos y fugaces detalles. En ese momento, aunque todas las señales conducen al médico a pronunciar la muerte y aunque en realidad para esta vida la persona está muerta, el hombre interior (el Ego) está muy activo en el cerebro y hasta que esa tarea [de recapitulación de los recuerdos de su vida] esté terminada no se puede decir que la persona ha fallecido en realidad. »
(El Océano de la Teosofía, p.99)
 
Y esto también lo aseveró el maestro Kuthumi:
 
« Tales pensamientos son involuntarios y no tenemos más control sobre ellos que el que tendríamos sobre la retina del ojo para evitar que perciba el color que más le afecta. Al último momento, toda nuestra vida se refleja en nuestra memoria, y desde todos los escondrijos y rincones olvidados emergen una imagen tras otra, y un acontecimiento después del otro. El cerebro agonizante desaloja la memoria con un fuerte impulso supremo, y la memoria restaura fielmente toda impresión que se haya confiado durante el periodo de actividad del cerebro. . . . El hombre puede muy frecuentemente parecer ya estar muerto. Sin embargo, desde la última pulsación, y entre el último latido de su corazón y el momento en que la última chispa de calor abandone el cuerpo – el cerebro piensa y el Ego ve su vida pasar en esos pocos breves segundos. »
(Carta Mahatma 23b, p.170)
 
 
 
Otro ejemplo de error es cuando Alice Bailey dice que:
 
« Después de la muerte no sucede lo mismo, porque el hombre encuentra en el más allá a quienes conoce y se vincularon con él en la vida del plano físico, y nunca está solo, como el ser humano entiende la soledad; y también es consciente de los que poseen aún cuerpos físicos, puede verlos, captar sus emociones y también sus pensamientos. »
(La Curación Esotérica, p.290)
 
Pero eso es incorrecto porque el maestro Kuthumi especificó que después de morir la inmensa mayoría de los humanos pierden la conciencia y entran en un profundo sueño:
 
« Cuando el hombre muere, su mental (el quinto principio) se hace inconsciente y pierde toda rememoración de las cosas internas al igual que externas. Ya sea que su estancia en el Kama-Loka tenga que durar solo unos pocos momentos, horas, días, semanas, meses o años; ya sea que haya muerto de muerte natural o violenta; ya sea que haya ocurrido en su juventud o en su vejez; y ya sea que el Ego haya sido bueno, malo o indiferente. Su consciencia lo abandona tan súbitamente como la llama abandona el pabilo cuando se apaga.
. . .
La conciencia comienza a revivir después de la lucha en el Kama-Loka, a la puerta del Devachan, y solo después del “periodo de gestación”. »
(Cartas Mahatmas 20C, p128 y 25, p199)
 
 
 
Y otro ejemplo de error es el que comete también Alice Bailey cuando dice que:
 
« La primera etapa consiste en retirar la fuerza vital del vehículo etérico del triple cuerpo físico, la segunda etapa consiste en retirar la fuerza vital del cuerpo etérico y en desvitalizarlo. La tercera etapa consiste en retirar la fuerza vital de la forma astral o emocional. Y la etapa final para el ser humano consiste en retirar la fuerza vital de su vehículo mental. Las fuerzas vitales después de esta cuádruple abstracción son centralizadas totalmente en el alma. »
(La Curación Esotérica, p.306)
 
Pero esto es incorrecto porque Blavatsky explicó que el cuerpo energético es el que mantiene funcionando a la parte del hombre que es mortal, o sea al cuaternario inferior y que está compuesto por:
 
   -  El cuerpo de las pasiones y los deseos
   -  El cuerpo astral
   -  El cuerpo energético
   -  El cuerpo físico
 
(Ver La Clave de la Teosofía, p.91)
 
Entonces no es que la fuerza vital se vaya retirando de cada cuerpo (como lo afirma Bailey) sino que cuando el cuerpo energético se acaba, los otros cuerpos comienzan progresivamente a desintegrarse: primero el cuerpo físico, luego el cuerpo astral y luego el cuerpo de las pasiones y los deseos, y en lo que concierne al mental inferior depende.
 
La parte buena asciende a la triada superior (que es la parte inmortal del hombre) mientras que la parte mala se desintegra también con el cuerpo de las pasiones y los deseos.
 
Y las fuerzas vitales después de ese procedimiento no son centralizadas totalmente en el alma (como lo afirma Bailey) sino que quedan inscritas en las skandhas, las cuales se guardan en el huevo áurico, no en el alma, y van a volverse a generar en la siguiente reencarnación.
 
 
 
 
 
 
CONCLUSIÓN
 
Como ustedes mismos lo pueden constatar hay muchos errores y falsedades en las explicaciones que dieron Bailey y Anglada. Así es que si ustedes quieren saber realmente lo que enseñaron los Maestros transhimaláyicos sobre lo que sucede después de morir, les recomiendo que estudien directamente lo que esos maestros dijeron en las Cartas Mahatma, y también lo que enseñaron sus verdaderos discípulos que fueron Helena Blavatsky y William Judge; y todo eso se los estoy recopilando en este otro link.
 
Mientras que las explicaciones que dieron los dizques instructores esotéricos que posteriormente fueron surgiendo: Charles Leadbeater, Annie Besant, Rudolf Steiner, Max Heindel, Alice Bailey, Omraam Mikhael Aivanhov, Vicente Beltran Anglada, Jorge Angel Livraga, etc.
 
Esos individuos no se los recomiendo porque dan explicaciones basadas en la Teosofía original, pero con muchas tergiversaciones, errores, mentiras e inventos.
 
José Rubio Sánchez es un increíble investigador, pero él comete un gran error al mezclar verdaderos instructores con embusteros.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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