Solnaciente:
Analizo una parte de mi vida, como una reflexión propia y también si eso
permite que otras personas puedan reflexionar sobre el motivo por el que nos
sometemos a voluntades ajenas, sean sectas o ideas impuestas.
Existen,
como la mala hierba, infinidad de vendedores de ideales, religiosos, políticos,
comerciales, etc., con mentes muy astutas que utilizan su inteligencia para
explotar a mentes ingenuas y frustradas.
Existe
una etapa en mi vida, con toda la fuerza de mi juventud que uno quiere hacer
cosas diferentes. Uno quiere brillar, deslumbrar a mis padres que siempre
esperaron que tuviéramos mucho éxito y dinero, o por lo menos esperaban que
fuéramos mejores que el vecino. Uno tiene la sensación de que nunca cumple
nuestras expectativas que son las expectativas de nuestros papas y mamas.
Entonces
aparecen las frustraciones por que me comparo con los que soy y lo que yo
quiero ser, las envidias con los que aparentan ser y que yo desearía ser.
Intentos de triunfos materiales y fracasos.
Entonces
uno, dice: tiene que haber algo más, algo más que te haga feliz que lo
material”, pero es la misma frustración la que te lleva a pensar esto. No
puedes llegar a lo alto y brillar en el lado material, pero tiene que haber
algo que no sea material y en donde puedas brillar.
Entonces
me encuentro con la gnosis, con una persona que tenia algo especial, yo también
quería sentirme así, ser así: especial, diferente. La gente la escuchaba, la
respetaba, tenia una aparente seguridad en si misma, (después me decepcionó muy
profundamente) mi profesora, ella se convirtió en el referente de mi vida, una
autoridad, después que me independicé de mi padre, ella fue mi segunda
autoridad.
Hasta
que conseguí ser como mi profesora, me hice profesor, me sentía pleno, con
poder, aunque fuera sobre un pequeño grupo de estudiantes. En la fiesta de
clausura me sentía transformado, mi ego se había engrandecido.
(SI,
SEÑOR ERNESTO BARÓN, EL EGO EN EL C.E.A NO SOLO SE HACE MÁS GRANDE SINO QUE SE
HACE INSOPORTABLE.)
Por
lo tanto, con el trabajo, el esfuerzo, el compromiso que me costó llegar hasta
donde llegué, después de hacerme profesor, empecé a confesar y a comulgar con
ruedas de molino. Y me mantuve tragando insultos, humillaciones, frustraciones
sexuales, chantajes morales, y no solamente toleraba este juego sino que
también lo jugaba.
En
el fondo de mi alma sabia que aquello era una hipocresía, una falsedad, pero mi
ego ya estaba consagrado, mi ego había jurado y por fin me sentía diferente del
común de los mortales. Mi ego fue el que me llevó al C.E.A, pero gracias a Dios
mi alma me sacó.
Maat:
No fue tu ego, Solnaciente, el que te llevó al CEA, fueron las redes tendidas
por los sirvientes de un conocimiento que nació enfermo y sesgado, visión de
una negatividad interesada dirigida a obtener poder y subyugar las mentes y
sustentado por unos fieles y buenos aprendices, ellos mismos, los primeros
afectados.
Se
ha jugado demasiado con el ego, como culpable de todos males y del alma como la
solución. Verdad o no es un juego que ellos han usado demasiado
superficialmente para acomodar a su voluntad e intereses por crear mentes
serviles y personas supeditas y serviciales subyugadas a su voluntad.
Solnaciente:
Maat, cuando tienes claridad y lucidez no caes en ninguna red, la esquivas y emprendes
otro camino. Optamos por un conocimiento sesgado y enfermo por que nuestra
mente esta también confusa y enferma. Fieles y aprendices afectados son ellos y
hemos sido nosotros.
Yo
creo que la ego no hay que juzgarlo, creo que el ego hay que estudiarlo y
conocerlo, y como dices, no superficialmente, sino profundamente y como una
realidad que nos lleva a tomar un rumbo determinado en nuestras vidas.
Robín:
Gracias Solnaciente por tu reflexión, en la que me identifico bastante porque
pasé algo muy similar a tu experiencia. Y al final nos lleva a considerar que
esos grupos tipo CEA corresponden a una espera, a deseos muy humanos, y más con
jóvenes que buscan un sentido a su vida viéndose no adaptados a la sociedad tal
como está constituida.
Podríamos
decir que muchos grupos incluso no "espirituales" llevan el ser
humano a fortificar sus frustraciones y equivocaciones en vez de curarlas. Si
las agrupaciones "normales" (políticas, científicas, artísticas,
deportistas etc.) fueran tan sabias, ¿cómo podríamos explicar tantos
sufrimientos?
Pero
la falta principal del CEA es precisamente considerarse como escuela superior
("universidad del alma" como se decía en un tiempo) posesora de una
verdad absoluta. Eso resulta ser muy atractivo para personas con inseguridades.
Muchos
seres humanos llevan esta búsqueda del "absoluto" por miedos,
frustraciones, falta de auto estima y mientras esa debilidades existan, falsos
profetas como Ernesto Barón y tanto otros se aprovecharán de ello.
Hoy
por hoy no sabría definir lo que es el "alma". Lo que sé es que uno
entra en este tipo de asociación por falta de equilibrio psicológico, falta de
adaptación a la sociedad actual y sale... por las mismas razones.
Al
final el CEA es el reflejo de nuestro mundo, con las mismas deficiencias (pero
con una intensidad muchas veces superior a causa del fanatismo) y mismas
virtudes; pero es ilusión creer que puede llevar a un "mejor".
Lycanthia:
Estas sectas siempre se aprovechan justamente de nuestras carencias, de
nuestras heridas emocionales, psicológicas. Todos queremos o hemos querido
hacer que nuestros padres se sientan orgullosos de nosotros, hacerlos felices a
ellos a través de nuestros logros.
Como
muchos, has sido otra víctima más de mitómanos fanáticos, con delirios
místicos, seguidores e idólatras de autoproclamados maestros inescrupulosos;
basta ver sus ojos para notar que por ahí, no se asoma ni un ápice de
sabiduría.
Saludos.
Saludos.
Armann:
Será el ego, será el alma, lo importante es darse uno cuenta de que algo está
mal en nuestra vida y hacer algo al respecto, y mientras más pronto mejor.
Aunque
no sea posible conocer a todas las sectas y a todos los instructores, en
algunos temas de éste foro se exponen puntos en común entre la forma de
"trabajar" de las sectas y las personas que caen en sus redes, aunque
la vida y forma de pensar de cada persona es única.
Ricky:
Pienso que hay que extremar la precaución en ocupar cierta clase de terminología
como la que se ocupa en esa religión samaeliana, en donde el ego que lo definían
como nuestros simples errores, para luego y acorde al adoctrinamiento se
inculcaba majaderamente en los estudiantes que este, aparte de ser un simple
defecto humano, era una legión de demonios que personificaban nuestros errores,
los que tenían forma y vida propia, siendo perfectamente distinguibles en el
astral y en otras dimensiones paralelas los que entraban y salían de nuestro
cuerpo (a voluntad propia pues cada cual tiene la suya) tomando control de
nuestra mente, de nuestro corazón y de nuestro sexo de instante en instante.
Lo
peor de esta visión es que su contraparte, que era la esencia, budhata o
nuestra alma, que más bien no era de nosotros pues estaba contenida en un 97%
dentro de los mismos egos, y solo teníamos un 3% de esta libre de los demonios,
pero para rematarnos respecto a esta teoría, la que estaba libre estaba
profundamente dormida, y de ahí que si le preguntamos a la mayoría de la gente
respecto a nuestro salvador, la mayoría no lo reconoce ni ha escuchado nunca su
nombre ni siquiera en pelea de cantina.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario