A esta pregunta el maestro Pastor respondió
lo siguiente:
« No hay ningún secreto y simplemente se requiere la necesidad
de cohesión del grupo. Cualquiera que sean las características de sus miembros,
el nivel de su desarrollo, el poder que tengan, el estado de su psique, etc. Cualquiera
que sea la naturaleza de todo eso, nada de eso importa para que el grupo sea
espiritualmente eficiente.
Y cuando les digo eso, no significa
que todo lo que les acabo de mencionar no sea importante, sino que a pesar de las
grandes diferencias que puedan haber entre los miembros que componen a un grupo,
aún así el trabajo se puede realizar siempre y cuando haya cohesión en el grupo
porque lo que cuenta para un grupo, y cualquiera que sea su nivel, es la
cohesión.
¿Por qué la
cohesión?
Porque la cohesión es el principio
mismo de la formación del Universo. ¿Qué hacen los átomos cuando quieren
construir un cuerpo, cuando quieren construir un planeta, cuando quieren
construir la materia?
Inmediatamente hacen una cohesión
porque solamente es a través de esa cohesión que los átomos pueden sostenerse
mutuamente, hacer una base, y sobre esa base puede surgir la estructura.
Así que sin importar cual sea vuestro
nivel, no se digan a ustedes mismos:
"¿Pero qué
rituales tengo que hacer? ¿Cuánta meditación debo efectuar este año? ¿Qué
mantras debo repetir? ¿Qué chakra debo abrir? ¿Qué estado de conciencia debo
alcanzar? Y para llevar a cabo todo eso,
¿qué método debo emplear?"
No
No se
compliquen la existencia porque todo eso es secundario.
Si me permito venir a hablar con
ustedes y darles algunas ideas, es porque ustedes son dignos de ellas, y si los
encuentro dignos de ellas, es porque también los encuentro dignos de
transmitirlas también. No es solo agua puesta en una olla hermética, es agua
puesta en las manos de aquellos que les pido que la lleven también a las otras
personas.
Nuestro objetivo no es trabajar solo
con iniciados, con seres iluminados. Nuestro objetivo es trabajar con todos
incluidos los más pequeños. Y cuando hablo de los más pequeños (y al decir esto
no estoy citando a nadie de aquí en personal) es para explicarles que podemos también
trabajar con los más pequeños, pero solo si estos se asocian con la ley misma de
la formación del Universo.
¿Y cuál es esa
ley?
Es la cohesión
¿Qué quiere
decir eso?
Significa convicción de vuestro rol,
ya sea del objetivo de lo que tienen que hacer, o de la energía que pasará a través
de ustedes, o del plan que se tiene que establecer, etc. La fe y la convicción,
eso es lo que le da solidez, y esta solidez es lo que les permitirá hacer vuestro
trabajo.
Se dice que Dios es un gran
arquitecto, y por ello ustedes deben mirar las leyes de la arquitectura. ¿Cuáles
son las reglas de la arquitectura cuando se quiere construir algo que se
mantenga y no algo efímero que solo estará de moda por un tiempo pero que luego
desaparecerá como sucede con muchos grupos?
La respuesta es tener buenas bases,
y por consiguiente todo lo que ustedes quieran construir, incluso si es algo
intelectual, tiene que basarse en las leyes divinas, en las leyes de la gran
arquitectura cósmica.
¿Y cuáles son
esas leyes?
En primer lugar son los pilares.
Para todo lo que queremos construir
hay una base fundamental, un cimiento en la tierra profundo como las raíces de
un árbol. Observen los árboles, ellos no crecen en el aire, y las flores
tampoco crecen así. Todas las plantas tienen raíces, cimientos profundos en la
tierra donde encuentran precisamente su fundamento y extraen una sustancia que
es vital para ellas.
Así que la cohesión también será una
base para ustedes, y una base que les aportará también una sustancia. ¿Pero qué sustancia? Para la flor, para el árbol, es una sustancia de
vitalidad y para ustedes será una sustancia, yo diría casi intelectual.
¿Por qué la
nombro intelectual?
Porque esa substancia se sentirá y se
experimentará a ese nivel. Los individuos que pertenecen a un grupo, si sienten
que ese grupo tiene cimientos sólidos, convicciones sólidas, entonces en el
momento en que surgirá un obstáculo o surgirá la duda, ellos se alimentarán de
la raíz de la cohesión de ese grupo, y así ese grupo podrá continuar existiendo.
De lo contrario tan pronto como un
individuo del grupo encuentre un obstáculo o una prueba, éste puede
desarmonizar a todo el grupo, y el grupo por culpa de un individuo puede incluso
colapsar.
Así que construyan como un buen arquitecto,
y sin importar lo que hagan siempre sigan las leyes divinas, porque como les he
dicho muchas veces, todo lo que está abajo es como lo que está arriba y solo varía
en la intensidad, en la magnitud. Entonces todo lo que es construido por Dios,
por los arcángeles, por los ángeles, los maestros, los iniciados, los guías o
los hombres, debe de ser construido con las mismas leyes.
¿Por qué un constructor
inventaría otro tipo de construcción y decidiría primero poner los muros antes que
los cimientos, cuando la experiencia de miles de años les ha mostrado a los
constructores que primero hay que comenzar por la base?
Eso solo
conducirá al desastre.
Así es que aprovechen de la
experiencia de los demás.
¿Y cuál es esa
experiencia?
Como les dije: cohesión, enfoquen
sus mentes en el mismo sentido de interés. Es absolutamente necesario construir
una convicción.
Al inicio es un trabajo individual,
pero luego se armoniza con el grupo para que así todas las convicciones se junten
y se conviertan en una, y de esta forma se conviertan en un egregor. Pero
inicialmente la convicción se establece de forma individual y esa es la parte
del trabajo que ustedes tienen que hacer en estos momentos por vuestra cuenta.
Esa labor ustedes pueden llamarla
esfuerzo, pero yo prefiero llamarla simplemente conciencia.
¿Quieren servir
o no, quieren ayudar a la humanidad o no, quieren ser los constructores del
nuevo mundo o no?
Y desde el momento en que han
elegido y no siguen dando vueltas al asunto, sino desde el momento en que han
elegido un sí o un no, entonces ya no hay nada más que discutir y vuestra
convicción está hecha.
Mientras que en cambio sigan
arguyendo motivos para no hacerlo o razones por las que tal vez podrían hacerlo;
por el simple hecho de buscar razones eso muestra que la persona todavía no ha
adquirido una convicción debido a que no es necesario tener razones o
motivaciones. Simplemente están dispuestos a hacerlo o no, así de simple.
Lo que es de la naturaleza del
servicio, lo que es de la disposición al servicio es algo que está dentro del
individuo. Es una naturaleza. Entonces no podemos inventarlo, no podemos
encontrar motivos para serlo, no podemos encontrar razones para convertirnos en
eso. Uno lo es o no lo es.
Ese estado de ánimo selecciona
demasiado a las personas, y eso es lo que yo tendería a hacer en la medida en
que quisiera construir un grupo. Habría que tener ese rigor, y un rigor no frío,
sino simplemente franco.
Pero luego, cuando el grupo ya esté
edificado, los futuros servidores que puedan añadirse, con ellos si sean más
flexibles porque ellos ya no serán la base del grupo, sino que serán las alas
del grupo. Y así podrán permitirles menos integración porque precisamente para
ellos se les puede ofrecer (presentado un poco como una prueba) la oportunidad
de mostrar o la oportunidad de sentir lo que significa servir.
Porque cada vez hay algún tipo de
calvario. Ustedes por ejemplo hoy vienen diciéndome que quieren servir. Pero no
es hoy que les llevó de repente a querer servir o tener la naturaleza o el
espíritu de servir, es porque en el pasado han podido probar lo que es el
servicio, y pudieron experimentar lo que significaba servir. Así que ya tienen adquirido
en vuestro interior la convicción o el estado de ánimo, y en todo caso la
experiencia que les permite comprometerse o retirarse, ir de manera solitaria o
formar un grupo.
En cambio para los que vendrán
después, para ellos tengan esa generosidad de la que les he estado hablando,
porque primero ellos necesitarán sentir para saber y conocerse, y así podrán
decidir después. Pero en cuanto a ustedes, sean francos con ustedes mismos y no
tengan miedo de decirlo.
Sobre todo no teman y no confundan
la franqueza hacia los demás con la franqueza hacia ustedes mismos, que es un
acto de amor, porque entonces la vergüenza podría surgir en ustedes mismos si
están obligados a reconocer que en el fondo no se sienten dispuestos todavía a esa
naturaleza del servicio.
Y si reconocen que todavía no se
sienten dispuestos para servir, nadie de nosotros [los maestros] los va a
juzgar ni mirar feo, porque simplemente comprendemos que ustedes todavía
necesitan experimentar cosas por ustedes mismos, todavía están en esa etapa de formación
para volverse soles que posteriormente iluminarán a los demás. Así que por
favor de la de claridad, de la franqueza y de la autenticidad.
Entonces para terminar con vuestra
pregunta, cuando un grupo quiere formarse, al menos debe ser genuino, y este
grupo únicamente puede ser genuino si es animado por la verdad, llevado por la
verdad, iluminado por la verdad, y si los individuos que lo componen son ellos mismos
llevados por la verdad. O sea que si por lo tanto han sabido aclararse,
encontrar sus caminos, reconocerse como son, sin avergonzarse ni asustarse, y
entonces a pesar de vuestras diferencias laborar con cohesión. »
(Conferencia
del 04.07.85)
Y porque la.sociedad teosófica fracasó tan rápido, la menos yo veía una buena base con olcot, judge, Hartmann yo veía una buena cohesión pero tan pronto murió bla vatsky todo se vino abajo
ResponderBorrarY porque la.sociedad teosófica fracasó tan rápido, la menos yo veía una buena base con olcot, judge, Hartmann yo veía una buena cohesión pero tan pronto murió bla vatsky todo se vino abajo
ResponderBorrarLa Sociedad Teosófica no tuvo una buena cohesión y es por eso que cuando llegó la primera prueba con el ataque de los coulomb y los misioneros esa organización se resquebrajó. Pero además yo sospecho que la Logia negra estuvo particularmente luchando para desvirtuar a esa institución.
BorrarVamos a ver. Me ha gustado el final de la explicación y la necesidad de que haya franqueza sobre el tema el servicio, porque éste ha sido y sigue siendo precisamente la excusa para usar y abusar de la gente que entra a instituciones donde se supone que se enfocan en el desarrollo "espiritual". ¿Porqué? Por la sencilla razón que cuando los abusadores notan que alguien tiene energía, entusiasmo y la apertura par colaborar, le caen con todo y ese servicio espontáneo poco a poco se vuelve obligación. Por otro lado me he vuelto muy escéptico de la relación maestro-discípulo, la cual también se vuelve muy proclive a la manipulación, al fingimiento por parte de los que usan una máscara de "maestro" y también por parte de los supuestos discípulos que cuando están en instituciones con mucha gente, se vuelven competitivos, egoístas, vanidosos o aduladores. Todo eso lo leí en la historia de la ST y lo vi en Nueva Acrópolis. Así que bajo mi punto de vista las instituciones son, todas por igual, corruptibles, y por tanto, yo no recomendaría buscar en ninguna de ellas, el despertar espiritual. Eso si, es bueno conocerlas para entender las razones de su ineficacia. Y sobre la cohesión, bueno...eso no existe. Es un imposible. O por lo menos, no significa pureza de objetivos. Mantener la cohesión no significa necesariamente ser espiritual. Hay organizaciones hasta de crimen organizado que están muy cohesionadas. A veces creo que el verdadero camino es totalmente individual. Al menos la parte más importante del sendero. Es más fácil estar cohesionado para el mal que para el bien.
ResponderBorrar