En
su libro “El Quinto Evangelio”,
Rudolf Steiner escribió lo siguiente:
« Voy
a relatar algunos pormenores de la vida de Jesús:
A
partir de los doce años de edad. Fue esta la edad en que, como ya sabemos, por
un acto místico, el yo de Zoroastro, que se había incorporado en uno de los dos
niños Jesús que en aquel tiempo habían nacido, pasó al otro niño Jesús, o sea,
al que principalmente en los primeros capítulos del Evangelio de Lucas se
describe.
Comenzaremos
pues nuestro relato con el instante de la vida de Jesús de Nazaret en que el
niño Jesús del Evangelio de Lucas había acogido en sí mismo el yo de Zoroastro.
Sabemos que en el Evangelio se alude a este instante de la vida de Jesús de Nazaret,
por el relato de que, en oportunidad de un viaje a Jerusalén, para la fiesta de
Pascua, se había extraviado el niño Jesús del Evangelio de Lucas y al ser
hallado, estuvo sentado en medio de los doctores, y todos se pasmaban de sus
poderosas respuestas.
Y
también sabemos que esas grandiosas respuestas se debían a que en el yo de
Zoroastro todo cuanto le surgía como por recuerdo espiritualmente revelado, se
traducía en las sorprendentes respuestas de Jesús de Nazareth.
Y
Sabemos, además, que por la muerte de la madre, por un lado, y del padre, por
el otro lado, se unieron las dos familias en una sola, en la cual siguió
viviendo el niño Jesús fecundado por el yo de Zoroastro. »
(Capítulo
4)
Y
como ustedes mismos lo pueden leer, la respuesta que dio Rudolf Steiner a la
pregunta que les puse arriba, es porque el espíritu de Zoroastro entró en el cuerpo
de Jesús cuando este cumplió los doce años, y debido a la gran sabiduría que
poseía Zoroastro, este pudo impresionar a los rabinos.
Y
no sé ustedes, pero esto me suena tremendamente fantasioso, y más que en ninguna
enseñanza esotérica se menciona semejante historia.
Pero
además, Rudolf Steiner explica el asunto de una forma todavía mucho más enajenada
porque él asegura que en realidad existían dos parejas (cuyos dos hombres se
llamaban José, y las dos mujeres se llamaban María).
Y
las dos parejas tuvieron al mismo tiempo un niño, al cual en los dos casos lo
llamaron Jesús.
Y
el espíritu de Zoroastro vivía en uno de ellos, pero cuando cumplieron los doce
años, el espíritu de Zoroastro se fue a vivir al cuerpo del otro niño Jesús.
Y
luego el hombre de una de las parejas murió, y la mujer de la otra pareja también
murió, y las dos personas restantes se juntaron para formar una nueva pareja,
en la cual siguió viviendo “el niño Jesús fecundado por el espíritu de
Zoroastro”.
Y
como ustedes lo pueden constatar, la explicación que da Rudolf Steiner se
vuelve tremendamente disparatada.
~ *
~
Y este es un ejemplo
más de a qué punto los relatos de Rudolf Steiner pueden ser impresionantemente
delirantes.
Cid que piensas de crowley que te parece interesante de el?
ResponderBorrarFue muy charlatán
BorrarLlevas el nombre del Campeador, y sí, pareces campear por tus dominios, pero mucho me temo que no eres capaz de atisbar más allá del Umbral para vislumbrar el Resplandor de la Ciencia Espiritual de orientación Antroposófica. Te deseo que algún día puedas acceder a la Quintaesencia del Gran Arcano Hermético de la Gran Obra. Que puedas apreciar el auténtico Dharma Universal de la SOFÍA DIVINA Y el LOGOS CRISTO JESÚS.
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