EL PRIMER GRAN TEMPLO QUE TUVO AMORC

 
 
 
 
Fue un edificio ubicado en Nueva York en 70 West 87th street, y sobre este inmueble Harvey Spencer Lewis, el fundador de AMORC, en su revista The American Rosae Crucis de febrero de 1916 informó que estaba buscando un inmueble para instalar ahí su templo:
 
« Se están considerando nuevamente los planes para una sede permanente en la ciudad de Nueva York, en la que se albergará la Biblioteca Rosacruz Americana, la Gran Logia, las Oficinas Ejecutivas Nacionales, los Laboratorios Rosacruz y posiblemente el Colegio Rosacruz. La dificultad parece estar en la cuestión de la ubicación. Es necesario un edificio grande y este debe estar convenientemente ubicado para todos los medios de tránsito. Se espera que para el comienzo del Año Nuevo de R. C. el 21 de marzo, se haya encontrado y preparado un lugar para la Cena Anual y el nombramiento de los nuevos Oficiales. »
(p.28)
 
 
 
 
Luego en su revista The American Rosae Crucis de marzo de 1916 Lewis escribió:
 
«
 
EL PRIMER TEMPLO ROSACRUZ EN LOS ESTADOS UNIDOS
 
El hogar de la Gran Logia en la ciudad de Nueva York
 
¡Por fin América tiene su propio Templo Rosacruz!  En estas pocas palabras se expresa la realización de un siglo de sueños y una vida de esperanzas. Encarnados en un monumento material están los planes y perspectivas de todo el movimiento Rosacruciano en los Estados Unidos. Este magnífico inmueble no es solo el hogar de la Gran Logia, sino la misma pirámide de la orden de América.
 
Es con considerable orgullo que ilustramos y describimos este Templo, situado en el corazón de la ciudad de Nueva York, en un distrito residencial selecto, alejado de los negocios y el comercio, tiene un entorno ideal.
 
Su apariencia exterior es digna y más bien simbólica. La parte inferior del edificio es de piedra marrón mientras que la parte superior es de ladrillo rojo. Tiene cinco pisos y está rematado con el triángulo significativo, como se muestra en la ilustración abajo adjunta.
 
El primer piso, al que se accede por una amplia escalera, contiene un amplio salón de recepción desde el cual se puede ingresar a la Oficina Ejecutiva o al Templo de la Gran Logia.
 
La Oficina Ejecutiva está ricamente amueblada y aquí se encuentran los escritorios del Imperator, el Secretario General, el Prelado y el Editor de nuestra revista The American Rosae Crucis. Junto a esto se encuentra la sala de recepción y música donde cada visitante tendrá todas las facilidades para una charla tranquila y una o dos horas de música y lectura.
 
Luego, en la parte trasera del piso está el Templo, grande y conveniente, con su plataforma triangular y el altar y los demás artículos de todo el equipo de la Logia. Este Templo está decorado en rojo con carpintería y paneles negros, y bellamente iluminado con luces eléctricas a los lados de la sala en el centro del techo.
 
Hay una pequeña alcoba contigua al Templo que proporciona espacio para el equipo eléctrico experimental y la estación de telégrafo inalámbrico perteneciente a la Gran Logia. En la parte trasera del Templo está el laboratorio químico, físico y eléctrico para la realización de investigaciones rosacruces y la prueba de ciertas leyes y principios.
 
En el segundo piso al frente se encuentra la biblioteca y el baño de la Gran Logia. Esta será la Biblioteca Rosacruciana más grande de América tan pronto como se instalen todos los libros y se reciban todos de aquellos que han estado guardando sus contribuciones de libros hasta que se estableció dicha biblioteca.
 
En el tercer piso, en la parte trasera, hay un jardín de verano al aire libre para recreación y estudio. En el cuarto piso hay una habitación que está siendo planeada como un laboratorio fotográfico experimental para trabajos de líneas especiales que están ocupando la atención de los rosacrucianos en muchos países.
 
Además de estas habitaciones, hay una serie de cámaras de invitados ocupadas por los encargados del Templo y por algunos que simpatizan con nuestro trabajo.
 
En definitiva, se trata de un Templo del que todo rosacruciano estará orgulloso. Estaremos encantados de que miembros de nuestra Orden de cualquier ciudad nos visiten en cualquier momento y disfruten de nuestras habitaciones y de las instalaciones para el estudio y el placer que se les brindan en todas las formas posibles. Así mismo estaremos encantados de recibir donaciones de nuestros amigos y también cuadros y antigüedades.

»
(p.9)
 
 
 
Posteriormente en 1918 Lewis trasladó el templo de AMORC a la mansión ubicada en 361 West 23rd Street que había sido la casa de la célebre cantante americana Lily Langtry.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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