LISTA DE CAPÍTULOS

EL CONCEPTO DE ALAYA-VIJNANA EXPLICADO POR ALEXANDRA DAVID-NÉEL




En el libro “Las Enseñanzas Secretas de los Buddhistas Tibetanos”, Alexandra David-Néel da a conocer el concepto profundo de Alaya-Vijnana o la conciencia almacén como también es conocida.

Recordemos que Alexandra David-Néel tuvo contacto directo con estas enseñanzas cuando ella estuvo en el Tíbet aprendiendo de varios Lamas, y lo que posteriormente ella trasmitió en sus libros. Y sobre este tema ella nos dice lo siguiente:


« En el Buddhismo tardío, es decir entre los siglos V y VI, se cedió un lugar importante a las teorías relacionadas con el Alaya-Vijnana. Estas no fueron inventadas precisamente en esa época, existían anteriormente en germen, pero el haberlas puesto de relieve y su desarrollo fue obra del Mahayana.

Alaya es un término sánscrito que significa morada, receptáculo, depósito. Lo hallamos en el nombre muy conocido de la elevada cadena de montañas que separa a la India del Tíbet: Himalaya, es decir morada o receptáculo de las nieves. Y Alaya-Vijnana es por consiguiente un receptáculo de conciencia-conocimiento.

El lector debe recordar que en el Buddhismo el término "conciencia" siempre significa "conocimiento" o "tomar conciencia de una cosa". En decir, se trata de saber, pero no como la facultad mental imaginaria del imperativo de Kant.

(Nota: El imperativo categórico de la ética kantiana pretende ser un mandamiento autónomo y autosuficiente, no dependiente de ninguna religión ni ideología, capaz de regir el comportamiento humano.)


El Alaya-Vijnana, receptáculo de conocimiento-conciencia, no se menciona en absoluto en el Tíbet, en las enseñanzas populares de grado elemental. La encontramos en el grado “nang” o las enseñanzas "interiores" y en los “sangswaidamngags” (fonética) o las enseñanzas orales secretas.

¿Y qué nos dicen estas enseñanzas?

Nos dicen que toda acción física o mental, todo movimiento que se produce en el dominio de la materia grosera o en el del espíritu (entiéndase como principio mental), da lugar a una emisión de energía (en tibetano: chug, en sánscrito: shakti). Para emplear la expresión usual, toda acción produce una "semilla" (en tibetano: sabon, en sánscrito: bija).

Y esta semilla, lo mismo que todas las semillas materiales, tiende a producir un “algo o un ser” de la misma especie que la del “padre” que ha emitido la “semilla”. Es decir, la semilla de un manzano tiende a producir otro manzano, la semilla de un animal, como un perro o un ave, tiende a producir un perro o un ave.

Y de modo similar, las innumerables semillas-fuerzas proyectadas en el universo por el deseo, la aversión, el amor, el odio y los actos suscitados por esos sentimientos, por el apego a la existencia individual, etc., todas esas semillas tienden a reproducir semillas semejantes a sus padres psíquicos y materiales.

No es necesario para que la siembra tenga lugar que los sentimientos que experimentamos se materialicen en actos. Las aspiraciones que alimentamos sin realizarlas, también aquellas que refrenamos, nuestros pensamientos, sea cual fuere su naturaleza, proyectan incesantemente simientes. Aún más, la actividad oscura que obra sin que lo sepamos en elsubconsciente es uno de los más poderosos focos emisores de simientes.

Entonces, es así que no se produce el menor movimiento —en este mundo que es movimiento— sin que ese movimiento no desencadene otros movimientos, otras manifestaciones de energía tendientes a repeticiones apoyándose en "memorias" (en tibetano: pagtchag, en sánscrito: vasana).

Cada uno de nuestros movimientos físicos o mentales es el fruto de causas que provienen de todo el universo y que repercuten en todo el universo. Así se despliega el juego, sin comienzo concebible, de la actividad que es el universo.

Y de acuerdo con una de las teorías que tratan de la suerte de las semillas-fuerzas proyectadas en el universo, éstas se depositan en un receptáculo (Alaya) donde permanecen en estado de energías latentes que sólo esperan para manifestarse la aparición de condiciones apropiadas, de igual modo que el grano espera para germinar cuando lo pongan en contacto con la tierra húmeda.

Así, mientras que caen continuamente simientes (Bija) en el receptáculo (Alaya), otras se escurren también continuamente bajo la forma de hábitos, de propensiones, de "memorias" (Vasana) de orden físico o de orden psíquico que favorecen la repetición de actos materiales o de actividades mentales que ya se habían producido anteriormente.


¿Cuáles son las "condiciones" que permiten
la germinación de las simientes?

Ellas mismas son el producto de simientes pues nada existe fuera de la ronda de los actos y de sus frutos, del encadenamiento de las causas y los efectos, siendo la causa el efecto de una causa anterior y el efecto deviniendo la causa de otro efecto.

Según la expresión de algunos buddhistas, el Alaya es un "río sin ruptura cuya corriente es perpetua".

Esta comparación de "río que corre" nos lleva lejos de la concepción de una morada o de un receptáculo de simientes, que más bien evoca la idea de la inmovilidad, del estancamiento.

Es así que las enseñanzas orales secretas asumen una posición muy diferente basándose en la impermanencia fundamental de todos los fenómenos y en el hecho que éstos son compuestos e interdependientes.

Las simientes productos de la actividad mental asociada o no a una actividad material, no pueden ser consideradas estables, como todas las formaciones consisten en sucesiones de instantes fugitivos.

¿Qué género de receptáculo, de morada cabe imaginar para contener en un estado de espera, es decir de reposo, lo que es inasible, por carecer de duración apreciable?


En verdad sólo existe el perpetuo fluir, a la vez continuo (nunca se detiene) y discontinuo (consta de movimientos distintos) de los destellos de fuerza: causas y efectos se engendran sin que el padre-causa pueda nunca conocer su progenie-efecto, pues desaparece mientras esta surge o más bien, su desaparición misma es lo que constituye su efecto: el fenómeno nuevo.

En lo que concierne a las simientes, desde su origen son compuestos, es decir que contienen elementos diferentes.

Una simiente antes de producir su efecto sufrirá forzosamente múltiples contactos con otras simientes y al superponerse en diferentes sentidos, pocas veces una de ellas adoptará exactamente la forma de otra. Así, como consecuencia de estos contactos, de estas superposiciones, las simientes e improntas tomarán una naturaleza más o menos diferente de su naturaleza original.

(Nota: esto excluye la posibilidad de cualquier profecía definitiva. Algunos pensaron que si se pudieran conocer todas las causas que existen en el momento presente, se podrían prever los efectos y contemplar así el cuadro del porvenir. Pero Alexandra David-Néel, señala que esta idea es rechazada en las enseñanzas orales.)


Los tibetanos tradujeron Alaya-Vijnana por “kun ji namparshespa”. Esta traducción no sería exacta pero lo importante es el significado que los tibetanos dan a ese término en sus enseñanzas secretas.

La idea de "receptáculo" no puede aplicarse a kun ji (fonética).

  • “Ji” (ortografía gzi) significa base, fundamento. Se llama “ji” a un bien patrimonial. El “ji” de un individuo es el domicilio que antes de ser de él, ha sido el de la casta familiar de la cual surgió. “Ji” se aplica también a los cimientos de un edificio, no importa qué cosa sobre la cual algo descansa.
  • “Kun” significa simplemente: "todo".
  • En cuanto a “namparshespa”, “nampar” que quiere decir "perfectamente" y “shespa” que significa "saber", "conocer".

En suma, “Kun ji namparshespa” significa "saber-conocimiento base de todo" o "el conocimiento fundamental".

Cabe aclarar que el saber, la toma de conciencia de que se trata Alaya-Vijnana NO es en absoluto el Conocimiento superior denominado Shesrab o Prajna (la Sabiduría Trascendental).

El saber que nos es presentado como siendo la base de todo (Alaya-Vijnana) es aquel que distingue, diferencia, que fracciona, distribuye los nombres, las formas, las cualidades, en suma, es aquel que precede al arreglo del mundo. El mundo es su obra.

Pero este saber es engañoso ya que depende de nuestros sentidos, de los cuales cada uno provee su contribución:

-      El conocimiento adquirido por el ojo... formas, colores.
-      El conocimiento adquirido por el oído... sonidos.
-      El conocimiento adquirido por la lengua. . . sabores.
-      El conocimiento adquirido por la nariz. . . olores.
-      El conocimiento adquirido por el conjunto de la epidermis. . .  tacto.
-      El conocimiento adquirido por el espíritu, es decir por los contactos mentales. . .  ideas.

Y se mencionan también otros dos saberes: su significado se aparta sensiblemente de los términos sánscritos.

Uno de ellos se presenta como una suma de los seis saberes ya enumerados, es el saber o conocimiento que posee el espíritu oscurecido (ngongmongspatchangyikyirnam par shespa). Pero de hecho, es un saber falso: es el error que domina al espíritu incorrectamente informado por los sentidos que le comunican sus impresiones siempre viciadas debido a su ineptitud para captar la realidad.

Las nociones falsas que posee el espíritu oscurecido, entenebrecido, se convierten en motivos que incitan a la acción. Una actividad mental basada sobre los saberes erróneos construye sobre estos datos, la imagen de un mundo sin relación alguna con la realidad trascendental.

Es este mundo el que contemplamos como un espectáculo que se despliega fuera de nosotros, cuando de hecho no hay allí sino una tela que lleva dibujos multicolores, como una pantalla de cine, que hemos tejido e impreso en nosotros según las indicaciones de nuestros conocimientos erróneos.

Así, el “Kun ji namparshespa”o “Alaya-Vijnana” formado por las contribuciones de todos los “namparshespas” o “semillas” NO es de ningún modo un receptáculo mítico, sino nuestra propia conciencia-conocimiento (Alaya-Vijnana), base del mundo de los fenómenos de todo nuestro universo.

El "río de corriente a la vez continua y discontinua" hecho de "simientes" no es otra cosa que nuestro “espíritu” en el cual los “namparshespas” o saber-conocimiento, las ideas, etc. que suscita aparecen y desaparecen en series de momentos distintos pero que surgen continuamente.

¿Pero qué se entiende por "espíritu"?


Para expresar eso que se denomina "espíritu", los tibetanos disponen de tres palabras que no son intercambiables: lo, yid, y sems.

  • “Lo” designa todos los “estados del espíritu”, es decir: el estado agitado o calmo, atento, escrutador, distraído, indiferente, impresionable o insensible a las influencias exteriores, inclinado a la discriminación, a la clasificación o no percibiendo las diferencias, el estado imaginativo u ocupado únicamente por los hechos que están a su alcance, el estado comprensivo o entumecido, el estado agitado, apasionado o impasible, el estado que mueve las ideas, las reúne, razona, el estado desalentado, deprimido o vivo, animado, ardiente, etc.
  • “Yid” designa más especialmente el espíritu en cuanto puro intelecto.
  • “Sems” designa al "principio pensante" que distingue a los seres animados de las cosas consideradas como inertes. La concepción exotérica de Semsse aproxima al del “jiva” de los hindúes.

En las enseñanzas secretas, el concepto de “espíritu” que existe separado de los estados, o de los géneros de actividad que lo manifiestan es negado rotundamente.

Samyutta Nikaya dice:

-      "Así como un mono que retoza en el bosque aferra una rama, luego la deja escapar y aferra otra, así lo que es llamado espíritu, pensamiento o conocimiento; se presenta y desaparece en un perpetuo cambio de día y de noche."


El estudiante que aborda las enseñanzas secretas no está solamente familiarizado con la teoría de la impermanencia del “espíritu”, dice Alexandra David-Néel, sino que ha experimentado su exactitud.

En el curso de sus meditaciones, el estudiante al vigilar su espíritu con atención ha alcanzado el lhagthong (viendo más), contemplando la continua aparición y desaparición de las ideas, las voliciones, los recuerdos, etc., que pasan como una procesión de efímeras burbujas que corren río abajo. El estudiante se da cuenta por sí mismo que el "espíritu" no es sino una palabra que sirve para designar un proceso de fenómenos mentales.

Ahora bien, con arreglo a las enseñanzas secretas, lo que es preciso llegar a comprender, a ver, a sentir, es que no existe corriente que sea “mi espíritu”, y de ahí, una pluralidad de corrientes que son los “espíritus” de otros individuos, sino una corriente única que es el “Kun ji namparshespa” o “Alaya-Vijnana”, el conjunto de la actividad mental que obra sin punto de partida conocible.

Es en “eso” donde se baña lo que llamamos “nuestro espíritu” y que nos esforzamos en delimitar y separar.

Pero vano es el esfuerzo, dice Alexandra David-Néel, porque estemos conscientes o no de ello, los pensamientos que pensamos no son nuestros pensamientos, los deseos, las necesidades que experimentamos no son en modo alguno las nuestras, el desenfrenado apego que sentimos por la vida, la sed que tenemos de ella, nada de todo eso es completamente nuestro, todo esto es colectivo, es el río en movimiento, incalculables instantes de conciencia-conocimiento que llegan del impenetrable fondo de las eternidades.

Esto es Maya o la Gran Ilusión.


Y he aquí que se vuelve a encontrar de este modo, bajo otra forma, el concepto del Alaya-Vijnana, la superposición de "simientes" frutos de los actos, que determinan nuevos actos por el efecto de las "memorias" como suelen decir los tibetanos.

Entonces, no basta con solo oír o leer sobre estas enseñanzas. Es necesario experimentarlas directamente por uno mismo a través de lo que los tibetanos llaman la vista penetrante o lhagthong, lo que hace "ver más" que lo que se percibe generalmente, la vista que perfora las apariencias y penetra más allá de las mismas»

(Este es un resumen del capítulo 4)





MABEL COLLINS EXAMINADA POR BASIL CRUMP



Basil Crump fue un miembro muy erudito de la Sociedad Teosófica y sobre Mabel Collins, él escribió lo siguiente:


« La Sra. Mabel Collins es la única hija de Mortimer Collins quien fue un famoso poeta y novelista, y quien fue también el padrastro de mi padre, así es que yo conozco muy bien a Mabel Collins, al punto que yo poseo una copia original de su libro “La Luz en el Sendero” en donde se encuentra la siguiente inscripción escrita con su mano:

« Trabajo realizado bajo Sri: Hilarión, "Luz en el Sendero" que comenzó en octubre de 1884. "Karma" escrito el 27 de diciembre de 1884. Mabel Cook. »

(Mabel Cook es el nombre de casada de Mabel Collins)



Pero debido a un error que hay en ese libro, Blavatsky cuando escribió “La Voz del silencio” en 1889, ella incluyó la siguiente advertencia (pág. 17):

-      "No creáis que la lujuria puede ser eliminada si es gratificada o saciada, ya que esta es una perversión inspirada por Mara [la ilusión terrenal], y al alimentar el vicio este se expande y se vuelve más fuerte, como el gusano que engorda en el corazón de la flor."

Y esto ella lo escribió para contrarrestar el siguiente consejo que se da en el libro “La Luz en el Sendero” (versículo 20):

-      "Busquen [el camino] probando toda la experiencia, utilizando los sentidos para comprender el crecimiento y el significado de la individualidad."

Pero en cambio Blavatsky en La Voz del Silencio advierte:

-      "Desconfía de tus sentidos ya que estos son engañosos."

Y esta es una doctrina fundamental del Raja Yoga (el Dhydna budista). Además Blavatsky explicó que las facultades psíquicas imperfectamente controladas por Mabel Collins habían provocado que ella malinterpretara el pensamiento del Adepto Hilarión.

Mabel Collins (o sea mi tía madrastra tardía) era bien conocida en la familia como una médium innata, y su talento literario heredado de su padre la convirtió en un instrumento útil en ese momento para los maestros. Y es por eso que ella comenzó su entrenamiento oculto bajo la supervisión de Blavatsky quien la colocó bajo la tutela del Adepto Hilarión

Pero ese entrenamiento oculto es muy difícil, Blavatsky dice acerca de  su propio entrenamiento que fue solo después de una lucha terrible y un esfuerzo supremo de voluntad y con la ayuda de sus maestros en el Tíbet, que ella obtuvo el control de sus facultades psíquicas.

En cambio Mabel Collins no fue tan persistente y muy pronto abandonó el movimiento teosófico, y posteriormente incluso negó que Hilarión tuviera algo que ver con su trabajo. »

(Esto se publicó en la revista The Occult Review de agosto de 1928, p.118-119)






Y más tarde un defensor de Mabel Collins envió una carta a esa revista que desafortunadamente no he podido localizar, pero encontré la respuesta que dio Basil Crump:

« Las obras de Mabel Collins posteriores a “Luz en el Sendero” no son del todo confiables, por buenas que estas sean, debido a la separación que ella tuvo con el Adepto Hilarión.

Recuerdo una carta que Blavatsky escribió al periódico espiritista “Light” en donde ella trataba el asunto de Mabel Collins en respuesta a los comentarios de esa revista, y Blavatsky expresó una opinión similar con respecto al otro libro de Collins “A través de las Puertas de Oro“.

El Sr. Whitney dice: "No sé a qué escrituras se refiere el Sr, Crump cuando asegura que Mabel Collins malinterpretó el pensamiento de su maestro".

Pero la interpretación no fue mía, ese pasaje de mi carta decía:


-      "Blavatsky dijo que las facultades psíquicas imperfectamente controladas por Mabel Collins habían provocado que ella malinterpretara el pensamiento del Adepto Hilarión."

Y también dije que el pasaje en La Voz del Silencio (pág. 17) que comienza diciendo "No creas que la lujuria puede ser aniquilada" se incluyó para contrarrestar el consejo dado el la Luz en el Sendero sobre "utilizar los sentidos".

No tengo conocimiento de que Blavatsky haya declarado en ningún lugar por escrito que Mabel Collins había interpretado mal, pero en cambio sí sé que Blavatsky habló de ello a los primeros miembros de la Escuela Esotérica, ya que uno de ellos me lo repitió a mí cuando me uní a esa escuela en 1893, y lo anoté en mi copia.

Y también Blavatsky explicó cómo Hilarión transmitía su mensaje a Mabel Collins de manera telepática y por qué era posible que ocurriera una transmisión imperfecta. Y en este caso no era, de ninguna manera, el de la relación regular entre un discípulo entrenado y completamente comprometido y su Maestro, como lo asume el Sr. Whitney.

Mabel Collins fue una novicia en ocultismo, y su desarrollo psíquico (al igual que Blavatsky durante su infancia y antes de su entrenamiento de muchos años en el Tíbet) fue más un obstáculo y un peligro. Al grado que Mabel Collins solo había estado unos días en la Escuela Esotérica cuando ya surgió la necesidad de la acción de Blavatsky.

Los primeros siete años son siempre probatorios, durante los cuales se debe realizar todo tipo de pruebas, y Mabel Collins no fue la excepción (consulten Las Cartas Mahatma para obtener información valiosa sobre este asunto).

Y sobre este tema puedo decir que cuando mi carta anterior fue publicada en la edición de agosto de la revista “The Canadian Theosophist”, el Sr. Morgan Pryse publicó en el siguiente número un artículo sobre Mabel Collins titulado: "El más grande de los exiliados".

En donde el Sr. Pryse se esfuerza por transmitir la impresión de que Blavatsky y Mabel Collins estaban más o menos en un nivel de desarrollo parecido en lo que se refiere al ocultismo, pero nada es más lejos de la realidad ya que Mabel Collins era solo una novata mientras que Blavatsky ya era toda una gran iniciada.

Y la torpeza de Mabel Collins se manifestó cuando apenas a los pocos días de haber ingresado como uno de los primeros miembros de la Escuela Esotérica, ella tuvo que ser atendida muy seriamente por Blavatsky en su calidad de Directora Externa de dicha escuela.

Y sus razones para ser obligada a actuar como ella lo hizo se dan en términos muy sólidos e inequívocos en sus largas Explicaciones Preliminares a las Instrucciones No. III, que tratan de las causas de la serie de crisis en 1889 a 1890, marcando un nuevo discurso y dando Instrucciones para cerrar las filas.

El pasaje al que me refiero fue uno de varios que se omitieron cuando las Instrucciones se reimprimieron en 1890-1891 bajo la dirección editorial de la Sra. Besant y el Sr. Mead, debido a que eran de naturaleza personal.

Y al restaurar esos pasajes en la reimpresión americana, William Judge dijo:

-      "Estas alteraciones a sus instrucciones se hizo cuando Blavatsky se encontraba demasiado enferma para supervisar, y sin su autorización, y como ella lo precisó después, muy en contra de sus deseos."

Y ese pasaje menciona como Mabel Collins se asoció en una campaña de calumnias y falsedades en contra de Blavatsky (ver link).


Y el Sr. Pryse, al igual que el Sr. Whitney, también desprecia la condena del pasaje de la "utilización de los sentidos"; pero como lo he explicado más arriba, esa condena fue hecha por Blavatsky y esta se encuentra completamente en línea con la doctrina budista.

La Voz del Silencio es inequívoca en ese punto, y nada es más enfatizado en el budismo y en la enseñanza esotérica en general, que el peligro de tratar de querer comprender lo divino a través de los sentidos, porque estos son muy engañosos.


Y el Sr. Pryse refuta enfáticamente mi afirmación de que la Mabel Collins era muy conocida en nuestra familia como un fuerte médium espiritista. Y en esto yo me refería a un período mucho anterior de que ella entrara en contacto con Blavatsky y el ocultismo en 1884.

Mi tía, la señora Tighe Hopkins (la hermana de mi padre y la media hermana de Mabel Collins) me contó muchas cosas notables sobre el desarrollo de Collins como médium, y como el Sr. Pryse solo entró a la Logia Blavatsky en Londres en septiembre de 1890, es natural que él supiera poco o nada de la actividad mediúmnica de Collins antes de 1884 y cuyos efectos había estado tratando de superar bajo la supervisión de Blavatsky.

Y esta actividad mediúmnica de Mabel Collins es bien conocida por los primeros miembros de la Escuela Esotérica.

Mi tía le tenía mucho cariño a Mabel Collins y a menudo me hablaba de su generosidad y de su bondad; pero nunca pronunció una palabra contra Blavatsky por la acción que ella tomó de expulsarla de la Escuela Esotérica, porque mi tía sabía que existía una muy buena causa para hacer eso. Y también mi tía me dijo que una novela que escribió Mabel Collins, en la que ella caricaturizó a Blavatsky, La Doctrina Secreta y la Sociedad Teosófica (no recuerdo su título), se debió porque Collins quedó muy ardida sin comprender que esa expulsión era por su bien.


El Sr. Pryse dice que Mabel Collins fue capaz de superar "los terribles inconvenientes kármicos contra los que ella tuvo que lidiar porque ella tenía un corazón de oro". Pero desafortunadamente la realidad es que ella no pudo superarlos como lo demuestran los comentarios que Blavatsky hizo sobre Collins a los alumnos de la Escuela Esotérica.

Tanto Blavatsky como los Maestros nos han explicado que para avanzar por el sendero iniciático se necesita mucha más que simplemente desarrollar las cualidades y las virtudes personales. De los cientos de aspirantes que hubo en la Sociedad teosófica, se nos dice que solo uno logró un éxito completo: Damodar Mavalankar, quien fue llamado al Tíbet por su Maestro en 1885.


Y para terminar sobre este asunto, el Sr. Whitney concluye su carta con la desconcertante afirmación de que el Hilarión que inspiró el libro “La Luz en el Sendero” no es el Adepto griego, sino que es:

-      "El Regente del Rayo Rojo, y su línea llega al oeste de Egipto. Él es el Manu de la Quinta Raza Raíz, y entre los reyes egipcios estaba Ramsés II. Él tiene el cargo cósmico de Anunciador del que viene. Él es el Preparador de la Vía, el Juan-Bautista de la encarnación de Cristo en los albores de cada Era Avatarica."

Y esto es un pasaje de la literatura de Besant-Leadbeater o de Bailey. Pero Blavatsky nunca habló o escribió sobre la existencia de un "segundo Hilarión", y ciertamente nunca hizo tales declaraciones ni usó un lenguaje tan delirante. »

(Esta carta se publicó en The Occult Review de abril de 1929, p.262-264)






¿CÓMO DEBEMOS DORMIR?




(Este artículo fue publicado en la revista principal de la Sociedad Teosófica y no sabría decirles qué tan valido sea, pero me pareció interesante y por eso se los transcribo, y el texto original en inglés lo pueden leer aquí.)



El asunto comenzó con una pregunta que hizo un lector:

« Leyendo el artículo del Sr. Seeta Nath Ghose titulado “Magnetismo Médico” y habiendo estudiado hace tiempo el texto del Barón von Reichenbach titulado “Investigaciones Sobre el Magnetismo”, estoy muy confundido porque estas dos autoridades parecen contradecirse mutuamente en todo.

Por ejemplo, el primero de ellos afirma que “la cabeza jamás debe estar hacia el norte bajo ninguna circunstancia” mientras que el segundo afirma que “la cabeza siempre debe de estar hacia el norte y en cualquier circunstancia”.

Seguí el consejo del último, no sabiendo del primero durante muchos años, pero no encontré el efecto en mi salud que había esperado, y lo que es más importante, no he encontrado una regla que se aplique para toda la humanidad y dé salud a todos.

Además me pareció al leer el artículo del Sr. Ghose que el punto más importante fue omitido o pasado por alto, es decir la posición del durmiente.

¿Boca arriba o boca abajo?

Y esto me parece que es lo más importante, pues una respuesta correcta puede conciliar las dos teorías, las cuales recuérdese, requieren ser sustentadas por medio del experimento y de la observación.

No puedo concebir que la posición unilateral sea natural en el hombre, y así se dejan dos alternativas.

¿La posición adecuada para dormir es sobre la espalda o sobre el estómago?

No se dijo en el artículo una sola palabra acerca de la posición, ni en cuál de los lados fueron hechos los experimentos.

Ahora lo único que queda claro en todo esto es que, el positivo debe estar hacia el negativo y el negativo hacia el positivo. Permítanme entonces dibujar un diagrama tomando el norte como positivo y al sur como negativo, el este como negativo y el oeste como positivo.



Lo que da, dependiendo de la posición que se tome, los siguientes resultados:

POSICIÓN: ACOSTADO SOBRE LA ESPALDA
1. Cabeza hacia el Este
 Armonía en todas las extremidades.
2. Cabeza hacia el Norte
 Armonía en manos.
 Desarmonía en cabeza y pies.
3. Cabeza hacia el Sur
 Armonía en cabeza y pies.
 Desarmonía en manos.
4. Cabeza hacia el Oeste
 Desarmonía en todas las extremidades.


POSICIÓN: ACOSTADO SOBRE EL ESTOMAGO
1. Cabeza hacia el Este
 Armonía en cabeza y pies.
 Desarmonía en manos.
2. Cabeza hacia el Norte
 Desarmonía en todas las extremidades.
3. Cabeza hacia el Sur
 Armonía en todas las extremidades.
4. Cabeza hacia el Oeste
 Armonía en manos.
 Desarmonía en cabeza y pies.



Ahora bien, pienso que de esto alguna luz saldrá en las teorías aparentemente contradictorias, si pudiéramos determinar:

1)   ¿Cuál fue la posición que los famosos Garga y Markandeya contemplaron como la posición adecuada para que los hombres durmieran?
2)   ¿Y en qué posiciones hizo sus experimentos el Barón von Reichenbach?

Porque la posición es el aspecto que considero más importante para todos los que valoran el don de la salud, así como para los que quieren ser sabios.

Durante mi estancia en los países del sur observé que los nativos de las clases bajas siempre duermen sobre su estómago, con su espalda vuelta al sol, como todos los animales, en cambio dormir sobre la espalda es muy peligroso, al menos en el sol.

¿No es esto una guía o pista acerca de la verdadera posición?


Atentamente.
Sr. Brighton de Inglaterra»

(Revista “The Theosophist” de septiembre de 1883, p.323-324)





Y dos teósofos le respondieron al Sr. Brighton acerca de su duda, uno de ellos occidental y el otro oriental:



LA RESPUESTA DE GUSTAVE ZORN
(Miembro de la Sociedad Teosófica)

« Parecería que la opinión del Sr. Seeta Nath Ghose y del Barón Von Reichenbach están en total conflicto con el tema debido a que el segundo recomienda que la cabeza del durmiente esté hacia el norte, mientras que el primero desaprueba por completo esa posición.

En mi humilde opinión ambos escritores tienen razón solo que cada uno desde su punto de vista como a continuación trataré de demostrar.

¿Por qué razón nuestra posición al dormir debe tener alguna consecuencia?

Porque nuestro cuerpo debe estar en una posición en armonía con las principales corrientes magnéticas de la Tierra; pero como estas corrientes no son las mismas en todas partes del planeta, las posiciones del durmiente deben por tanto variar.

Hay tres corrientes magnéticas principales en nuestro planeta, a saber:

-      en el hemisferio norte, la corriente magnética que va del polo norte hacia el ecuador,
-      en el hemisferio del sur, la corriente magnética que va del polo sur hacia el ecuador,
-      y estas dos corrientes se encuentran en la zona ecuatorial siguiendo su curso combinado de este a oeste.

De modo que la posición del durmiente debe variar según se encuentra en el hemisferio norte, o en el hemisferio sur, o en la zona ecuatorial.

·        En el hemisferio norte tiene que acostarse con su cabeza hacia el norte,
·        En el hemisferio sur tiene que acostarse con su cabeza hacia el sur,
·        Y en la zona ecuatorial tiene que acostarse con su cabeza hacia el oeste.

Para que la corriente magnética pueda pasar de la cabeza a los pies sin alteración pues esta es la posición natural para la magnetización.

Y el siguiente diagrama puede dar una perspectiva más clara del caso, y así ayudarnos a responder la segunda parte de la pregunta, si debemos y cuándo acostarnos sobre el lado derecho o el izquierdo, sobre el estómago o sobre la parte de atrás:



En cuanto a la posición en que debemos dormir el Sr. Brighton expone en su diagrama de la cruz, su idea de que la cabeza es totalmente positiva y ambos pies negativos. Sin embargo pienso que éste no es el caso, sino que el lado derecho de la cabeza y el pie izquierdo son positivos, y el lado izquierdo de la cabeza y el pie derecho negativos, y de la misma manera la mano derecha es negativa y la mano izquierda es positiva.

Y dado que el polo norte es positivo y el lado izquierdo de la cabeza es negativo, la posición natural al dormir para los que viven en la zona norte sería sobre el lado derecho, la cabeza hacia el norte; y es obvio que en la zona sur la posición debería ser exactamente al contrario.

En cuanto para los que viven en los trópicos, me parece que la posición más natural es acostados sobre el estómago, puesto que el lado izquierdo, o negativo de la cabeza, está volteado hacia la corriente norte o positiva, y viceversa.

Durante muchos años mi familia y yo hemos estado durmiendo, o con nuestras cabezas hacia el norte o hacia el oeste (la posición correcta en nuestro hemisferio, en mi opinión), y no nos hemos arrepentido pues desde a partir de entonces el médico se ha vuelto un raro visitante en nuestra casa.

El Sr. Seeta Nath Ghose dice, en su interesante artículo titulado “Magnetismo Médico” que las mandulies (las células metálicas) han resultado muy beneficiosas en la India para las partes enfermas del cuerpo, y yo mismo he sido testigo de las propiedades curativas de estas células que han tenido un auténtico efecto positivo en varios casos.

Cuando hace años (creo que alrededor de 1852) el cólera devastaba algunas partes de Europa, se comentó en Múnich (Baviera) que entre los miles de sus víctimas no había un solo cobrero. Y de ahí que las autoridades médicas de ese pueblo recomendaban llevar discos de lámina delgada de cobre (de aproximadamente 6 cm de diámetro) en un cordón en la boca del estómago, y estos demostraron ser un poderoso preventivo del cólera.

De nuevo en 1867, el cólera visitó Odessa. Todos en mi familia y yo llevamos estos discos de cobre; y mientras alrededor había numerosos casos de cólera y de disentería, ninguno de nosotros fue atacado.

Por lo que propongo que se realicen experimentos serios en este sentido, y especialmente en los países que periódicamente son devastados por esa enfermedad, como es el caso de la India, por ejemplo. Ya que estoy convencido que un disco de cobre sobre el estómago, y otro de cinc en la espalda, opuesto el anterior, será aún de mayor utilidad, más aún si los discos son unidos por una cadena delgada de cobre. »






LA RESPUESTA DE NOBIN K. BANNERJI
 (Presidente de A.B.B. de la Sociedad Teosófica de Berhampore)

« En primer lugar es necesario decir que las reglas establecidas por Garga, Markandeya y otros sobre la manera como se debe de dormir, sólo se refieren a los habitantes de las llanuras y no a los moradores en las montañas.

La regla es que al dormir un hombre debe acostarse primero sobre su lado derecho durante un período de dieciséis respiraciones, y luego voltearse sobre su lado izquierdo el doble de ese tiempo, y después de eso puede dormir en cualquier posición. Más allá, un hombre no debe dormir sobre la tierra, sobre mantas de seda o de lana, bajo un árbol solitario, en un cruce de caminos, en las montañas, o en el cielo (lo que sea que hayan querido significar con esto).

Ni debe dormir con la ropa húmeda, los pies mojados, o desnudo; y a menos que sea un iniciado, no debe dormir en césped Kusha o cualquiera de sus variedades. Hay muchas más reglas semejantes. Puedo señalar aquí que en el lenguaje sánscrito, la mano derecha o el lado derecho y el sur son nombrados con la misma palabra. Asimismo la frente y el norte tienen el mismo nombre.

El sol es la gran y principal fuente de vida y magnetismo en el sistema solar, por ello para el mundo el este es positivo por ser la fuente de luz y magnetismo. Y por la misma razón, para el hemisferio norte, el sur (el ecuador y no el norte) es positivo. Bajo las leyes de dinámica la resultante de estas dos fuerzas es una corriente en dirección sureste noroeste.

Esto, pienso yo, es uno de las verdaderas causas de que prevalezcan los vientos del sur-este. De todos modos, no pienso que el polo norte sea positivo, pues en tal caso no habría allí nada de nieve. La aurora no puede tener lugar en la fuente de las corrientes, sino en su cercanía. Y de ahí que la fuente debe estar hacia el ecuador o al sur.

El curso de la vida, de la civilización, de la luz, y casi todo parece ser de este a oeste o de sureste a noroeste. Se dice que el castigo por dormir con la cabeza hacia el oeste es la ansiedad mental, en cambio dormir con la cabeza hacia el norte se considera fatal.

Solicito la atención de los hindúes a la pena de muerte en que incurre cualquiera que no siendo un iniciado (Brahman) pronuncie la sagrada Pranava (Om). Esto no demuestra que la Pranava sea en realidad una mala palabra capaz de hacer daño, sino que dicha palabra pronunciada por hombres ignorantes es muy peligrosa.

Es el mismo caso de los hombres malhablados de las llanuras, puede haber peligros desconocidos a los que no sería prudente que se arriesgaran en tanto no sepan enfrentarlos, o en tanto no estén bajo la guía de hombres que puedan protegerlos. Para abreviar, los hombres malhablados deben dejar de estar ociosos, estas reglas sólo son para ellos.

Como ejemplo de una infracción a la regla se da la anécdota siguiente:

Después de que Ganesha (el hijo de Siva) nació, todos los Devas (los dioses) vinieron para felicitar a la familia y bendecir al niño. Sani o Saturno, fue el último en llegar, e incluso entonces llegó después de que se le había llamado en varias ocasiones.

Cuando llegó para ver al niño, ¡no tenía cabeza! Enseguida esto creó una conmoción, y todos los Devas estaban al borde de la melancolía. Por fin, Saturno se acercó al Mahâdeva con las manos dobladas, los dedos entrelazados y le recordó que su aspecto se debía a que de niño había sido acostado en una cama con su cabeza hacia el norte.

Porque esa era la ley. Entonces los Devas se reunieron en consejo y enviaron mensajeros para encontrar a alguien más que estuviese dormido con la cabeza hacia el norte. Por fin descubrieron un elefante en esa posición. Su cabeza fue cortada de inmediato y puesta en los hombros de Ganesha.

No es necesario decir que Ganesha se volvió después tan estudioso y sabio que si no hubiera tenido cabeza de elefante, una cabeza humana no habría sido suficiente para contener todo lo que él sabía. Su ventaja fue debida a la circunstancia de haberse dormido con la cabeza hacia el norte, y a la bendición de los Devas.

En cambio para el elefante, la misma posición pero sin la bendición de los Devas resultó ser la muerte absoluta. »


(Revista “The Theosophist” de diciembre de 1883, p.91-92)