RUDOLF STEINER AFIRMA QUE LOS HUMANOS SE FUERON A VIVIR A OTROS PLANETAS

Y según Rudolf Steiner esto sucedió durante la segunda raza raíz en la “época hiperbórea” cuando la Tierra pasó (según él) de ser una bola astral a materializarse en una bola liquida y etérea:

« Y entonces en ese momento sucedió un acontecimiento cósmico muy importante. El sol salió de la tierra, y las así fuerzas solares simplemente dejaron a la tierra. Y la consecuencia de la separación del sol de la tierra fue un enfriamiento del planeta y una densificación material adicional de la tierra. »

(Libro “Memoria Cósmica”, capítulo 9, 1904)

Pero también esta supuesta salida del sol de la tierra provocó que los humanos se fueran a vivir a otros planetas por las razones que Steiner explicó posteriormente en una de sus conferencias:

« La separación del sol de la tierra fue un evento muy importante y a fuerza tuvo que ocurrir en algún momento, porque si los dos cuerpos cósmicos hubieran permanecido unidos (como fue el caso en la primera etapa de la existencia de la Tierra) el curso de la evolución humana no podría haber dado al hombre su verdadero significado terrenal.

Por lo que todo lo que incluimos en la palabra "sol" (y no solo los elementos y constituyentes físicos del cuerpo del sol, sino también todos los seres espirituales que le pertenecen) tuvieron que retirarse fuera de la tierra porque si esos seres hubieran permanecido unidos con la tierra, sus fuerzas habrían trabajado demasiado fuerte para el bienestar del hombre terrícola, y por lo tanto tuvieron que mitigar sus fuerzas retirándose de la escena terrestre y trabajando desde afuera.

Y nos preocupa un momento en el que varios seres transfieren la escena de sus operaciones a una distancia, a fin de moderar su influencia en el desarrollo tanto del hombre como del animal, debido a que durante un cierto lapso de tiempo, la tierra se deja sola, y como sus fuerzas más finas y más espirituales se han retirado con el sol, ella sufre de un cierto engrosamiento.

Pero el hombre, tal como se ha convertido a través de las evoluciones de Saturno, el Sol y la Luna, todavía permaneció por un tiempo con la tierra, y fueron solamente seres muy exaltados quienes se retiraron con el sol y encontraron su escena de actividad afuera.

Después de esta separación, la tierra todavía tenía dentro de sí todas las sustancias y fuerzas que forman a la luna actual, y por consiguiente el hombre estuvo expuesto a condiciones que eran mucho más groseras antes que el sol se separada de la tierra, ya que la sustancia de la luna es muy burda, por así decirlo.

Y un resultado fue que después de la separación del sol de la tierra, las fuerzas de la tierra se volvieron cada vez más parecidas a la luna, cada vez más densas. Y por consiguiente otro resultado de la separación del sol de la tierra es que ahora el hombre terrestre estaba expuesto al peligro de marchitarse, de ser momificado, o en cualquier caso, de ser momificado astralmente.

En cambio mientras que el sol permaneció con la tierra, las condiciones habían sido demasiado finas, pero ahora se volvían demasiado ásperas. Y en consecuencia, a medida que avanzaba el desarrollo de la tierra, el hombre podría prosperar cada vez menos manteniendo su conexión con ella. Y esto lo he descrito en detalle en mi libro “Ciencia Oculta”.

Y ustedes saben por la conferencia que les di ayer que los humanos todavía eran seres psico-espirituales en ese momento, pero que no pudieron unirse con la tierra debido a la densidad de la materia que fluía de la tierra a su periferia mientras la luna permaneciera con ella.

De modo que ocurrió que la gran mayoría de las almas humanas tuvieron que renunciar a su unión con la tierra. Y aquí llegamos a algo de gran importancia con la relación entre el hombre y la tierra, algo que sucedió durante la separación del sol y la luna de la tierra.

Durante ese intervalo, los espíritus del alma humana, excepto por un número muy pequeño, abandonaron las condiciones terrenales y presionando hacia arriba en regiones más altas, continuaron su evolución sobre los varios planetas que pertenecen a nuestro sistema solar, cada uno de ellos en función con la etapa de su desarrollo.

Y es así como algunas almas fueron preparadas para seguir su evolución en Saturno, mientras que otras en Marte, y otras de nuevo en Mercurio, etc. Y solo un número muy pequeño de los espíritus de las almas más fuertes permanecieron en unión con la tierra.

Entonces durante ese tiempo, el resto de los humanos habitó en los planetas vecinos de la tierra. Y esto sucedió en un momento anterior (para usar nuestra propia terminología) a la era lemuriana.

Y entonces sucedió ese otro evento importante que tuvo lugar durante la época lemuriana, en donde la luna con toda su materia y todas sus fuerzas se retiró de la tierra.

Y esto provocó grandes cambios en la tierra que hicieron que por primera vez la tierra entrara en una condición en la cual el ser humano podía prosperar en ella, porque mientras que el sol hubiera permanecido dentro de la tierra, entonces las fuerzas de la tierra habrían sido demasiado espirituales. Y mientras que la luna hubiera permanecido dentro de la tierra, entonces las fuerzas de la tierra habrían sido demasiado burdas.

Por lo tanto, la luna también se retiró, y a partir de ese momento tanto los seres del sol como los seres de la luna trabajaron sobre la tierra desde afuera, por lo que la llevaron a un estado de equilibrio, y de esta manera la tierra se preparó para convertirse en portadora de la existencia humana. Y todo esto sucedió durante la era lemuriana.

La evolución ahora avanzó más, y poco a poco, los espíritus de las almas humanas que habían escapado a los otros planetas comenzaron a regresar de nuevo a la tierra. Y eso continuó hasta la época atlante. Y lo que se había cristalizado como hombres durante la última parte de Lemuria y durante la Atlántida se fueron dotando gradualmente de espíritus del alma con características de los diferentes planetas de donde regresaban, que fueran de Marte, Mercurio, Júpiter, etc.

Y esto provocó una gran variedad de encarnaciones terrenales. Y aquellos de ustedes que están familiarizados con las conferencias que di recientemente en Christiania saben que esta división de hombres de Marte, hombres de Saturno, etc., eso fue el origen de lo que más tarde se convirtió en la diferenciación racial. Y todavía hoy es posible que el vidente reconozca si el alma de un hombre ha descendido de uno u otro planeta.

Pero también he enfatizado y he profundamente discutido en mi libro “Ciencia Oculta” que de ninguna manera todas las almas humanas abandonaron la tierra. Lo que podríamos describir como las almas más resistentes pudieron seguir utilizando la materia terrenal y permanecer en la tierra.

E incluso mencioné la sorprendente circunstancia de que hubo un par de humanos sobresalientes que sobrevivieron a la densificación de la tierra, y la investigación espiritual nos impulsa a aceptar lo que al principio parece increíble: que hubo una pareja conocida como Adán y Eva. »

(Conferencia del 25 de agosto de 1910)

OBSERVACIONES

Ya en otros capítulos anteriores les he detallado por qué la aseveración que hace Rudolf Steiner de que el sol salió de la tierra es una absurdez total tanto desde el punto de vista científico como desde el punto de vista esotérico (ver link).

Y a continuación les voy a explicar por qué también es una profunda patraña su afirmación de que las almas humanas terrestres se fueron a vivir a los otros planetas.

Pero para comprender por qué Rudolf Steiner dijo esos disparates tan descabellados, primero ustedes tienen que saber que cuando Rudolf Steiner escribió esas elucubraciones (a inicios del siglo XX) las personas todavía creían que los otros planetas del sistema solar estaban también físicamente habitados como lo está la Tierra.

Al grado que varios individuos pretendieron haber tenido encuentros con esas humanidades extraterrestres y quienes los llevaron a viajar a sus respectivos planetas.

Y algunos ejemplos de ellos fueron:

• Salvador Villanueva Medina quien pretendió que unos venusianos se lo habían llevado a visitar la avanzada civilización que hay en Venus, y posteriormente en 1953 público un libro titulado “Yo estuve en Venus” contando su aventura.

• Narciso Genovese quien pretendió que un grupo de marcianos lo llevaron a él y a otros científicos terrestres a visitar Marte para mostrarles la avanzada civilización marciana, y en 1958 publicó un libro titulado “Yo he estado en Marte” en donde relataba esa supuesta expedición.

• O Yosip Ibrahim quien en 1972 publicó un libro titulado “Yo visité Ganimedes” y en donde narraba una historia parecida, nada más que en vez de ir a un planeta, él pretendió que los extraterrestres le habían hecho visitar el más grande satélite de Júpiter.

Croquis de la capital marciana según Narciso Genovese

Y también los científicos pensaban lo mismo ya que por ejemplo las manchas alargadas que varios astrónomos habían percibido observando al planeta Marte, eso les había hecho considerar que podían ser canales construidos por los marcianos para extraer el agua de los polos y llevarla a las regiones ecuatoriales.

Mapa de Marte elaborado por el astrónomo Percival Lowell

Y es por eso que varios embusteros que se hacían pasar por grandes clarividentes (como fue el caso de Leadbeater, de Samael y por lo visto también de Rudolf Steiner) esos individuos influenciados por esa errónea creencia que existía en su época de que los otros planetas también estaban físicamente habitados, ellos elaboraron sus “enseñanzas esotéricas” fundadas con esa mentira.

Y vemos que en el caso de Rudolf Steiner, en su elucubración de que el Sol había surgido de la Tierra y ese acontecimiento había deteriorado las condiciones evolutivas para los humanos en la Tierra, a Steiner se le ocurrió la idea de pretender que las almas humanas terrestres se fueron a vivir con las humanidades de los otros planetas, hasta que finalmente después de que la Luna también se salió de la Tierra y por consiguiente las condiciones terrestres mejoraron, entonces todas esas almas terrícolas regresaron a proseguir alegremente con su evolución en la Tierra.

Pero para infortunio de Rudolf Steiner la exploración espacial que comenzó a partir de 1957 derrumbó esa falsa creencia demostrando con ello su charlatanería.

Sin embargo y a pesar de la evidencia, algunos seguidores de Rudolf Steiner han querido defender a su gurú argumentando que "los espíritus de las almas humanas terrestres que se fueron a vivir a los otros planetas", ellos no reencarnaron en el plano físico, sino que permanecieron viviendo en los planos sutiles.

Pero eso demuestra que esos individuos NO han estudiado el esoterismo con seriedad porque entonces sabrían que cada planeta se encuentra en un diferente ciclo evolutivo y por consiguiente los humanos terrestres no pueden ir a vivir (aunque sea  en los planos sutiles) con civilizaciones que se encuentran mucho más avanzadas que ellos.

Y para que me lo comprendan, a continuación les voy a hacer un pequeño resumen de cómo procede la evolución en los planetas rocosos.

~ * ~

Los Maestros explicaron que el ciclo de evolución de un planeta se divide en siete ciclos menores a los cuales se les denominan “rondas”.

• Durante las tres y media primeras rondas el planeta se va a ir formando y la vida que hay en el planeta se va a ir materializando cada vez más.

• Y durante las tres y media siguientes rondas el planeta y sus habitantes se van a ir sublimando cada vez más hasta que finalmente toda la vida que se desarrolló en el planeta ascenderá a planos de existencia cada vez más superiores:

Mientras que en el plano físico solo quedará el esqueleto sideral del planeta moribundo el cual lentamente se irá desintegrando.

Como es el caso de la luna

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Pues bien, los Maestro explicaron que Venus ya se encuentra en su última ronda y que prácticamente toda la vida de ese planeta se encuentra existiendo en el plano mental (Manas).

Y por consiguiente los humanos de la tierra no podríamos vivir con los venusianos porque a nosotros nos falta todavía muchísimo para poder alcanzar el nivel que ellos ya tienen y así poder vivir en el plano mental como ellos lo hacen, debido a que nosotros apenas nos encontramos en la cuarta ronda.

Ahora bien, algunos defensores de Steiner me han argüido que los humanos terrestres permanecieron en los planos sutiles más bajos (en el plano etérico y en el plano astral) de los otros planetas.

Pero el detalle es que cuando la vida deja de existir en un plano de existencia, entonces las condiciones de vida para ese plano de existencia se vuelven cada vez más inhospitalarias. Y ahí tienen el ejemplo del plano físico de Venus en donde ya es imposible albergar vida física (porque ya no se requiere).

Y lo mismo sucede a nivel del plano etérico y del plano astral.

Y es por eso que el Maestro Kuthumi explicó que muchos magos negros de la Tierra se esconden en el plano astral (terrestre) y logran sobrevivir vampirizando la energía de los demás. Pero a medida que la humanidad prosiga con su evolución, los humanos van a seguir ascendiendo a planos de existencia cada vez más elevados, hasta que llegará el momento en que esos magos negros ya no tendrán más a quien poder vampirizar y las condiciones del plano astral volviéndose cada vez más y más inhospitalarias, esos magos negros terminarán por desaparecer.

Y el Maestro Kuthumi lo explicó con estas palabras:

« Las formas astrales de los hechiceros que han alcanzado la cúspide del conocimiento en el arte prohibido, ellos han logrado engañar a la naturaleza por así decirlo, pero esto es solo temporalmente hasta que nuestro planeta entre al final de su ciclo, y entonces estos seres, lo quieran o no, ellos serán aniquilados. »

(CM 16, p.107)

Por lo tanto y en base a lo que enseñan los Maestros, no es factible que las almas de los humanos terrestres puedan sobrevivir en el plano astral de los otros planetas, porque además cada planeta tiene sus peculiaridades energéticas y los humanos terrestres terminarían siendo muy afectados por las diferencias energéticas que existen con los otros planetas.

Y es por eso que cada humanidad tiene su propio planeta, porque ese lugar fue especialmente creado para poder hospedar a esa humanidad en su progreso evolutivo.

Pero además:

¿Para qué irían los humanos terrestres al plano astral de los otros planetas cuando ellos pueden permanecer en el plano astral de la Tierra?

Los estudiantes de Antroposofía van a responder que fue para evitar la influencia demasiado lunar que se produjo en la tierra después de que el sol se separó de ella, pero cualquiera con un poco de conocimiento sabe que eso son puras absurdeces.

Y ese argumento de que los humanos se fueron a vivir a los planos sutiles de los otros planetas no tiene ningún sentido y solo es un pretexto más para tratar de encubrir la charlatanería de Rudolf Steiner.

Porque además en el caso del planeta Mercurio el asunto es todavía menos factible debido a que la enseñanza teosofía explica que ese planeta es todavía más oculto y misterioso que Venus.

Y en el caso del planeta Marte el asunto tampoco es factible debido a que la enseñanza teosofía explica que ese planeta se encuentra actualmente en un pralaya menor (que es un estado de adormecimiento temporal) y por consiguiente actualmente no hay vida en ese planeta ni siquiera en los planos sutiles.

Y además,

¿Cómo las almas de los humanos terrestres habrían podido regresar a reencarnar en la Tierra si con el desprendimiento de la Luna, como lo afirma Rudolf Steiner, eso habría causado un cataclismo tan inmenso que habría destruido toda la vida física en el planeta?

Rudolf Steiner trató de arreglar ese asunto explicando que quedaron viviendo en la Tierra los humanos más resistentes, pero es que ese tipo no tiene ni idea de lo que está diciendo porque un cataclismo de esa dimensión habría reducido la vida a cero en la Tierra y se requería de muchísimos millones de años para que la vida volviera a surgir y progresar en el planeta. Mientras que Rudolf Steiner pretende que apenas en lo que duró la época lemuriana ya se había resuelto el asunto y las almas terrestres regresaron muy contentas a proseguir con su evolución en la tierra…

¡Lo cual es absurdo!

CONCLUSIÓN

Ni científicamente ni esotéricamente es posible que los humanos de la tierra se hayan ido a vivir a los otros planetas del sistema solar (como lo pretende Rudolf Steiner) y sus declaraciones solo muestran que ese tipo era un individuo profundamente embustero y que sus supuestos dotes de clarividencia solo eran delirios y fantasías producto de su imaginación.