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¿FUE CAGLIOSTRO UN CHARLATÁN?



En el siguiente artículo, Blavatsky revela varios aspectos poco conocidos de quien fue uno de los más importantes ocultistas del siglo XVIII.


« La mención del nombre de Cagliostro produce un doble efecto. Por una parte, toda una secuencia de acontecimientos maravillosos emerge del oscuro pasado; pero por el otro lado, y para la progenie moderna demasiado materialista, el ocultista Alejandro conde de Cagliostro provoca asombro, pero también desprecio.

Las personas son incapaces de entender que ese "encantador y mago" podía producir legítimamente tal impresión como lo hizo en sus contemporáneos. Y esto da la clave de la reputación póstuma del siciliano conocido también como Giuseppe Balsamo (Cagliostro) y que hizo que un creyente en él, un hermano masón (al igual que el príncipe Bismarck y algunos teósofos) dijera sobre él:

-      "Cagliostro, bien podría decirse que es el hombre más maltratado y odiado en Europa."

Sin embargo, y a pesar de la forma de enzarzarse contra él con nombres oprobiosos, no hay que olvidar que Schiller y Goethe se encontraban entre sus grandes admiradores, y lo siguieron siendo hasta su muerte.

Goethe, durante un viaje a Sicilia, dedicó gran parte de su trabajo y tiempo para recopilar información acerca de Cagliostro en su supuesta tierra natal, y fue a partir de esas copiosas notas que el autor de Fausto, escribió su obra de teatro "El Gran Kophta".

Y la razón por la que este hombre sorprendente que fue Cagliostro está recibiendo tan poco honor en Inglaterra se debe a Carlyle. El historiador “más veraz y sin miedo de su tiempo”, él que presuntamente abominaba la mentira bajo cualquier apariencia, pero que selló con el visto bueno de su nombre “honrado” y famoso, la reputación de Cagliostro, provocando así la más inicua de las injusticias históricas jamás perpetradas por los prejuicios y la intolerancia. Y esto gracias a los informes falsos que casi hasta el último momento emanaron los Jesuitas que son quienes representan verdaderamente la mentira encarnada.

(Nota: en una carta el maestro Kuthumi escribió: “Ellos [los Jesuitas] trabajan, se afanan y engañan con el único propósito de obtener mayor poder terrenal, mientras que nosotros laboramos únicamente para ayudar a la humanidad a avanzar.” CM30, p.231)


El nombre de Giuseppe Balsamo, al ser traducido por métodos cabalísticos significa «Aquel que fue enviado», o «Lo Dado», o también «Señor del Sol», lo que muestra que ése no era su patronímico real.

En palabras de Kenneth R.H. Mackenzie, F.T.S., declara que hacia el final del siglo pasado se puso de moda con determinados instructores esotéricos de la época, el transliterar en forma Oriental todos los nombres proporcionados por las Fraternidades Ocultistas para los discípulos destinados a trabajar en el mundo.

Entonces probablemente su nombre natal no era «Balsamo». Además, como todos sabemos que en su juventud vivió con, y fue instruido por un hombre llamado, como se supone, Althotas, «un gran Sabio Hermético del Oriente», o en otras palabras, un Adepto

Por lo tanto no es difícil aceptar la idea que éste último fue quien le dio su simbólico nombre. Pero lo que se conoce con aún más certeza es la estima que le era prodigada por algunos de los hombres y científicos más honrados de su época.

En Francia encontramos que Cagliostro había sido un amigo íntimo y ayudante en el laboratorio químico de Pinto, el Gran Maestre de los Caballeros de Malta, y también se convirtió en amigo y protegido del Príncipe Cardenal de Rohan, y también le honró con su apoyo y amistad un elevado Príncipe Siciliano de nacimiento, al igual que muchos otros nobles.

Y antes esto MacKenzie se pregunta pertinentemente:

¿Es posible entonces que un hombre de modales tan ilustres pudiera haber sido un impostor, como intentan asegurarlo sus enemigos?




La realidad sobre las acusaciones que le hicieron

La principal causa de sus problemas vitales fue su matrimonio con Lorenza [o Serafina] Feliciani, quien fue una herramienta para los Jesuitas; y también su infortunio se debió por dos causas menores que fueron: su extrema y natural bondad, y la confianza ciega que depositó en sus amigos — algunos de los cuales se convirtieron en traidores y en sus enemigos más acérrimos.

Ninguno de los crímenes de los que él es injustamente acusado podría conducirlo a la destrucción de su honra y reputación póstuma. Todo se debido por su debilidad hacia una mujer indigna, y a la posesión de ciertos secretos de la naturaleza que no le divulgó a la Iglesia.

Siendo un nativo de Sicilia, Cagliostro, probablemente nació de forma natural en una familia de Católicos Romanos, y sin importar cuál sea su nombre original, él fue educado por los monjes de la «Hermandad de la Buena Castiglione», como nos dicen sus biógrafos; por lo que en aras de salvar su vida, tuvo que profesar exteriormente la creencia y el respeto por la Iglesia, ya que su política tradicional ha sido que "el que no está con nosotros está contra nosotros", y por consiguiente la Iglesia católica destruía a quienes ella perciba como sus enemigos.

Sin embargo (y sólo por esto) Cagliostro aún hoy es acusado de haber servido a los Jesuitas como su espía; y esta acusación ha sido efectuada por los Masones que deberían ser los últimos en hacer una acusación contra un sabio Hermano que fue más perseguido por el Vaticano por ser Mason que por ser un Ocultista.

Además, si Cagliostro hubiera sido el espía de los jesuitas como lo pretenden los Masones,

¿Estarían estos mismos Jesuitas, incluso hasta el día de hoy difamando su nombre?

Si Cagliostro los hubiera servido a ellos, no les hubiera demostrado ser útil para sus fines, y además un hombre con esos innegables dotes intelectuales no podría haber cometido el error de la omisión, de las órdenes de aquellos a quienes supuestamente servía. Pero en lugar de eso, ¿qué vemos?

Vemos que Cagliostro fue acusado de ser el impostor más astuto, charlatán y con más éxito de su tiempo; acusado de pertenecer al Capítulo Jesuita de Clermont, en Francia; de aparecer (como prueba de su afiliación a los Jesuitas) con la clerical vestimenta en Roma.

Sin embargo este "astuto impostor" es juzgado y condenado por los esfuerzos de esos mismos Jesuitas a una muerte ignominiosa, y que sólo se modificó posteriormente a cadena perpetua debido a una interferencia o ¡influencia misteriosa ejercida sobre el Papa!

Entonces no sería más consistente y caritativo con la verdad decir que en realidad fue su conexión con la Ciencia Oculta del Oriente, y su conocimiento de muchos secretos (incluso algunos mortales para la Iglesia de Roma) lo que en verdad llevó a Cagliostro, primero a la persecución efectuada por los Jesuitas, y finalmente al rigor de la Iglesia???


Fue su propia honestidad la que le impidió ver los defectos de aquellos a los que él apreciaba, y esto lo llevó a confiar en dos bribones que fueron el Marqués Agliato y Nicastro Ottavio, es decir los que están en el fondo de todas las acusaciones de fraude e impostura que entonces se prodigaron contra él.

Y son los pecados de estos dos individuos —posteriormente ejecutados por estafas gigantescas y asesinatos—los que caen ahora sobre Cagliostro. Sin embargo, se sabe que él y su esposa (en 1770) fueron sumidos en la pobreza por la fuga de Agliato con todos sus fondos, de manera que la pareja tuvo que mendigar en su camino a través de Piamonte y Ginebra.

Kenneth MacKenzie ha demostrado esto: que Cagliostro nunca se había mezclado con la intriga política (que por cierto es el alma misma de las actividades de los Jesuitas).

Cagliostro fue ciertamente un desconocido en cuanto a la capacidad de aquellos que guardaban celosamente los archivos de la preparación de la Revolución, y su aparición posterior como defensor de los principios revolucionarios en realidad no tiene ninguna base.

Él era simplemente un Ocultista y un Masón, y como tal se permitió que sufriera a manos de aquellos que, añadiendo el insulto y la injuria a la herida, en primer lugar trataron de matarlo con prisión perpetua y luego extendieron el rumor de que había sido su innoble agente.




Fue un mensajero de los maestros transhymaláyicos

Hay muchos puntos interesantes en las biografías que se han escrito sobre él que demuestran que Cagliostro enseñó la doctrina Oriental sobre los principios del hombre, y también que Dios habita en el ser humano como una potencialidad en acto (el Ser Superior) y que Dios también habita en todos los seres vivos e incluso en los átomos como una potencialidad in posse. Y todo esto muestra que Cagliostro sirvió a los Maestros de la Fraternidad pero que no reveló su nombre, a causa de su promesa de que no podía hacerlo.

Su carta a la nueva Hermandad mística pero bastante abigarrada, la logia de Filaleteo, es una prueba de ello. Los Filaleteos, como todos los masones saben, era un rito fundado en París en 1773 en La Logia de los Amigos reunidos, y la cual se encontraba basada en los principios del Martinismo (1), y cuyos miembros hicieron un estudio especial de las Ciencias Ocultas.

La Logia Madre fue una Logia filosófica y teosófica, y por lo tanto Cagliostro tenía razón en su deseo de purificar la progenie de la Logia de Filaleteo.

Y esto es lo que la Royal Masonic Cyclopaedia dice al respecto:

« El 15 de febrero de 1785, la Logia Filaleteo (o Amantes de la Verdad), en sesión solemne con Savalette de Langes, tesorero real; Tassin, el banquero, y otro Tassin, un oficial al servicio del rey, abrió una Convención Fraternal en París con los Príncipes de Rusia, Austria, y otros, y también con varios padres de la Iglesia, los concejales, los caballeros, los financieros, abogados, barones, teósofos, canónigos, coroneles, profesores de la magia, ingenieros, hombres de letras, médicos, comerciantes, administradores de correo, los duques, embajadores, cirujanos, profesores de idiomas, receptores generales, y en particular dos hombres notables de Londres: Boosie, un mercader, y Brooks de Londres

Todos ellos asistieron a esa Convención, a la que se podrán añadir el señor conde de Cagliostro y Mesmer, "el inventor de la doctrina del magnetismo", como Thory lo describe (Acta Latomorum, vol. II. p.95).

¡Sin duda fue un conjunto de hombres capaces de configurar al mundo y los derechos de Francia, que nunca habían visto antes ni desde entonces! »
(p.95)


La queja de la Logia fue que Cagliostro había prometido primero el hacerse cargo de ella, pero luego retiró su oferta, porque la Convención no adoptaría la Constitución del Rito Egipcio, ni el consentimiento Filaleteo para que sus archivos fuesen arrojados a las llamas, condición sine qua non.

Y es extraño que la respuesta que Cagliostro dio a la Logia haya sido posteriormente considerada por el hermano Mackenzie y otros masones, como emanada “de una fuente jesuita”, ya que el estilo que utilizó Cagliostro es muy oriental y ningún masón europeo (y menos aún un Jesuita) iban a escribir de esa manera.

Así es como Cagliostro dio su respuesta:

« El desconocido instructor de la verdadera masonería ha puesto sus ojos en los Filaleteos… Tocado por su piedad y movido por la confesión sincera de su deseo, acepta extender su mano sobre ellos, y presta su consentimiento para dar un rayo de luz en la oscuridad de su templo.

Es el deseo del desconocido Gran Maestro para demostrar la existencia de un Dios — la base de su fe, la dignidad original del hombre, sus poderes y su destino… Es por las obras y los hechos, mediante el testimonio de los sentidos, que se conoce a Dios, el hombre y los seres espirituales intermedios [principios], creados entre ellos; los cuales la verdadera masonería da a los símbolos e indica el camino real.

Vemos entonces, a los Filaleteos abrazar las doctrinas de esta verdadera masonería, someterse a las reglas de su jefe supremo, y adoptar sus constituciones. Pero, sobretodo, dejar que el santuario se purifique, los Filaleteos saben que la luz sólo puede descender en el Templo de la Fe [basada en el conocimiento], y no en el escepticismo. Que se dedique a las llamas la acumulación inútil de sus archivos, porque es sólo sobre las ruinas de la Torre de la Confusión que el Templo de la Verdad puede ser levantado. »
(Royal Masonic Cyclopaedia, p.96)


En la fraseología secreta de algunos ocultistas, los términos "Padre, Hijo y ángeles" representan el símbolo compuesto por el hombre físico y astro-espiritual. (2)

John G. Gichtel (a finales del siglo XVII), amante ardiente de Böhme, el vidente de quien Saint-Martin relata que se casó "con la celestial Sophia", o sea la Divina Sabiduría, hizo uso de esos términos. Y por lo tanto es fácil ver lo que Cagliostro entiende por demostrar a los Filaleteos el testimonio de sus “sentidos”, “Dios, el hombre y los seres Espirituales intermediarios” que existen entre Dios (Atma) y el hombre (Ego).

Y tampoco es muy difícil de entender su verdadero significado cuando Cagliostro en su carta de despedida reprocha a los Filaleteos lo siguiente:

« Les hemos ofrecido la verdad pero ustedes la han desdeñado. Se las hemos ofrecido por el propio bien, y usted la ha rechazado debido a un apego de las formas… ¿Pueden elevarse ustedes mismos a (su) Dios y al conocimiento de sí mismos con la ayuda de un Secretario y una Convocatoria? » (3)




Todavía se desconoce mucho sobre Cagliostro

Numerosas son las declaraciones absurdas y contradictorias acerca de Joseph Balsamo, más conocido como el Conde de Cagliostro, y varias de las cuales fueron incorporadas por Alejandro Dumas en su libro “Memorias de un médico” con esas variaciones prolíficas de la verdad y los hecho que tanto caracterizaron a los libros de ese escritor.

Y aunque el mundo está en posesión de una masa de la más diversa y variada información acerca de ese notable hombre que fue Cagliostro, durante la mayor parte de su vida, sin embargo, salvo lo sucedido en sus últimos diez años y de su muerte, nada cierto se sabe, excepto la leyenda de que murió en la prisión de la Inquisición.

Aunque es cierto que algunos fragmentos publicados recientemente por el sabio Italiano, Giovanni Sforza, a partir de la correspondencia privada de Lorenzo Próspero Bottini, quien fue el embajador en la República Roma de Lucca al final del siglo pasado, de alguna manera han llenado ese gran vacío. (4)

Esta correspondencia con Pietro Calandrini, el Gran Canciller de la República, comienza a partir de 1784, pero en realidad la información de interés sólo comienza en 1789, en una carta fechada el 6 de junio de ese año, e incluso entonces no aprendemos mucho, ya que solo señala que:

« El célebre Conde de Cagliostro acaba de llegar con su esposa de Trento, vía Turín, a Roma. La gente dice que es oriundo de Sicilia y extremadamente rico, pero nadie sabe de dónde viene su riqueza. Tiene una carta de presentación del Obispo de Trento a Albani.
. . .
Hasta ahora su caminar diario por la vida, así como su condición privada y pública están por encima de cualquier reproche. Muchos son los que buscan una entrevista con él, para escuchar de sus propios labios la corroboración de lo que se dice de él. »


En otra carta nos enteramos de que Roma había demostrado ser un suelo ingrato para Cagliostro. Él tenía la intención de establecerse en Nápoles, pero el plan no pudo concretarse debido a que las autoridades del Vaticano, que hasta entonces habían dejado tranquilo al conde, de pronto pusieron su pesada mano sobre él.

En una carta fechada del 2 de enero de 1790, solo un año después de la llegada de Cagliostro, se afirma que:

« Los debates secretos extraordinarios del pasado domingo en el consejo tuvieron lugar en el Vaticano. (El Consejo) se componía del Secretario de Estado y Antonelli, Pallotta y Campanelli, y Monseñor Vicegerente en el cumplimiento del cargo de Secretario.

El objeto de dicho Consejo Secreto sigue siendo desconocido, pero el rumor público afirma que fue originado a causa de la detención repentina la noche entre el sábado y el domingo, del Conde de Cagliostro, su esposa, y un Capuchino, Fray Giuseppe da S. Maurizio.

El Conde se encuentra encarcelado en Castel Sant ‘Angelo, la Condesa en el Convento de Santa Apolonia, y el monje en la prisión de Ara Coeli. El monje, que se hace llamar “Padre Svizzero”, se considera como un cómplice del famoso mago. En la lista de los delitos que se le imputan se incluye el de la circulación de un libro escrito por un autor desconocido, condenado a la quema pública, titulado “Las Tres Hermanas” y el objetivo de ese trabajo es de “pulverizar a tres individuos de alta alcurnia”. »


El verdadero y más extraordinario significado de esta mala interpretación que se hizo de ese libro es fácil de adivinar, ya que en realidad se trata de un libro sobre alquimia y las “tres hermanas” simbolizan los tres principios en su doble simbolismo. En el plano de la química oculta ellos “pulverizan»” el triple ingrediente utilizado en el proceso de la transmutación de los metales; en el plano de la espiritualidad se reducen a un estado de pulverización los tres principios inferiores y personales en el hombre, una explicación que cada Teósofo está obligado a entender.

El juicio de Cagliostro duró un largo tiempo. En una carta del 17 de Marzo, Bottini le escribe a su corresponsal de Lucca que el famoso mago por fin ha comparecido ante la Santa Inquisición. Y la verdadera causa de la lentitud de los procedimientos fue que la Inquisición, con toda su destreza en fabricación de las pruebas, no pudo encontrar pruebas de peso para demostrar la culpabilidad de Cagliostro. Sin embargo, el 7 de Abril, de 1791, fue condenado a muerte acusado de diversos delitos.

Los principales eran su condición de ser un Masón, de ser un “Iluminati”, de ser un “Hechicero”, de estar ocupado con estudios ilícitos; y también fue acusado de burlarse de la Santa Fe, de hacer daño a la sociedad, de apoderarse por medios desconocidos de grandes sumas de dinero, y de incitar a las otras personas al sexo, sin importar su edad ni su posición social.

En resumen, nos encontramos con el desafortunado Ocultista condenado a una muerte ignominiosa por esas acusaciones infundadas, las cuales día a día se repitieron públicamente hasta hoy en día por más de un Gran Maestro de la Masonería, como también por los cientos de miles de Cabalistas y Masones, con inclinaciones místicas.

Después de este veredicto, los documentos de “hereje”, títulos de las Cortes extranjeras y Sociedades, insignias Masónicas y las reliquias familiares fueron quemadas solemnemente por los verdugos en público en la Plaza de Minerva, ante enormes multitudes de personas.

En primer lugar sus libros e instrumentos fueron consumidos. Entre ellos se encontraba el manuscrito masónico del ritual egipcio, que por lo tanto ya no puede servir como testigo en favor del hombre vilipendiado. Y ahora el pobre Ocultista condenado tuvo que pasar a las manos del Tribunal Civil, cuando un misterioso suceso ocurrió.

Un extraño que nunca había sido visto por nadie antes o después en el Vaticano, se presentó y pidió una audiencia privada con el Papa, enviando al Cardenal Secretario solo una palabra en lugar de un nombre. E impresionantemente fue recibido de inmediato, y sólo estuvo con el Papa durante unos minutos.

Apenas se había ido, su Santidad dio la orden de conmutar la pena de muerte del Conde a la de cadena perpetua en la fortaleza llamada el Castillo de San Leo, y toda la operación debía llevarse a cabo con gran secreto. El monje Svizzero fue condenado a diez años de prisión, y la Condesa de Cagliostro fue puesta en libertad, pero sólo para ser confinada con un nuevo cargo de herejía en un convento.


¿Pero qué fue de Cagliostro en el Castillo de San Leo?

Ahora esa fortaleza castillo se encuentra en las fronteras de la Toscana y se encontraba entonces en los Estados Papales, en el Ducado de Urbino. Está construido en la cima de una roca enorme, casi perpendicular por todos los lados, por lo que para entrar en ese castillo, había que subir en aquellos días por una especie de cesta abierta que era izada con cuerdas y poleas. En cuanto al preso, fue puesto en la especial cesta, y los carceleros lo subieron “con la rapidez del viento”.

El 23 de abril de 1792, el Conde de Cagliostro ascendió al cielo en el penal para criminales, encarcelado en esa tumba donde estuvo de por vida.

Se le menciona por última vez en la correspondencia de Bottini en una carta fechada el 10 de Marzo 1792. El embajador habla de un milagro producido por Cagliostro en su prisión durante sus horas de ocio. Un clavo largo oxidado tomado por el preso fue transformado por él sin la ayuda de ningún instrumento en un puñal triangular agudo, tan suave, brillante y nítido, como si estuviera hecho del más fino acero. Se reconoció que era el clavo viejo sólo por su cabeza, dejada por el prisionero para servir como mango. El Secretario de Estado dio órdenes para que se lo quitasen a Cagliostro y lo llevaran a Roma, y doblaran la vigilancia.

Y ahora viene la última patada al burro moribundo o al león muerto. Luigi Angiolini, un diplomático de la Toscana, escribe lo siguiente:

« Al final, el mismo Cagliostro, hizo que muchos creyesen que había sido un contemporáneo de Julio César, alcanzó fama y amigos, y murió a causa de la apoplejía, el 26 de Agosto de 1795. Semproni lo había enterrado debajo del granero de un bosque, el cual los campesinos utilizaban para robar constantemente a la propiedad de la corona. El astuto capellán contaba, muy justamente, que el hombre que había inspirado al mundo con temor supersticioso mientras vivía, siguió influyendo a la gente con los mismos sentimientos después de su muerte, y así mantuvo a los ladrones alejados. »


Sin embargo uno se pregunta:

¿Cagliostro fue realmente muerto y enterrado en 1795 en San Leo?

Si es así,

¿Por qué los custodios en el Castel Sant ‘Angelo de Roma muestran a los inocentes turistas el pequeño agujero cuadrado en el que se dice que Cagliostro fue confinado y “muerto”?

¿Por qué esta incertidumbre o imposición a tales desacuerdos en la leyenda?


Luego están los Masones que hasta la fecha cuentan historias extrañas en Italia. Algunos dicen que el conde se escapó de una manera inexplicable de la prisión aérea, por lo que obligó a sus carceleros a difundir la noticia de su muerte y sepultura.

Otros sostienen que no sólo escapó, sino que gracias a un Elixir de la Vida, él sigue vivo.


Y Bottini en una de sus cartas pregunta:

¿Por qué si realmente Cagliostro poseía los poderes que se afirma que tuvo, no desapareció delante de sus carceleros, para así escapar de ese castigo degradante por completo?


Ahora bien, hemos oído hablar de otro preso (Jesús), uno aún mayor en todos los aspectos que Cagliostro. Y de ese preso también se dijo en tono de burla que: "salvó a otros, pero él mismo no pudo salvarse… dejen que descienda ahora de la cruz, y creeremos…"

Y ahí yo pregunto:

¿Hasta cuándo las personas caritativas escribirán las biografías de la vida y arruinarán la reputación de los muertos, con tan incomparable indiferencia, por medio de chismes y a menudo falsedades de las personas?

¡Y éstos generalmente son los esclavos de los prejuicios!

Mientras tanto nos vemos obligados a pensar que esas personas siguen siendo ignorantes de la Ley del Karma y que su justicia es inviolable sin importar los poderes que posean los inciados. »






NOTAS

1. Los Martinistas fueron Místicos y Teósofos que afirmaron tener el secreto de la comunicación con los Espíritus (Elementales y Planetarios) de las Esferas ultramundanas. Algunos de ellos eran Ocultistas prácticos.

2. Consulten los Tres Principios y las Siete Formas de la Naturaleza de Böhme y comprenderán su significado oculto, si quieren asegurarse de ello.

3. La declaración sobre la autoridad de Beswick que Cagliostro fue conectado con La Loge des Amis Réunis bajo el nombre de Conde Grabianca no está probada. Hubo un Conde Polaco con ese nombre en ese momento en Francia, un místico se menciona en las cartas de Madame de Krüdner que están en manos de la familia del escritor, y uno que pertenecía, como dice Beswick, junto con Mesmer y el conde de Saint-Germain, a la Logia de los Filaleteos. ¿Dónde están los manuscritos Savalette de Langes y documentos dejados por él después de su muerte del Filosófico Rito Escocés? ¿Perdidos?

4. La declaración de Blavatsky en el sentido de que los fragmentos que ella está a punto de citar habían sido publicados recientemente, presentan un problema que nunca ha sido completamente resuelto. Algunos de los pasajes que ella cita en este artículo se han publicado con la firma de Giovanni Sforza en una comunicación titulada: “La Fine di Cagliostro” que apareció en el Archivio Storico Italiano, Serie 5, vol. VII, Febrero de 1891, p.144-151.

Este archivo fue publicado en Florencia por G.P. Vieusseux. Obviamente, esta fuente salió un año más tarde que el propio artículo de Blavatsky, y no podría haber sido utilizado por ella en ese momento. Ella también trae a colación varios puntos que no se mencionan en la fuente anterior. Una investigación adicional está obligada a identificar la fuente que ella uso. (Nota de Zircoff)


(Revista Lucifer de enero de 1890, p.389-95)













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