Por
Ernest Pelletier
UN MISTERIO EN TORNO
A HPB Y LOS EVENTOS OCURRIDOS EN LONDRES EN 1891
Poco
después de haber leído la obra “La Doctrina Secreta”, Annie Besant ingresó a la
Sociedad Teosófica el 10 de marzo de 1889. Besant se había formado un nombre
como una de los oradores más competentes de Inglaterra, y sus habilidades
estaban siendo necesitadas por la Sociedad Teosófica. Besant mostraba grandes
aptitudes como estudiante de Teosofía y en breve estuvo sentada al lado de HPB
y reconociendo a ésta como su nueva maestra.
Poco
después fue introducida como miembro de la Sección Esotérica. Justo un mes
antes de su muerte, HPB nombró a Besant (1 de abril de 1891) como la Secretaria
en Jefe del Grupo Interno de la Sección Esotérica y Registradora de las
Enseñanzas [1] e hizo arreglos para que Besant fuera a América a encontrarse
con William Judge como delegada especial para transmitir el mensaje de
Blavatsky en la Convención que tendría lugar durante el 26 y 27 de abril de
1891. En ese tiempo Besant aceptaba que Judge era un Ocultista, pero posteriormente
cambió su punto de vista.
El
8 de mayo de 1891 Blavatsky murió en Londres mientras Besant estaba en viaje de
vuelta desde América. Besant se había embarcado para Inglaterra el 6 de mayo, y
Judge, al recibir noticias de la muerte de Blavatsky, la siguió el 13 de mayo
de 1891. Olcott no pudo embarcarse desde India hasta el 15 de junio.
Varios
hechos con evidencias han sido recogidos y son presentados aquí para
consideración del lector acerca de ese periodo entre la muerte de Blavatsky el
8 de mayo y el tiempo de la llegada de Judge a Londres el 21 de mayo de 1891.
Su primer
testamento elaborado en India
Blavatsky
llevó a cabo su primer testamento antes de dejar la India a principios de 1885.
De acuerdo con Olcott, ella redactó un testamento el 31 de enero de 1885.
Olcott afirmó lo siguiente:
“Los testigos eran P. Sreenivasa Row, E. H.
Morgan, T. Subba Rao, y C. Ramiah. El Testamento contiene una cláusula al
efecto de que ella deseaba que sus cenizas fueran enterradas en las
inmediaciones de las Oficinas Generales en Adyar, y otra petición era que
anualmente, en el aniversario de su muerte, algunos de sus amigos debieran
reunirse aquí a leer un capítulo de ‘La Luz de Asia’ y uno de la ‘Bhagavad
Gita’.” [2]
Este
es el legado y testamento que es conservado en Adyar hasta nuestros días, y
considerado como la última voluntad de Blavatsky. Pero éste no es el último testamento
y última Voluntad que ella firmó.
Su segundo
testamento elaborado en Bélgica
Un
segundo testamento se emitió en marzo de 1887 mientras Blavatsky estuvo en
Ostende junto a la Condesa Wachtmeister, quien cuidaba de sus necesidades
materiales en ese tiempo. Diez días antes de dejar Ostende ella se desvaneció
mientras estaba sentada en su silla. Sylvia Cranston narra a partir de las
notas de Wachtmeister:
“Cuando el abogado, el doctor y el cónsul
llegaron, se encontraron con una jubilosa algarabía. El doctor decía
repetidamente: ‘Pero ella debería estar muerta… debería haber muerto’. Él nunca
había conocido un caso que se recuperara en esas condiciones.
La redacción del testamento se iba llevando
sin problemas hasta que el abogado supo que HPB había dejado todos sus bienes
materiales a la Condesa y nada a sus familiares. Temiendo que la Condesa
hubiera ejercido una indebida influencia sobre ella, él objetó pero HPB se
opuso vehementemente. La Sra. Gebhard, para evitar una escena, gentilmente
informó al abogado: ‘Quizá cuando usted sepa la cantidad que la señora
Blavatsky va a legar, no tendrá mayores objeciones en escribir el testamento
como ella desea, porque si la señora Blavatsky muriera, no habría suficiente
dinero para pagar los gastos fúnebres’.
La tertulia duró por varias horas. Al
despedirse, el cónsul americano riéndose dijo: ‘Bien, yo pienso que es
suficiente fatiga por hoy para una mujer moribunda”. [3]
Wachtmeister
continúa:
“Tengo que añadir que nunca volví a ver ese testamento
otra vez. Después de la muerte de HPB ocurrida en Avenue Road en Londres en 8
de mayo de 1891, yo fui a Ostende para ver al abogado y le pregunté qué había
ocurrido con el testamento. Él me contestó que después de mi partida él había
entregado el testamento a HPB. Yo supongo que ella debe haber destruido el
documento porque éste nunca fue hallado entre sus papeles.” [4]
El
segundo testamento de Blavatsky, aunque muy diferente del primero en contenido,
tiene un elemento similar: ambos testamentos fueron redactados en momentos de
muerte inminente.
Su posible
tercer y último testamento elaborado en Inglaterra
A
finales de marzo de 1889, pocos meses después de que “La Doctrina Secreta”
fuera publicada, de acuerdo a Cheiro, un famoso lector de palma de la mano que
estaba en Londres, HPB lo invitó una tarde a visitarla en Avenue Road.
Blavatsky
había deducido, estudiando su propia palma de la mano, que estaba cerca del
final de su vida. Aparentemente ella contactó a Cheiro para verificar sus
conclusiones y darle un marco de tiempo en que esperaría lo inevitable.
Continuando, según Cheiro, Blavatsky le dio las gracias después de leer la mano
de ella y le dijo:
“Tu aviso me hará bien, porque ahora pondré
mis papeles en orden y me prepararé seriamente para el corto tiempo que queda.”
[5]
Por
tanto, aunque un tercer Testamento no ha sido oficialmente reconocido, se puede
asumir de los presuntos comentarios que ella estaba tomando esto seriamente y
que ella tomaría tiempo para redactar otro testamento y su voluntad final.
El probable
contenido de su último testamento
En
su testamento de 1887, Blavatsky al parecer no dejó nada a Olcott ni tampoco a
Adyar; todo iría a manos de la Condesa Wachtmeister quien estaba velando por
ella día y noche sin ninguna recompensa a cambio. Pero las circunstancias
habían cambiado drásticamente desde entonces y un testamento muy diferente era
necesario para reflejar la nueva situación.
William
Judge había llegado a ser su apoyo más confiable y el más dedicado a la CAUSA.
Con el tiempo Blavatsky llegó a darse cuenta de que el propio Maestro de ella
lo había iniciado a él en 1884 y que ella dependía de Judge para las muchas
tareas que aún quedaban por hacer. En una de sus cartas ella escribió: “Confío
en Judge más que en nadie en el mundo”. [6]
Reconociendo
que Blavatsky estaba involucrada con William Judge en todos los aspectos del
trabajo teosófico, y que Besant apenas recién había ingresado a la Sociedad
Teosófica, parece razonable asumir que Blavatsky no habría designado a Besant
como el principal beneficiario de su Testamento.
El
coronel Olcott mencionó que cuando él llegó a las Oficinas Centrales de Londres
el 4 de septiembre de 1889, él encontró “a la Sra. Annie Besant, habiendo
recién salido de la mundanalidad a nuestro campo, viviendo en la casa con todo
y sus pertenencias”. [7]
Sin
embargo Besant alegó y sostuvo algunos meses después de la muerte de Blavatsky
que ella era “la persona que se encargaba de atender los asuntos financieros de
Blavatsky en Inglaterra” durante ese tiempo. [8]
Sería
razonable esperar por lo tanto que Besant fuera la persona a cargo del testamento
y última voluntad de Blavatsky, y que ella supiera dónde encontrar ese documento
después que HPB falleciera.
Es
razonable deducir que Blavatsky bosquejara un nuevo testamento algún tiempo
después de la visita de Cheiro y también asumir que ella redactó su última
voluntad en un testamento alrededor de Agosto de 1890 cuando un título de
Propiedad fue legalizado en el cual el Título de Propiedad de Annie Besant de
Avenue Road número 19 fue oficialmente adjudicado a un Fideicomiso para
convertirlo en las Oficinas Generales de la Sección Británica. [9]
Se
acordó en ese tiempo que:
“Por un lado no era razonable dejar la casa a
nombre de la Sra. Besant y por otro, la salud de la señora Blavatsky impedía
que se pusiera a su nombre.” [10]
Una
vez más la salud de Blavatsky era de la mayor relevancia.
Los
motivos para elaborar un tercer testamento
A
continuación se dan razones de por qué un tercer testamento es una posibilidad:
1)
El 27 de julio de 1886 Blavatsky le había ofrecido a Judge los derechos de “La
Doctrina Secreta” y de “Isis Develada”.
2)
En agosto de 1886 Blavatsky le pidió a Judge que le ayudara a conseguir los
derechos que tenía el señor J.W. Bouton de “Isis Develada”. Ella protestaba que
el dinero estaba siendo enviado a Olcott en Adyar mientras que ella necesitaba
esos fondos para su manutención. (Ver el libro “The Judge Case”, de E.
Pelletier, Chronology, Agosto 22, 1886 para más detalles)
3)
Olcott mencionó años después en sus “Viejas Hojas de Un Diario” que: “ella
también propuso transferir sus ganancias de la revista The Theosophist a Judge
y convertirlo en el sucesor de ella.” [11]
4)
Cuando Blavatsky hizo su segundo testamento ella quería que Wachtmeister se
quedara con todo, pero su “Doctrina Secreta” todavía no había sido publicada ni
la Sección Esotérica se había formado.
5)
Cuando Olcott, que era abogado, finalmente declaró seis meses después de la
muerte de Blavatsky que había un testamento, cuidadosamente él formuló el fraseo
de su discurso durante la Decimosexta Convención y Aniversario de la Sociedad
Teosófica en Adyar. Él afirmó lo siguiente: “En el testamento que ella realizó
aquí me dejó todo y dejó a su hermana los derechos de sus libros….” [12]
Olcott
no solamente omitió cualquier referencia al testamento de 1887 (el segundo)
sino que cuidadosamente evitó mencionar las palabras “última voluntad y
testamento” cuando anunció el testamento de Blavatsky. (Años más tarde en el
libro “Viejas Hojas de un Diario” (“Old Diary Leaves”) Olcott escribió que
“ella llevó a cabo lo que resultó ser su Última Voluntad y Testamento….. el 31
de enero de 1885”. [13]
Y
cabe mencionar que en la trascripción publicada de ese testamento no se hace
mención de que los derechos literarios fueran dejados a su hermana.
6)
Blavatsky había hecho arreglos posteriores con relación a los dividendos
correspondientes a sus ganancias de la venta de sus libros (en 1888 y 1890) y
estos no incluían que dinero alguno fuera a Adyar. [14]
7)
En una entrevista realizada por William Mulliss en octubre de 1926, Besant
sostuvo que ella había sido designada como albacea literaria de HPB [Ver “The
Judge Case” de E. Pelletier, apéndice H para conocer el texto completo.]
En
“Rebirth of the Occult Tradition”, Boris de Zirkoff escribió: “En lo que
concierne a la Ley Inglesa, un albacea literario puede ser nombrado únicamente
mediante un testamento” [15].
Por
lo que es posible que Besant sí fuera en realidad nombrada Albacea Literaria,
entonces habría ese tercer testamento donde habría sido puesto en vigor ese
cargo después que ella llegó a estar asociada con Blavatsky.
8)
Hubiese sido extraño e imprudente no haber hecho un nuevo testamento que
reflejara las circunstancias diferentes acaecidas.
9)
Si Blavatsky destruyó el segundo testamento, como Wachtmeister especula, ella
no hubiera hecho tal cosa sin un nuevo testamento que lo reemplazara; resulta
obvio después de leer su carta “Por Qué No Regreso a la India” que Blavatsky no
le dejaría todo a Olcott y a Adyar como estipulaba en su primer testamento.
William
Judge muestra desconfianza
La
pregunta interesante que surge es la siguiente: ¿Qué era lo que tanto le
preocupaba a William Judge que envió un telegrama desde New York el 9 de mayo
de 1921, a Avenue Road 19, diciéndole a los miembros de allí: “No hagan nada
hasta que yo llegue”? [16]
Esto
fue hecho por Judge poco tiempo después de recibir la noticia de la muerte de
Blavatsky y pocos días después de la salida de Besant desde New York el 6 de
mayo de 1891.
Blavatsky
había designado a Judge como “mi único representante para la Sección Esotérica
en América”, el 14 de diciembre de 1888.
En
diciembre de 1889, ella nombró a Olcott como su “único representante oficial
para la Sección Esotérica en los países asiáticos”, aunque esa designación pareció
ser más bien un formulario administrativo. Tampoco Olcott estaba en Inglaterra
en el momento de la muerte de Blavatsky.
Judge,
de quien HPB había dicho que “había sido parte de ella misma y de la Gran Logia
‘desde hace eones’ ” [17], se sentía muy responsable en preservar la integridad
de los materiales de la S.E. [Sección Esotérica]. Y HPB había reforzado esto en
su circular “Anuncio” de Agosto 9 de 1890, en donde establecía que todas las
órdenes en las Instrucciones de la Sección Esotérica emitidas en los Estados
Unidos solamente se harían a través de William Judge o directamente por ella misma.
Estas
serían razones suficientes para impulsar a Judge a la acción e inmediatamente
mandar ese telegrama. Edmund Garreth, editor de la “Westminster Gazette” y
amigo de Besant, reportó que: “la gente de Avenue Road al principio resintió
esta orden impositiva” [18], pero esto era una orden oficial, teniendo la
fuerza de un mandato. Es muy interesante que este telegrama de Judge es
mencionado por varios autores [19] pero nunca apareció en algún comunicado
teosófico de ese tiempo. El telegrama parece haber sido expurgado.
Cuando
Judge llegó a Londres en Mayo 21, Besant ya estaba usando la sortija de Blavatsky
y el cuerpo de Blavatsky había sido cremado. ¿Era Judge quien se suponía que
recibiría la sortija de HPB después de su muerte?
Existe
suficiente información incluida en la “Cronología” y en el “apéndice A” del
libro “The Judge Case” que cubre los detalles acerca de la sortija. Por lo
tanto, no serán repetidos aquí.
Ningún
testamento fue jamás mostrado a William Judge mientras él estuvo en Inglaterra.
Puede que él no supiera en ese tiempo que existía un testamento, pero es de
esperarse que lo hubiera. Judge había representado a Blavatsky en otros asuntos
legales anteriormente y por consiguiente habría sido muy extraño que no se le
hubiera mostrado el testamento de ella mientras él estuvo en Londres.
Algunos
años después Besant admitió que ella destruyó documentos que contenían
evidencias muy importantes que estaban en su poder relacionados con el Caso de
Judge, diciendo: “Yo destruí todas las cartas que recibí del señor Judge ya que
yo no podía llevarlas conmigo alrededor del mundo…” [20]
¿Pudiera ser que Blavatsky
sí tuvo un tercer Testamento y Última Voluntad y que éste sufrió la misma
suerte?
¿Se ocultó
ese posible tercer testamento?
El
coronel Olcott no llegó a Londres hasta cerca de dos meses después de la muerte
de Blavatsky. Al saber de su muerte, Bertram Keightley partió a Colombo el 21
de mayo de 1891, en donde se encontraría con Olcott para el día 28. [21]
Sin
embargo Olcott llegó a Colombo solamente el 10 de junio, desde Adelaida; se
reunió con Bertram y se embarcaron para Bombay. Ellos dejaron Bombay en un
vapor francés el 15 de junio y llegaron a Marsella el 2 de julio. Cuando
llegaron a Londres el 4 de julio, fueron muy bien recibidos por Judge quien los
llevó a las Oficinas Generales de Avenue Road 19, “en donde [Olcott] fue
afectuosamente recibido por la Sra. Besant y otros residentes de la casa.” [22]
Olcott
describió lo ocurrido poco después de que él llegara:
“La Sra. Besant y yo fuimos a la habitación
de HPB, y luego de un momento de solemne meditación, juramos ser fieles a la
Causa y para uno con el otro. La muerte de mi cofundadora me había dejado como
único centro reconocido del movimiento y parecía como si todos los corazones de
todos nuestros mejores trabajadores estaban vueltos más hacía mí que nunca
antes.” [23]
No
existe razón para no tomar la descripción de los al pie de la letra aunque el
incidente parece más bien extraño. Varios días después él declaró:
“Yo pasé algún tiempo solo en su habitación y
yo recibí allí lo que era necesario para mi dirección en el futuro; Yo puedo
decir simplemente y en una palabra que la médula de asunto es que yo debía
continuar el trabajo como si nada hubiera pasado.” [24]
Uno
se pregunta si Olcott dio todos los detalles del evento o si él a propósito
dejó fuera alguna información muy importante, información que hubiera podido
socavar la autoridad de Olcott y de toda la organización de Adyar que él había
construido.
Aparte
de la pérdida de su “camarada” ¿pudiera haber contribuido el contenido de un
posible tercer testamento a la melancolía de Olcott luego de la muerte de Blavatsky,
mientras él estaba en Londres?
Judge
se dio cuenta unos meses más tarde, cuando ambos estuvieron en California, que
algo le estaba molestando a Olcott. Él incluyó en un cable a Besant el 26 de
octubre de 1891: “Le ocurre algo malo a H.S. Olcott.” [25]
Surgen
serias preguntas acerca de lo que ocurrió en la habitación de HPB ¿Por qué no
estaba Judge incluido en esa pequeña conferencia privada? ¿Por qué ninguno de
los otros residentes de la Sede fue invitado a la habitación de Blavatsky con
Olcott y Besant? ¿Y por qué en la habitación de Blavatsky después de todo?
El
primer encuentro de Olcott con Besant fue la noche de su llegada a Londres el 5
de septiembre de 1889, en la ocasión en que vino a subsanar las diferencias con
HPB acerca de la Sección Esotérica y otros asuntos.
Besant,
una secular en ese tiempo, había recién ingresado a las filas del Movimiento y
Olcott de inmediato se aficionó a ella y pensó que ella era “una Teósofa
natural”. Diez años más tarde él recordaba un incidente que reveló lo sucedido
en esa tarde:
“Ella no había, creo,
hecho un solo discurso público en apoyo de la Teosofía ni había dicho una
palabra parecida durante la conversación entre ella y HPB o conmigo… yo
recuerdo que la tomé de la mano y le dije justo cuando se despedía: ‘Pienso que
tú estarás más feliz que nunca en tu vida, porque veo que eres una mística y
que has estado paralizada en tu cerebro debido al entorno que te rodea’.” [26]
Pronto
Olcott llegó a ser un admirador de las habilidades de dar conferencias de
Besant, luego de oírla en varias ocasiones.
En
ese momento, tras haberse conocido apenas dos años antes, ellos hicieron una
alianza que solamente una vez fue puesta en peligro, poco después de la muerte
de Blavatsky. ¿Qué clase de confabulación ellos tuvieron para que de pronto
salieran del cuarto de Blavatsky jurándose lealtad uno al otro y ser fiel a la
Causa? ¿Cuál Causa?
Basándonos
en la premisa de que había un tercer testamento, esta sería la mejor
oportunidad para Besant de entregarlo a Olcott. Besant, que vivía junto a
Blavatsky en la misma casa y se encargaba de sus asuntos financieros, muy bien
pudo haber sido la única persona que sabía de la existencia del tercer testamento
de Blavatsky. Quizás cuando ella regresó a Londres desde Nueva York ella
inmediatamente leyó el testamento, reflexionó sobre su contenido y se
preguntaba qué hacer con ese documento.
Otra
vez asumiendo que el tercer testamento existía, con toda probabilidad después
de leerlo ella determinó mostrárselo primero a Olcott ya que él era el
Presidente de la Sociedad Teosófica, y dejó que él decidiera qué hacer.
Besant
debe haber sentido que era su deber entregarle personalmente el testamento a Olcott.
Al parecer ella creía en ese momento que la Sección Esotérica era una parte de
la Sociedad Teosófica (cuando en realidad era una organización paralela) y que
Olcott, como Presidente de la Sociedad Teosófica era por consiguiente “el único
que representaba la misión a partir de los Maestros mismos.” [27]
Esta
creencia llegó a ser más evidente cuando estaba leyendo su informe y resolución
en la convención anual de Adyar en 1894. [28]
Suponiendo
que en el tercer testamento de Blavatsky, ella no le había dejado nada a Olcott
o a Adyar, ¿no hubiese eso sido motivo de inquietud suficiente para que Besant
aguardara la llegada de Olcott para que determinara qué hacer?
Al
poco tiempo de ingresar a la Sociedad Teosófica, Annie Besant dio dos
conferencias en el Hall de la Ciencia; el 4 y 11 de agosto de 1889 titulada
“Por Qué me Convertí en Teósofa”. Allí ella describió su lealtad tal como ella
la concebía:
“Una imperiosa necesidad me fuerza a hablar
la verdad tal como yo la veo, sea que el discurso guste o disguste, traiga
honor o deshonor. Esa lealtad a la Verdad debo mantenerla inmaculada, aunque
amistades me fallen o lazos humanos se rompan. Ella quizá me dirija hacia un
yermo solitario, sin embargo he de seguirla, ella quizá me arranque de todo lo
que amo, pero aún así la perseguiré, aunque me asesinara, confiaré en ella; y
yo no pido otro epígrafe en mi tumba que Ella trató de Seguir la Verdad”. [29]
Continuando
con la posibilidad de un tercer testamento ¿pudiera ser que la Causa que ambos,
Olcott y Besant, adoptaron después de su entrevista privada haya sido la de
mantener el estado de cosas inalterado en la Sociedad Teosófica, como ella la
visualizaba, y a lo cual Olcott había dedicado el trabajo de su vida?
La
premisa de que en este probable tercer testamento Blavatsky hiciera a William Judge
uno de sus beneficiados, en vez de Adyar, ¿no sería ésta una razón suficiente
para que Besant y Olcott hayan hecho un mutuo juramento de fidelidad uno al
otro?
Este
tercer testamento sería su pequeño secreto. Si Besant ocultó el hipotético
Testamento hasta que Olcott lo viera, ¿no sentiría él una profunda gratitud
hacia ella? ¿Y de qué manera Olcott pudiera alguna vez compensarla por haber
salvado la Sociedad de Adyar, que él consideraba el centro del Movimiento
Teosófico?
Los
actos de Olcott ciertamente le dan crédito a esta probabilidad y él ciertamente
apoyó a Besant como a nadie de aquí en adelante. Como se mencionó antes, Olcott
probablemente había encontrado una cierta información muy perturbadora en el tercer
testamento de Blavatsky, información que él decidió que nunca sería revelada, y
que nunca fue revelada, pero existe suficiente evidencia para la probabilidad
de que ese tercer testamento realmente existiera y que Olcott tomara la opción
de ocultarlo.
William
Judge pudo haber sospechado que Blavatsky tenía otro testamento cuando mandó el
telegrama el 9 de mayo, pero aparentemente nunca hizo alboroto por ello. A
Judge puede no haberle importado gran cosa un yestamento ya que su mayor
inquietud era la verdadera CAUSA Teosófica.
Al
igual que HPB, Judge estaba totalmente consciente de que la responsabilidad
ejecutiva de Olcott estaba centrada desde el principio en ser el Presidente y
que su autoridad era mayormente exotérica.
Judge,
por otro lado, aunque estrechamente involucrado en asuntos exotéricos, estaba
mayormente comprometido con lo esotérico y era leal a la CAUSA Teosófica y a
sus grandes Maestros.
Olcott
siempre estuvo preocupado en promover y sostener la Sede de Adyar como centro
de la organización teosófica. Él parecía perder de vista la CAUSA original y
los objetivos principales, y todavía seguía creyendo que estaba siguiendo
órdenes de los Maestros y que era leal a HPB.
En
una carta escrita al coronel Olcott en abril de 1885, Blavatsky repitió las palabras
del maestro K.H. diciendo que Olcott se había preocupado por salvar el cuerpo
externo de la Sociedad Teosófica pero que al alejarse de la CAUSA había provocado
la perdida del alma de esa institución.
NOTAS
[1]
El título conferido a Besant por HPB no era más que el de Secretaria en “Jefe”
para tomar notas justo como uno lo haría para cualquier otra reunión. No había
ninguna categoría oculta en esta posición que el de que sus notas serían
mantenidas en el registro. Esta posición sería el primer paso para entrenarla
en su papel de discípula. En la realidad, Besant nunca tomó notas de una
reunión del Grupo Interno. Ella faltaba a reuniones, y luego HPB murió.
[2]
“Old Diary Leaves”, (Viejas Hojas del Diario) Cuarta Serie (1910), p. 418; “The
Theosophist”, Vol. 60, Febrero 1939, pp.355-360; “The Theosophist”, Mayo 1892,
Supp. p. LIX.
[3]
“HPB”, por Sylvia Cranston, p. 321.
[4]
“Reminiscences of HPB” (“Reminiscencias de HPB”), p.64, Quest, 1976, o
pp.77-78, 1893.
[5]
“Mysteries and Romances of the World’s Greatest Occultists” (“Misterios y
Romances de
los
Grandes Ocultistas”) por Cheiro (Conde Louis Hamon), Londres: Herbert Jenkins
Limited, 1935; p.178. También vea la revista Fohat, Vol.5, Primavera 2001,
p6.
[6]
“Irish Theosophist”, Vol.3, Junio 1895, p.156.
[7]
“Old Diary Leaves”, Serie Cuarta (1910), p.171.
[8]
“The Theosophist”, Vol. 13, Marzo 1892, Supp. p. XLV.
[9]
“La compraventa de la casa de la calle Avenue Road 19, adquirida por 1,600
libras en 1883, fue donada a HPB en 1890 por su propietaria, y por deseo de HPB
fue de inmediato traspasada bajo un grupo fideicomisario… La escritura tenía
una hipoteca… quedando la responsabilidad de su liquidación en el donador de la
propiedad. Un cheque [por 405 libras, 16s, 11d.] fue entregado a Annie Besant
[por un teósofo que pidió anonimato] el mes pasado, y ella pagó a los
acreedores hipotecarios, por lo que se liberó la propiedad.” (“The Vahan”,
Segunda Serie, No. 2, septiembre 1 de 1891, p.7) En diciembre de 1896 Olcott
nombró algunos de los patrocinadores más prominentes: “La Logia Blavatsky
adquirió dominio permanente del local de Avenue Road, a través de la gran
generosidad de la Sra. Besant, de la Condesa Wachtmeister, de los señores
Keightley y otros…”. Vea “Reporte General del 21vo aniversario de la S.T.”,
1896, p.15, y “Una Retrospección Histórica 1875-1896 de la Sociedad Teosófica”,
p.14.
[10]
“Reporte General de la 15va convención y Aniversario de la S.T.”, 1890, p.59.
En “Una Historia Corta de la S.T.”, p.257, Ransom escribe esto como habiendo
tenido efecto en agosto de 1889. El “Reporte General”, sin embargo, establece
que “en la primera parte de este año [1890]… la Sociedad Teosófica ha llegado a
poseer, por la generosidad de la Sra. Annie Besant, la propiedad de la casa de
ésta para su Centro de Operaciones . . .”, p.58. Fueron realizadas reparaciones
y construidas ampliaciones. Las oficinas generales fueron inauguradas en julio
3 de 1890. “The Theosophist”, Vol 11, agosto 1890, pp.661-662.
[11]
“Old Diary Leaves”, Tercera Serie (1904), p.379.
[12]
“Reporte General de la 16va Convención y Aniversario de la S.T.”, 1891, p.49.
[13]
“Old Diary Leaves”, Cuarta Serie (1910), p.418.
[14]
Vea “The Judge Case”, Ernest Pelletier, Chronology, entradas de abril 4 de 1888
y marzo 9 de 1890.
[15]
“Rebirth of the Occult Tradition”, pp.65-66.
[16]
Ver “The Judge Case”, E. Pelletier, Cronología, mayo 9 de 1891 (est.).
[17]
“Irish Theosophist”, Vol. 4, marzo 1896, p.115.
[18]
“Isis Very Much Unveiled”, 2da ed., p.28.
[19]
Por ejemplo: Arthur H. Nethercot menciona este telegrama en la p.357 en “The
First Five Lives of Annie Besant” (Las primeras cinco vidas de Annie Besant). Sus
referencias son “The Theosophist” de julio 1891; “Bright”, pp.20-21; Williams,
“The Passionate Pilgrim”, p.204. Nosotros no tenemos las referencias de Bright
y la última es mencionada en la p.205, no 204; de la primera referencia no
existe en “The Theosophist”.
[20]
“The Case Against W.Q. Judge”, p.82. (El caso en contra de W.Q. Judge)”, p.82.
[21]
“The Theosophist”, Vol. 12, junio 1891, Inserto en el Supp. en p.lxxi.
[22]
“Old Diary Leaves”, Cuarta Serie (1910), pp. 301-303.
[23]
“Old Diary Leaves”, Cuarta Serie (1910), p.303.
[24]
“The Theosophist”, Vol. 12, septiembre 1891, p.707.
[25]
“The Case Against W.Q. Judge”, p.42.
[26]
“Old Diary Leaves”, Cuarta Serie (1910), p.172.
[27]
“La Recepción de Bienvenida al Presidente Fundador” por Annie Besant en la
Primera Convención Anual de la S.T. en Europa, llevada a cabo en Londres, julio
9 y 10 de 1891. “The Theosophist”, Vol. 12, septiembre 1891, pp. 705-706.
[28]
“Reporte General del 19vo Aniversario de la S.T.”, 1894, pp. 39-46.
[29]
“A Short History of the ST”. p.257.
Nota:
El texto anterior forma parte del libro “The Judge Case, A Conspiracy Which
Ruined The Thosophical Cause” por Ernest E. Pelletier (Edmonton Theosophical
Society, Edmonton, Canada, 2004.) Ver p.351-353 del “Suplemento”. El texto ha
sido publicado también por la revista “Fohat” de Canadá, edición de invierno
del 2008. Y la traducción es de la teósofa mexicana Aida Luz Rivera Santiago.
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